Capítulo Trece(13): La Chica Rubia De Las Gradas.
Pov Alex.
-¡Primera chica que tiene tu cabeza echa un lío!, oh Alex,¡la tengo que conocer!¿donde estudia?¿Cuantos años tiene?¿Cómo se llama?¡A ver decidme!
- Vale, calmate cuando este listo te contesto todas esas preguntas.
Pov Milexa.
- Hey- volteo al escuchar que al parecer alguien me llama- ¿Eres Milexa Maddinson?.
Al voltear me encuentro con una chica con el uniforme de la preparatoria, una cabellera de color negro intenso, piel pálida y unas iris color gris.
La miro extraña y ella me devuelve una mirada urgente.
- Si, ¿por qué?.
- Me han dicho que eres la mejor nota de la clase de último año, ¿es cierto?.
- Emm... sí.
- Bueno, siendo así necesito un favor de tu parte, mi hermano aplazará el año sí no sube su nota y necesito alguien que le ayude y esa persona eres tú, te lo pido por favor- hace un pequeño puchero y yo no puedo negarme igual tengo mucho tiempo libre-aunque en realidad son dos.
- Vale, ok te haré el favor pero antes dime el nombre de tu hermano- ella me mira apenada y luego me da una sonrisa calida.
- Ejem... Es Alex Seguer lo debes conocer de seguro, yo soy su hermana Alexandra, un gusto- me ofrece su mano y la acepto poco en blanco por el favor que acabo de aceptar hacer.
¿Como no pude notarlo?, parece su copia femenina, pero no que idiota soy.
Acá hay un problema y un dato curioso que no sabía
1¡Le tendré que enseñar al anormal!
2- ¡Ella es la hermana de Alex!.
Sí lo hago es solo porque tengo palabra, pero que conste que si hubiera sabido antes que se trataba de Alex me negaría rotundamente.
Excusas.
- ¿Estás bien?- Alexandra pasa una mano a centímetros de mi rostro.
- Estoy bien, gracias. Luego habló con él pero ¿cual es él segundo?.
- Tendrás que convencerlo nunca acepta ayuda de nadie y no también... ¿Podrías decir que eres tú quien lo quiere ayudar?, si se entera de que fui yo no te dejará ayudarlo.
Asiento: Vale.
Problema 2: ¡Tendré que convencerlo!.
Y el que no es terco.
Pov Alex.
Baje las escaleras y me encaminé a los vestuarios para cambiarme y empezar a entrenar con mis compañeros faltaban solo dos semanas para que empezarán los torneos.
- ¡Alex! - James al verme llegar empieza a gritar mi nombre haciendo que todos los del equipo voltearan a verme.
Me acerco a él y empezamos a caminar al centro de la cancha donde está el resto del grupo.
- Allá está la chica que te fué a buscar el otro día al bar - señala disimuladamente las gradas dónde está Milexa sentada de piernas cruzada con su cabello recogido en una coleta y sus libretas contra su pecho.
Se ve linda, hermosa, ¡arg!. Me tiene mal.
Empezé a caminar a las gradas ignorando los gritos de todo el equipo preguntando que hacía donde voy.
Y la repuesta es fácil.
Hacía mi pequeña Mili.
Al verme se levanta de golpe colgando su mochila en sus hombros.
- Hola, Alex. Cuándo termines el entrenamiento te espero en biblioteca. - dice y hace un ademán de irse pero la retengo.
- ¿Para qué? - pregunto dondole una pequeña sonrisa.
- Estudiaremos, no aplazaras este año.
Dejó de mirarla y me tenso un poco pero me resconpongo rápido.
- Te preocupas por mí, Mili pero no iré ya e aplazado un año y sigo acá no moriré. - murmuró algo que no entendí y luego dio dos pasos quedando a mi lado.
- No te pregunté, Alexander. Iré a comprar algo para ambos y vuelvo para esperarte - susurró en un tono que sonó demandante pero tan seductor para mí que no quedo tiempo para negarme.
Alex dijiste que la enamorarías, no al revés. Pensé.
Y luego baje para empezar el entrenamiento, cada minuto que podía volteaba a ver las gradas o mejor dicho a mi pequeña, estaba atenta a lo que yo hacía, pero de un momento a otro cuando estaba apundo de terminar el entrenamiento la fui a mirar y ya no se encontraba.
Me sentí despistado por un momento pero luego le vi el lado bueno:
Me podía escapar.
Así que me despedí de todos con un leve saludo, y me adentre a las duchas y luego salí por la parte de atrás de la cancha por si venia no me viera. Ya iba caminando cuando alguien me da un pequeño golpe en mi espalda.
- Eres predecible. - dejo de caminar y miro hacia atrás para ver de quien se trata:
La chica rubia de las gradas.
- ¿Me seguiste? - pregunto y me cruzo de brazos.
- No, te esperaba aquí a que salieras, si no me veías sería el momento exacto para tú huir. ¿Ahora quién huye Alex?. - se cruzó de brazos y elevó unas de sus cejas.
- Huyo de la tarea, no de ti.
- Toma, y vamos a biblioteca-me tiende una botella de malta y un pitillo - y... ¿Me ayudas?.
Me tiende también su malta, y sacó mi llave y se la destapo.
-Gracias.
- Sabes que prefiero ir a debajo de un puente, a bebermos estas maltas si lo deseas. Pero biblioteca no.- digo y ella se encoge de hombros.
- Entonces vamos a estudiar en otro lugar - dice y toma mi mano y empieza a arrastrarme con ella.
- Joder, Mili contigo no se vale un no. - digo y ella sigue arrastrándome hasta llegar a su auto.
-Ese azul celeste me gusta-digo y ella me mira confundida.
-¿Cuál?.
-El de tu auto, Mili-digo y veo a James a cuatro autos de nosotros.
- Espérame acá, no me iré - me fulmina con la mirada pero deja que valla a donde James.
A él mirarme le lanzó las llaves y le digo:
- Llévate mi auto, me voy en otro-lo señaló con dedo acusatorio-lo chocas y te lanzó de un quito piso.
El asiente y se dirige a mi auto que no estaba lejos de él, y me devolví a donde estaba Mili.
- Que conste que lo hago por ti, pero no tengo ninguna intención de pasar el año.
Ella no responde y empieza a conducir.
Aunque ahora tengo una intención de pasar el año: el graduarme con ella me gustaría.
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N/A
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He visto que han incluido mi historia a muchas listas de lectura así que quiero dar las gracias a tod@s que votan, comentan y siguen mi cuenta.
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