Totalmente indispuesto a dialogar con sus enemigos, Dynasmon fue quien lanzó el primer ataque. Disparó una onda de energía de color azul de su cuerpo que tomó la forma de un dragón y se dirigió inmediatamente hacia RaptorSparrowmon. El imponente Digimon recién aparecido sólo tuvo que extender sus alas para que de ellas se desprendiera una onda de color rojo que logró neutralizar el ataque de Dynasmon. La calma que emanaba de RaptorSparrowmon era exasperante para sus enemigos. Era casi como si estuviese alardeando de poseer un poder que, quizá, no poseía realmente. Para Taiki y Lelouch, sin embargo, fue más que evidente el hecho de que RaptorSparrowmon poseía más poder del que aparentaba.

—Así que esta es tu Súper Evolución, Sparrowmon —dijo Shoutmon cuando finalmente pudo estar totalmente en pie luego de que RaptorSparrowmon hubiese vencido a las enredaderas que sujetaban a sus compañeros—. Me gusta. Es un gran cambio.

RaptorSparrowmon asintió.

—Ahora que estás aquí, entonces quizá podamos vencer a DarkKnightmon —dijo Mervamon, que igualmente había recuperado sus energías—. ¿Tienes algo en mente?

RaptorSparrowmon asintió de nuevo.

—Yo me encargaré de vencer a DarkKnightmon —dijo—. Ustedes encárguense de mantener lejos a Dynasmon. Si unen sus fuerzas, nosotros no tendremos más oportunidad.

—Nosotros somos más —intervino Taiki, quien no se atrevía a dar un paso más hacia adelante por temor a que Akari pudiese salir aún más herida. La chica pelirroja se mantenía prendida del brazo derecho del general del Xros Heart y esbozaba ocasionalmente algunas muecas de dolor a causa de los pequeños cortes sangrantes que las enredaderas le habían causado en el rostro al intentar amordazarla—. Shoutmon y yo también lucharemos.

—Nosotros también —aseguró Katsura levantando su DigiLector, Infermon asintió a su vez.

—Tswarmon y yo estamos listos —dijo Yuu.

—Y yo —dijo Mervamon.

Kiriha se limitó a colocarse a un lado del general para comunicarle que también estaba dispuesto a participar en la batalla. El resto de sus compañeros, a pesar de que hubieran querido continuar luchando,

Taiki asintió decidido y eso desencadenó la ola de Súper Evoluciones. OmegaShoutmon y ZeekGreymon se colocaron al frente del grupo, cada uno resguardando a RaptorSparrowmon quien se había vuelto a cruzar de brazos. La sombra que proyectaba su cuerpo seguía recordando al hombre enmascarado que había intentado destruir al sacro imperio de Britannia. Katsura se encargó de que Keramon pudiese tomar una Digievolución diferente, transformándose en Diaboromon. Tswarmon y Mervamon adoptaron posiciones de batalla, esperando la orden para atacar. Dynasmon y DarkKnightmon se tomaron su tiempo de igual manera. Taiki, entonces, miró a Lelouch y dijo con una cálida sonrisa de complicidad:

— ¿Me harías el honor?

Lelouch devolvió la sonrisa, la cual carecía de calidez gracias a su fría indiferencia, y exclamó con la voz de Zero:

— ¡RaptorSparrowmon, ataca!

— ¡Destrúyelos! —secundó Nene.

Ella saltó entonces, haciendo uso de una agilidad que parecía poco acorde con su cuerpo cubierto por la aparentemente pesada armadura de metal. Giró sobre sí misma y extendió sus alas estando en los aires. Éstas comenzaron a emitir un intenso resplandor de color rojo que se disparó, tomando la forma de un Geass, con destructiva potencia cuando ella sacudió sus alas y exclamó:

— ¡Raptor Charge!

El abrazador resplandor incendió todo lo que se interpuso en su camino, impactando de lleno a DarkKnightmon. El siniestro Digimon contraatacó a su vez lanzando un rayo de energía oscura de su lanza. RaptorSparrowmon utilizó una técnica de teletransporte para esquivar el ataque, apareciendo detrás de su enemigo para asestar su siguiente golpe. Fue todo tan veloz que DarkKnightmon no pudo verlo llegar. El brazo derecho de RaptorSparrowmon emitió un sonido metálico cuando se transformó en algo similar a una gigantesca y afilada garra de color dorado, misma que para Nene y Lelouch tuvo un gran parecido con las garras metálicas del Guren MK-II. El nombre que RaptorSparrowmon anunció a la hora de utilizar su técnica fue mucho más impactante para ellos, Nene y Lelouch. Ceremonialmente levantó la garra y esperó un par de milisegundos antes de apuñalar a DarkKnightmon, exclamando:

— ¡Guren Fang!

La puñalada había sido solamente el comienzo. Al estar dentro del cuerpo de DarkKnightmon, la cuchilla se dividió en tres hojas que cortaron el cuerpo del siniestro Digimon para abrirse paso. Aquello sólo desencadenó un potente disparo de luz de color blanco que logró perforar de lado a lado el cuerpo de DarkKnightmon. Un par de Datos emanaron de su herida.

—Me parece que escuché ese sonido antes —dijo Nene acalorada cuando RaptorSparrowmon se alzó nuevamente en los aires para esquivar un golpe de DarkKnightmon—. Lelouch, ese disparo. El sonido fue idéntico al de...

—El rifle del Lancelot —respondió Zero—. ¿Qué mierda ha pasado con Sparrowmon?

—Se le llama Súper Evolución —explicó Kiriha.

—Me refiero a su transformación —dijo Zero un tanto ofendido—. Todos esos artefactos que salen de su cuerpo... ¿Cómo pudo conseguirlos?

Sus pupilas y las de Nene se contrajeron cuando RaptorSparrowmon, para bloquear un golpe del hacha de DarkKnightmon, transformó su brazo derecho en un objeto que se disparó hacia el enemigo y se mantuvo sujeto a RaptorSparrowmon mediante un cable de color negro.

—Un Slash Harken... —musitó Nene.

Katsura fue quien levantó su DigiLector para obtener la información del misterioso Digimon que parecía ser todo un cofre de sorpresas. Lo que apareció en la pantalla fue un tanto sorpresivo para todos.

—RaptorSparrowmon —leyó Katsura en voz alta—. Es la Súper Evolución de Sparrowmon. Se encuentra en el nivel más alto de su línea evolutiva. Su cuerpo entero es una máquina que se adapta a las condiciones que se den durante la batalla. Puede copiar las técnicas de los Digimon enemigos y utilizarlas en su contra. Su técnica especial es el Raptor Canyon, el cual consiste en disparar potentes y destructivos rayos calóricos de sus ojos que arrasan con los Datos del enemigo y destruyen su información, impidiendo que el Digimon afectado pueda renacer.

Nene y Lelouch se miraron impactados.

¿En verdad era que la unión de las fuerzas de ambos había transformado a Sparrowmon en un arma, en sí mismo, tan destructiva y letal?

Había un ángel resguardándose en una pequeña cueva inestable. Era inseguro estar en cualquier sitio de aquella Zona, a decir verdad. La batalla que había tenido lugar entre sus usurpadores y los libertadores sólo consiguió dejar una estructura inestable. La información de la Zona Disco había quedado totalmente dañada y la única manera de evitar que todo se viniese abajo era mediante el sacrificio de un Digimon sumamente humilde y bondadoso. El ángel que en esos momentos miraba hacia el interior de la cueva, donde una pequeña Lunamon se estaba encargando de dejar un mensaje para quien encontrase la cueva en caso de que todo terminara mal para el ángel y sus secuaces. Lunamon trabajaba velozmente. Cada segundo era vital. Especialmente para un Digimon como el ángel, cuya luz comenzaba a extinguirse. Ya no podía mantenerse en pie y la profunda herida que tenía en el costado derecho de su cuerpo no había mejorado en absoluto. Sin importar cuántos vendajes se hubieran hecho para intentar ayudarlo, los Datos escapaban de la herida de la misma forma que habría hecho un lento torrente de sangre. Su muerte estaba cerca y el proceso era sumamente doloroso.

Apenas pudo levantar la cabeza para mirar a sus secuaces cuando los vio entrar a la cueva. Ambos iban acarreando un balde de madera que contenía un poco de agua, así como un par de retazos de tela totalmente limpios y un par de hojas de gran tamaño. Con voz débil, el ángel sólo pudo musitar:

— ¿De dónde han traído eso?

Uno de sus amigos, un chico que usaba una remera de color azul y cuyos goggles en la cabeza le hacían parecer que era un aficionado a la natación, se acercó al ángel para retirar el vendaje. El otro chico, que llevaba puesta una chaqueta que lucía decoraciones con la forma de llamas danzantes, tomó un poco de agua con sus dos manos para beberla. Acto seguido, miró al ángel y esperó a que su amigo hubiese retirado completamente el vendaje. Sus dos compañeros Digimon aparecieron entonces. El Digimon de color azul lucía exhausto. El Digimon de color rojo parecía estar lleno de energía.

—Estás empeorando, Seraphimon —dijo el chico de los goggles de natación—. ¿Estás seguro de que no hay ninguna manera en la que podamos curar tu herida?

— ¿De dónde han sacado esas cosas? —insistió el ángel con impaciencia.

—Taiki y Tagiru las han traído para nosotros —respondió el otro chico.

— ¿Ellos estuvieron aquí? —preguntó Seraphimon.

—Sí. Vinieron a traer un poco de comida para esos chicos que llegaron a nuestro escondite —dijo el chico que había retirado el vendaje—. Ya les hemos dado un sitio para descansar. Takuya ha dormido durante todo el día.

—Asegúrate de que ellos se sientan cómodos, Daisuke —dijo Seraphimon—. Dales todo lo que necesiten. Especialmente a Takuya. Luego de lo que ocurrió con Ophanimon, él sólo debe querer...

—Es precisamente por eso que no podemos permitir que tú sigas cargando con esa herida, Seraphimon —reclamó el aludido levantando la voz—. Takato y yo hacemos un gran esfuerzo con tal de ayudarte para que esa herida deje de debilitarte, pero no poseemos el poder necesario para sanarla. Tú mismo nos has dicho que Cherubimon es el único que puede curar esa herida. ¿Por qué no vamos a la Zona Espada?

—No puedo abandonar la Zona Disco, Daisuke —dijo Seraphimon con un dejo de impaciencia—. Daemon y Barbamon volverán en cualquier momento. Y esas dos chicas que los acompañan representan un peligro mayor.

—Yo puedo quedarme aquí, Seraphimon —sugirió Takato tras haber comenzado a atar el nuevo vendaje—. Daisuke y tú pueden ir a la Zona Espada con Cherubimon.

—No —dijo de nuevo el ángel—. Ellos deben estar cerca. Sólo tengo que resistir.

— ¿Y cuánto tiempo más crees poder resistir, si tus Datos se desprenden de tu cuerpo cada vez que cambiamos el vendaje? —reclamó Daisuke nuevamente.

—Daisuke —llamó Takato con un dejo de severidad—, ve a buscar a Takuya. Ya debe haber despertado.

— ¿Y eso de qué serviría? —reclamó el otro chico.

—Quizá Seraphimon se sienta un poco mejor si recibe otro tipo de visitas —dijo Takato encogiéndose de hombros.

Resignado, Daisuke asintió y salió de la cueva.

Aquella fue la última vez que todos ellos pudieron estar reunidos con vida.

El Heavy Metal Vulcan de OmegaShoutmon se unió con el Cañón Catástrofe de Diaboromon, colisionando ambas técnicas contra los haces de luz que Dynasmon disparó desde sus manos. Aprovechando la breve confusión, Mervamon saltó, impulsándose desde la cabeza de ZeekGreymon, para golpear a Dynasmon con la Olympia. Acto seguido, el tridente de ZeekGreymon desgarró un poco la piel del costado derecho de Dynasmon. Del cuerpo del enemigo volvió a desprenderse aquella onda de energía de color azul que tomó la forma de un dragón, misma que fue neutralizada gracias a la Zeek Flame de ZeekGreymon. Sin darle a Dynasmon más oportunidades de seguir luchando, Diaboromon sujetó al Digimon enemigo con una de sus gigantescas manos. OmegaShoutmon y ZeekGreymon, uniendo sus técnicas especiales, lograron drenar todas las energías de Dynasmon. El malvado Digimon cayó al suelo, con su cuerpo rodeado por un haz de luz de color azul. Kiriha avanzó hacia él y, realizando un veloz movimiento de su Xros Loader, capturó los Datos de Dynasmon dentro del aparato. Al verlo aparecer en la pantalla, el chico anunció con indiferencia:

—Digimon, captura completa.

Ninguno de sus amigos se atrevió a celebrar, pues el enemigo mayor aún no había sido derrotado.

RaptorSparrowmon se movía ágilmente en los aires. Su técnica predilecta parecía ser el Guren Fang, pues era la que repetía con más frecuencia. Y la que parecía causar más daño a su enemigo, a decir verdad. DarkKnightmon sólo podía igualar a RaptorSparrowmon en cuanto a la fuerza física, pues ella era superior en intelecto y velocidad.

O, al menos, esa fue la impresión que tuvo Lelouch hasta darse cuenta de un detalle crucial.

Pudo corroborar sus sospechas cuando RaptorSparrowmon lanzó de nuevo el Slash Harken que se enroscó alrededor del mango de la lanza de DarkKnightmon. Tiró de ella para desprenderla de las manos de su enemigo, aplicando una fuerza tan excesiva que la muñeca de DarkKnightmon lo resintió. Los Datos brotaron de las heridas antes de que él soltase su lanza, permitiendo que RaptorSparrowmon la destruyera estando en los aires. De haber podido hacerlo, quizá todos se habrían dado cuenta de que DarkKnightmon sonreía con malicia.

— ¡¡RaptorSparrowmon, detente!!

Todos miraron a Lelouch en cuanto lo escucharon exclamar aquello.

Nene separó los labios para responder, pero fue Katsura quien le arrebató las palabras de su boca al decir enfurecida:

— ¿Que se detenga? ¡Pero si esa batalla ya está ganada!

— ¿No te das cuenta? —dijo Zero exasperado—. ¡Eso es lo que DarkKnightmon quiere!

— ¿Sacrificarse? —Preguntó Nene escéptica—. Pero... DarkKnightmon no...

—Nene —dijo Zero y miró a la chica con tal firmeza que ella no pudo pensar siquiera en intentar rebatirlo nuevamente—, ¿qué es lo que necesita esa tal Clarisse para que el Pandemonio de Bagra ocurra?

—Los Datos del Mundo Digital —dijo Mimi—. Eso fue lo que dijo Ophanimon.

—Esos Datos son los que se desprenden cada vez que un Digimon es asesinado, ¿no es así? —urgió Zero.

Una luz se encendió en la mente de Nene.

Taiki, a su vez, lo comprendió de golpe.

—Si asesinamos a cualquiera de nuestros enemigos, estaremos contribuyendo a que el Pandemonio de Bagra suceda —dijo el general del Xros Heart—. ¡Tenemos que evitar que RaptorSparrowmon destruya a DarkKnightmon!

— ¡Tswarmon! —Exclamó Yuu entonces—. ¡Detén a RaptorSparrowmon! ¡Ahora!

Nadie pudo detener a la guerrera Digimon.

La Digi-Ninpou de Tswarmon para encerrarla en un saco de tela fue inútil, pues ella anuló la técnica de su compañero con un simple movimiento de su brazo izquierdo. Subió entonces un poco más en el cielo y se colocó en la misma posición que habría utilizado al estar de pie sobre el suelo. Levantó entonces su brazo derecho y realizó el movimiento que había copiado de Lelouch, exclamando:

— ¡Raptor Canyon!

Hizo caso omiso de los gritos que soltaron sus amigos cuando la técnica especial de RaptorSparrowmon hizo justo lo que nunca debió hacer.

De los ojos de la guerrera Digimon brotó el rayo calórico que Nene y Lelouch identificaron como el cañón de Hadrones del Gawain. Todo a su paso quedó destruido. Especialmente el cuerpo de DarkKnightmon, en cuyo lugar quedo solamente un gigantesco cráter. RaptorSparrowmon dirigió el rayo igualmente hacia la Torre Oscura, que se derrumbó de inmediato.

Todos, con la respiración agitada, presenciaron la forma en la que Katsura hizo aparecer el medidor en la pantalla de su DigiLector.

PANDEMONIO DE BAGRA

84,8% COMPLETADO

Los Datos de DarkKnightmon, junto con aquellos que seguían desprendiéndose de la Zona Shinobi, se añadieron a la cifra que marcaba el progreso del Pandemonio de Bagra.

RaptorSparrowmon aterrizó entonces y volvió a cruzarse de brazos, topándose sólo son las miradas de desaprobación que hicieron desaparecer su sonrisa triunfal.

— ¿Qué ocurre? —preguntó ella.

Todos los miembros del grupo se miraron, en silencio. OmegaShoutmon fue el único que se atrevió a caminar hacia RaptorSparrowmon para decir con tono sombrío:

—No debiste hacerlo.

—Ese malnacido intentó asesinar a Nene —le espetó RaptorSparrowmon indignada—. ¿Por qué habría de perdonarle la vida?

—Por esto —dijo Katsura mostrándole el medidor en su DigiLector—. Por el Pandemonio de Bagra.

La impresión fue tal que RaptorSparrowmon perdió su Digievolución.

De nuevo, la nube de pesimismo hizo acto de presencia.

—Entonces, esas tenemos —dijo Kiriha—. Esa tal Clarisse nos tiene en las palmas de sus manos.

—Si no nos defendemos, nuestros Datos formarán parte del Pandemonio de Bagra —asintió el general del Xros Heart.

—Pero si nos defendemos, los Datos de nuestros enemigos serán los que se unan al Pandemonio —completó Akari angustiada.

Lelouch, agachando la mirada durante un momento para considerar sus palabras, sólo pudo mirar a Nene para decir con la voz de Zero:

—Hemos caído en su trampa. Todo este tiempo estuvimos haciendo lo que ella quería.

—Pero, entonces... —musitó la chica—. Si cualquier cosa que hagamos la favorecerá solamente a ella... ¿Qué podemos hacer?

La voz de D'Arcmon fue la que dio la única respuesta que no era tan fatídica como lo que todos pudiesen haber estado pensando.

—Ir al Campo del Infierno. Es allí donde se encuentra Clarisse. Es el único lugar que no será destruido aún. Sólo ahí estaremos seguros.

Taiki, Kiriha y Nene intercambiaron miradas, entonces. El trío compartía el mismo pensamiento pesimista.

¿Cómo llegar al Campo del Infierno, si sólo habían podido aparecer en él tras haber vencido a los Siete Generales de la Muerte que regían los Siete Reinos?