Hiccup despertó más tarde de lo habitual, el pobre chico había quedado molido del.dia anterior, para su sorpresa aún era de noche ya que todo se encontraba obscuro, algo sorprendido intento moverse pero un peso extra se lo impidió, a su lado se podía escuchar una respiración calmada, el joven trago grueso, se encontraba abrazado por dos patas negras y podía jurar que su cintura tenía enroscada la cola de Toothless, mientras ambos estaban cubiertos por las alas negras que impedían la entrada de los rayos del sol.

Unos rasguños en la puerta hicieron que el dragón comenzará a despertar, Toothless abrió los ojos con pereza no tenía ganas de despertar, inconsciente apretó sus patas contra su pecho escuchando un leve quejido, sorprendido miró bajo sus alas encontrando a Hiccup sonrojado, por un momento le pareció extraño pero no tardó en recordar que le había permitido dormir con el, restandole importancia abrió sus patas para que el joven se marchara pero no lo hacia y....

Di...disculpa, podrías soltar mi cintura.

Nervioso señaló la cola.

Toothless abrió los ojos sorprendido pero no tardó en obedecer, comenzó a desenrollar su cola lentamente, cuando terminó el castaño se sentó en la cama de golpe con la cara roja y la mirada abajo.

Unos golpes en la puerta así como ligeros gruñidos la regresaron a la realidad, afuera Copo de Nieve y Fishlegs exigían desayuno.

El castaño se paró de golpe y sin decir nada se encaminó a la cocina para preparar algo, dejando a los demás sorprendido por su actitud ya que ni los buenos días dió.

Al llegar a la cocina soltó un suspiro, que demonios estaba pasando con él? Tras mojar su cara se dispuso a preparar él desayuno, de verdad no entendía porque estar tan cerca de Toothless lo ponía tan nervioso, Por Dios era un Dragón! Debería estar aterrado y no...

Desayunaron en silenció, era obvio que ya era muy tarde, Hiccup decidió no ir a la facultad no tenía asuntos importantes y debía rellenar la nevera por lo que usaría la mañana en ello, por su parte Fishlegs si partió a la escuela, después de lavar los platos que quedaban y limpiar el resto de otros dos, cortesía de Toothless, decidió cambiarse, podía escuchar el ruido de la televisión, a veces le sorprende la habilidad e inteligencia de ese zorro, preparó el dinero y la lista, tal ves aproveche para renovar su equipo de trabajo.

En la sala Copo de Nieve y Toothless se encontraban embobados con las caricaturas, pegados a la televisión sin pestañar.

Aléjense un poco, se van a quedar ciegos si ven la tele tan cerca.

Los otros dos lo ignoraron olímpicamente, veinte fijamenten el televisor hasta que el programa terminó y empezaron los comerciales, Toothless hizo un sonido de aburrimiento le chocaban estos ya que no los entendía muy bien, en especial los de política, el dragón se giro a ver al humano que en ese momento se coloca su chaqueta y se dispone a salir, Copo de Nieve se acercó a despedirse seguido de Toothless.

Voy por más comida de acuerdo, no vallan a hacer destrozos como anoche, entendido.

Los ojos de Toothless se iluminaron, no entendía lo de destrozos pero.si lo de comida, pronto el dragón comenzó a seguirle.

Quieres venir?

Una gran sonrisa fue la respuesta.

Estas loco, no puedes salir así.

El reptil lo miró enojado.

Ya hablamos de esto, nadie debe verte en esa forma o tendremos problemas.

Resoplo molestó, muy a su pesar comenzó a transformarse tomando su forma humana, satisfecho se dirigió a la salida pero Hiccup le impidió el paso.

Ahora que?

Reclamo enojado

To...Toothless no puedes salir así, estas desnudo! Te tienes que vestir.

Aghhh! Como molestas.

El morocho se dirigió a la sala, porque los humanos complican todo, el solo quería ir por comida, Carajo! Donde demonios estaban esas telas raras?
Enojado no tardó en gritarle a Hiccup, el sabrá donde encontrarlas.

Hiccup apareció y se dirigió a su cuarto cubriendo con la mano su cara, regreso con las prendas y las dejo en el sillón saliendo de ahí para que el moreno se vistiera, después de unos minutos el moreno apareció en la entrada.

Tsk! No se como caminas con estas cosas, es incomodo

Hiccup lo miró unos segundos antes de soltar la carcajada, lo te ocaciono que Toothless le mirara molestó.

Perdón, perdón, es que te pusiste los zapatos y la camisa al revés, ven siéntate te voy a ayudar.

Toothless asintió y se sentó en el piso, Hiccup se acercó y empezó a quitarle los zapatos mientras le ordenaba cambiar la camisa, había hecho un caos con las agujetas.

Listo ya esta, ahora vamos a...///...Toothless porque no te haz puesto la camisa.

Es que no entendí....que es revés?

Rápidamente volteó la camisa y se la coloca

Espera un momento.

Rápidamente fue a su habitación y regreso con una chamarra de pana negra, Toothless la miro confundido pero la acepto, batallo un poco con las mangas pero logro ponérsela.

Listo.

Bien, vamos.

Cuando estaba por salir Copo de Nieve lanzó un quejido, porque a él no lo llevaba, el animalito se paró en sus patas traseras y se aferro a la pierna de Hiccup chillando.

Que pasa Copo de Nieve.

Quiere ir.

Oh...lo siento cariño, pero no dejan entra mascotas.

Porque no lo esconden como la otra vez.

Tampoco dejan entrar mochilas.

Carajo, los humanos si que se complican, molesto el moreno no tardó en sujetarlo del cuello, sin lastimarlo, guardándole en su chamarra, un gruñido de felicidad fue la respuesta.

Listo, así nadie lo verá.

Bueno en eso tienes razón.

Exclamó sorprendido el joven ( yo más, me sorprende que no se salga por la parte de abajo debido al peso).

Salieron del departamento , Toothless estaba por bajar las escaleras cuando Hiccup lo detuvo, esta vez tomarían el ascensor, se escuchó una campana y las puertas se abrieron, con algo de duda el moreno entró.

Este es un ascensor, sube y baja los pisos del edificio, para moverlo tienes que presionar los botones, mira, estamos en el 4 y queremos ir a la planta baja, es este PB, solo lo precionas y listo.

Toothles ponianatencion a todo lo que el joven decia, le gustaba aprender, las puertas se cerraron
y una ligera sacudida asustó al moreno que no tardó en pegarse a la pared, Hiccup río por la acción, no tardo en acercarse para tranquilizarlo.

Calma, no pasa nada, solo.esta bajando.

Aun desconfiado acepto, en breve llegaron a la planta baja.

Al salir del edificio Toothless no dejaba de mirar a todos lados, sorprendido.

Frenten a ellos había edificios igual de grandes o más, las calles, los autos, el ruido, la gente, todo esto era nuevo para el moreno....para el y el pequeño zorro que no tardó en asomarse.

Hiccup miraba divertido las expresiones de su compañero, parecía un niño pequeño entre emocionado y asustadizo, ya que le rehuia a la gente cuando pasaba a su lado, un par de veces Hiccup lo sujeto para que no se bajara a la calle, cuando llegaron a un semáforo el castaño le explicó el uso de éste, no queria que sufriera un accidente.

El super al que iban no estaba lejos, unas cuatro cuadras de su hogar, Toothless miró sorprendido el sitió parecía una cueva enorme, se veía muy iluminada y olía muy bien, pronto su nariz capto el aroma de la comida, estaba por salir disparado al interior cuando el castaño lo detuvo.

Espera, no puedes entrar corriendo, primero cierra bien tu chamarra antes de entrar, no olvides que no dejan entrar animales.

De mala gana el moreno y copo de nieve aceptaron, en segundos las cabezita de algodón desapareció.

Bueno, así está mejor, andando.

Con paso tranquilo ingresaron, Toothless quedo impresionado con el interior, aromas agradables inundaban la cueva, había demasiados humanos pero nimodo, la comida es la comida.

Observo como Hiccup tomaba un extraño objeto de metal y comenzaba a caminar mientras le pedía seguirlo.

Una gran cantidad de empaques llamativos inundaban los pasillos, algunos olían dulce otros más fuertes, otras cosas con formas extrañas que no entendía para que servían pero los colores eran bonitos.

Primero compraremos las pastas, vamos.

El moreno lo siguió por un buen rato su compañero lo llevó por varios pasillos mientras metía varias de esas envolturas de colores en el carro, un par de veces intento abrirlas pero Hiccup lo regaño, ya habían pasado un buen rato por lo que empezó a desesperarse.

Oye, dijiste que veníamos por comida pero no e visto ninguna.

Pero....si ya la llevamos (señalando el carro) vez.

Eso no es comida! No e visto ningún pescado, un venado o conejos, solo llevas esas cosas extrañas que me hicieron daño la última vez, pero nada de comida.

Hiccup lo miró antes de sonreír, era obvio que para el eso no era comida.

Eso fue porque te comiste la envoltura...esta bien, creo que se que es lo que quieres, vamos por carne.

Los ojos de Toothless se iluminaron al oír la palabra mágica....carné.
Casi saltando siguió a Hiccup al área de refrigeración, hiendose de espalda al ver la cantidad de cortes.

Bueno, escoge.

Prácticamente se pego a los cristales de los refrigeradores, mirando emocionado los trozos.

Puerco, res, pescado, pollo, había una gran cantidad de piezas, el azabache corría de un lado a otro emocionado.

Hiccup lo miró ya algo apenado, la gente que pasaba los veía como bichos raros.

Toothless, ya decidiste cual vas a llevar.

Sí...Todas!

...Qué?! Toothless no, no puedo comprar todas.

Pero yo las quiero.

Ah, entiende no podemos llevarnos todas.

Yo las cargo.

Donde las vas a meter, se echaran a perder y no puedes comer tanto...ayer te enfermaste por comer de más.

Eso fue por comer esas cosas raras de colores, puedo comer toda esta carne sin problemas.

Pero...no tengo tanto dinero.

Yo las quiero.

Pronto se enfrascaron en una discusión por la carne, Hiccup intentaba por todos los medios hacerle entender que era imposible que se comiera todo y por lo tanto la carne se descompondra, pero el otro aseguraba que si podía, intento explicar el problema del dinero pero eso no le importaba al moreno, el mayor se empecino en que quería toda la carne y quería toda la carne, después de unos minutos el castaño exploto le dijo que no le compraría nada y comenzó a caminar ignorando a su compañero, ya no le importa si este se enoja, que lo hiciera, podía gritar todo lo que quisiera pero no le iba a cumplir su capricho, que iba a hacer? No tenía dinero y es obvio que no le regalaran la carne, y entonces que? Se transformara en Dragón y se llevaría la carne por la fuerza....

Asustado se detuvo de golpe, había olvidado ese pequeño detalle, Su compañero era un DRAGÓN!

Era obvio que si podía tomar la carne por la fuerza, entonces llamaran a la policía y Toothless estará en problemas por un maldito trozo de carne.

Regreso como rayo al pasillo, temiendo encontrar este como área de guerra, por suerte todo lucía normal, las personas tomaban los productos y los metían en sus carros, soltó un suspiro, al menos Toothless se había controlado pero.

Pronto sus ojos se abrieron asustados, miraba de un lado a otro mientras el color abandonaba su cuerpo.

Donde estaba Toothless?!.

*******

Regla 7

Nunca dejes solo a tu dragón ya que puede aprender malas mañas.

El moreno caminaba furioso,  quien se creía ese humano para negarle comida, avanzo entre los pasillos enojado, él conseguiría su propia comida, buscaría un lago y pesaría, o cazaria alguna presa, después de soltar un bufido se percato de algo importante,  Donde diablos estaba?

Cuando Hiccup se empezó a aléjate él hizo lo mismo solo que en dirección contraria,  siguió caminado mirando a su alrededor, solo había cajas de colores con figuras de animales (cereales), a su lado varias hembras con sus crías.

No puede negar que se asustó un poco, no le agradaban los humanos, desgraciadamente este super parecía un laberinto, continuo por los pasillos hasta llegar a uno que olía a...cachorros.

Los niños gritaban emocionados con la enorme cantidad de juguetes.

Curioso decidió tomar uno de estos, parecía un oso, pero era más suave y esponjoso y esos enormes ojos negros se veía...lindo. sonriendo tomó otro y otro, le gustaban.

Un ligero chillido lo asustó,  sin que nadie se diera cuenta bajó disimuladamente el cierre de su chamarra, dando la oportunidad a Copo de Nieve de hechar un vistazo, pronto los dos estaban embobados con los juguetes.

Por su parte Hiccup estaba asustado caminando entre los pasillos, no debió enojarse por una tontería como esa, debía tener más paciencia con Toothless,  no es humano y es de esperarse que no entiende algunas cosas, cruzo el pasillo pero sin suerte.

Que debería hacer?

Vocearlo como a los niños cuando se pierden?

Suspiró, solo espera que no se fuera.

Por su parte los otros dos miraban emocionados los juguetes, continuo hasta que Copo de Nieve soltó un ligero chillido y señaló algo, en uno de los estantes estaban esos pinguinos que tanto les gustaban, no dudaron ni un segundo en tomarlos, eran tan suaves y pachoncitos,  como quería llevárselo pero...Hiccup no lo dejaría, suspirando dejo los juguetes y se dispuso en buscar al castaño, pero al dar la vuelta se encontró con una escena muy interesante.

Ahh! Así es como se consiguen las cosas aquí.

***

Un minuto después Hiccup finalmente encontró a su niño, él chico suspiro exhausto,  ya le había dado vueltas a toda el área de comida pero nada, jamás pensó que terminaría en la sección de juguetes.

Toothless,  gracias a Dios te encontré, escucha...lo siento, no debí gritarte y enojarme, perdón.
Oye, que te parece si te compro dos raciones, no es mucho pero después podemos venir por más.

El moreno lo miró y mostró una sonrisa traviesa, era momento de probar si aprendió bien.

****

Salieron del supermercado con una gran cantidad de bolsas, Toothles caminaba adelante con una sonrisa de oreja a oreja, a su lado el pequeño Copo de Nieve daba brinquitos de felicidad esperando llegar a cada, Hiccup venía atrás, son la cabeza gacha y más rojo que un tomate.

Como demonios terminó así?!

Lo que ocurrió en el supermercado.

El moreno vio llegar a Hiccup e intento poner en marcha lo que vio.

1.el niño tomó a su mamá de la mano y la guió hasta el juguete.

Toothless me estas escuchando.

Sin darle tiempo a reaccionar Toothles lo tomó de la mano y lo arrastro hasta el área de comida.

2. Agarrar lo que deseas y después mostrarlo a tu "mamá "

Al llegar Toothless comenzó a mirar todos los refrigeradores,  bueno, al menos ya no estaba enojado, después de algunos minutos regreso con seis piezas de distintas carnes.

3. Mamá siempre se va a negar.

Toothless estas loco, no podemos comprar todas esas, ya te dije que no tenemos tanto dinero, escucha solo puedo comprar dos, después vendremos por más.

4. Comienza el chantaje, habla en voz baja y menciona cuanto quieres las cosas.

Pero Hiccup, yo los quiero, de verdad (con voz tierna y baja) te prometo que voy a comerlas todas, ninguna se va a hechar a perder.

Toothless ya te dije que no, no tengo tanto dinero y te vas a volver a enfermar si comes mucho.

Pero yo las quiero, si me las voy a comer y no me voy a enfermar.

Que no, entiende, no es no.

5. Recurrir al contacto físico siempre es útil.

Se acercó a Hiccup y colocó sus manos en esas penosas mejillas, mirándole cálida y tiernamente.

Por favor Hiccup, te juro que si me las como, anda, comprarlas, si, si...

El humano estaba sorprendido por la actitud de su compañero,  podía sentir sus mejillas calentarse, estaba seguro que estaba más rojo que el cabello de su padre.

Escucha Too...

No pudo terminar la frase, Toothless le empezó a dar pequeños besos por toda la cara mientras seguía repitiendo cuanto deseaba la carne.

Para ese momento Hiccup ya no sabía que hacer, se encontraba sonrojado hasta las orejas, frente a él  el moreno le miraba de una manera tan tierna y a la vez sexi mientras repartía besos fugaces por toda su cara, dos de ellos habían aterrizado en sus labios ocasionando una corriente eléctrica que recorrió toda su espina dorsal ( eso era tortura) y justo cuando creía que no podía empeorar, empeoró.

6. Recordar a mamá cuanto la quieres.

Por favor Hiccup,  yo te quiero mucho (un beso) anda si (otro beso) tu también me quieres  verdad (otro beso) anda, comprármela.

7. Esperar el veredicto de la madre.

E-esta...b-bien...pu-puedes llevarla.

Oh sí!!

Quien dice que lo niños no enseñan nada.

Toothless sonrió alegre, soltó la cara de su compañero y se alejó un poco devolviendo su espacio personal, Hiccup estaba confundido y apenado.

Que diablos fue eso?!

Jijijiji!!!

Unas risas a su espalda lo devolvieron  a la realidad, tres chicas lo miraban con estrellitas en los ojos y grandes sonrisas,  en ese momento quería que la tierra se lo tragara, como se le olvidó que estaba en el super, rápidamente salió de ahí jalando al morocho.

No volvería a traerlo.

Por desgracia  para Hiccup la escena se volvió a repetir cuando Toothless recordó ciertos peluches y lo arrastro al área de juguetes,  para aplicar de nuevo la misma estrategia.

***

De regreso en el departamento.

Ya había dejado la comida preparada y se disponía a ir a su trabajo, se la paso encerrado en la cocina evitando en todo momento al moreno, antes de salir guardo lo.que sobro de dinero, como diablos fue a gastar más de la mitad de sus ahorros  en juguetes y carne?!

Ni hablar, ahora tendría que trabajar horas extra.

En la sala Toothless y Copo de Nieve jugaban con sus peluches nuevos, por alguna razón el joven no había cambiado de apariencia.

Ya me.voy, Fishlegs llega en una hora, no hagan ningún destrozo, nos vemos en la noche.

Ni siquiera espero una respuesta, Toothless y Copo de Nieve solo escucharon un portazo, dirigieron su mirada a la puerta confundidos,  esperaban que se quedara todo el día con ellos pero bueno, sonriendo el moreno llevo uno de esos dulces a su boca, sabían muy bien sin la envoltura pero, una sonrisa más grande se formó en su rostro, pero el ya había probado algo más dulce, volteó de nuevo a la salida, tendría que acompañar a Hiccup más seguido a hacer las compras.

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Continuará....