—¡Yuju! -Umji corrió hasta mi para abrazarme.

—¿Qué haces aquí?

Sentí su llanto, sus lágrimas.

Una persona más a la que hago llorar.

¿Por qué?

—¿Co-cómo estás? ¿te.. te sientes bien? -tartamuedaba, sonreí.

—Me asfixias Yewon.

—¡Lo siento! -lloraba con mayor fuerza apartándose de mi.

—¿Por qué todos lloran al verme? ¿Tan mal me veo?

Negó— ¡N-no estoy llorando!

Reí levemente al verla, esa tarde paso todo el día conmigo.

Me levantó el humor, su visita y compañía me alegraron.

Después de haber visto como EunBi se alejó sin decir una palabra, realmente me sentí sola.

Umji me alegro mucho la tarde, su dulzura y buen corazón me recordaron a mi yo del pasado. Aquella niña que amaba a su appa. Aquella pequeña que fue salvada por los re Code, que encontró la familia en esa hermosa y pequeña comunidad, aquella dirigida por quien fue como mi oppa, Lee Félix.

Ella me recordó los hermosos momentos que pasé junto a ellos, me recordó como era sentirse en casa. El amor y la calidez de la familia que tuve una vez, que perdí dos veces y al parecer que perderé por tercera vez.

(...)

—No quiero que la veas.

—No puedes impedirlo.

—Jimin, ella no te necesita.

—Eso no puedes decirlo tu.

—Aléjate, es mi última advertencia.

—Muevete.

Se interpuso, lo empujé pasándolo de largo.

Rápidamente sentí una mano tomando mi pierna, haciéndome caer. Lo raro e inexplicable, era una mano inexistente.

—No tendré compasión. No te acerques a ella.

—¿¡Quién mierda te crees!?

Me levanté del suelo para tomar el cuello de su remera.

—La nueva familia de tu hermana.

Eso, realmente me dolió.

Él apartó mi mano de su remera y se alejó.

Quería verla, quería verlas a ambas.

Pero..

¿Debia?

Mi celular sonó, un mensaje de Hoseok.

Mang:

Reunión. Edén nos llama.

Volví a ver la dirección de aquél cuarto, suspiré pesadamente.

—Umji está ahí. Ella estará bien..

(...)

—Hazlo, ¡entra de una vez!

—No quiero.

—Min Yoongi.

—Déjame.

Tomó mi mano.

—Se que te enteraste por boca de Jimin.

—¿Y?

—Ayer a la noche estuviste aquí ¿verdad?

—No.

Ella soltó un leve suspiró.

—Se que si estuviste. Creí haberte visto cuando fui a comprar un café. -la miré vagamente— ¿Por qué mientes?

No lo sé.

—Tienes miedo.

—¿Miedo?

—No quieres enfrentarla. Es normal, Yoongi tu..

Ella dudo, la vi morder su labio inferior.

—¿Qué?

—Mataste a su padre.

Es cierto lo hice. Sé que era mi deber, no me molestaba oirlo. No hasta que salió de su boca.

—Eso no se puede cambiar. No hay retorno, pero.. puedes tratar de sanar la herida, habla con ella.

—No quie..

—Mentiroso. Estás aquí, ¿eso qué significa?

Aquellas palabras, esta mocosa..

—Me iré ahora, confío en que harás lo correcto -sonrió para soltar mi mano y pasar de mi, alejándose hacia la planta baja.

Sigue especulando sobre mi. Sigue buscando actos redentores.

Ella, cree en mi.

En mi humanidad..

(...)

—¿Qué haces?

—Tú.. -senti sus brazos rodear mi cintura— mi hermosa.

Sonreí— Estoy toda transpirada Tae.

—¿Y? Me gusta tu olor corporal -senti su nariz olfateandome.

Reí ante el tacto.

—Tae Tae eres travieso -tome sus manos y giré para verlo directamente a los ojos.

—Mi niña, realmente te extrañaba -su tono y mirada eran únicas.

—Yo te necesite mucho -susurre con una sonrisa leve.

—¿Cómo te sientes?

—Se por donde vienes. No, no voy a detenerme.

—Yerin..

—Taehyung, ese imbécil pagó para que casi me matará. Me mintió, me uso. No voy a detenerme.

—Lo sé, se lo que sientes pero tú..

—Se que no tengo mis poderes completos, sé que le di la mitad a Jimin, se lo que implicó. Le entregue la mitad de mi vida..

—Debes ser cuidadosa.

—No soy de cristal. No soy tan frágil.

Sonrió para acariciar mis mejillas— Lo sé. Eres una mujer fuerte y amo todo de ti. Por eso me preocupas, te estás excediendo y mucho..

Uni nuestros labios en un corto beso.

—Eso no es justo.

Volví a tener aquel contacto con sus labios, sonreí traviesa.

—No juegues conmigo esto es serio, escúchame no quiero perder..

Volví a besarlo, esta vez él tomo mis mejillas profundizando el beso.

—Te amo -susurre.

(...)

—Yoongi.

Aquel rostro pálido, realmente odiaba aquel hombre, odiaba todo él.

—¿Cómo estás? -tan fribolo.

—Muriendo. ¿No es obvio?

Guardó silencio un momento, bastante largo.

—Lo lamento.

Mis ojos titilaron levemente por un momento.

Recordé las palabras alentadoras de Umji, ella realmente ama la vida, ama a las personas y tiene una gran convicción..

—Yo creo que todos merecen una segunda oportunidad. Realmente creo en la sinceridad y bondad en las personas. Nadie puede ser tan malo. Creo en la paz al soltar, al perdonar -sonrió— la paz que uno mismo se merece.

Recuerdo a Eunha, su amor y dedicación por los suyos. Por su hermano. Por su familia.

Recuerdo a mi pequeña familia, la sangre no es nada comparado con los lazos del corazón. Los re Code.. el jóven Félix, la señora Jinu, los jóvenes que tanto me mimaron y enseñaron.

Recuerdo a mi padre..

—Hombre bola de fuego, también me volveré fuerte para ser un héroe como tu -sonreí.

—Juguemos algo..

...

—Señor Choi. Edén no esta contento por estas matanzas. No se te permitió que iniciarás un negocio de trafico de órganos. ¿Por qué hiciste esto?

—No te incumbe.

...

—¡En verdad viniste! -sonreí acercandome a ellos— Mi appa me dijo que el hombre bola de fuego vendría y cambiaría mis órganos malos ¡gracias por venir, hombre bola de fuego! Cuando me recupere seré una heroína, como tu..

...

—Pensaste que fue tu día de suerte cuando te asignaron la dirección de esta investigación . Tenias los posibles donantes. Pero señor Choi, tener lo que quieres enfrente de ti. No te da el derecho a tomarlo.

—¡Callate! ¡Yuna necesita un donante! ¡no puedo esperar durante años hasta que aparezca un donante!

—¿En serio?

—Lo mismo pasaría con los niños, crecerían para volverse asesinos, perros del estado. ¡Es mejor usar sus órganos para salvar la vida de alguien! ¿¡Qué hay de malo en sacrificar un perro faldero para salvar a Yuna!?

—No debí jugar contigo. -aseguro apenado.

—¡Quiero salvar a Yuna! ¡ella es todo lo que tengo! Por amor a mi hija sólo queri..

—Incluso si era por el bien de su hija -golpeo a mi padre haciendolo caer, acercándose para tomar su rostro— sigues siendo un asesino.

—¿No tienes corazón?

—Hazte cenizas.

Aquel niño que conocí, al que le sonreí, el que solo me sacó información.

—Yuna.. perdona a papá.. tu papá se convirtió en malvado y mato a muchas personas..

—Estas mintiendo, ¡papá!

—El hombre bola de fuego me castigará. -lagrimas salían de sus ojos, él se abalanzo hasta aquel adolescente, este lo consumió en llamas.

El que mató a mi padre.

—Pero lo hiciste, jugaste con una niña de tan sólo cuatro años.

Él volteó antes de evaporarse en miles de cenizas, sonrió con lágrimas cayendo y me llamo por mi nombre..

—Me sonreíste, recuerdo que me dijiste que contará hasta cien..

La voz quería fallarme, mi garganta se secaba.

—Que era una escondida. Conté y conté, al llegar a cien, moví las ruedas de mi silla, fui a buscarte.. te encontré, confrontándolo, grité.. implore -negué— no te detuviste, lo mataste.

Las lágrimas se asomaban, las sentía pero no quería llorar.

—¡Eres un idiota, hombre bola de fuego! -tire aquel cuento infantil a su rostro, cayendo de mi silla— ¿Cómo te atreves a.. matar a papá? ¡Mi papá es papá aunque él sea malvado! -llore— ¡Te odio, hombre bola de fuego! ¡Muere! -aquellas hojas del manga se desprendieron actuando como cuchillos atacandolo débilmente, me sentía débil— Muere..

—¿Me odias? Si lo es, entonces vive y trata de matarme. No me olvides y nunca te olvidare.

Termine desmayada, despertando en un hospital. Un centro clandestino de Edén.

—Con tan sólo doce años, eras un asesino sin escrúpulos.. -nuevamente la tos, la sangre— Un profesional.

Carraspee un poco, la sangre imploraba por seguir saliendo.

A este punto llegue, nuevamente me enferme. Sólo por el odio.

—“El resentimiento y el odio te consumirán” no entendí, no quise entender.

Pero tenían razón, por eso estoy así.

—Tú padre..

—No se trata de él. Se trató de mi, yo lo lleve a ser aquél monstruo, mi enfermedad lo obligó. No justifico nada, sólo.. entiendo a mi padre.

Tomé aire conteniendo el llanto.

—Mis órganos vuelven a fallar, todo porque me llene de odio, me envenene a mi misma. No cumplí la promesa.

Lágrimas al fin salieron, lágrimas silenciosas.

—Te perdonó. Perdono todo.. -sonreí.

Te perdono por mi misma, por mi propia paz.

(...)

Me encaminé al parque escondido entre aquél barrio despejado, aquél en el que ocurrió el incidente.

Dónde el hombre que respetaba me vendió, sólo por estar a punto de conocer la verdad.

—Park Jungsoo.. ¿por qué?

—Porque no vales nada.

Sentí una gran correntada electrica sobre mi cuerpo, apenas logré girar para verlo.

El mismo de hace cuatro años, el especie rara que me atacó.

—¿Por qué te ataqué? -sonrió— por el mismo motivo de ahora, tú ‘padre’ me pagó muy bien, tan sólo por hacerte caer en Lost pero hoy, podría matarte tranquilamente -sonrió.

Maldito..

—Hijo de p.. ¡ahgg! -el dolor en mi espina dorsal era demasiado.

Ese espécimen rara era como Yewon, su poder retenia el mío, lo usaba a su favor.

Sólo me queda una opción.

Matarlo con mis propias manos.

Con fuerza propia, aún con aquél dolor infernal corrí hasta él.

(...)

—Yuju.. -corrí hasta ella quien estaba hecha bolita a un costado de la habitación.

—Yo.. -estaba cubierta en sangre, aquel uniforme blanco del hospital estaba completamente manchado.

—¿Qué ocurrió? -frunci mi ceño, tomé sus manos, quise ver su rostro.

—Jaebum.. sólo.. sólo abrázame -susurro— por favor -suplico.

Lo hice, no indague más, la abracé con fuerza.

—Está bien, todo está bien.

Sentí su cuerpo temblar, aquél hermoso cuerpo estaba deteriorado, mucho más delgado, ¿cómo en tan pocos días pudo adelgazar tanto?

Maldita sea..

—Lo merezco.. -susurraba.

—No hables estupideces -negué con lágrimas apuntó de brotar.

—Yo.. debí haberte escuchado Jb.. debí dejar.. la venganza y el odio..

—¿Qué dices?

—No es bueno.. me lo dijeron.. ellos me advierteron.. me aconsejaron.. tú igual..

—Shh calla -la abracé con mayor fuerza.

—Lo siento.. -negué—Perdón..

—¿Por qué te disculpas? -controlaba mi voz, no quería quebrarme, no ahora.

—Por todos los problemas que te causo..

Su voz tan suave, su cuerpo seguía temblando.

—Tonta..

Ya no podía..

—No eres un problema para mi...

Las lágrimas salieron, mi voz se cortó.

—Te amo Yuna.. Me enamoré de ti.

—Jaebum.. -ella busco mi rostro, no quería que me viera así.

Soy consciente que odia verme preocupado, que odia que uno lloré delante suyo.

Porque aunque no lo vea, tiene un hermoso corazón. Un corazón de niña.

Encontró mi rostro, con una de sus manos mantuvo firme mi mentón. Me incliné más hacia ella, uniendo nuestros labios.

Quería hacerlo hace tiempo. Ya no me importaba que me rechazará. No tenía importancia.

—Oppa..

Volví a esconder su rostro debajo de mi barbilla, acaricié su cabello.

—Kamsamida.. oppa..

Las lágrimas cayeron una vez más.

(...)

—Yerin..

Me encontraba mirando por los alrededores, nada.

—Ye.. -esquive aquél ataque.

Una llama de fuego azul.

—Yoongi.

—Paso tiempo hyung.

...

A nada de un final, espero les guste!

Jinu bebé gfriendxbts89 prometí agregarte en alguna historia, de hecho es una mención breve, apareceras aún jejeje te quero pollineja 🐣🐰💖👈