Todos me hacen sentir
como si el quererte, es algo malo.
Yo no elegí este camino,
es el camino quien me ha encontrado.

— Clairel Estevez

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Daiki se encontraba en un gran problema. Muy grande para él, ¡como del tamaño de su papá Eijiro! Así de grande era su problema.

Tanto así que necesitaba un héroe, como de esos que salían en las películas que veía.

Y se preguntaran: ¿Por qué?

Bueno, justo ahora se encuentra viendo como dos niñas se encuentran declarándose la guerra entre sí, y por él, como lo leyeron, se estaban peleando por él.

— No, Daiki es mi hermanito menor, no tuyo... — Su brazo izquierdo fue jalado por una niña de cabello castaño, tenía su ceño fruncido y sus mejillas infladas.

— ¡No!, Es mío, tiene la elegancia necesaria para serlo, digno de ser mi hermanito — Reclamo la otra niña que jalaba su brazo derecho, tenía cabello negro y era más alta que él y la otra niña.

Las dos tiraban fuertemente de sus bracitos, sentía que se iba a romper y estaba a nada de echarse a llorar. ¿Dónde estaba su papá? ¿Cuándo volverían?

¿Cómo llego a encontrarse en esa situación?

Volvamos a hace unas horas...

Daiki ya se estaba acostumbrado a su vida, pues ya llevaba ahí un buen tiempo.

No iba a la escuela porque estaba de vacaciones, eso le dijo su papá Kirishima.

Realmente estaba bien, tenía una señora muy amable que le preparaba soba cada vez que lo pedía amablemente, y el señor de traje de pingüino le traía lo que él pidiera, de verdad, lo que fuera.

Un día bromeando, dijo: "Quiero un conejo" había visto dicho animal en una película animada, y soltó ese comentario a broma, de verdad.

A la mañana siguiente el señor le entrego una caja con agujeros, al abrirla vio un conejo en el interior, era de color verde, bien raro, pero estaba feliz, le puso Deku al conejo, más bien, así le puso su mamá y a él no le molesto llamarlo de esa manera.

Irradiaba de felicidad, pero sus papás le dijeron que el cuidado de un conejo no era fácil, su mamá le dijo que, si se le moría, él lo iba a enterrar, y que no cuidaría de un animal tan feo.

Adivinen quien está viviendo como rey en su casa, si, su conejo. Pero ese no era el punto, el punto era que lo que le pidiera a su "mayordomo", este se lo conseguiría.

Pero ahora solo quería una cosa, y su mayordomo no podría dárselo. Quería estar con su mamá y papá, porque Eijiro Y Katsuki estaban tan ocupados "trabajando" (Organizando con Shoto como trabajarían en Japón) Que no habían estado pasando con el mucho tiempo.

Ahora mismo se encontraba en su habitación, pintando, después leía y volvía a pintar. Y, aun así, era tan aburrido estar ahí... quería salir, ver que sucedía en el mundo, ver a niños de su edad, lo que fuera, necesitaba aventuras, no estar encerrado junto con su conejo.

¡El señor conejo merecía también aventuras!

— ¿Realmente tenemos que llevarlo? — Esa voz... vio la puerta de madera abrirse, viendo por esta ingresar a sus papás, por fin.

Dejo de pintar y corrió hacia su papá, lo abrazo .
—  Por fin volvieron... — los dos adultos se miraron entre sí, joder, tan ocupados viendo como trabajarían en Japón y se olvidaron de su hijo.

— Si mocoso, siempre vamos a volver. No seas dramático — Katsuki sacudió el cabello de Daiki, este soltó una risa por la acción. — Oye, hoy vendrás con nosotros — sus ojos brillaron, demasiado.

-—¿De verdad?  — Su papá Eijiro asintió, el celebro y su conejo también, dando saltos y saltos.

— No puede ir el señor conejo.

A Kirishima se le rompió el corazón al ver a su hijo detenerse a media celebración, y ver como sus ojos se invadían de lágrimas. ¿Esto era su primer berrinche?

Bakugo negó con la cabeza, no, el no caería en esos malditos berrinches infantiles. Daiki abrazo a su conejo y empezó a llorar, él quería llevar al señor conejo, merecían vivir esa aventura juntos.

— Pero mamá-

— No — Daiki empezó a llorar más fuerte, mientras abrazaba a su conejo y les dio la espalda. Bakugo se sintió raro, anteriormente había dicho que cuando tuviera un hijo no cedería ante tales berrinches. No lo haría.

— Blasty... — Joder, vio como Kirishima se iba a poner a llorar. Estaba derrumbado todas sus barreras ver el cuerpo del mocoso temblar y escuchar su llanto.

Maldita sea la hora que el mayordomo trajo al puto conejo.

Se acercó lentamente al niño y se agacho a la altura de este –—No llores, no se va a morir tu horrible conejo por dejarlo solo unas horas.

— Pe-pero "hip" e-el señor "hip" conejo merece una aventura — Kirishima se acercó también a su hijo y sacudió el cabello de este.

— El señor conejo es muy varonil, va a estar bien unas horas sin su aún más varonil dueño.

Katsuki limpio las lágrimas de los ojos del pelinegro — Eres un llorón de mierda. Te prometo que sacaremos al señor conejo cuando estemos en nuestro nuevo hogar, ahí podrás llevarlo a revolcarse al lodo si quieres.

— Eso lo hacen los cerditos, el señor conejo, es pues... un conejito — Katsuki soltó una carcajada, y Daiki vio con ojos brillosos a su mamá, tenía una risa exótica, era cálido para sus oídos.

— Pues irán a donde quieran.

— ¿Lo prometes?

— Lo prometo — engancho su meñique con el meñique de Daiki.
— Promesa de meñique o como se llame.

— Entonces está bien.

Bajo al señor conejo y fue a cambiarse, o más bien su papá Eijiro lo cambio, poniéndole un traje negro, con un sombrerito bien raro. Casi se veía igual que el señor pingüino.

Se había despedido del señor conejo, y subió al auto. El transcurso fue callado, cuando llegaron a su destino, sintió demasiado terror, pues vio al hombre de cabello bicolor. Semblante serio, mirada fría y un aura de oscuridad lo rodeaba.

"Aterrador"

Bajo del auto y camino detrás de su mamá, le daba miedo ver al bicolor. — Gracias por traer a su hijo.

— Como sea, quiero que mi hijo salga sin un solo rasguño — Amenazo Bakugo a Todoroki.

— Y así será. Hyo-ri quería mucho conocerte pequeño cuando le platique de ti — Sintió sus piernas temblar al ver como el señor bicolor le extendía una mano, y sintió total traición cuando sintió como su mamá le entregaba su mano al señor.

— Te llevare adentro, hay Hyo-ri te espera con alguien más. Tus padres y yo iremos a una reunión, donde hablaremos con otra gente de-

— ¡Ni se te ocurra decirle bastardo mitad y mitad! — Shoto vio con una mueca de confusión y algo de enojo—por haber sido interrumpido—a Bakugo.

Prefirió dejarlo pasar, solo por esta vez. Entro a el lugar con los Kirishima siguiéndolos por detrás, caminaron por el lugar, donde lo metió a una habitación, en ella había juguetes, demasiados. Vio a dos niñas sentadas en una mini mesa.

— Hyo-ri, ya llego el niño del que te conté — La niña de nombre Hyo-ri volteo a verlo, tenía cabello negro, largo y muy suave, ojos de color azul y era probablemente más alta que él.

— Justo a tiempo para la hora del té — la niña se acercó a él y tomo su mano. El bicolor soltó su otra mano, y él se fue con la niña sin decir palabra alguna. El bicolor salió de la habitación dejándolos solos, claro, afuera de la puerta había tres hombres bien armados.

Se sentó en una de las sillas de la pequeña mesa, observando ahora a la otra niña. Tenía cabello de color café y ojos verdes, tenía una taza en las manos.

— Un gusto, mi nombre es Hyo-ry Todoroki, ¿Cuál es el tuyo? — Se sentía algo nervioso, sus mejillas se tornaron de color rojo. Quería abrazar a su conejo.

— Tranquilo, no te haremos nada, si no quieres decir tu nombre está bien. Yo me llamo Jiyu Midoriya, un gusto. — Las dos al ver que Daiki no hablaba, lo dejaron estar, y siguieron tomando té.

— M-me llamo Da-Daiki Kirishima... — las dos voltearon a verlo, y sintieron pura ternura al verlo, se veía tan chiquito. Aunque ellas fueran un año menor.

— ¡Qué bonito nombres tienes! — Exclamo Jiyu — Es un nombre bastante elegante. — Agrego Hyo-ry.

Después de ese momento, empezaron a jugar, aun cuando tuviera esa ropa tan elegante, y las niñas esos vestidos tan sofisticados y seguramente caros, corrían de aquí y allá, riendo y gritando algunas veces.

— Juguemos a las escondidas Daiki-kun — asintió, era divertido jugar con Jiyu, tomo la mano de la niña, pero antes de ir a ver como jugarían, su otra mano fue agarrada por la mano de la pelinegra.

— Mejor coloreemos Daiki-san — Asintió, colorear también era bastante entretenido. Podía colorear con la pelinegra cuando terminaran de jugar a las escondidas.

— Daiki-kun jugara primero a las escondidas conmigo — sintió un tirón hacia el lado de la castaña, iba a decir algo, pero la niña de ojos azules hablo.

— Coloreara primero conmigo, debe hacerlo, ya lo nombré como mi hermanito — Otro tirón, pero esta vez para el lado de la pelinegra.

— ¿Qué? No, en ese caso sería mi hermanito, y por eso debería jugar conmigo. — Ya no tiraba de su mano, si no de su brazo.

— Es mi hermano, Jiyu-san, nos parecemos más.

— No, Daiki es mi hermanito menor, no tuyo...

— ¡No!, Es mío, tiene la elegancia necesaria para serlo, digno de ser mi hermanito — Las dos tiraron fuertemente de sus brazos y sintió que se rompería.

Y así fue como llego a esta situación. ¿Qué estaban haciendo sus papás para no ir por él?

Los Midoriya y Todoroki se encontraban en una reunión de "mafiosos" junto con otras organizaciones, pero no tan poderosas como lo eran esas dos. En dicha reunión se conversaba de dinero, poder, dinero, matanza, entre otras cosas.

— Shoto ¿seguro que buena idea tener a la hija de los Midoriya con la tuya? — Le pregunto su hermana, se encogió de hombros, la verdad le daba medio igual, la niña había insistido que se lo dio.

— Es una reunión donde no podemos permitirnos pelear, al menos no aquí. Así que ni los Midoriya ni yo haremos algo que nos dañe, al menos esta noche. — Acepto la copa de vino que una de las meseras le ofreció. Su hermana soltó un suspiro y fue a ver a su otro hermano, que coqueteaba con una chica.

Soltó un suspiro, entrecerró sus ojos al ver a su padre acercarse a el líder de los Midoriya. Carajo, ¿su viejo no podía quedarse con la boca cerrada? Parece que no.

— Espero que tú padre mantenga su boca cerrada, no queremos un espectáculo ¿verdad? — Escucho la burla en la voz, giro los ojos. — Y espero que tu padre no sea tan idiota y se baje a sus provocaciones, Deku.

Escucho la risa del peli verde, pero fingió total desinterés. — Tan gracioso como siempre, Shoto. Espero que mi hija se esté divirtiendo con el hijo de Kacchan, y de paso con la tuya.

— Si — Se quedaron un buen rato en silencio, siguieron así hasta que el peliverde fue a ponerse a lado de su esposa. Ochako Midoriya. Shoto prefirió apartar la vista e irse a poner a un lado de la pelinegra, se veía realmente hermosa, Shoto apreciaba su belleza, pero... no la amaba. No en el sentido amoroso.

— Querido, le decía a Bratva que- vio la cara algo afligida de su esposo, su mueca seguía seria y feria, pero sus ojos estaban algo tristes
— ¿estás bien? — no volvió a preguntar cuando Shoto asintió, no quería molestarlo de más.

Pasaron unos minutos, para que toda la gente se sentara en sus respectivos asientos. Las mesas eran redondas cubiertas con un mantel de color blanco, y en el centro de esta había una botella de vino, demasiado elegante.

— Como todos saben, cada 8 meses hacemos esta reunión para informar, comercializar, tal vez matar — unas risas de fondo se escucharon
— Pero más que nada, por ver quienes tiene más poder, aunque todos ya sabemos quiénes son las organizaciones más poderosas. – Hubo murmuros, claro, siempre los había.

Quien daba la presentación, le paso su micrófono a Endeavor, el hombre siempre tenía palabras alentadoras — Como saben, nuestra organización es muy poderosa, pero también requerimos de socios, para engrandecernos más y-

— Que aburrido, ya me quiero ir a mi casa — Dijo una castaña, mientras bebía su vino
— No diga eso en voz alta señora Midoriya, Endeavor podría escucharla — Dijo tratando de calmar a su jefa un peli azul.

— Ugh — Inflo sus mejillas
— ¿Cuándo le toca al señor Midoriya hablar? — Deku vio a su esposa, luego al peli azul.

— En un momento, cuando Endeavor-san deje de decir su discurso "aburrido" — La castaña soltó una risa bajita, y asintió. Vio al peli azul, su guardaespaldas personal sentado a su lado.

Endeavor hablo de como su organización empezaba a crecer más y tenían muy buenos soldados de su lado. Como su nombre esparcía miedo en todo corea y empezaba nuevamente a sonar en Japón. También menciono su total odio y asco hacia la nueva organización que se levantaba, "liderada por mocosos".

— Creo que a quien más han atacado ha sido a los Midoriya, me pregunto por qué... — La primera provocación. Algunos ahogaron un grito ahogado, y otros soltaron algunas carcajadas.

— Supongo que es porque nos tienen más miedo — Respondió con total calma el señor Midoriya. Hizashi Midoriya, quien dirigía aquella organización tan sangrienta, cruel y malvada, tenía una sonrisa tranquila en la cara mientras le extendía su copa a Endeavor en modo de brindis.

Endeavor tenso su mandíbula, miro con puro odio a Hizashi. Chasqueo su lengua — Puras idioteces, aunque también nos han estado atacando a nosotros, y creo que compartimos el mismo odio por ellos — Hizashi le mostro una sonrisa con dientes y asintió

— Supones bien

— Las ratas no se mueren, incluso mande a mi hijo prodigio, pero supongo que debe perfeccionar — Shoto lo fulmino con la mirada, sabía muy bien cuanto le dolía al ego del viejo que no los haya podido matar, pero él iba con mentalidad de buscar a su bebé, no a matar cucarachas.

— Supongo que algunas cucarachas son difíciles de pisar, viejo — Reto a su viejo, el también podía abrir la boca de más si quería, pronto seria líder, y podría ahora sí, ignorar a su viejo en todos los aspectos.

Endeavor lo fulmino con la mirada, Shoto no se quedó atrás, sus ojos le dedicaron todo el desprecio que podía albergar.

— Mi hijo también iba en uno de esos camiones, supongo que la emoción de poder matar a tú hijo lo distrajo, pero esta perfeccionando eso — Izuku giro los ojos, ni Enji, que era hartante, había ido tan lejos.

— Supongo que debo perfeccionar, no logre matar a Tomura, me lo impidieron las llamas de Dabi — Shoto sonrió, maldito cabello de árbol

— Creo que fue por uno de los cuchillos de Hawks, ya sabes, te impidieron matar a Tomura también.

Ni siquiera les importo que sus padres los estuvieran matando con la mirada, sabían porque lo hacían, después habría tiempo para platicar de ello.

— ¿Entonces los traicionaron? – Otra ola de murmullos empezó a sonar, solo pocos sabían del trabajo encubierto que realizaban esos dos.

— Tal parece ser que sí, con razón no había visto a el incompetente de mi hijo mayor — Endeavor mira furioso a su hijo, se suponía que tratarían de mantenerlo en secreto lo más que pudieran, algo en él le dijo que Shoto tenía una razón, nunca actuaba sin pensarlo bien dos veces.

— No sabía que tu soldado numero dos también te había traicionado, era de esperarse...

Midoriya no cuestiono por qué su hijo lo dijo, estaba enojado, claro, pero Midoriya siempre tomaba medidas precipitadas para garantizar su seguridad, y si eso garantizaba la seguridad de Hawks, lo dejaría pasar, solo esta vez

—Creo que sí, de su castigo por tal traición me encargare yo. Gracias por su preocupación Endeavor-san.

Un silencio incomodo inundo el lugar, y nuevamente, los murmullos se empezaron a escuchar. "¿El propio hijo de Endeavor los traiciono? Patético" "Haws era tan guapo para unirse a esa liga de pacotilla; será un desperdicio que le descuarticen la cara" Entre otros murmullos, pero Izuku se encargó solamente de escuchar unos.

— Entonces si es verdad que los traicionaron... que bien, por fin puedo quitarles mis ojos de encima — Comento una castaña, según era "Camie", la esposa del lider de otra organización, pero Izuku había notado muy difícilmente el gran disfraz que llevaba Himiko Toga.

— A Tomura le encantar oír esto, es una lástima... quería ver tanto su sangre. Tal vez pueda ver la de alguna de estos cerdos, sólo debo esperar a que se retiren... para ir afuera a matar a uno.

Por eso había dicho lo de la traición, Himiko Toga estaba ahí, esperando ver si de alguna manera el ataque de esa noche de hace un mes los había afectado, por el bien de su amigo, tuvo que decirlo. También por benefició propio, así tendrían más confianza en el ojimiel y podrían romper la organización de pacotilla desde adentro, para que dejara de ser un estorbo. 

— Creo que el doctor no volverá a su casa esta noche —  Ochako se extrañó por el comentario.

No pregunto, no quería saber el porqué, quería conservar, aunque sea un poco de brillo, si es que realmente aun le quedaba, en su maldita mente.

— A nadie le agrada, no tendrá importancia — Dijo viendo al "doctor" que se encontraba a dos mesas de ellos, realmente nadie tomaría importancia si un hombre egocéntrico, cerdo y pervertido desaparecía.

Izuku asintió, sus ojos buscaron los de Shoto, y cuando conectaron, una sonrisa surco sus labios, le era inevitable. La reunión aburrida siguió, cuando culmino, todos empezaron a despediré e irse, su padre se había retirado ya que lo llamaron desde un almacén, donde solicitaban su presencia. 

El salón se quedó casi vacío, su esposa había ido por su hija. Vio como la esposa de Shoto le decía algo y se iba, seguramente también iría por su hija. Ordeno a sus hombres que se fueran, prometiendo que no haría alguna estupidez que los pusiera en guerra.

— Estamos solos mitad y mitad — comento con burla Izuku, usando el apodo que Bakugo le puso a Shoto en la universidad
— Me sería muy fácil matarte — Shoto alzo una ceja, como si eso fuera a pasar.

— Te equivocas, tu estas encerrado aquí conmigo, Deku. A mí me sería fácil matarte, estas completamente sin protección, un cuchillo en tu garganta y me esperarías en el infierno. — zuku soltó una risa.

Se empezaron a acercar, no había nadie, podían hacer lo que quisieran y nadie los vería, no habría testigos.

Y la idea era demasiado tentadora.

Cuando estuvieron lo suficientemente cerca, sus respiraciones chocaron, escuchaban los latidos de sus corazones, la piel se erizaba y sus manos empezaban a picar.

—Esto se vería muy mal si alguien entra... a nadie le gustaría ver como un Todoroki hace gritar a un Midoriya y no precisamente de dolor.

Izuku asintió, sus ojos demasiado brillantes. — Mmm... supongo que tienes razón Shoto — enrollo sus brazos alrededor del bicolor — A nadie le gustaría ver cómo te monto.

Sus caras empezaron a acercarse, cada vez más y más. Shoto puso sus manos sujetando la cintura de Izuku.

"Solo un poco más cerca"

Justo cuando se iban a besar, la puerta del gran salón fue abierta. Apenas si pudieron reaccionar, separándose rápidamente.

— ¡Todoroki!

Era Shinso.

El peli morado se quedó estático al ver a esos dos juntos, estaban solos, en un salón, casi a oscuras, ay no... ni siquiera quiere imaginar que había pasado antes de que llegara — ¿Qué sucedió Shinso?

Arrugo su nariz, pero prefirió ignorarlo, había lago más importante que ese amor a escondidas.

-— Denki ha roto fuente, va a dar a luz...

¡Hola! Aqui Ami_Ely reportándose viva y con un nuevo capitulo. Perdón por haberme desaparecido por dos semanas, pero estaba culminando el semestre y tenia que dar mi total atención.

A eso agréguele que tuve un bloqueo de escritora y no se me ocurría nada, si tengo las ideas pero las escenas no nacían.

Pero por fin pude hacer este capitulo.

Realemnte espero que les haya gustado este capitulo como a mi el redactarlo.

Y antes de despedirme, tengo un anuncio, tengo otro libro que quiero publicar, no ahora, después.

Así se verá la portada, y su fecha de publicación oficial será el 01/01/23.

Así que espero que también les vaya a gustar, tengo ya varios capítulos pero obviamente se actualizará a su debido tiempo.

¡Estoy ansiosa por subirlo!
Y espero que ansien leerlo

Eso es todo mis queridos lectores, no tengo asuntos anuncios.

Cuídense, tomen mucha agua y coman bien.

Ami_Ely fuera.

》♡《