Capítulo 27 : Adiós

Marinette se quedó mirándolo sorprendida. Le estaba diciendo que la quería? O sólo quería que se quedará en París para entretenerlo?

-No me dejes -Repitió acercándose un poco más.

-N...No te entiendo -Tartamudeo la joven apretando el paquete de galletas.

-Mari, yo creo que me acostumbré a pasar tiempo contigo y no puedo pensar en que te irás de viaje con mi padre todo el tiempo. -Se acercó más. Su pecho estaba a unos centímetros del de Marinette y la observaba desde arriba. -Creo que en algún momento comencé a amarte.

Ahora si la había impresionado tanto que casi se cae la bolsa de sus manos.

-Pero si amarte significa hacerme a un lado y aceptar que tu te vayas de viaje a donde mi padre te arrastre...entonces así será -Rodeó la cintura de Marinette con sus brazos y la apego más a él -Pero te estaré esperando aunque decidas irte por cuarenta años.

El rubio soltó una risa nerviosa mientras que Marinette estaba en un estilo de shock por las palabras que acababa de escuchar. Volvió a mirarla con una media sonrisa esperando su respuesta.

-Tu...Estas hablando enserio? -pregunto sonrojada tratando de calmar su corazón que palpitaba velozmente. -Me amas? -Se le llenaron los ojos de lágrimas y comenzó a sonreír con emoción. -Enserio me amas? -No lo podía creer.

Él no respondió, sólo la acercó y la beso. Se separaron con una amplia sonrisa en sus rostros.

N..No se que decir- Marinette sentía como su corazón se trataba de escapar del pecho.

-Sólo dime que me amas -Respondió acariciando su cabello aún abrazado a ella.

-Claro! -Exclamó rápidamente- Adrien, te amo más que a nadie- Se sintió algo avergonzada de soltarlo así de rápido, como si fuera que estaba desesperada por él. -Es decir... eres perfecto, dulce, muy comprensivo, perfecto, amable, muy lindo ¿Ya dije perfecto? -El rubio soltó una carcajada al escuchar los balbuceos nerviosos de la chica, le recordaba a la vieja Marinette...a la misma que había rechazado alguna vez.

-Sabes...si mañana te vas deberías tener una buena despedida. Tal vez una cena, una mano para hacer tu maleta y una noche románticacon tu novio...-Le levantó el mentón para que lo mirase a los ojos.

-Soy tu novia? -pregunto sorprendida con una gran sonrisa.

Adrien asintió y ella lo tomó del cuello para acercarlo y besarlo con impaciencia. (...)

El despertador hizo que Marinette se despertará un poco y entre quejidos el brazo del rubio tanteo la mesa emocionada busca del despertador que también lo había despertado.

-Donde esta?! -Exclamó aún tanteando la mesa hasta que lo encontró y lo logró apagar. -Mari, lecantate.

Aún seguían abrazados, Marinette con su cara oculta en el pecho del rubio tratando de mantenerse así durante unos cuantos segundos.

-Dame un minuto- Respondió con un suspiro.

-Cuando vuelvas podremos estar así horas si quieres -Volvió a suspirar resignada y se levantó.

Marinette se ducho de mala gana y se vistió semi-elegante para encontrarse con el Sr. Agreste. J
Al salir del baño se encontró con un Adrien completamente dormido boca abajo en la cama.
Iba a observarlo unos minutos pero su teléfono comenzó a sonar sobre la mesa despertando al rubio nuevamente.

-Hola? -Respondió la joven sentándose en la cama junto a Adrien quien le abrazo la cintura y apoyo su cabeza sobre sus piernas.

-Srta. Dupain! Buenos días -No era más que Gabriel Agreste- Sólo es una llamada de chequeo, pero como estas despierta paso a decirle que un auto pasará por usted en unos cuarenta minutos para llevarte al aeropuerto.

-Claro Sr. Agreste estaré lista en treinta minutos -Adrien levantó la mirada y la observó algo triste.

-La veo luego- Se despidió cortésmente y colgó.

-Ya te irás? -pregunto tomando una de sus manos.

-Tu mismo lo dijiste, estarás aquí cuando vuelva -Lo beso rápidamente y le sonrió -Y créeme que volveré tan rápido como me fui.

Él la tomo de la nuca y la acercó a sus labios haciendo un beso más largo.

-Ve a vestirte Adrien -Dijo separándose. Quieres un café? - El chico asintió mientras se sentaba buscando sus boxers con la mirada por la habitación.
(...)

El auto se había estacionado delante del aeropuerto y el nudo del estómago de Marinette se había echo más grande. No quería tener que despedirse de Adrien justo después de que él se le declarase.

-Mi padre debería estar esperándote -Dijo caminando a su lado con la maleta roja de la chica en su mano -Te gustará el avión privado de mi padre, te tratarán como una princesa -Le sonrió a medias tratando de hacerla hablar pero no tuvo suerte. -Mari, que sucede? -pregunto pasándose en seco.

-No es nada -Respondió tomándose su brazo -Es que no me imagino que quiera tener que repetir esto.

-Esto? -pregunto el rubio mirándola.

-Si, cada vez que me vaya con tu padre tener que despedirme quien sabe por cuánto de todos. Sólo tuve diez minutos para despedirme de Alya esta mañana!- exclamó molesta.

-Marinette, estas dramatizando las cosas- Respondió riendo. La tomo de la mano y siguieron caminando- Serán unos días, te prometo que estaremos todos esperándote de regreso cada vez que te vayas. Además ni pensarás en nosotros ya que tendrás miles de cosas en la cabeza con todo esto de las pasarelas y eventos.

La peliazul suspiro resignada pero algo de emoción por su viaje la hizo sonreír.

-Más te vale que estés aquí cuando vuelva -Dijo en tono de broma mirándolo.

-Más te vale que traigas tu trasero de vuelta y no me hagas ir por el- Respondió riendo.

Antes de que subiera al avión privado Adrien la beso y la abrazo fuertemente.

-Espero que te diviertas -Ella se separó sonriendo y subió al avión luego de darle un último beso.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top