Capítulo 11. Absoulut XXX

Vodka, hielos con arándanos, zumo de naranja, vermut rojo... también con su mayor ingrediente, el Campari, no, no era el Campari el día de hoy, eran esos dulces, dulces y seductores labios que Dazai por fin probaba, esos dulces labios color cereza que mantenían la sensualidad en el ambiente. Era un sueño, seguramente era uno de esos sueños que siempre tenía con él más bajo, el saber que estaba con él, el soñar que podía besarlo o tocarlo era lo que le mantenía cuerdo. ¿Era un sueño? ¿Un sueño? ¿Lo era? ¿O no lo era? Sintió como Chuuya mordió su labio y con ello le despertó, le había hecho sangrar, y miro sorprendido al pelinaranja. Chuuya había tomado la nuca del castaño para bajarlo a su altura - ¿Qué no lo sabes? - sonrió amplio el de ojos azules – me encanta el hard – No, ¡no era un sueño!

Chuuya devoraba a Dazai como si fuese una copa de agua, con un sediento, muy sediento Chuuya, y aunque el nivel de alcohol en Dazai no era tan alto, aun así le impedía parar, al contrario, quería más de Chuuya. Sus besos se elevaron, Chuuya llevaba a Dazai entre los arbustos, provocando que el castaño se sonrojara más.

Entre los arbustos, obviamente lejos de Oda y Atsushi, Chuuya comenzaba a quitarle la camisa a Dazai, y Dazai hacia igual, disfrutaban de su húmedo beso junto con las caricias que se daban el uno al otro, en pocos movimientos, Dazai y Chuuya quedaban solamente en bóxer mientras usaban sus ropas para recostarse en el pasto, los besos continuaban, Dazai apenas podía seguirle el paso, bien está dicho aquel dicho "Chiquito pero picoso"

Dazai se quedaba atrás ligeramente mientras Chuuya llenaba su cuello y pecho de chupetones – estúpidas vendas

― Son para verme mejor – dijo sonriente Dazai

― Y – Chuuya tomo el elástico del bóxer de Dazai - ¿esto?

― Para hacerte sentir mejor – menciono Dazai

― Hacerme sentir mejor, mi culo – expreso Chuuya

― Exacto

― Dazai – hablo serio Chuuya – el único que cogerá, soy yo

Dazai se había sonrojado, Chuuya estaba bajando su bóxer descaradamente – Chuuya tú no sabes

― Vi suficiente – dijo el pelinaranja – ahora cállate – Chuuya hablaba serio más no se mostraba serio, quizá... orgulloso o poderoso, creo que poderoso era la palabra correcta. Besaba a Dazai con facilidad, y el castaño obviamente no se quejaba, estaba siendo realidad su gran sueño

― De-déjame ayudarte – menciono Dazai

Puso su mano en el pecho de Chuuya y le tiro al suelo para sentarlo, acaricio el pecho del pelinaranja – como amo tu pecho – sonrió Dazai y bajo su rostro hasta el vientre de Chuuya donde el elástico del bóxer se quedaba tapando, lo tomo con sus labios y lo bajo, quedando el miembro de Chuuya en la mejilla de Dazai "es demasiado grande" pensó Dazai al ver el miembro – si me preparas bien te sentirás mejor – menciono Dazai llevaban su propia mano a su trasero – mientras déjame ocuparme de ti – agrego.

Dazai hacia el trabajo por ambos, Chuuya se quedaba respirando agitado por la felación, Dazai lamia el miembro de Chuuya como si esté se tratase de una paleta helada, pasando su lengua lento de la base a la punta y metiéndolo en su boca de vez para succionar un poco de él, Chuuya estaba sintiéndose increíble, jamás imagino que Dazai fuese mejor que cualquier chica. Tomo el cabello del castaño arremetiendo contra su garganta, Chuuya se sentía mejor y mejor, quería más, era demasiado bueno, Dazai apenas iba por su segundo dedo cuando sentía que llegaría al éxtasis teniendo a Chuuya de aquella manera, se sentía, más que bien, apresuro sus dedos mientras el pelinaranja le acariciaba mejor, y fue cuando más se sorprendió, cuando sintió como sus cabellos fueron tomados con fuerza y su rostro alzado, por inercia saco sus dedos y por sorpresa no pudo cerrar sus ojos. Chuuya estaba besándolo, las caricias, el beso, sus dedos, Dazai había llevado al éxtasis en cuanto sintió el apretón de cabello y sus labios chocar – Vaya – sonrió Chuuya – creí que aguantarías más pero eres bueno Osamu Dazai 

― Chuuya...

― Está bien – sonrió Chuuya siendo ahora él quien empujaba al suelo al castaño – ahora es mi turno de terminar

― ¿va-vas a entrar? – pregunto el castaño

― ¿todavía preguntas? ¿Qué no te preparaste tú mismo? ¿Qué tan bastardo idiota eres?

― No lo sé, tú no eres...

Chuuya estaba fastidiado, así que simplemente le dio la vuelta al castaño – es-espera od-odio hacerlo de espalda – dijo Dazai

― ¿ah? – pregunto Chuuya – acomódate – dijo fastidiado

Dazai se movió, dejo su espalda en el suelo y abrió sus piernas - ¿así estarás mejor? – pregunto Chuuya al ver al castaño completamente sonrojado

― S-si

Chuya acomodo su miembro en el anillo de Dazai, fue entrando lentamente, Dazai apretaba todo de sí, pues claro, era muy grande. Logro llegar al fondo haciendo al castaño gemir un poco más fuerte – estas demasiado apretado, eres como una virgen

― Es porque es más pequeño el espacio

― Vas a matarme – dijo Chuuya – abre más las piernas

― No puedo abrirme más, no soy elastic girl – se quejó Dazai y Chuuya tomo sus piernas abriéndolas más – ¡su puta madre Chuuya! ¡no hagas eso! ¿Cuánta fuerza tienes? – se quejaba

― Mucha – sonrió Chuuya comenzando el vaivén

Dazai estaba disfrutando de aquel momento, el rostro de Chuuya tan concentrado, el sudor recorriendo su pecho, sus manos sosteniendo sus muslos, su miembro dentro, ¿Qué más podía desear Dazai? Estaba haciéndolo con Nakahara Chuuya, su eterno amor. Dazai la abrazo del cuello, sin permitirle escape, Chuuya sonrió triunfante, tomo más fuerza en sus embestidas, y acomodo mejor su miembro, ahora lograba llegar más profundo haciendo a Dazai gritar y sí, eso le gustaba a Chuuya. Los gemidos aumentaron junto con las embestidas, los rasguños y mordidas llegaron entre ambos. Dazai termino una vez más y Chuuya también lo hizo dentro de esté, respiraron relajados e intentando recuperar su aire, Dazai pudo ver el mejor rostro presentado por Chuuya, uno complacido y feliz, cansado por su gran acto y... simplemente, Chuuya. Sus ojos se ampliaron en grande cuando Chuuya volvió a entrar – es-espera Chuuya vas a matarme – dijo Dazai

― Cállate bastardo – menciono Chuuya molesto mientras volvía al acto

Si, Dazai podría morir en aquella noche, podría más no lo haría.

A la mañana siguiente, despertaron por el amanecer, el sol los llenaba, Dazai y Chuuya se quejaron de ello, habían pasado la noche en vela, se miraron, Dazai se sonrojo levemente, lo sabía, Chuuya estaba ebrio en la noche, así que bajo la cabeza. Chuuya miro a otro lado, no sabía cómo mirar a Dazai, pero arreglo su garganta y sin mirarlo hablo susurrante – a-anoche, es-estuvo aam... bu-bueno – menciono y Dazai lo miro – n-no me mol-molesta si eres tú

― Chuuya dices

― Digo que quizá, y si me gustes un poco

Dazai se fue encima del pelinaranja abrazándolo – te amo Chuuya, estoy seguro que te enamoraras de mi

― Ca-cállate bastardo, suéltameeeee

Dazai beso a Chuuya y Chuuya esta vez se sonrojo avergonzado, así que se separó – parece que eres más activo ebrio eh

― Ca-cállate maldito Dazai – lo miro fijo – y tu demasiado pasivo con alcohol

― Puedes apostar que sin alcohol te llevaré a la luna

Su pelea continuaba mientras por su otro lado, Oda y Atsushi despertaban, iba a la casa entre bostezos, y vieron a Akutagawa en la cocina durmiendo – yo voy por él – sonrió Atsushi

― No, déjamelo a mí, ve a ver a tus hermanos

― Está bien – sonrió Atsushi subiendo las escaleras

Oda se acercó al azabache, se sentó a su lado y lo miro – pensar que por ti se cambió el apellido – suspiro y movió al azabache – hey, Akutagawa

― ¿Mmm? – expreso el azabache apenas abriendo los ojos, cuando vio a Oda, despertó por completo – bu-buen día

― Buen día – sonrió Oda – oye en verdad quiero hablar contigo seriamente

― Entiendo pero – miro alrededor - ¿y los demás?

― Dazai y Chuuya en los arbustos, y mi hijo con sus hermanos, estamos tu y yo

― Comprendo – dijo Akutagawa sentándose recto

― Iré al grano, heriste a mi hijo y mucho en el pasado

― Lo sé señor, comprendo pero no fue mi intención, mi hermana mayor me transfirió y no pude comunicarme con él, en verdad lo busque

― Te creo, Atsushi cambio su nombre por ti

― ¿Por qué?

― Cuando desapareciste y comenzó a vivir conmigo fue un año donde él tampoco te encontraba, ni sabía de ti, pensó que no quería saber de ti y tomo mi nombre como era de esperarse

― Por eso no lo lograba encontrar...

― Si, así es y después se fue a Inglaterra y sabes... - miro serio al azabache - allí se hizo de un amigo, también mayor que él – menciono mientras se adentraba a la cocina – es un chico inteligente y muy calculador, - decía mientras se servía jugo – creí que sería su nueva pareja

― ¿me dice esto por qué?

― El suele venir seguido, se frecuentan, y no dudo que tenga sentimientos por Atsushi, no sé por qué los retiene, pero es así – tomo del jugo y dejo el vaso para suspirar – te diré esto sinceramente, confió más en Tatsuhiko que en ti

― ¿Tatsuhiko?

― Si, aunque no es como si confiara mucho en ninguno de ustedes, soy un padre, mi deber es ver que Atsushi esté bien - suspiro – y sé que te sigue amando, pero – lo miro fijo – dudo que seas la mejor opción, te tendré vigilado

― Co-comprendo

― Es hora de desayunar – decía Chuuya entrando a la cocina

― Chuuya, tu pantalón sigue desabotonado – dijo Oda y Chuuya arreglo su ropa

― Parece muy inteligente – dijo Dazai

― Lo es créeme - dijo Chuuya avergonzado 

Los niños comenzaron a bajar las escaleras, Atsushi bajaba con Ana entre sus brazos - ¡papá! – gritaron los niños y Oda apago el cigarro

― Hey ¿Cómo durmieron?

― Bieeeeen – decían Meko y Taki

― Ryuro-san sigue durmiendo – decía Atsushi alegre

― ¿harás el desayuno? – pregunto Oda mientras Atsushi entraba a la cocina

― Si – menciono buscando en el refrigerador

― Dame a Ana – dijo Oda y Atsushi reacciono - ¿sigues con eso?

― Perdón – menciono Atsushi dejándole a la bebé a su padre

― ¿Qué pasa con Ana? – pregunto Dazai sentándose

― ¿Qué pasa contigo? ¿te puedes sentar tan fácil? – pregunto Oda burlón y Chuuya se sonrojo

― Papá – le llamo Atsushi fastidiado

― Perdón, perdón – sonrió Oda – me gustan las bromas, cuando vives con un chico que gusta de otros chicos, se nota

― Papá – se quejó una vez más Atsushi

― Fue difícil ocultarlo de Chuuya – volvió a decir Oda y solo vieron como un pañuelo golpeo la cabeza de Oda – ok, ya me callo

― Al parecer Atsushi es cinta negra en trapos de cocina – dijo Dazai haciendo reír a Oda

― Cierto, lo es – sonrió Oda

― Volviendo a lo de Ana

― Oh – Oda miro a Atsushi quien cocinaba como si nada – Ana perdió a sus padres en un incendio, parece que Atsushi se ha entendido bien con Ana y cuando están juntos casi nunca la suelta

Chuuya miro a Atsushi y hablo bajo – sus quemaduras siguen notándose aun cuando has gastado tanto Oda-san

― ¿y si usa las cremas? – pregunto Oda en el mismo tono

― No, se las pongo yo, prácticamente siempre lo obligo a bañarse conmigo por eso pero dice que por lo menos ya no le duele

― Gracias Chuuya

― No le duele – dijo Akutagawa sorprendiendo a todos, excepto Atsushi quien estaba fuera del radio para escuchar – no creo que una crema le alivie, creo que es cuestión de aceptar lo que paso y no querer borrarlo – miro a Oda – creo que así es feliz

― ¿Akutagawa te dejo verla? – pregunto Chuuya

― Si, verla y tocarla – menciono el azabache y Oda lo miro serio

― Bien, ganas puntos por eso – dijo Oda serio

Atsushi cocinaba mientras todos hablaban, los niños veían las caricaturas de los domingos en la sala justo enfrente, Akutagawa se mantuvo al margen, miraba a Atsushi cocinar, y de eso Oda se dio cuenta - ¿Por qué lo miras tanto? ¿Quieres ayudarlo? – pregunto

― Akutagawa no es bueno cocinando, solo con cócteles – dijo Dazai

― Está bien – sonrió Atsushi – ya está listo todo – menciono volviendo a lo suyo

― Sabes, cuando algo te gusta o eres agradecido solo lo demuestras – dijo Oda quien se levantó a ayudar a su hijo, hombro con hombro reían y servían los platos, Akutagawa solo lo miraba, cada vez... se veía más distante

La mañana transcurría con los chicos conviviendo con los niños, Oda por su lado también jugaba con ellos, desde atrapadas hasta ser unos ninjas, era el día libre de Hirotsu pero él también era parte de la familia, se quedaron un rato en el jardín disfrutando de cigarros al lado de Oda

Dazai y Chuuya arropaban a los gemelos Taki y Meko quienes tenían su hora de la siesta mientras que Atsushi intentaba dormir a Ana y Akutagawa le acompañaba – entonces... ¿Por qué quieres tanto a Ana? – Preguntó – es decir, pareces más apegado a ella

―Tenía que ir al hospital seguido por medicamentos y curaciones, pero cuando llegamos al hospital ese día, había una alerta de incendio, Oda y yo queríamos ayudar, traía mucha gente y el personal no se daba abasto, subí a una ambulancia junto a unos paramédicos, y al llegar al lugar, tuve miedo – dijo bajando la cabeza

― Es normal tener miedo Jinko

― Lo tuve por mí – confeso el albino – no quería volver a quemarme... aun cuando en el centro de apoyo dijeron que pasaría, me sentí muy inútil.

― ¿entonces?

― Entonces escuche a Ana llorar y mi cuerpo se movió, corrí hasta donde estaba Ana y logre sacarla – sonrió amplio Atsushi – Ana es... quien me motivo a seguir en el centro de apoyo, y Oda abrió una fundación gracias a Ana – Atsushi abrazo a la pequeña – Ana es una heroína

― Los dos son héroes – confeso Akutagawa acariciando la mejilla de Ana con su dedo y la bebé sonrió

― Parece que le agradas ¿quieres sostenerla?

― ¿podría? Jamás he cargado un bebé

― Si, mira – decía Atsushi – tomarás su nuca en alto y su cuerpo firme ¿bien?

― Bien – respondió el azabache mientras recibía a la bebé – va-vaya e-es pesada

― Lo es – sonrió Atsushi

La sonrisa tan cálida que le mostró, Akutagawa no lo pudo evitar, se acercó a besarlo y para el albino su corazón casi sale, tomo los hombros del azabache y continuo el beso, se separaron al oír a Ana reír – lo si-siento Ana – dijo Atsushi

― No deberías disculparte, creo que a Ana le gusta que nos besemos, deberíamos hacerlo más – menciono y miro a Ana - ¿no crees Ana? – la niña reía

― Basta, no uses a Ana – dijo Atsushi divertido para besar al azabache

― Quiero que me digas más, muchas más cosas de ti, lo que paso estos años... lo que viviste, amigos y enemigos, quiero saberlo todo

Atsushi sonrió – te lo diré todo – ambos chicos sonrieron, Ana reía, Chuuya y Dazai sonreían y Oda y Hirotsu fumaban, el ruido de la puerta les llamo la atención, Oda volteo ligeramente y volvió a su pose – le dije que no sería mi favorito justo a tiempo – dijo Oda, lo cual solo Hirotsu escucho, Akutagawa y Dazai miraron extrañados aquel hombre, aquel chico llegaba hasta Atsushi quien beso su mejilla y después beso a Ana, lo cual molesto a Akutagawa, Chuuya y Dazai se acercaban

― He vuelto, Atsushi-kun

― Bienvenido a casa – sonrió Atsushi mirándole – Tatsu-san

― Bienvenido Tatsuhiko-san – dijo Chuuya

Dazai y Akutagawa ardieron en celos ¿Quién rayos era ese chico?


¡:3 Hooooooolis! 

disculpen mi mal saludo pero no pude evitarlo, mi mamá ha decidido torturarme el día de hoy con cosas sobre amor y la verdad muero de risa por el bullying que me hace... ¡El siguiente capitulo es el ultimo!

¡Gracias por leer!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top