Especial: Cumpleaños de Yugyeom ♡.

Un año. Un año y algunos meses habían pasado desde que Jungkook y Yugyeom comenzaron a andar oficialmente de novios. Cada día fue y es tan bueno como el primero, entre mimos, abrazos, besos, y demás, no podían dejar de amarse ni un poco. Cada vez la confianza creció más en ambos, si tenían algún problema, se lo decían y lo arreglaban al mismo rato que hablaban, puede que en alguna ocasión llegaron a pelear tanto en donde Jungkook terminó yéndose a dormir a su departamento por una simple tontería donde los dos no concordaron, pero al siguiente lo dejaron pasar y se arreglaron.

Y bueno, Lisa seguía siendo la misma de siempre, sólo que menos discreta. Ahora que ya estaban en la universidad y se veían siempre llegando a casa, iba detrás de ellos hasta cuando se lavaban los dientes. Claramente ellos hablaron con ella para que dejara de ser tan acosadora en su relación pero le valía un comino y seguía haciendo lo mismo. Al igual que la amistad que tenían Jungkook y ella no cambió nada, pues aunque ambos ya tuvieran novio/novia no significaba que se abandonarían el uno al otro, por algo serían mejores amigos siempre.

La universidad los traía completamente atareados, pero se daban su tiempo de al menos los tres desayunar y cenar juntos. Y aunque Jungkook se sintiera como un juguete, le daba gracia que su mejor amiga y su novio se pelearan por a quien le tocaba dormir con Jungkook en la noche, cuando en realidad éste decidía la mayoría del tiempo y en algunas ocasiones de lo cansado que estaba dejaba que discutieran el rato que quisieran hasta que por fin se decidían y ya iba a dormir con quien sea de los dos. Yugyeom lo iba a dejar primero todas las mañanas, ambos despidiéndose de un beso y diciéndose "te amo." antes de que Jungkook tuviera que entrar por las puertas, abandonando a su novio en aquella camioneta y a Lisa, pero de ella se despedía antes de salir de la casa.

En toda relación, cuando ya se llevaba un tiempo juntos, las insinuaciones no se hacían de esperar. Jungkook al ser un tanto inocente -y realmente no tanto, sabía lo básico pero no todo- no comprendía del todo esas insinuaciones de su novio, porque sí, ellos llevando el tiempo que llevan, aún no han intentando nada. El mayor de los dos no se sentía listo para dar el siguiente paso, él sabía que en su relación con Yugyeom sería algo por lo que le entendió a Lisa el pasivo claro que, el que recibe. Y aún no tenía su primera vez, si le daba vergüenza tocarse él mismo entonces si Yugyeom lo intentaba ¿Qué le pasaría? Los dos llegaron a hablar del tema en una ocasión y Yugyeom le hizo saber a su novio que lo esperaría el tiempo suficiente, claro, sí el lo quería intentar. Unos pequeños toqueteos y roces sí llegaron a suceder, pero cuando Yugyeom estaba a punto de llegar a más, Jungkook lo frenaba y éste se controlaba, haciéndole caso.

La mano de Yugyeom recorría toda la extensión de su cintura, besando sus labios lentamente, como si tuviera miedo de romperlo. Era temprano todavía, digamos que ese día había amanecido un poco... Acalorado, y tener a Jungkook dormido a su lado y a su merced no le calmó mucho el sentimiento. Lo despertó como la mayoría de los días, con un buenos días y un pequeño beso en los labios, pero Jungkook al seguir medio dormido, no estaba muy bien enterado de lo se sucedía, hasta que el menor de los dos comenzó a besarlo con más intensidad que antes, restándole el sueño.

Inconscientemente, llevó su pierna a la entrepierna de el alto, sin saber muy bien que hacía y sacándole un jadeo luego de rozarla sin estar muy enterado, disfrutando del beso que le estaba dando Yugyeom. Pensó, que podía estar dándole los buenos días, pero cuando ingresó la lengua segundos antes lamiéndole los labios, empezó a moverla junto a la suya, supo que no era del todo un buenos días. Al tacto de su novio, su piel se sentía caliente, sabiendo que ya estaba más que rojo del rostro, apretó las manos alrededor de la camisa de Yugyeom y abrió los ojos en grande en el momento de que una dureza rozó contra su pierna, e igualmente tuvo las intensiones de mirar, pero le descolocaba el beso que le daba.

Yugyeom se separó de él, dejando sus labios rojizos, húmedos y algo hinchados; bajó los besos de sus labios hasta el cuello, y cuando llegó a ésta zona, comenzó a besar, lamer y succionar en toda la piel donde tenía la libertad de dejarle pequeñas marcas rojizas que luego serían azuladas, soltó jadeos al tiempo que sentía los dientes de su novio rozarle suavemente la piel del cuello y un gemido puro cuando las manos que se encontraban en su cintura bajaron a su trasero, apretando una de las dos nalgas. La excitación ya corría por sus venas, pero un miedo inmenso llegó al éste comenzar a tocarle algo más abajo, con ambas manos lo empujó sin mucha fuerza.

— G-gyeomie, to-todavía...

— No, lo sé, perdón. Es que no me contuve, lo lamento pequeño.— Jungkook volvió a abrir los ojos, conectando la mirada con su novio y acomodándose hasta dejar la cabeza en su pecho, calmando el miedo, la excitación y los nervios que crecieron en esos segundos, inhalando el aroma que tenía Yugyeom en su ropa.– Tranquilo, está bien.— Intentó tranquilizarlo, besándole el centro de la cabeza repetidas veces.– Todo está bien Kookie.

— S-sí...— La inseguridad de que debió dejarle avanzar lo carcomía poco a poco, poniéndole intranquilo dentro de sí.

Esa fue una de las primeras veces que ellos intentaron algo, y aunque fue la única vez que Yugyeom llegó más lejos, Jungkook seguía pensando que estar tan miedoso de la primera vez no le ayudaba en nada, pero ¿Y sí dolía mucho cuándo entrara? ¿Y sí era muy brusco? ¿Y si tenía que caminar en la universidad cómo pingüino? Esas pequeñas cosas eran las que lo tenían pensando más de lo necesario, además que ver vídeos y los rostros adoloridos de los que recibían sí lo acobardaban.

Tocó la suave madera de la puerta del cuarto de Lisa con el puño y escuchó un claro “pase.”, entonces ingresó cerrando la puerta detrás suyo, saludando a su mejor amiga con la mano, ella formó el mismo gesto con una sonrisa, tecleando en su computadora luego al igual que acomodando sus lentes, concentrada en lo que hacía. Jungkook se mordisqueó el labio nervioso, necesitaba un consejo y quien mejor que Lisa para ayudarlo, aunque seguramente se volvería loca cuando le pidiera hacer algo por él.

— ¿Qué te trae por aquí Kookie?— Cuestionó, despegando la mirada de la pantalla segundos después, el mayor de los dos jugó con sus manos, con las mejillas tomando un suave tono rojo, Lisa hizo una mueca confundida por el repentino sonrojo, pero no dijo nada.

— E-eh, necesito ayuda d-de algo.— Su vista viajó de los ojos de Lisa a sus manos comenzando a sudar de los nervios que le consumían poco a poco.– Tu cumpleaños y el de Yugyeom se acerca. Ya tengo tu regalo, y el de Yugyeom todavía no, pero no sé que regalarle.

— ¿Quieres que te dé idea de regalos? Puede ser una nueva funda para su teléfono o una cámara él la ne...

— Quiero tener mi primera v-vez con él.— Las palabras de Lisa pararon apenas escuchó eso de la boca de Jungkook, apreciando cada vez más su sonrojo creciente y la vergüenza ponerlo tímido. Sonrió tierna al inicio y después esa sonrisa se transformó a una pervertida, acercándose en la silla de ruedas a él.

— Te puedo ayudar, si quieres te paso el PDF del Kamasutra. También podemos conseguir trajes y cosas así ¿Te gustan los juguetes sexuales?

— ¡Claro que no! Hablo q-que quiero tener mi primera vez, pero me da m-miedo.— Susurró y Lisa comprendió los nervios de Jungkook, dándose una vuelta y avanzando más a él, tomándole las manos para ponerlo tranquilo.

— Ya sé, no quieres que te lastime ¿Verdad? Vamos Kookie, tener tu primera vez siempre es difícil, porque tienes millones de pensamientos sobre que dolerá peor que te rompas una pierna, pero en el momento que estás ahí sólo es por unos segundos hasta que pasa. No creo que Yugyeom sea tan idiota como para no prepararte y tener cuidado justo cuando, ya sabes.— Explicó, calmando ese miedo interior en Jungkook, un poco más confiado por las palabras de Lisa, suspiró y asintió.

— ¿En s-serio que no dolerá t-tanto?— Ella le calmó acariciando sus manos y asintió, poniendo más tranquillo a Jungkook.– Pero no s-sé como hacerlo...

— ¿Te quieres poner algo sexy? Puedo ayudarte con eso.— Alzó las cejas de arriba a abajo, codeando a su mejor amigo pervertida y Jungkook rió aún avergonzado.

— P-puede ser, aunque no tanto, digo, no quiero vestirme de nada, sólo a-arreglarme un poco.

— Bien, entonces mañana iremos al centro comercial, estaremos de compras toda la tarde.— Sonrió maliciosa, planeando en su cabeza lo mejor del mundo y espantando a Jungkook un poco.– Luego te digo que hacer si Yugyeom no te prepara, y, como estimularlo al igual que sus puntos débiles.— Se dio la vuelta, pensando en donde pondría las cámaras.

***

— No me jodas. N-no, yo me voy, no entraré ahí.— Confiar en Lisa no estaría en sus opciones nuevamente, ahora ambos se encontraban en el único pasillo escondido, detrás de las escaleras, justo enfrente de la sex shop. Bueno, había una tienda de accesorios enfrente y una entrada a el centro comercial del lado derecho, pero la tienda casi no era visitada y esa entrada no era muy recurrida por estar algo lejos del estacionamiento. Negó repetidas veces, comenzando a caminar fuera de allí y Lisa lo tomó de la sudadera, deteniendo su caminar y arrastrándolo de nuevo frente a la tienda.

— No seas exagerado, mira, haremos esto. Entramos, vamos a la zona de las bragas y los otros accesorios que luego se ponen en las piernas, o las calcetas, escoges, sales y yo pago como si fuera mío ¿Bien?— Jungkook volvió a negar haciendo un puchero como berrinche y ella bufó.

— No quiero entrar ahí, no sé ni como es, no, mandame foto y yo veo desde afuera, más seguro el que atiende piensa que somos pareja y queremos experimentar, no, ew, no.— Lo agarró de nuevo y entró a la tienda con Jungkook detrás suyo sin dejar de quejarse, riendo al ver la cara sorprendida y aterrorizada de su mejor amigo por todas las cosas que había dentro, desde látigos a pequeños consoladores. Caminó tranquila a la zona que le dijo, sí, ella entró una vez haciendo el mismo favor, pero a SeokJin, estando igual que Jungkook al inicio, y después como si nada.

Llegando miró al tomate de Jungkook y le señaló con la cabeza a las cosas frente suyo.– P-pensé que con sexy te referías a alguna cosa que ya tenía, n-no esto.

— Escoge y ya verás como te quedará.— El mayor de los dos llevó la vista a las cosas, observando diferentes tipos de pequeñas bragas para chicas y la única zona que le llamó la atención fue la de las tiras ajustadas alrededor de la pierna, habían unas que se podían atorar a la ropa interior, como si fueran parte ya de ésta. La mayoría eran negras, sólo había alguna que otra que tenía tonos rosados o blancos, contuvo las ganas de largarse a chillar por la vergüenza recorrerle todo el cuerpo.

— Esas negras y el shoker liso.— Susurró en su oído y salió hecho un tomate en vida, con la atenta mirada del chico que atendía la tienda sobre él, si le fue difícil que las manos no le sudaran por estar en esa tienda tan rara fue terrible poder escoger esas dos cosas tan insignificantes sin sonrojarse tanto. Soltó un suspiro relajado una vez salió, sintió como si estuviera presionado cuando entró a la tienda y al salir todo eso se esfumó, pero sus manos y el sonrojo seguían ahí. El sonido de su celular lo sacó de su trance y supo apenas leyó las primeras letras que era Lisa.

MonaLisa ♡:

Que moderno 👀.

Bueno, ya iré a pagar, pero te aviso de una vez que Yugyeom anda aquí en el centro comercial.

El corazón de Jungkook paró una milésima de segundo a el mensaje de Lisa y rápidamente tecleó.

¿No dijiste que había salido a ver a tu tía para invitarla a las fiestas por separado tuya y la de él? 😢

Si nos ve todo se arruinó 😭.

Yah, dramático.

No creo que esté por éstos rumbos, se supone que aquí no hay nada interesante. Ya casi salgo, estoy viendo las medidas para que no te queden apretadas las tiras. 7u7

Apurate 😳.

Jungkook apagó su teléfono nervioso, se suponía que Yugyeom no estaba en el centro comercial, él debía estar con su tía y eso le ocasionaba ponerse aún más nervioso, joder, estaba justo enfrente de una sex shop ¿Qué pensaría si ve a Lisa salir de ahí?

— ¿Kookie?— Si antes el corazón dejó de latir por una milésima de segundo, ésta vez sintió que dejó de latir por un minuto. Tragó saliva y chilló sin saber que hacer y voltear, las palabras de Lisa nunca eran ciertas, bueno, en ocasiones sí, pero en esos últimos días no fueron buenas. Suspiró y se dio la vuelta mostrándole la mejor sonrisa a su novio.

— Hola Gyeomie ¿Qué haces aquí?— El alto se acercó a él para dejarle un beso en los labios y Jungkook lo aceptó gustoso.

— Lo mismo me pregunto yo, pensé que estabas en casa con Lisa, hace un rato le dije que estaba aquí. Vine con Namjoon, Mingyu, Kai y Chanyeol a comprar las cosas para mi fiesta.— Acercó su cuerpo al suyo una vez lo tomó de la cintura, sonriente por poder ver a su novio antes de tiempo y le extrañó un poco que estuviera ahí.– ¿Por qué estás aquí solo?

— Ah, es que Lisa se q-quedó en el estacionamiento hablando con una e,-compañera de la preparatoria, viene en un rato, la estoy esperando aquí porque ya sabes, temas de chicas.— Al parecer Yugyeom le creyó ya que no preguntó más y no dejó de mirarlo ni un minuto.– ¿Pasa algo?— Un tierno sonrojo creció en sus mejillas y él negó, sin abandonar la sonrisa en su rostro.

— Nada, nada. Sólo aprecio la belleza de mi novio.— Jungkook escondió la cara en su pecho lleno de vergüenza y se separó apenas pasó.– Debo ir con Namjoon y los demás, están dentro justo en la tienda de enfrente buscando las cosas ¿Quieren que los lleve cuándo terminen?

— Claro Gyeomie, te mandamos mensaje.— El otro asintió, besando castamente sus labios en forma de despedida.

— Los veo luego, te amo.

— Te amo más.— Respondió, escuchando la risa de Yugyeom casi como siempre al igual que él, avergonzada. Las veces que era tierno con él, siempre se ponía de esa manera y viceversa, ambos un desastre después de las palabras o gestos bonitos.

Desapareciendo por la puerta de aquella tienda, exhaló todo el aire contenido, haciéndole señas a Lisa para que saliera rápido y los dos se fueron corriendo como si los persiguiera alguien.

***

— Lisa ¿Y Jungkook? Ya casi termina la fiesta y quería tomarme una foto con él.— Habló en voz alta sobre su oído por la música que sonaba en un alto tono en todo el salón donde se daba la fiesta.

Su cumpleaños había ido mejor de lo que se esperaba. Lisa y Jungkook lo despertaron con las típicas felicitaciones y el feliz cumpleaños a la primera hora donde se asomaba el sol, y la verdad hace un tiempo no se esperaba ser despertado por la dulce voz de su novio y un beso algo largo en los labios, felicitándolo millones de veces seguidos, tal vez hace tiempo pensaba en sólo Lisa y Jungkook cantándole el feliz cumpleaños como casi siempre se hacía, pero claro que ahora era diferente. Como Lisa y él eran mellizos, ambos tomaban un día para celebrar su cumpleaños por separado, Lisa un día antes y Yugyeom el mismo día que nacieron los dos, pero Yugyeom para no ser mal hermano, siempre que partía el pastel lo hacía con Lisa.

Horas después de su despertar, gracias a Lisa que consiguió a alguien para que adornara tanto el jardín, donde fue la fiesta de Lisa y el salón pudieron salir a comer algo. Su hermana no quiso hacer la gran cosa, así que sólo tuvieron una linda tarde en viernes, tomando pero no demasiado y la comida que realmente fue una parrillada se acabó en menos de una hora. La suya comenzó al siguiente día por la noche, bebidas, comida mayormente basura y demasiadas tipos de bebidas alcohólicas.

— Se fue porque su omma llegó hace veinte minutos, pero me dijo que te vería en tu habitación, dormirá contigo hoy por ser tu cumpleaños y creo también mañana. Yo también me voy, estoy algo cansada y necesito mi cama, ya son las doce. te veo mañana.— Yugyeom asintió algo triste, le hubiera gustado estar con Jungkook un rato más y tal vez tomarse la foto que planeaba hace un rato, pero él hubiera hecho lo mismo si sus padres llegaran en el día de su cumpleaños.

— Yo voy en media hora, ya somos pocos y recogeré un poco antes de irme, hasta mañana.— Lisa respondió con una sonrisa, saliendo del lugar y caminando con rapidez a su casa, tenía la suerte de que quedaba cerca. Sacó su celular y marcó el número de Jungkook, luego de dos sonidos contestó, notando en su voz el nerviosismo.– ¿Estás listo?

— C-creo que sí. Lisa e-esto es muy sexy, y-yo, no puedo salir así.

— No lo comprobaré hasta que te vea.— Cortó la llamada sonriente y comenzó a correr hasta su casa, llegando en cinco minutos y teniendo que ponerse las manos sobre las rodillas para recuperar el aire perdido en la carrera que se dio a su casa. Abrió la puerta y la cerró, subiendo las escaleras, abriendo la puerta de su cuarto de un portazo, extrañada por no ver a nadie dentro y el baño con el foco apagado.– ¿Jungkook?

— Aquí estoy...— La voz de su amigo provino desde el baño y cuando intentó abrirla ésta estaba cerrada.

— Abre y si no lo haces entraré a la fuerza y te tomaré fotos quieras o no. Estoy en mis días, tengo sueño, quiero más chocolate y café para seguir despierta.— Rápidamente la puerta se abrió, tal vez Jungkook le tenía miedo a Lisa en los días que Andrés la visitaba. Su mejor amigo salió, vistiendo como se lo imaginó días antes. Se paró frente a ella sonrojado y sosteniendo el borde de la camisa de manga larga blanca.

— ¿Crees que l-le guste?

— Claro que le gustará y si no le gusta yo misma le parto la cara. Bien Kookie, ya sabes sobre como prepararte si no lo llega a hacer, sus puntos débiles, las posiciones y lo más importante, protección. No quiero ser tía a los diecinueve.— Metió un paquete pequeño plateado en la bolsa de la camisa algo discreta.– Sólo espero tus gemidos no se escuchen al otro lado de la calle e intenta no ponerte tan nervioso, todo estará bien.

Su amigo asintió, caminando a la puerta, tomando el picaporte de la puerta, suspirando y pensando en lo que se le avecinaba, volteó y le sonrió a Lisa.– Gracias Li.

— No hay de qué Kookie, disfrutalo.— Movió las cejas de arriba a abajo, haciendo reír a Jungkook, éste saliendo del cuarto y caminando a el de Yugyeom, con un escalofrío pasarle por todo el cuerpo una vez entró y se sentó sobre la cama, en espera de su novio en la oscuridad. Agarró su celular, poniéndolo sobre la mesita de noche, jugando con sus manos esperándolo.

Él estaba, lo podía hacer, no es un cobarde.

***

El recién cumpleañero llegó a su casa menos tiempo de lo esperado. La gente se fue tiempo después de que él hablara con Lisa, así que no tardó demasiado en recoger la basura tirada en el piso junto a SeokJin y Namjoon, ya que se quedaron a ayudarle pues fueron los únicos no borrachos en la noche, recogieron toda la basura tirada en el piso y las mesas desplegables, recogiendo también la comida que sobró y los regalos, metiéndolos dentro de la camioneta y entrando a ella luego de agradecer a SeokJin y Namjoon por haberse quedado con él, les dio la buenas noches y fue rumbo a su casa junto con Lisa y Jungkook.

Seguía sintiéndose algo triste por no poder acabar la noche con Jungkook, al menos un buenas noches por parte de su novio, lleno de tiernos besos en los labios y abrazados como casi siempre lo hacían, pero seguramente por la hora Jungkook y Lisa estaban en su tercer sueño, podría tomar alguna foto de Jungkook dormido, ese podría ser el regalo de su novio. Una vez entró a la casa y bajó todas las cosas, metiendo la comida en el refrigerador, subió con pereza las escaleras, bostezando en el camino no sólo por tener algo de sueño, sino porque estaba más que aburrido. Caminó por el pasillo hasta llegar a la puerta de su cuarto y la abrió, cerrando la puerta detrás suyo, prendiendo el foco, quedó sorprendido al igual que espantado al ver la silueta de su novio sentado sobre la cama, casi recostado.

Más al bajar la mirada a sus piernas y ver unas tiras negras ajustadas a su alrededor, después uun bóxer blanco que le quedaba antes de la línea del muslo, de ahí una camisa de manga larga blanca, en su cuello aunque no recordaba el nombre, un collar pegado negro y liso. Subió la mirada a su rostro, apreciando el tierno sonrojo sobre sus mejillas y el ligero maquillaje, dándole un aspecto aún más tierno los lentes redondos como los de Harry Potter, las manos juntas tomando el borde de la camisa, un escalofrío le recorrió todo el cuerpo por la tierna y sexy imagen.

— ¿Jungkook ¿T-tú, cómo es, yo, esto, e-eh?— Él sonrió ocultando sus nervios, levantándose de la tibia cama y caminando frente a su novio, quedando a sólo unos centímetros de su rostro.

— ¿Te gusta t-tu regalo Gyeomie? Feliz cumpleaños.— Su voz salió en un tono tierno, Yugyeom aún no sabía de que manera responder, no podía creer todavía lo que sus ojos veían.

— K-kookie, ok... Eh, sabes que yo quiero hacer esto contigo, pero ¿De verdad lo quieres hacer? Si no te sientes listo, sabes que puede ser en cualquier otro momento, te amo y yo te puedo esperar lo suficiente, no quiero que te sientes presionado.— Besó la punta de su nariz y luego sus labios, conteniendo las ganas de llegar a más con él, no lo haría sí ni se sentía preparado.

— Estoy listo Yugy, no quiero acobardarme más, quiero hacer el amor contigo.—Esas palabras lo dejaron mudo, y la sangre le bombeó por todo el cuerpo, volviéndolo algo tímido, entonces acarició una de las mejillas de su novio, notando que en una parte había mucho más que en las demás zonas, frunció el ceño quitando el exceso de maquillaje de la mejilla donde se encontraba la cicatriz.

— Ya te he dicho que no te cubras la cicatriz, eres perfecto así.— El puchero de Jungkook era tan tierno que logró hacerlo besar una y otra vez sus labios.– Bien, intentaremos esto, pero si te llego a lastimar mucho, quieres parar o te sientes incómodo, dímelo, yo lo entenderé completamente y pararé ¿Está bien?

Jungkook asintió, seguro que Yugyeom decía la verdad. Rozó sus narices, siendo algo travieso al tomar las manos de su novio y bajarlas a su trasero, sorprendiéndolo por su iniciativa aunque sintiendo vergüenza después de ello.

— P-puedes tocar un p-poco.— El mayor de los dos llevó las manos propias a los hombros de Yugyeom, masajeando levemente la zona. Soltó un jadeo cuando el menor comenzó a apretar sus glúteos como si estuviera amasándolos a su gusto buscando esos esponjosos labios de su conejito y uniéndolos en un brusco beso que empezaba a dejar sin aliento a Jungkook. Éste dio un giro, llevándolo entre toqueteos y el beso a la puerta, cerrándola con pestiño y también apagando el foco quedando a oscuras en la habitación. Yugyeom volvió a darle la vuelta tomando el control de la situación, guiándolo a la cama, subiendo las manos hasta meterlas por debajo de la camisa y tomarle de la cintura. Sintió el sabor a cereza algo artificial de sus labios, mayormente una vez ingresó la lengua entre sus labios cuando le dio el permiso, una oleada de calor invadió a ambos por la húmeda sensación del beso, combinado con los chasquidos y los jadeos de Jungkook recuperando aire sin querer separarse, las manos ahora en el cuello de su novio logró juntarlo a él y en un paso torpe los tiró sobre la cama, no estando tan acomodados como se lo imaginaba, se separaron riendo ya que la posición que estaban era de Yugyeom sobre su vientre y Jungkook algo más arriba.

— Esto n-no es como los vídeos porno.— Se acomodó mejor en la cama, abriendo las piernas para que Yugyeom se posicionara entre ellas, éste lo hizo segundos después, tomándolo firmemente de los muslos, el tamaño y lo fuertes que eran lo tenían más deseoso.

— Ya verás que sí. Demonios ¿Sabes cuántas veces quiso apretarlos?— Farfulló y Jungkook asintió sonrojado, lamiéndose los labios ya de un color rojizo y húmedos.

— Una v-vez cuando estaba dormido tú los apretaste y también el día que vimos Megalodón hace un año t-todo el camino a el carro los estuviste apretando.— El alto, sonrió divertido, rozando el pantalón con el bóxer de su novio, arrancándole un fuerte jadeo.

— ¿Te gusta acaso?

— Sería mejor si, t-te quitas todo eso.— Se alzó un poco, apoyándose en sus codos volviendo a poner aquella sonrisa inocente.– Y-y te puedo ayudar Gy-gyeomie.

— No hables o te juro que no tendré piedad de ti, e igual, claro que me puedes ayudar.— Agarró la mano de Jungkook, apoyándola en su pecho cubierto por la camisa, su novio comenzó a desabotonar la camisa, su piel estaba caliente, en realidad no sólo la piel, y a cada toque de Yugyeom se sentía menos cuerdo. Bajó las manos a el pantalón, desabotonándolo y bajando la cremallera, apreciando la tela negra del bóxer ya con un bulto en ella, volvió a relamerse los labios. Ignorando la vergüenza que traía en la sangre, apretó un poco el grueso bulto, haciendo soltar un jadeo a Yugyeom, casi un gemido.– N-no juegues así.

— ¿Cómo? ¿Así?— Apretó nuevamente la tela, moviendo la mano de arriba a abajo, ocasionando que Yugyeom lo tirara de nuevo hacia atrás, acorralándolo con las manos.

— Te dije que no tendría piedad de ti.— Susurró sobre su oído, soltando un poco aliento y mordiendo el lóbulo, provocando un escalofrío en Jungkook, subiendo más ambas manos, poniéndolas sobre su cabeza. Atacó sus labios nuevamente. Apretando un poco, llevó sus manos a el bóxer blanco, remarcando con los dedos la uve desde su cadera a la pelvis, juguetón volvió a subirlas, desabotonando la camisa de su novio y quitándola con rapidez. Le provocó una punzada en el miembro apenas se separó, el ver a Jungkook con los ojos llorosos, los labios rojos y los pezones algo erectos, sonrió lascivo, acercándose a su pecho y lamiendo uno, conteniéndolo entre sus labios y Jungkook cerró los ojos, abriendo la boca y ahogando un gemido.– Repito ¿Te gusta?— Ese gemido que ahogó salió luego de que le mordiera el mismo y apretara el otro, dándole una nueva oleada de calor hasta bajar a su miembro.

— Se s-siente raro, pero b-bien.— Mordió su labio, acariciando el cabello pelinegro de su novio, disfrutando la atención que le daba y le fue inevitable apretarlos cuando una de sus manos tocó su miembro dentro de la tela del bóxer.– ¡Gyeomie! N-no si-sig... Mgh, n-nunca me, a-ah.

Yugyeom soltó el pezón de Jungkook levantando la mirada, sonriendo perverso mientras seguía el vaivén.— ¿Que acaso Kookie nunca se a todo aquí?— Jungkook en esos minutos se preguntó donde había quedado su novio tímido, ahora sólo veía a un Yugyeom fuera de lugar, pero le encantaba la forma en que lo tocaba, nunca se había sentido de esa manera, tan acalorado y deseoso de más, de que lo toque mucho más. Arqueó la espalda e intentó cerrar las piernas o quitar a Yugyeom porque sentía que en cualquier momento se correría en su mano, le fue imposible ya que él abandonó su cintura y llevó la otra mano a sus piernas, conservándolas abiertas, prosiguiendo con la masturbación que le daba a Jungkook.

Todo era tan, rápido.

— E-eres de-demasiado malo, aunque n-no tanto... ¡Oh Dios!— Un fuerte y dulce gemido resonó desde su garganta, corriéndose en la mano de Yugyeom y comenzando sentir pequeños espasmos por su corrida, jadeante y algo mareado por toda la excitación que recorría cada punto de su cuerpo.– Eso fue m-muy, perdón por, ya sabes.— La vista la tenía nublada, no podía articular palabras que tuvieran sentido, se sentía bien, de haber sabido lo bien que era tocarse, lo hubiera hecho desde hace mucho, y no ser tan avergonzado en esas cosas.

— Tranquilo, ahora relájate Kookie y ten la mente en blanco, aún falta mucho que hacer. Quitate el collar un momento.— El mayor hizo caso y desabrochó el collar, poniéndolo en la mesa de noche junto a su celular, por un momento le recordó a Minimi, su gatita que seguramente estaba en los brazos de Lisa.

Sus pensamientos se fueron cuando los labios de Yugyeom se colocaron en su cuello, dejando suaves besos, juntando más ambos cuerpos, rozándolos en ciertas ocasiones, mordiendo la fina y tersa piel pálida de su cuello, apretando su cintura sin parar de besar, morder y lamer la piel, cada vez más húmedo y caliente, como le gustaba sentirlo. Los besos húmedos cesaron en su cuello, yendo en dirección a su hombro, dejando uno, luego siguiendo a su pecho, estómago y la cadera, se paró cuando en sus labios cayó un polvo, no supo de que color por la oscuridad, pero en donde estaba la cicatriz de Jungkook, volviendo a molestarse un poco con él por hacer eso, lo miró algo enojado y Jungkook se encogió en su lugar.

— E-es fea Yugy.— Formó un puchero y  el alto negó, uniéndose en un beso con él, tomando una toalla húmeda del cajón donde siempre las tenía guardadas, limpiándola del maquillaje, pudiendo apreciarla perfectamente.

— Sabes que no te despreciaría por tu cicatriz, es hermosa como tú, así que deja de hacer eso, ya te he repetido todo este tiempo que te amo tal y como eres, no lo vuelvas a hacer.— Regañó, frunciendo la nariz, dejando un piquito en su mejilla y después en la nariz, viendo a Jungkook asentir apenado. Jaló a el mayor, quitando las tiras negras de sus piernas junto a el bóxer y los lentes, con ahora Jungkook completamente sonrojado, cohibido por la mirada tan profunda que le dirigía a todo su cuerpo. Yugyeom volvió a estirar su brazo, tomando el frasco que vio dentro y seguramente fue Lisa, conectó su vista con la de Jungkook, notando el miedo en sus ojos después de verlo sacar el frasco.– Te juro que te no dolerá demasiado, y si lo hago, dime, todo estará bien ¿Sí?— El cuerpo de su novio dejó de estar tan tenso, pero seguía temeroso.

Confiaba en su Gyeomie, siempre lo haría.

Yugyeom mantuvo abiertas las piernas de Jungkook, entonces tuvo la hermosa vista de su contraída entrada, si se daba cuenta, todo estaba pasando tan rápido, si hace unos minutos lo estaba masturbando, ahora estaba a punto de prepararlo, joder, el tiempo era demasiado rápido, aunque bueno, Jungkook no se veía muy cansado, más bien necesitado y podrían jugar un rato más. Metió los dedos en aquella cosa algo viscosa, untando sólo tres, Jungkook ladeó la cabeza y cerró los ojos, apretando entre sus puños las sábanas, estaba listo, él estaba listo, y ya cuando el dedo índice empezó a rozarle justo en la entrada donde comenzaba su ano, mordió sus labios, tirando de uno. Lo adentró poco a poco, y la sensación de las paredes anales de su novio apretándolo provocó que el líquido preseminal le recorriera desde la punta del pene y chorrearle en el bóxer, ya no tenía el pantalón, al menos sólo el bóxer, lo movió dentro, escuchando los gemidos lastimeros de Jungkook, éste sólo teniendo pequeñas punzadas dentro, sin mucho dolor como lo pensó a un inicio, prosiguió los movimientos, de lado a lado y agregó el segundo, viendo como Jungkook ni se inmutada, como si en realidad no hubiera metido nada más, ya hasta que comenzó con los movimientos de abrir ambos dedos, aprendiendo de la manera que lo vio en aquél vídeo, los gemidos del mayor se volvían cada vez más placenteros, pero conservando un poco el dolor en ellos.

Recordó que con los dedos era capaz de llegar a su próstata, y escuchar los gemidos de Jungkook ahora podría ser su sonido favorito. Los impulsó más profundo, rozando la zona con los dedos y esos sonidos fueron mucho más fuertes y profundos, con su novio arqueando la espalda por todo el placer que sentía, metió el tercero de una, emitiendo la parte de avisarle que lo haría, e igualmente Jungkook no se dio cuenta de nada, sólo seguía gimiendo lo más que podía, sin creerse la gran sensación en su parte baja, y el dolor había desaparecido por completo.

— Entraré ahora, inhala y exhala, ya te dije, avisame, tampoco te tenses, eso lo hace más difícil.— Explicó, bajándose el bóxer y liberando finalmente su miembro erecto. Jungkook abrió los ojos, dispuesto a mirar cuando entrara en él, por más morboso que sonara, el miembro de Yugyeom era pálido, con la punta roza y sobremarcándose las venas en él, pensó que como sería capaz que entrara en el, pero luego que lo rozó, siendo más grande que los tres dedos. Yugyeom lo posicionó, recordando que le faltaba ponerse el condón. Frustrado abrió el cajón por tercera vez, sacando un paquete plateado y rompiéndolo con cuidado, poniéndoselo en el miembro, adentrándose poco a poco en él después, delirando por la ahora nueva sensación de su miembro apretado en el ano de Jungkook, dejando sólo la mitad dentro.

— Es t-tan, pero tan gra-grande, c-como, oh G-gyeomie, metela m-más, ugh.— Realmente dolía, dolía demasiado, pero el dolor de volvía en algo más placentero, le daba más placer y nuevamente su miembro estaba erecto. Una lágrima le recorrió la mejilla, la limpió disimuladamente, disfrutando cada vez más. Esas palabras se quedarían grabadas en su mente por mucho tiempo, y tal como lo pidió, embistió lentamente, sin contenerse mucho, se acercó a Jungkook, juntando sus labios y mirándole los ojos.

— Te amo d-demasiado.— Murmuró, juntando sus frentes, Jungkook estaba siendo algo irreal en su vida, era como si fuera un sueño, pero no lo estaba, él sí estaba con Jungkook realmente, el mayor quitó las manos de las sábanas y las puso en la espalda de Yugyeom, abrazándolo mientras ponía el rostro en su cuello y Yugyeom hacía lo mismo.

— Yo nunca te c-contestaré un y yo a ti, yo siempre te amaré m-más Yugy, m-mi corazón y cuerpo s-sólo serán y son para ti.— El dolor cesó minutos después. La humedad de su entrada y el miembro de Yugyeom le daban más facilidad al asunto y las embestidas empezaron lentas, logrando que Jungkook le rasguñara la espalda.– Y-yugy, m-más.

Yugyeom se separó, no porque le molestara que Jungkook le rasguñara la espalda, le gustaba el dolor, y ver como su miembro entraba y salía de Jungkook le calentaba más, deseoso, embistió con fuerza contra el cuerpo de su novio, tomándolo por los muslos sin parar las embestidas, cada vez más duro y sin piedad, escuchando los gritos de Jungkook, entre ellos algunas veces su nombre. Jungkook se tapó la boca, contendido todos los gemidos, gritos, que eexigían salir, Yugyeom al notar eso le quitó la mano de la boca, bufando en medio de gemidos algo roncos, su voz era chillona, pero Dios ¿Cómo se le puso ronca la voz?

— No te ta-tapes.— Gruñó, apretando los dedos en sus muslos, sintiendo la punta de su pene más caliente que antes, ya casi llegando.– La única que te escucharía es... Ahg, Lisa.

— P-pero ¡Yugyeom, oh demonios!— Exclamó, corriéndose sobre su abdomen, sin poder contenerse más, terminando con lágrimas de placer corriendo por todo su rostro. Las paredes de Jungkook se contrajeron, pero no fue lo suficiente para hacerlo correr, y luego de seis embestidas más, se corrió dentro de condón, deseando sólo un poco haberlo hecho sin él. Soltó un gutural gemido mezclado con un gruñido, descansando por fin sobre el cuerpo de Jungkook, en paz y relajado, regularizando su respiración al igual que su novio, subiendo y bajando el pecho repetidas veces, soltó ambos muslos, poniendo las manos en su cintura, besando los labios de un Jungkook a punto de caer dormido.– Eso fue m-muy... Gyeomie, feliz c-cumpleaños.

— Gracias Jungkookie, de verdad, gracias. Te amo tanto.— Salió de él, acostándose al lado, acomodándolo en su pecho y abrazándolo por la cintura.

— Yo más, yo mucho más.— Susurró, cayendo dormido a el minuto, agotado, pero feliz, completamente feliz.

***

Lisa pausó la grabación, sentándose en la cama, con una expresión neutra pero sorprendida e impactada. Tomó su celular y buscó en KakaoTalk el chat con su novio.

Chae, my girlfriend :3❤.

Chae... ¿Y si nos vemos mañana?

El fin.

•'•

Ok, creo que quedó medio kk y muy largo ¿Qué piensan? ;-;.

Bueno, aquí llega el final Pt.2 especial por el cumpleaños de Yugyeom :3. Espero no les haya hartado tantas palabras :c.

Nuestro Kookie ya fue desvirginado uwu.

¿Ya vieron Burn the stage? Yo no :(. Pero espero se la hayan pasado muy bien las que ya la vieron Y LES PIDO QUE NO DEN NINGÚN SPOILER UWU.

Yo voy hasta el 1 de Diciembre u,w,u. Y el Martes tengo vanguardia, y saldré con un vestido algo corto, con este frío, matenme ya :').

Nos leemos en el epílogo nun. Parezco feliz pero no la quiero terminar :'v.

¡Nos leemos luego!