Dahyun era una persona gris.

Y no, el gris no significaba algo negativo. En cambio, la de cabellos morados era tranquila y algo conservadora.

Se preguntarán el por qué estamos hablando de ella. Bueno, esta chica acababa de chocar con Mina en medio del supermercado y había botado las compras que la chica azulada tenía en las manos.

Dahyun era una persona muy distraída y por ello, no había notado cuando la otra se había cruzado en su camino. Estaba muy avergonzada.

— L-lo siento, déjame ayudarte, unnie.

— No importa, tranquila.

Mina pudo tomar sus cosas del piso, pero parecía no poder dejar de mirar a la chica quizá cuatro centímetros más baja que ella, con las mejillas de un gris brillante por la vergüenza y las uñas pintadas de negro. Le resultaba un tanto interesante y agradable a la vista.

Dahyun sonrió cuando Mina estiró su mano hacia ella para darle una presentación correcta.

— Mi nombre es Myoui Mina, ¿Y el tuyo? Jamás te había visto por aquí.

— Oh, soy Kim Dahyun. Vivo aquí hace un tiempo pero no salgo mucho... Debe ser por eso.

Cuando hicieron contacto, el tatuaje de Mina, aquella rosa teñida de color naranja se quedó sin color. Simplemente se veía el contorno de color negro del dibujo. Pero el color de Chaeyoung no estaba ahí.

Son Chaeyoung había aceptado que estaba enamorada de Mina desde un principio.

Myoui Mina aún no.

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