Era abrazado entre aquellos cómodos brazos que lo trataban con una ruda sobreprotección. Cerro los ojos dejó que sus calores se compartieran, dejo que con delicadeza el canadiense rozará acariciando con la yema de sus dedos su espalda delineandola.

Canadá: Debes portarte bien si quieres que esto funcione --Susurra-- Sabes que quiero lo mejor para ti y para Canper. Quiero lo mejor para nosotros. Por eso siempre que te diga que hagas algo o que no lo hagas es por nuestro bien...no solo como familia...

El peruano se sonrojo un poco, asintió mientras se acurruca mejor en ese fuerte pecho, algo que llamo la atención del canadiense, no se esperaba esa reacción. Siendo sinceros esperaba que el peruano actuará sumisamente temblando de miedo. quizá esperaba una tímida y asustadiza negación. Pero no tenía pre visto que el pequeño se acurrucara...

"¡AHHHH!  déjame el control! Es tan lindooo!!!' escucho a la voz en su cabeza, sintió su corazón inexplicablemente calentarse ante aquel tierno acto del omega, estaba sonrojandose.

Su alfa interno estaba acaramelado y conmovido, sintió entonces una emoción apoderarse de todo su ser: Tenia que proteger a ese omega, debía tratarlo bien y por sobre todo: No hacerlo llorar. Nunca más.

Canadá: Todo cambiará...--Susurra-- Perú...quiero llevarme bien contigo, formar una hermosa familia...darle un hermanito a Canper...

Perú: Canadá...--Susurra-- Tengo miedo.

Aquellas dos palabras le llamaron la atención. Tanto a él como a sus instintos

Canadá: Dime qué te asusta y te prometo que desaparecerá

Perú: Si te digo vas a molestarte.

Canadá:.. ¿Es sobre mí? Perú, tu me tenés ¿no es cierto?

Titubio en responder.

Canadá: Se sincero y dilo, juro que no voy a herirte

El pequeño bicolor asintió, paso saliva y se acomodó mejor alejándose un poco del canadiense. Cosa que le había sido un golpe en el corazón del norteamericano

Perú: Te quiero... pero siento que al más pequeño error, dejaras de tratarme bien y me golpearas. Sé que puedes ser muy lindo conmi-conmigo  y me gusta...pero cuando siento que hay peligro me pongo alerta y me tenso bastante...porque siento que me matarás...siento que no soy tu pareja sino un niño que vive al temor de ser golpeado por un padre severo...y me da miedo...

El canadiense lo miro,sabía que aquello era verdad, sabía que Perú no estaba mal diciendo que le tenía. Sabía que le había dado muchas razones por las cuales debía temerle.

Y ¿saben? Lo cierto es que originalmente ese era el punto.

Hacerlo sentir tan miserable, tan inservible y tan patético que reciba por cuenta propia encadenarse a él, el plan era hacerlo suyo. Hacerlo en base al miedo de quedarse solo, en base al miedo que debería tenerle con él y sin el.

Pero justo en ese momento...en ese momento solo dolía.

No sabía bien que decir, se podría decir algo? Iba a decir algo, quizá alguna escusa o tal vez un "discúlpame" pero en cuento quiso decir algo el pequeño que tenían como hijo hizo acto de presencia

Canper: Tengo hambre --Aviso-- Papa aquí está, llama para que nos traigan algo rico de comer. 

Canadá sonrió y asintio le hizo una seña para que se acercara y así lo hizo el pequeño con una sonrisa, se subió el en sillón y se apoyó en su padre latino. Le dio el celular al norteamericano y beso con cariño la mejillas del peruano.

Perú: Tienes hambre mi amor?  Mi hermoso bebé. --Acaricia su mejilla --

Canadá: Pediré la pizza más grande que tengan entonces --Sonríe--  My love, ve a poner la mesa.

Canper: Noo veamos películas mientras comemos.

Canadá: En mi cuarto?

Asintió.

Canadá: Ve a elegir la pelicula entonces pequeño

Canper: ¡Veamos Bob esponja!

Ambos rieron ante eso, ambos adultos amaban con locura a su pequeño hijo. Era la personita que con solo decir algo los tenía a sus pies, no leal amor. Lo que más adoraban.

Perú: Jajaja todos los capítulos que quieras mi vida.

Canper: ¡siii!

Quizá la idea de una familia normal no sonaba mal...