—Waaaa, hoy te vez demasiado bien, Susu —Hobi me sonrió de la manera más linda que podía existir, y hoy, que yo me sentía más radiante que nunca, era imposible no devolverle la hermosa sonrisa de la misma manera, aunque a mi, Hoseok siempre me hacía sonreír incluso en los peores momentos.

—¿Si? Yo también me siento demasiado bien —dije, sentándome en la barra como siempre, solo para charlar un poco con mi amigo.

—¿Pasó algo especial? ¿Namjoon te hizo un aumento? Si es así, reclamaré el mío —frunció su ceño con un enojo fingido, porque Hobi nunca se enojaba con nadie.

—Has sido y siempre serás el empleado del mes, Hobi —le señalé y él me sonrió levantando las cejas repetidas veces, y aquello me hizo soltar una carcajada —Pasó algo especial, sí —admití, aunque claramente no era el momento para dar detalles al respecto.

Aunque estuviera extremadamente feliz, porque me reconcilié con Jungkook, pasé la noche en su casa, dormí con él en su cama, desayunamos juntos como una pareja, no sabía aún si realmente lo éramos, ambos habíamos admitido que nos gustábamos, pero no habíamos hablado sobre una posible relación y en todo caso, si eso pasara, tendría que pensármelo, porque aunque Jungkook fuera un chico que hasta el momento no había revelado que le disgustara mi trabajo extra, o sea, el de ser puta, no creo que le divirtiese que su novia se esté acostando con hombres continuamente, y yo no estaba tan segura de querer dejar esa vida, porque me gustaba mucho Jungkook, y tal vez podía admitir que algo mucho más fuerte también sentía por él, pero mi trabajo era algo que yo había escogido porque quería, yo había tenido la oportunidad de dejarlo cuando comencé a tener éxito en el club con los bailes de Pole dance, pero no lo dejé, y no me desagradaba, que era lo más raro.

Por lo que tener una relación con Jungkook llevaría una larga charla sobre los pro y los contra.

—Mmm... Es la típica cara que pone una adolescente cuando su crush le pasa por delante, así que ya me dirás tú, si ese "algo especial' tiene que ver —me mordí el labio y miré hacia otro lado durante un rato, haciéndome la pensativa.

¿Porqué hoy me sentía tan guapa? El espejo que había junto a la escalera que daba a las habitaciones parecía tener Photoshoot incluido, porque me veía muy bien.

O solo era idea mía.

—Tal vez, puede ser, a lo mejor —valaceé mi cabeza hacia distintos lados sonriendo con picardía.

Hoseok dejó estruendosamente el vaso que estaba limpiando y se colocó con los codos en la barra, inclinado hacia mi y su rostro entre sus manos para prestarme la mayor atención del mundo.

—¿Quién es el afortunado? Ya te estabas tardando en sentar cabeza —indagó con curiosidad y a mi la sonrisa no se me desaparecía del rostro.

¿Era normal estar tan feliz? Solo había dormido con él.

—Es... Especial, digamos, nos estamos conociendo aún, pero es muy dulce, muy bueno, y súper guapo —dije, dibujando con mi uña encima de la madera de la barra, entretenida e imaginándome a Jungkook en mi cabeza.

Su sonrisa de conejo con los costados arrugados, sus incisivos mayores, sus ojos de Bambi, sus labios pequeños, su cabello largo y suave como tocar seda, su cuerpo frondoso, fuerte y escultural, sus tatuajes... Jungkook era más que guapo, la palabra se le quedaba incluso corta. Y no solo estaba el físico, que podía ver cada vez que quisiera, incluso en una foto, sino también su personalidad, el ser callado la mayoría de las veces, el expresar miles de cosas indescifrables con solo mirarlo a los ojos, las estrellas que poseía en ellos, la manera de ser tan atento, tan dulce, tan cariñoso hasta a veces un poco empalagoso, sinvergüenza y con dotes de narrador de cuento, sus gustos extraños y sin razón y la manera tan asombrosa con la que miraba todo, aprendía rápido y era bueno en todo, incluso cuando me había dicho que era virgen, me había demostrado que eso solo era un impedimento en su cabeza.

—¿A caso es Mario Casas? Porque si es así, déjame decirte que no tienes oportunidad, solo está en tú cabeza —se burló muy convencido, yo le pegué un zape con el codo hasta hacerlo quejar, pero se rió luego.

—Oye, estoy siendo sincera, y tú te lo tomas a juego —hice un puchero y descansé mi rostro entre mis manos.

—Lo siento, ¿vale? Es que es raro, pensé que contigo enamorarse sería imposible, te gusta tú trabajo —señaló, yo solté un suspiro al caer en cuenta.

—No se si estoy enamorada, pero me gusta mucho, más de lo que puedes imaginar, y... También pensé que sería imposible, más porque pensé que no le llegaría a gustar a nadie teniendo este tipo de trabajo, los hombres cuando me ven bailar me miran con lujuria, ganas y deseo sexual, pero él, él me mira con... admiración, adoración, no se si me entiendes —expliqué.

—Te entiendo perfectamente, Susu, y no sabes cuanto me alegro por ti, te mereces mucho más que esto ¿sabes? —dijo Hobi, acariciando con su mano mi brazo.

—Pero esto me gusta, Hobi, me gusta bailar, y... llegué a un punto en el que no me desagrada estar... con hombres, es complicado —añadí, y Hobi asintió.

—Eres una mujer sexualmente activa, te va a gustar el sexo sea con quién sea, eso no es problema —asentí, soltando un suspiro —¿Pero...? —alzó una ceja mirándome con atención.

—Pero me siento entera cuando estoy con él, siento que no necesito más nada si estoy con él, ya sea en el sexo o sentimentalmente —Hoseok hizo una mueca de lado subiendo ambas cejas.

—Uf, es fuerte, entonces —señaló y yo me encogí de hombros —Pero espero que todo salga bien y que sean felices, y que acepte este lado tuyo, que no es tan malo —asentí de acuerdo con sus palabras.

¿Jungkook aceptaría dejarme seguir con mi trabajo? No el de acostarme con hombres, ese se podía dejar, y aunque no era un tema que me desagradara en lo absoluto, a veces sí me apetecía dejarlo, por él, podía dejarlo, pero ¿soportaría y aceptaría que su "novia" bailase en el tubo todas las noches en un club nocturno?

Cuando esa conversación surgiera entre nosotros, sería una muy larga, sin duda alguna.

—Oye, ¿Namjoon se encuentra en su despacho? —pregunté levantándome del taburete.

—Sí, llegó temprano, tiene una mala ostia... Así que ve a ver no te aviente un libro a la cabeza —me guiñó un ojo cogiendo otros vasos para seguir con su trabajo de dejarlos pulcros.

—Lo tendré en cuenta —hice gestos con mis dedos para luego comenzar a caminar hacia el despacho de Namjoon.

Hoy me tocaba cobrar el dinero del mes, mayormente lo hacíamos todos los trabajadores por separados, un día iba yo, otro día Hobi, y así con los demás empleados, y mayormente yo cobraba los jueves de la última semana del mes.

Cuando estuve frente a su puerta, me tomé muy literal lo que dijo Hobi, ambos sabíamos como era un Namjoon furioso o con un mal día, si estaba con mala ostia, a veces era mejor dejarle su espacio hasta que se le pasara, pero yo quería mi dinero, además de que me hacía falta para pagar el alquiler de mi apartamento.

Abrí poco a poco la puerta y cuando hubo una distancia prudencial, suficiente para que mi cabeza entrase, miré hacia adentro, y lo vi sentado en su escritorio escribiendo con un ceño fruncido, y apretaba tanto la pluma que terminaría por cargársela seguro.

—Nam... ¿estás ocupado? —usé mi tono más dócil para no molestarlo más.

No fue un libro, pero si vi como la pluma que antes sostenía en la mano voló en mi dirección, pero gracias a Dios salió desviada y terminó dando en la puerta. Abrí mis ojos asustada y quise irme, a lo mejor era buena idea volver más tarde.

Pero Namjoon no me dejó.

—Pasa —dijo, como si no me hubiera lanzado una pluma con punta y todo segundos antes.

Con el miedo latente en el cuerpo, entré el restó de mi cuerpo a su despacho y entrelacé mis dedos al frente, y mantuve la vista en el suelo, ante todo estaba el respeto.

—V-Vine por mi paga d-del mes —mi voz tembló al hablar.

—Acércate y cógela —oí el sonido de un sobre caer encima de la mesa.

Me acerqué sutilmente y agarré el mismo sin objetar nada, pero Namjoon me cogió de la mano.

—¿Recuerdas lo que te dije hace unas semanas atrás? —preguntó, y yo levanté la vista para mirarlo, hablaba tan frío que daba miedo —Lo que dije cuando ese chico vino a buscarte ¿lo recuerdas? —insistió, las palabras de Namjoon vinieron  a mi como si me las hubiera dicho ayer:

"El cariño y el amor son más difícil superar, y eso no se supera con volverse algo más, o acostarse con hombres".

"Ese chico que te busca no es cualquier chico, no es alguien que está pagando tus servicios por una noche, es de los que se enamoran y sufren, y de los que enganchan y hacen sufrir"

¿Pero a qué venía la necesidad de recordarlo?

—Lo recuerdo —afirmé, sin entender.

—No lo olvides, ¿vele? Tenlo como un consejo que tal vez debas sacar en algún momento del bolsillo, y cuando ese momento suceda, yo voy a estar aún esperando por ti —mis mejillas agarraron calor cuando sus dedos acariciando mi piel.

Yo me aparté sutilmente para no ofenderlo, pero me sentía de momento un poco incómoda.

—¿Tú...?

—Lo supe desde esa vez, Sunhye, no soy tonto y tampoco ciego, y tus ojos dicen más que tus palabras, sé identificar cuando miras a un chico y es especial, y... no quiero que te hagan daño —señaló, yo hice una mueca de lado pretendiendo que fuera una sonrisa, pero no salió.

—Se cuidarme sola, Joonie, ¿lo recuerdas? Sung Sunhye puede con todo, y con todos —Nam me enseñó una sonrisa.

El hecho que recordara aún la frase que me repetía cuando era más joven una y otra vez, lo hacía feliz, pero gracias a esa frase tan simple, yo había encontrado un apoyo inmenso, tanto en la frase como psicología, como en él que me la repetía cada vez que tenía oportunidad.

—Claro, así será siempre —esta vez si le enseñé una sonrisa sincera para luego salir de su despacho y soltar aire.

Hoy había sido un día lleno de emociones.

(•••)
¡Sorpresa! Actualización sin aviso porque me apetecía y porque he estado avanzando más en la historia.

Decirles que tengo tantas ideas hasta el final que no se cómo voy a plasmar cada idea en un capítulo, pero iremos poco a poco, y creo que esta historia va a tener más capítulos de lo esperado, tal vez incluso llegue a los 50😳. Nadie sabe puede suceder.

Pero bueno, aquí estamos y yo creo que ya estoy agarrando más ritmo.

Nos vemos el martes, no se si habrá más sorpresas antes, ya lo veremos😁.

Una pregunta ¿Desde donde me leen? Lxs voy a estar leyendo.

También dejen sus teorías de lo que piensan que puede pasar más adelante.

Yo solo digo que se vienen capítulos calientes😏🔥.

Bueno...

Lxs sarangheo❤😘