Capítulo 01: Secuestro.
Otro aburrido día de escuela terminó, dos amigas iban de camino a casa a estudiar juntas para un complicado examen que tenían que presentar al día siguiente. Alex había ofrecido su casa como lugar de estudio, ya que era la más cercana a la Facultad donde ambas estaban cursando su carrera. El par de chicas subió al auto de Alex y emprendieron camino, escuchando música en el radio y riendo ante los chistes que hacían.
Al llegar a su destino, su madre les ofreció una rica comida, la cual aceptaron gustosas, pues tenían el estómago vacío y necesitaban la energía para seguir estudiando como las estudiantes responsables que pretendían ser. Terminaron su platillo, dejando el plato prácticamente limpio, sin ninguna migaja. Cuando lo fueron a dejar al fregadero, la adulta se acercó a ellas dando un beso en sus mejillas.
—Saldré un rato, niñas, no me tardo. Ary, te quedas en tu casa —le dedicó un guiño a la mencionada, recibiendo como respuesta una sonrisa y un asentimiento con la cabeza.
—¿Comenzamos a estudiar? ¿O reposamos la comida un rato? —preguntó Arya después de que la señora se fuera, depositando su plato previamente lavado en el escurridor.
—No lo sé, me dió el mal del puerco, pero si me duermo sé que ya no haremos nada y mi mamá me va a regañar —respondió la de cabello rizado teñido de morado mientras acomodaba sus lentes, quedándose ambas pensando en qué hacer para matar el tiempo en lo que su metabolismo terminaba de procesar todo lo que acababan de ingerir. Tras dudar un poco, volteó a ver a su amiga sonriendo de forma pícara—. ¿Jugamos videojuegos?
—Súper jalo —respondió Arya corriendo hacia la habitación de la dueña de la casa.
🐢🐢🐢🐢
—Recuerdas cómo jugar, ¿no? — preguntó la más alta hacia la pelirroja.
—A huevo, estuve practicando —contestó Arya con una sonrisa de victoria.
La de ojos grises le dió play al videojuego y ambas comenzaron a jugar por unas cuantas horas. Entre tanta diversión, perdieron por completo la noción del tiempo, y para cuando se dieron cuenta ya eran las seis de la tarde. Las amigas entraron en pánico, ya que no habían estudiado nada en todo ese rato, por lo que Alex se dispuso a apagar la consola para comenzar con su sesión de estudio. Al querer apagar la pantalla, ésta no respondía a las órdenes del control remoto; en su lugar, apareció estática y un ruido espantoso que les estaba perforando los oídos.
—¿¡No habías apagado ya la consola!? —preguntó Ari mientras ejercía presión sobre sus orejas para evitar que entrara el sonido.
—¡Se supone que sí! —respondió la menor imitando la acción.
Entonces, el ruido cesó drásticamente y la estática en la pantalla fue reemplazada por un color rosado muy brillante que la invadió por completo. Ambas destaparon sus oídos y se acercaron un poco al televisor.
—Lexi, dime que tú hiciste eso.
—No… no fui yo.
De la televisión se proyectó una luz deslumbrante igualmente rosa, provocando que ambas jóvenes se alejaran y cubrieran un poco sus ojos con sus manos para amortiguar la incidencia de la luz en sus orbes, completamente asustadas y confundidas. Dicho destello se formó en un triángulo que abarcaba desde el piso hasta casi tocar el techo.
Se miraron con el ceño fruncido y la de ojos marrones se acercó un poco para poder tocar lo que sea que fuese aquello y saciar su curiosidad, más sus movimientos fueron detenidos, pues del televisor se asomó una cabeza encapuchada con tela negra, de ojos saltones como de mosca con apariencia de coladores metálicos que emitían una luz roja de su interior, portando una cinta roja en la frente. Arya gritó y cayó hacia atrás por la impresión, Lexi se acercó a ella para ayudarla y alejarla de allí mientras la "persona" terminaba de salir por completo de aquella proyección, siendo seguido por otros tres exactamente iguales, pudiendo apreciar sus extremidades sumamente delgadas.
—¿¡Qué son esas cosas!? —cuestionó la pelirroja poniéndose de pie, totalmente aterrada por lo que presenciaban sus ojos marrones.
—¡Y yo qué voy a saber! —respondió la menor empujando a Ari para evitar ser atravesadas por una espada de doble filo— ¡Estos tipos nos van a matar!
—No lo sé, siento que se me hacen… familiares, por alguna extraña razón.
—¡No es momento de recordar asesinos, Ari! ¡Hay que irnos de aquí! —ambas intentaron correr hacia la puerta, siendo bloqueadas por los cuatro tipos que se pusieron velozmente justo frente a la salida, impidiéndoles el paso.
—Mierda —se quejaron al unísono.
Las chicas miraron en todas direcciones en busca de otra alternativa para escapar, pero en un rápido movimiento, se fueron dos sujetos encima de cada una para tratar de inmovilizarlas. La más alta soltó una patada en la entrepierna de uno de los atacantes, tal y como le habían enseñado en kickboxing, pero éste ni siquiera se inmutó y su pie comenzó a dolerle mucho.
—¿¡Qué no son humanos!?
Arya forcejeó y logró zafarse, alejándose de los dos sujetos que la sostenían, yendo por un bate que estaba recargado en una esquina del cuarto. No tardó en tomarlo y golpear en la cabeza al que se acercaba con intención de tomarla otra vez, consiguiendo únicamente voltear su cara, pero fuera de eso no hizo más. La cabeza regresó a su lugar, y ahora el tono rojo que salía por los agujeros de sus “ojos” se intensificó.
—Son robots… —susurró mientras esquivaba un golpe.
—¡Arya! —la mirada de la mencionada se dirigió hacia el "portal", al cual estaban arrastrando a su amiga.
—¡Alex! —antes de que pudiera siquiera comenzar a correr hasta ella, uno de los robots se interpuso, convirtiendo su mano en una espada con la cual fue empujada, rompiendo una mesa de centro que decoraba la habitación.
—¡ARYA!
Gritó la menor, preocupada por el estado de su amiga mientras era arrastrada hacia la televisión. La pelirroja se levantó sacudiendo la cabeza, logrando ver cómo los robots atravesaban el portal con su amiga tomada de los brazos, y el último en cruzar la vió de reojo por última vez mientras la entrada se cerraba lentamente. Intentó levantarse, pero una punzada en su estómago se hizo presente, llevando su mano por reflejo a esa zona y manchándola de sangre.
—Ay, no…
Dirigió nuevamente su mirada hacia el televisor, donde el portal casi terminaba por cerrarse. Respiró profundamente para aguantar el dolor, ubicó su celular y el de su amiga junto a sus carteras para tomarlos y colocarlos en una cangurera que encontró por allí y, con su corazón latiendo a mil por hora, entró al portal sin pensarlo dos veces, aguantando la respiración.
🐢🐢🐢🐢
—¡Suéltenme, hijos de puta! —gritaba la más alta forcejeando en un intento inútil por soltarse. La llevaron a un cuarto dentro del cual había una habitación rodeada con paredes de cristal, donde la metieron sin nada de sutileza, prácticamente la aventaron contra el piso para después ellos retirarse sin más— ¡Hey! ¡SÁQUENME DE AQUÍ, BASTARDOS! —golpeaba el vidrio con la intención de romperlo, pero era inútil.
—Ya lo intenté y no funcionó —se escuchó una voz detrás de ella, provocando que brincara ligeramente y se pusiera en posición de pelea—. No quería asustarte, lo siento.
Dijo una chica pelirroja de ojos azules, con una diadema y camiseta amarilla, shorts de mezclilla con medias negras abajo y pecas en su rostro. Se paró justo frente a ella con una sonrisa apenada y las manos entrelazadas frente a su cuerpo.
—¿Quién eres, dónde mierda estamos y qué eran esas malditas cosas? —estaba demasiado alterada, no había bajado la guardia en ningún momento.
—Soy Abril, estamos en uno de los laboratorios del Kraang y…
—Disculpa —le interrumpió la recién llegada—, ¿estamos en el qué de quién?
—En el laboratorio de los Kraang —la contraria frunció su ceño confundida, apareciendo un tick nervioso en su ojo izquierdo.
—¿De los qué? —Abril golpeó su frente con su diestra, suspirando y jalando aire hasta llenar sus pulmones al máximo, luego exhaló y procedió a explicar con calma.
—Los Kraang, unos robots alienígenas de otra dimensión que experimentan con humanos.
Las palabras "alienígenas" y "dimensión" se repetían varias veces en su cabeza. Sus pupilas se contrajeron y sostuvo su cráneo con ambas manos, como si eso le ayudara a no perder la compostura y la cordura.
—No, no, no, esto debe ser una broma —comenzó a caminar de un lado a otro, jalando su cabellera morada con frustración—. ¿Por qué a mí? Tengo que estudiar para un examen que presentaré mañana en mi facultad, estar aquí me quita tiempo que de por sí, no tengo —se tiró al piso de rodillas, casi al borde del colapso.
—¿Tienes examen?
—¿Qué eres sorda? —soltó sin pensar. Sus emociones estaban a flor de piel, estar enojada y estresada no era una buena combinación para ella con la ansiedad que padecía.
—Lo siento —se disculpó la pecosa sentándose a su lado—. ¿Estás cursando la universidad? —intentaba sacarle plática, pero no eran las mejores circunstancias. La de ojos grises asintió con desgane, intentando pensar en cómo salir de allí mientras escuchaba de fondo la que ahora le parecía irritante voz de su compañera de celda— ¡Qué bien! Igual vamos juntas y nunca nos habíamos visto.
—Lo dudo.
—¿Ah sí? ¿En cuál vas?
—En la UNAM, estudio veterinaria —la fémina se quedó impresionada, pues jamás había escuchado tal nombre en su vida, su escuela no se llamaba así.
—Jamás había oído de ella, ¿dónde queda? —Alex soltó una carcajada demasiado sarcástica, volteando a verla sin borrar su sonrisa socarrona.
—Tienes que estar bromeando —Abril negó con la cabeza, una media sonrisa adornaba su rostro—. Es la universidad más prestigiosa de México, muchos matarían por un lugar allí.
—Wow, ¿o sea que vienes de México? ¿Entonces qué te trae a Nueva York?
—¿¡Nueva York!? —comenzó a temblar y sus párpados se abrieron a tal punto de casi salirse sus ojos de su órbita, estaba entrando en pánico— No puede ser, hace unos segundos yo estaba en México, ¿estás segura de que no estamos en México? —preguntó tomando a la pelirroja de los hombros, sacudiéndola con algo de brusquedad.
—¿Dijiste “hace unos segundos”? Entonces, te trajeron aquí con un portal…
—Esto es una puta broma.
***
¡Hey! Muchas gracias por leer hermoses ❤️✨
No olviden votar para poder continuar, igual que comentar. Amo leerles. 🥰
Recuerden seguir a mi poderosisima NamjoonOppa404 quien también estará publicando en su perfil.
Los amoooo y nos leemos pronto 😍
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top