— Pero... ¿Por qué dice eso, profesor? Ya le dije, es para inscribirlo en ese concurso —Dijo Matthew, esperando salir de esa por algún milagro. Remus negó con la cabeza, bastante desconcertado.

— ¿Para qué les interesa eso? —Inquirió Lupin— ¿Acaso le regalaran un premio a mi familia en caso, de que llegara a ganar? —Preguntó con ironía. Matthew alargó la cara; aquello era una mala señal.

—Ósea que... ¿Sí está casado? —Insistió. Lupin se quedó perplejo ante la insistencia del chico, pero decidió decirle la verdad—. No. No lo estoy, señor Bones ¿Es todo, lo que tenía que preguntarme? —Interrogó Lupin. Matty negó con la cabeza.

—No, profesor; Muchas gracias —Sin dejar que el profesor se despidiese, Matthew Bones intentó salir de la oficina del profesor Lupin como un gamo. Después de haberse alejado una distancia prudente, marchó rumbo a clase de Historia de la magia. Pero antes de concretar sus planes, la voz del profesor lo detuvo en el umbral.

— ¿Si, profesor?

—Espero, señor Bones... Tenerlo aquí dentro de algunos días, trayéndome la noticia de un primer lugar —Dijo Lupin con una sonrisa. Matthew asintió, devolviendo la sonrisa. Después corrió de nuevo al aula del profesor Binns.

Mientras cruzaba los pasillos, dejaba escapar largos y suntuosos suspiros de alivio. Por una parte, el profesor casi lo descubre, y por otra, iba a poder ayudar a su amiga. Se detuvo a tomar un poco de aliento. Y se quedó pensando en ella, su amiga, por quien daría todo... Pero por su mente cruzaba, ¿En realidad le gustaba sólo la amistad?...

Sus pensamientos fueron interrumpidos, al parecer alguien le jaloneaba levemente de la túnica. Al darse vuelta, Matthew se topó con Zack Sharkey. Aquel alto y castaño joven imponía respeto, de tan sólo verlo. Sonreía con suficiencia, mientras que bajaba su mano de la túnica del joven. Sin duda alguna, él y Jack Slopper eran los chicos más perseguidos por la población femenina de toda la escuela.

— ¿Bones? —Preguntó el corpulento chico. Matthew solo asintió— He escuchado que tú eres un gran amigo de... Charlotte Studdert... —Dijo, aclarándose la garganta. Matthew lo miró fijamente al escuchar el nombre de su amiga.

—Sí, lo soy. ¿Por qué? —Preguntó en un arranque de valentía.

—No sé sí te haya dicho, pero ella y yo bailamos... Y ella es muy hermosa —Comentó.

— ¿Y...?

—Necesito, que me digas todo sobre ella. Que me ayudes a conquistarla — Propuso eufórico. Matthew temía dar una respuesta. Sabía lo que se aproximaba.

—Lo siento, pero no puedo —Tartamudeó. El castaño casi lo devoró con la mirada al escuchar la negativa.

— ¡¿Por qué, no?! —Gritó el Hufflepuff.

—Ella, ya ama a... alguien más.

— ¿Quién? —Preguntó demasiado exaltado el castaño.

—No lo sé. No me ha querido decir —La vena de la sien del chico castaño, comenzaba a latirle furiosamente.

— ¡Dime! —Exigió.

—Lo... lo siento. No lo sé, pe-pero —balbuceó al ver que se aproximaba un golpe por parte del puño izquierdo de él— Puedo averiguarlo y decirte cuando lo sepa ¿Eh? ¿Qué dices? —Intentó negociar. El castaño se quedó pensativo.

—Está bien. Date prisa, o sí no. Tu pagarás por ese chico ¿Me oíste, Bones?

—S-sí, claro. No hay problema —Contestó.

— Bien —Dicho esto, Zack se alejó, dejando al pobre de Matthew asustado. Después de largos segundos viendo el pasillo, Matt dirigió un vistazo a su reloj, ¡Había pasado más de la mitad de clase! Lo mejor sería esperar a que se terminara, ya que sí entraba ahí, el profesor Binns le quitaría más de 100 puntos a Hufflepuff. Al final decidió ir a la sala común, para comenzar la espera de su amiga.

En el trayecto iba sumamente pensativo, sí Sharkey se llegara a enterar quien era en realidad el enamorado de Charly... ''Pobre profesor Lupin, no quiero ser él'' Se lamentó para sus adentros. Debía inventarse alguna excusa, pero por mientras alegraría a su amiga con aquella noticia.

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La clase de historia de la magia había concluido. Esta vez me pareció exasperante, creo que es debido a los nervios. Mi amigo no había llegado en toda la hora, eso quería decir... ¿Algo bueno, o algo malo? Me temía lo peor. Apenas había llegado la hora de marcharse, cuando tomé mis cosas, y prácticamente salí corriendo. Directo a mi sala común, sin ningún desvío en el trayecto.

Y como lo esperaba, ahí estaba Matt. Solo. Sentado, pensativo ¡Aquello era raro! Él nunca se ponía en plan soñador. Me acerqué y al parecer no me notó ya que no dijo nada. Entonces le jalonee de la túnica por parte del hombro. Con ojos enormes, giró su rostro de forma lenta y tortuosa.

— ¿Qué sucedió? —Pregunté. Me encontraba nerviosa en demasía.

—Es... Soltero —Dijo con una sonrisa en los labios. Yo suspiré.

—Eres un gran detective —musité, con una alegría inusual desbordando por mi pecho.

—Sí, bueno, de nada —dijo, con tono irónico.

— ¡Huy, perdón! —Exclamé.

—Sí, bueno... Ahora, debes de hablar más con él.

— Claro, claro —Dije. En realidad no ponía mucha atención, la felicidad era agobiante y distractora—. Aún no sé como te lo voy a pagar. Eres un gran amigo —Después, un impulso irrefrenable me obligó a abrazarlo, para por lo menos en agradecerle. Él contestó el abrazo. Y luego una voz nos interrumpió.

— ¡Ajá! ¿No qué no? —Gritó Elizabeth. Matthew y yo torcimos los ojos.

— ¡Se aman! ¡¡No lo nieguen!! Los acabo de ver —Matthew se levantó y se dirigió a ella.

—Estas mal ¿Sabes? Sólo somos amigos, muy buenos amigos —Le contestó. Me era extraño, aquella palabra. ''Amigos''

—Pero... ¡Se estaban abrazando!

—Los amigos nos abrazamos, a ti te abrazo siempre —Atajé.

—Pues sí... Pero... Pero...

—Además, ella ya ama a alguien —Comentó And. Lo perforé con la mirada. Y mi amiga se puso como suelo llamar ''Insoportable''

— ¿¿Qué?? ¡Charlotte Diane Studdert! ¿¡Te gusta alguien, y no me lo has dicho!?

—Sí, se me pasó comentarte —Y dirigí una mirada de ''Muchas gracias'' a mi amigo, el cual se mostraba divertido con la escena.

— ¡¿Y quién es?! —Preguntó, casi infartada. Yo no sabía si decirle o no.

—Es... Es un poco complicado de decir... Algo que no se puede decir, así como así...

— ¡¡Es el profesor Lupin!! —Soltó mi amigo, con una emoción que me recordó tanto a una mujer. Elizabeth soltó un gritito de sorpresa, volví a torcer los ojos. Lo bueno es que estábamos solos.

—Gracias...—Susurré, apenas audible. Después sentí como los brazos de mi amiga me zarandeaban por los hombros.

— ¡Por dios Charly, te gana como por 200 años! Pero, ¡Está guapo! —Comentaba, emocionada — A ver, ¡Cuenta, cuenta!

— ¿Qué quieres que cuente? —Pregunté, frunciendo el ceño.

— ¿Lo has besado? No, no ¡Ya sé! ¿Qué te atrajo de él?

—Probablemente su enorme...

— ¡Cállate Matthew! —Le grité, a la vez que le tiraba un cojín a la cara—. Elizabeth, sólo me gusta. No pienso casarme con él. Y no, ni siquiera sabe que existo —Contesté. Mi amiga se sentó junto a mí, con una cara de ''Oh, que decepción''

—Vaya...

—Pero, eso va a cambiar... ¡Tenemos un plan! —Comentó mi amigo.

— ¿Un plan? ¡Yeiii! —Gritó Lizzie como loca. Aun no entendía como me llevaba tan bien con ella.

—Sí, bueno...

— ¿Qué es lo que tienen en mente? —Preguntó, mordaz.

—Sabemos que es soltero —Contestó Matthew.

— ¿Qué más?

—Nomas —Respondí. Mi amiga parecía desilusionada de nuevo.

— ¿Tan poco? Pero descuida, aquí está la vieja Beth, y te ayudaré. No te preocupes —Me dijo mientras me daba una palmadita en el hombro. Pero me era más preocupante si me ayudaba.

—Te lo agradezco pero...

— ...Te maquillaré, y peinaré ¡Mírate nada más! Si te arreglaras un poquito más quizás lograrías llamar su atención. Pero déjalo todo en mis manos —Interrumpió. Después subió hacia el dormitorio, pensativa. Al parecer, pensando en cómo me iba a ayudar. Mientras mi amigo y yo, intercambiábamos miradas de diversión por aquella actitud de ella.

N/A: ¡Feliz año! Sé que es algo cortito pero en aquellas épocas escribía poco unu. 

¿Quieren "Maratón"? 

Sólo prometan leer y votar en todos los capis nuevos, porque después leen todo el maratón pero se les pasa(? unu