Los días fueron pasando y nadie parecia saber nada de mi chico misterioso, nadie sabía quien era, de donde había llegado o como contactarlo, sin importar todos mis esfuerzos me encontraba igual o incluso peor que al inicio, su nombre... era la unica pizca de información que tenía de el, fuera de ello solo existian espacios vacios; ¡comenzaba a desesperarme! ni si quiera habíamos logrado encontrarlo en redes sociales, pareciera que simplemente se había borrado del mapa
-¡¡Es inutil!! ¡¡Nunca lo hallaremos!!.- dije mientras me tiraba en la cama exahusta
-Ten fe, ya veras que si
Alce la vista para ver a Katia, quien estaba sentada al borde de la cama
-¡¡llevas diciendo eso toda la bendita semana!! ¡¡Ya tuve suficiente!! ¡¡me rindo!!.-dije exasperada
Lio se llevo las manos al rostro finjiendo asombro-¡¡No puede ser!! ¡¡No puede ser!! ¡Mikaela Rosheri dijo que se rinde! ¡Es el fin del mundo señores! ¡No es un simulacro! Repito ¡No es un simulacro! ¡¡corran!!.-Luego de esto empezo a correr en circulos zangoloteando las manos
Todos empezamos a reír-¡Qué payaso eres!
-Es mi don, mi maldición.-dijo de forma dramatica llevandose la mano al pecho, lo golpee en el hombro y el hizo una mueca-¡Auch, eres una salvaje!
-RAAR, soy una temible leona.-dije finjiendo que rugia para luego lanzarme sobre el como si fuese a atacarlo
-Uuuy, mira como tiemblo, más bien eres un lindo gatito.-dijo riendo
-¿Qué dijiste?.- dije indignada para comenzar a hacerle cosquillas, comenzo a retorcerse y a reír sin parar.
-P...a..r.a..aa, M..i...k..a pa..r.....a
-Quien rie ahora zopenco.-seguí haciendole cosquillas
-Aal...t..o
-¡Me rehuso! ¡Es mi venganza spaky!
-Mi..ka p...or.f.aa.v....ooo..r
-Bieen.- dije de mala gana alejandome y levantando las manos en signo de paz, él suspiro aliviado.
-Ya que terminaron de jugar ¿Podemos ir a comer? ¡Muero de hambre!.-Dijo Matt, un amigo de Lio quien había comenzado a salir con la pelinegra 
-Amor, tu siempre tienes hambre
-No puedo argumentar nada ante esa logica, ahora... ¡A comer!.-Reimos y fuimos a por unos tacos
Llegamos y nos sentamos en una mesa pegada a la ventana, estabamos esperando nuestra orden, mientras los chicos habían arrazado con las papas y el refresco que habíamos pedido, ahora se encontraban peleando con las pajitas cual niños; nosotros reíamos y finjiamos  no conocerlos cuando en ello volte hacía la ventana y de pronto...
¡Ahí estaba! ¡Era él! ¡No podía creerlo!
Me puse de pie tan rapido como pude pero tropece y caí, me puse de pie me sacudi y segui mi camino, ni siquiera le di tiempo a los chicos de entender la situación, solo sali despavorida como alma que lleva el diablo, sali del local y mire a todos lados buscandolo, entonces lo vi cargaba una maleta y estaba apunto de subir a un taxi, como pude atravese la calle coriendo, fue toda una odiasea ¡por poco y me atropellan!; finalmente logre llegar al otro lado de la acera pero en ello observo como su taxi arranca y se aleja, separandonos una vez más...
Frustrada regrese al local, al entrar los chicos me miraron preocupados, negue con la cabeza intentando ignorar el nudo  que se formaba en mi garganta
-¿Qué ha pasado?
-Era él, pero... llegue demasiado tarde
Eliot me abrazo-Ya, ya, calma pequeña, todo estara bien.
Negue con la cabeza-Quiza no estabamos destinados a reencontrarnos
-Quiza el destino se equivoco y lo encontraras cuando menos te lo esperes
-El destino no se equivoca
-¿Estas segura de ello?
-Yo... .-no supe que decir al respecto
-Aveces el destino actua de maneras muy extrañas pero ya veras que si tiene que pasar, pasara
Asenti intentando procesar sus palabras
-¡Animo amiga! ¡Al diablo los chicos!.-exclamo Susy alegre
-¡¡Oye!!.-dijo Matt fulminandola con la mirada
Ella acaricio su cabello-Sabes que te quiero corazón.-Él la abrazo y beso su mejilla
-Te quiero linda
-Iu me dan diabetes.-Exclamo Lio fingiendo una arcada
-¡¡Quiero uno de esos!!.-chillo Paula al mismo tiempo
Todos reímos
-Todos queremos uno amiga
Susy gruño-Es mio, alejense perras
-Ni quien quiera a tu coso ese
-¡Oye! ¡El coso este tiene sentimientos!.-se quejo susy
-¡Amoor! no me ayudes.-dijo Matt negando con la cabeza
Todos reímos, yo solo esperaba encontrar a algun día alguien que me amase