Especial de Navidad


Este no es un capítulo normal, es un especial sobre Navidad!

Esto se llevaría a cabo cada vez que la Navidad tiene lugar en la serie.

Navidad

Era la mañana de la víspera de Navidad. Todo estaba listo para la primera Navidad de Comet en la Tierra. Se hicieron galletas, el árbol de Navidad, se encuentran regalos envueltos, y las medias fueron colgadas.

Comet salto de la cama y corrió a la habitación de Marcia. Él abrió la puerta. La chica seguía felizmente dormida. "Marcia!" gritó Comet. "Despierta! Es víspera de Navidad!" Se acercó a ella y sacudió su brazo.

Marcia se incorporó. Estaba media dormida, su cabello era un desastre, y en definitiva no estaba preparada para ser despertada a las seis de la mañana. "Comet", se quejó. "¿Por qué me despiertas tan temprano?"

"Es la víspera de Navidad!" dijo. "Estoy muy contento. Tenemos la oportunidad de pasar todo el día con los demás, comer galletas y ver un montón de películas de Navidad!"

"Sigue siendo seis de la mañana, Com", se quejó Marcia.

"Vamos, vamos, vamos," canto Comet.

Marcia se quejó. Ella sacó su cuerpo fuera de la cama. "Muy bien, ya voy."

"¡Estoy muy emocionado!" exclamó Comet.

"Lo sé", dijo Marcia. "Yo también."

Caminaron por el pasillo muy decorado. Oropel y las luces en rojo y verde fueron envueltas alrededor de las barandillas de las escaleras. Y justo en el último escalón colgaba muérdago. Este hecho era desconocido para los dos mejores amigos hasta que pasaron por debajo de él.

Comet dejó de caminar al lado de Marcia en el último escalón. "¿Qué?" preguntó Marcia....

Señaló el techo de la planta pequeña. "No es eso un muérdago?" preguntó.

Marcia siguió hasta donde él estaba buscando. Ella se sonrojó fuertemente. "Si es."

"¿No hay algo que debes hacer si pasas bajo al mismo tiempo con alguien?" preguntó.

"¡No!" Marcia chilló, tratando de salir de la situación. "No."

"Oh está bien." Él se encogió de hombros restándole importancia a la situación.

"sabes, tengo que ir a hablar con mis padres muy rápido", dijo Marcia. "Regreso en un minuto."

"Bueno."

Marcia corrió por las escaleras hasta la habitación de sus padres. No podía creer que sus padres hubieron puesto el muérdago en la parte inferior de la escalera. Gracias a Dios ella consiguió salir de esa situación. Definitivamente no quiere poner en peligro su amistad a causa de un beso bajo el estúpido muérdago.

El Señor y la señora Díaz se acababan de levantar de la cama cuando Marcia entró en su habitación. "¿Por qué ustedes colocaron el muérdago en la parte inferior de la escalera? "Pregunto a sus padres.

"Debido a que su padre y yo vamos a tener que besarnos cada vez que nos toca estar debajo de el," dijo la señora Díaz. "Es bastante romántico."

Bueno, mama usted no piensa acerca de cómo cuando su hija y su mejor amigo al pasar queden atrapados debajo de ella, sería no romántico y torpe," Marcia les dijo.

"Nos detuvimos a pensar en ello", dijo Díaz. "¿ustedes dos se besaron?"

"No. Y ¿qué es lo que quiere decir que tu pensaste ? No pensé que ustedes querrían que me besara con cualquiera! En especial, con Comet", despotricó Marcia. No podía creer lo que estaba oyendo. No importa si se habían besado o no.

"Unos nietos reales sería lindo,"El Sr. Díaz le dijo a su hija, dándole golpecitos en la cabeza, ya caminando hacia el pasillo.

Ella estaba en la puerta de la habitación de sus padres, tratando de analizar lo que su padre acababa de decir,. ¿Qué quería decir 'nietos reales'? Sus padres esperaban que ella y Comet iban a estar juntos en algún momento? Al igual que una pareja? El era un príncipe mágico de otra dimensión y Marcia era sólo ... Marcia.

Marcia se sacudió fuera del shock y se dirigió a la planta baja. Observó el muérdago hasta que llegó al suelo. Tal vez ... no sería tan malo si ella y Comet se besaran.

Sería probablemente incluso agradable. Pero, no, eso sería ridículo, le gustaba Jack Lee Thomas.

Sus padres se quedaron congelados en el marco de la puerta de la cocina. Tan pronto como Marcia se unió a ellos, vio por qué. La cocina estaba cubierta de arriba a abajo con los huevos y la harina y - así - todo lo necesario para hacer panqueques. Comet se puso de pie en medio de la cocina, con la varita en la mano, mirando un poco sorprendido por lo ocurrido. "Vaya", fue todo lo que dijo.

Marcia se acercó a él y se limpió un poco de harina de su rostro. "¿Que estuviste haciendo?"

"Traté de hacer panqueques," dijo Comet, mirando hacia abajo directo a sus pies que se movían nerviosos. "Lo siento."

Él esperaba que ella se enojara, decepcionara, pero ella no lo hizo. Ella sólo se rió. "Está bien. Es navidad después de todo."

Hubo un golpe en la puerta de su habitación a las dos de la mañana. Marcia sesentó en la cama cuando la puerta se abrió lentamente. Comet estaba en la puerta, mirando a su habitación. "¿Comet?" Marcia preguntó, preguntándose qué estaba mal.

"No puedo dormir", murmuró.

"Nadie puede dormir en la víspera de Navidad," Marcia le dijo.

"¿Puedo quedarme aquí?" -preguntó, con la cabeza apoyada en el marco de la puerta.

La muchacha asintió. "Sí."

El muchacho entró en la habitación con un peluche de narval en la mano. Él tiró el animal de peluche en la parte inferior de la cama y lo utilizó como una almohada.

Marcia sacó una manta extra de debajo de su cama. Lo desdobló con cuidado y lo puso sobre el príncipe interdimensional. "Gracias, Marci", dijo medio dormido.

"No hay problema, Com," dijo ella, acurrucándose de nuevo en su propio lugar en su cama.

Ninguno de los dos podía dormir. La emoción de la Navidad rodeaba a los mejores amigos, manteniéndolos en el medio de la noche. "Marcia?" Comet susurró, preguntándose si su amiga estaba todavía despierta.

"¿Sí?" susurró ella.

"¿Estás dormida?"

"No."

"¿Puedes dormir?"

"No."

Comet se incorporó. "Bien, porque yo tampoco puedo. ¿Podemos ver películas en tu ordenador portátil?"

"Claro," estuvo de acuerdo Marcia. Se bajó de la cama, cogió su laptop fuera de su escritorio y se la llevó de vuelta a su cama.

Pasaron el resto de la noche viendo películas de Navidad. Y, finalmente, se durmieron.

Comet se despertó a las siete de la mañana. Él sacudió Marcia despierta y le grita: "¡Es Navidad!"

Marcia rápidamente cubrió su boca. "¡Silencio!" Marcia susurró. "Vas a despertar a mis padres."

"Lo siento", susurró. "Vamos abajo y ver lo que Santa nos trajo."

Marcia asintió. "Vamos."

Él agarró la mano y tiró de ella. Ni siquiera se les paso por la mente el muérdago que colgaba del techo en ese momento. Ellos se enfocaron en los regalos debajo del árbol.

"Mira," dijo Comet, apuntando a los presentes. "Él vino."

Marcia se rió. Deseó poder estar entusiasmada de la Navidad de nuevo. Deseaba que todavía pudiera creer en Santa Claus. Deseó poder sentirse cómo Comet acerca de la Navidad.

Se arrodilló delante de los presentes. Estaban envueltos en papeles y lazos de colores bonitos y cintas. "Vamos a abrir uno primero", dijo el Comet.

Marcia le detuvo. "Espera no. Tenemos que esperar a que mis padres se levanten."

"Está bien", cometa avistado.

Esperaron durante una hora y media antes que el señor y la señora Díaz se despertaran y se unieran a ellos en la planta baja. El tiempo de en medio consistía en que Comet trataba de averiguar lo que había en los regalos.

Cuando finalmente todos estaban juntos, los presentes se abrieron en la pequeña familia, las galletas eran compartidas y se haciendo bellas memorias que serían recordadas en el futuro. Y dos horas más tarde, Comet y Marcia tuvieron sus horas de sueños bien merecidas.

~ Echo

Lamento haber tardado tanto en publicar, esta vez no tengo excusas tratare de publicar mas seguido. 

¡Feliz año nuevo!!!!

Vema.

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