Quiero que sean felices
Acababa de amanecer cuando yo iba ya por mi quinta taza de café, cada uno más cargado que el anterior, no podía dejar de mirar la puerta con la esperanza de que en algún momento el pequeño castaño entrara. No lo había visto desde hace unas horas en la comisaria cuando salió corriendo calle abajo. Tuve tantas ganas de abrazarlo sin dejarlo escapar de mis brazos, quería decirle que todo estaría bien desde ahora, que ya no habría más mentiras y que lo amaba... pero el solo se había alejado, no me quería cerca y yo... no sabía si podría escuchar que me rechazaba otra vez.
-cielos Jack... sí que estas mal. –papá había entrado a la cocina para sentarse en una de las sillas frente a mí, lucia unas grandes ojeras y bostezaba cada dos segundos. El tampoco había dormido nada desde que supo que Hiccup había escapado.
-¿Por qué lo dices?
-nunca te había visto tomar tanto café. –tomó la taza que hasta el momento había estado sosteniendo con la mitad del oscuro liquido aun caliente, tomó un poco para solidarizar conmigo o posiblemente porque no quería que me enfermara por tanta cafeína en la sangre. –tenemos que hablar de todo lo que pasó.
-no hay mucho que contar
-Jack... -solté un suspiro y me acomodé en mi silla, el seguía mirándome serio y su mano estaba apretándome el antebrazo.
-hice algo horrible papá. –ya no podía ocultarlo más, quizás si le contaba todo podría respirar un poco más tranquilo, y sabia que no cambiaría nada pero al menos ya no tendría que cargar con tantas mentiras yo solo. Comencé contándole desde el día en que el plan de Liz había empezado, todo iba tomando sentido para él y a medida que avanzaba en mi historia su cara de desaprobación iba en aumento, pero no fue hasta que terminé de contarle cuando me puse realmente nervioso.
-no puedo creerlo Jack, no te eduqué de esa manera
-lo siento tanto... -no lo estaba mirando a la cara pero sabía que sonreía, una sonrisa cansada y tierna que siempre ponía cuando le pedía disculpas.
-entiendo... ¿hay algo más que quieras contarme? –asentí despacio.
-nada de esto hubiera pasado si no fuera porque... estoy enamorado de Hiccup. –todo el aire que pudiera tomar no sería suficiente, admitir algo así frente a papá era mucho mas difícil de lo que había pensado. –lo he estado desde siempre, lo amo, papá, y no sé que voy a hacer si no regresa o si no quiere hablarme jamás
Estábamos en silencio, yo con el corazón latiendo muy fuerte y el seguramente mirándome impactado, fueron un par de segundos tortuosos hasta que papá estallo en una sonora carcajada, lo quedé mirando con los ojos y la boca abierta
-hijo, eso ya lo sabía... te preguntaba si tenias algo que decirme sobre el robo de la escuela
-no yo... ¿Cómo que ya lo sabías?
-siempre lo supimos Molly y yo desde que eran niños, todas las personas que los veían lo sabían menos ustedes dos.
-¿entonces no estás enojado? ¿Decepcionado? ¿Vas a hacer algo además de burlarte de mi viejo?
-Jack. He confiado en Hiccup desde que tenía ocho años, mi laboratorio, mis investigaciones, mi vida entera. No hay nadie más a quien pueda confiarle la felicidad de mi hijo
-papá
-solo quiero que sean felices
-eres el mejor, ¿lo sabías? –asintió con la cabeza, no había dejado de sonreír y su agarre en mi brazo seguía firme
-¿Qué vas a hacer ahora? Hiccup debe estar esperándote
-no tengo idea de donde puede estar, además el dijo que no quería verme
-sabes que eso no es cierto
-¿y si lo fuera? Fui un completo idiota con el papá. -Entonces se puso de pie para tomarme por los hombros y mirarme fijamente
-fuiste un idiota Jack, lastimaste al amor de tu vida y le mentiste... pero serías el idiota más grande del mundo si lo dejas ir sin más. –papá nunca usaba ese tono de voz conmigo a menos que estuviera hablando muy enserio, pocas veces en mi vida lo había escuchado pero sabia reconocer cuando lo que decía era de vital importancia solo por el brillo en sus ojos. –así que ahora quiero que dejes ese café y vayas a buscarlo.
Ambos sonreíamos, me paré a abrazarlo y le susurré un "gracias", el me dio unas palmadas en la espalda y me alcanzó la chaqueta colgada en el respaldo de mi silla. Por primera vez en mucho tiempo tenía claro que era lo que debía hacer. Eran poco mas de las siete cuando Salí por la puerta principal con el corazón a mil por hora y un solo pensamiento en la mente.
"voy a encontrarte, Hiccup"
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:D heeeey holiiii. se que tardé mucho en actualizar peeeero esta vez si que no fue mi culpa, mi computador esta malito y no podia prenderlo! voy a organizar una colecta solidaria para comprarme otro y poder escribir (sus aportes son bien recibidos) ¿les gustó el cap? ¿que creen que va a pasar con este par de bebés?
estoy toda sentimental porque ya va a terminar :C asi es la vida supongo...
espero poder escribir otro hoy dia, no se olviden de dejarme su comentario y su lindo voto, recuerden que AMOOOOOOO leerlos todos >3<
byeeee
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