Naruto ni Highschool DXD me pertenecen, son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.

Sin más que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo de mierda.

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"¡Habla con él! ¡ Ni siquiera al funeral fue! ¡Que clase de delincuente han creado! ¡Es el peor hijo posible!"

Minato entonces vio la espalda de su hijo en una baranda en su escuela, ya habían salido de clases iniciando las vacaciones por lo que no debería de estar ahí.

Pero la escuela estaba ubicada en alto por lo que la azotea de la misma ofrecía la mejor vista posible.

Minato no estaba en sus mejores condiciones, no había dormido casi nada estos días, había adquirido la bebida y un hábito que pensó que nunca tomaría como era el tabaco.

Su apariencia era desarreglada mientras que en la parte inferior de sus ojos habían dos bolsas lo que indicaba su falta de sueño.

-Naruto, ¿Intentas suicidarte?-Pregunto Minato viendo a su hijo tan cerca de la orilla.

No había visto a su hijo en este último mes, solo sabía que le dejaba la comida a en la puerta de su cuarto así como dos botellas de licor y una cajetilla de cigarros.

-No seas tonto, alguien tiene que cuidar tu trasero, además me patearian el mío si me voy así-Hablo Naruto de espaldas mientras que Minato se acercaba.

Padre eh hijo se quedaron viendo la hermosa vista de la cuidad unos segundos sin decir nada.

-Dejame contarte una historia...-Habló Minato mientras que dejaba salir una bocanada de humo.

-Fue hace mucho tiempo, sabes, yo era un bastardo, las mejores notas sin esforzarme, la mejor apariencia, la meior vestimenta, muchos me llamaban de prodigio incluso en la cocina, ingresé a Totsuki aplastando a todos los que se me opusiera incluso destrozando en mis primeros dias a los cinco asientos inferiores, pero hubo un tomate rebelde que me escupió en la cara...-Habló Minato mientras que se rascaba la cabeza recordando aquello.

-'Muy bien bastardo, si crees que puedes venir aquí sin que te patee el trasero estas equivocado' tuvimos una competencia de comida, nuestra habilidad culinaria debían de hablar-Habló Minato viendo a su hijo que prestaba atención.

-¿Te gano?-Pregunto Naruto ya que seria patético si le hubieran cerrado la boca a su viejo.

-Por supuesto que no, la destroce, pero entonces al borde del llanto juro venganza, una y otra y otra vez, todos los días me retaba, todos los días ella perdía, no se en que momento me enamore tan profundamente de aquella mujer que en mis ojos no hubo nada más que su felicidad...-Habló Minato con una sonrisa mientras que se recostaba en el barandal ya que era de mangas que estuvieran oxidados debido a la política tan estricta que había sobre las escuelas japonesas.

-Simp-Hablo Naruto mientras que Minato bufaba ante aquellas palabras de su hijo.

-Años después nació la cosa más preciosa que pude llegar a tener, fruto del amor de tu madre y mío, aquel ser que fuera hombre o mujer lo amaría de la manera más incondicional posible, por él cual entregaría mis dedos con una sonrisa en mi rostro, ese eres tu Naruto, mi hijo-Habló Minato mientras que daba un cuarto vuelta viendo su hijo quien hizo lo mismo.

Naruto observó la cara de Minato mientras que Minato observó la cara se Naruto.

PAM.

Minato golpeó el pecho de Naruto un poco duro poniendo una sonrisa ante su hijo.

-Llora hijo, no actúes rudo frente a tu viejo sabes, ambos hemos perdido la mujer de nuestras vidas-Habló Minato mientras que veía a su hijo.

Una lágrima salió del ojo de Naruto mientras que en su otro ojo también procedió a salir lagrimas.

Minato lo sabía, los bastardos podían hablar, pero el conocía a su hijo, su esposa había muerto, Kushina ya nunca la volvería a ver.

Pero Naruto había perdido a su madre.

Aquella mujer que cuando llegaba a su casa lastimado le curaba sin protestar, cuando tenía hambre le cocinaba con todo el amor del mundo, cuando tenia frío lo abrazaba y lo calentaba.

Acaba de perder a un pilar de su vida.

Naruto por más que no lo demostraba se encontraba devastado, pero su manera de ser le impedía enseñarlo al mundo.

-Po-Porque viejo, po-porque mi madre, ella n-no tuvo que ser-Hablaba Naruto mientras que apretaba sus puños.

Kushina había muerto hace un mes, un accidente se tránsito, había salvado a una niña de ser atropellada pero no pudieron salir de la trayectoria del vehículo.

Minato no odiaba al asesino de su mujer, verle, aquellos ojos llenos de horror y desesperación le hicieron entender que aquel pobre hombre solo había sido usado por el destino.

Pronto la aseguradora dio la revisión del vehículo mostrando que había sido una accidente donde el vehículo que quedó sin frenos que lastimosamente iba de bajada.

El fiscal había pedido cárcel para el hombre, pero Minato había hablado a favor de aquel hombre pidiendo que ni se le castigará, un accidente tan horrible podía suceder y lastimosamente Kushina había sido la afectada.

Todavía recuerda al hombre arrodillado pidiéndole perdón por haber cometido tal crimen de dejar a una familia sin madre.

-Llora Naruto, desahoga toda esa tristeza hijo mio-Hablo Minato mientras que daba un paso al frente.

Minato abrazo a Naruto mientras que este comenzaba a llorar, un río de lagrimas salieron de los ojos de Naruto.

[Nota: Algo así]

Naruto dio alaridos llenos de dolor y tristeza, porque su madre, porque tuvo que ser ella, había muchos drogadictos o Yakuza, pero de todos tuvieron que elegirle.

Él extrañaba a su mami.

Minato consoló a su hijo mientras que lagrimas salían de sus ojos, la realidad le había golpeado hace unas horas, se había acordado de la edad de su hijo.

Apenas tenía 15 años.

El era un niño.

Minato se sentía la peor basura, saber todo el peso que su hijo tuvo que sufrir estos días le hizo sentirse asqueado consigo mismo.

"¡BUAAA!"

El grito desgarrador de los alaridos de Naruto fueron la sinfonía que se escucho en aquel frío lugar.

Tiempo después.

Por primera vez Naruto en este mes se sentía un poco mejor, sentía que se había quitado un peso de encima.

Estaban en su hogar, debido al atardecer padre eh hijo tuvieron que ir nuevamente para su hogar.

Su comida rapida había estado cerrado este, nadie fue tan desconsiderada para reclamar el cierre, bueno nadie que conociera la situación de ellos.

-Abre-Hablo Naruto mientras que metía la cucharita de plástico dentro de la boca de un pequeño niño de 2 años.

El niño sonrió sentado en la silla mientras disfrutaba el delicioso sabor del pescado.

Minato comía a un lado de la mesa también, sin embargo lo hacía sin preocupación alguna debido a que si se tragaba una espina seria por su propia estupidez.

Rei estaba recibiendo clases de su universidad por lo que estaba en la Segunda planta, ellos le habían echo el favor de alimentar a Yuki.

-Sabes vas a tener solo mujeres como hijos-Hablo Minato viendo a Naruto limpiar suavemente a su comensal.

Naruto había preparado la cena, pescado con verduras al vapor, arroz y una ensalada de tomate picado, zanahoria y pepino.

Era algo liviano para el estomago para poder dormir de manera tranquila sin problema alguno.

-¿Porque lo dices?-Pregunto Naruto mientras que sus ojos estaban rojos debió al llanto que habían sufrido.

-Eres demasiado paciente, nunca te eh visto exaltado o impaciente por algo, lo leí en una revista cuando tu madre estaba embarazada que el 90% de los hombres que nacieron pacientes en su vida adulta cuando tienen hijos estos son mujeres-Hablo Minato viendo a Naruto darle un poco de comida a Yuki

El niño agradeció mientras que daba el bocado sin miedo, siempre le había gustado que su hermano mayor le cocinara, cocinaba delicioso igual que su tío Minato.

-Eres igual-Se quejo Naruto mientras que señalaba aquello y Minato sonrió.

Naruto tomó una de las hojas insípidas de su dieta mientras que la masticaba, pronto se convertiría en un conejo a este paso.

-No, adquirir paciencia con el paso del tiempo, después de todo para soportar a tu madre y a ti uno desarrolla mucha paciencia, pero tu en cambio eres paciente desde el inicio-Habló Minato con una sonrisa mientras que Naruto bufo ante aquello.

-Da igual, ¿Quieres una patata Yuki?-Habló Naruto viendo al pequeño señalando las papas horneadas con mantequilla de ajo y gengibre que había echo.

El niño asintió mientras que Naruto tomaba los palillos y tomaba una papa, el niño abrió su boca mientras que Naruto le daba de comer.

-Que vas a hacer?-Pregunto Minato a su hijo quien se quedó pensando unos segundos.

La vida seguía, Minato sabía que Kushina resucitaría y les patearia el trasero sin piedad alguna por estancarse y ahogarse en su propia tristeza.

-Ganaré mi competición, lo haré por ella...-Habló Naruto ya que esta victoria seria por su madre.

Kushina siempre le había apoyado en todo, incluso cuando venia golpeado a la casa ella se sentaba a escucharle decir todo lo que había sucedido con una sonrisa.

-¿Luego?-Pregunto Minato viendo que Naruto se quedaba pensativo ante aquello.

El quería ser chef, aparte de las MMA aquella vocación era su felicidad, saber que sus puños también servían para dar felicidad en lugar lastimar a todos.

"Escúchame y espero que lo hagas bien Naruto, si quieres practicar MMA puedes hacerlo, que ningún idiota te diga que hacer o que elegir, soy tu madre y ni siquiera yo puedo hacerlo por ti, no tengo ese derecho, ni tampoco tu padre...pero si quieres ser chef  y ser boxeador debes ser el mejor en las dos cosas, porque de no ser así es mejor que te centres solo en una y la otra la tomes como hobby"

Naruto todavía recordaba las palabras de su madre sobre aquel tema cuando el llegó triste debido a que se habían burlado de él ya que sus puños servían solo para lastimar.

-No lo se-Habló Naruto ya que ni siquiera el sabía que hacer.

Minato observó a su hijo quien veía a Yuki terminar de comer el pescado, el rubio menor tomó los palillos mientras que rápidamente desmenuzaba la carne de pez para buscar espinas, con previsión saco todas y cada una de ellas poniéndolas sobre una pequeña pila que tenía.

Para esta receta había usado pez de agua dulce y entero, aquel pescado estaba delicioso, eso era irrefutable, cada ingrediente se había fusionado en una mezcla de sabores que hicieron a Minato sentirse a la orilla de un río pescando en armonía junto a una cerveza.

El problema de este plato era el mismo pescado, el pez de agua dulce era muy espinoso, para adultos sería fácil y no tan peligroso, pero para un niño como Yuki sería muy peligroso si una espina se alojaba en su garganta, además que que Yuki lo comería sin precaución alguna debido a su sabor.

Así que Naruto se encargo de seleccionar los trozos de pescado de Yuki mientras que le ayudaba a servirlos, el fanatismo por mariscos del niño hicieron que un sonriente hombre les diera su regalo este pescado que Sabalo Pipon.

Este era un pez centroamericano, Minato lo habia probado cuando fue a Nicaragua, nunca pensó que Shura el dueño de 'Marisquería Sol Naciente' tuviera una granja de peces y justamente tuviera aquel pez que probó hace 20 años.

-¿Que tal si te unes a Totsuki?...-Pregunto Minato mientras que Naruto lo volvía a ver ante aquello.

-Quieres ser chef verdad Naruto, Totsuki es el lugar ideal para que tú elijas el camino de tu cocina, que elijas que chef quieres ser-Habló Minato mientras que observaba a su hijo con tranquilidad.

-Pero que pasara con la tienda de nuestro hogar, no creo que puedas tu solo-Habló Naruto preocupado por Minato mientras que este último negaba.

Una sonrisa amarga salió de los labios de Minato, él no podría volver a cocinar ahí, la sola idea de volver a pisar ese sitio lo haría romper a llorar nuevamente.

-Les enseñare a Rei y a Felipe como hacer las recetas de nuestra familia, como manejar el negocio y sobre todo les dejare a ellos tienda para que sobrevivan ellos mismos, yo por mi parte me iré del país, también le dare la casa a Rei para que viva junto a Yuki...-Habló Minato mientras que Naruto le veía.

-¿Me vas a abandonar?-Pregunto Naruto a su padre quien nego ante aquello.

-Nunca digas eso, solo muerto se podrá, después de todo eres mi hijo Naruto, simplemente no estaré aquí, viajare por el mundo encontrando recetas así como preservandolas, ese era el sueño de tu madre sabes, conocer las costumbres de los países y sus recetas culinarias, estaba ansiosa sabes, viajar por el mundo junto a nosotros dos-Susurro Minato apretando sus puños mientras que se abstenia de lagrimear ya que asustaría a Yuki.

-Entonces cumplela-Sonrio Naruto al escuchar las palabras de su padre.

-Espero que cuatro años sean suficientes para hacerlo, sino te puedes unir también, terminaremos en Estados Unidos, ahí comenzaremos a vivir con una vida nueva-Hablo Minato a su hijo ya que era hora de volver a su país de origen.

Minato era estadounidense, aunque sus padres eran de ascendecia japonesa los dos habían nacido en EEUU, Kushina era Rusa-Japonesa nacida en Japón y por ello su nacionalidad.

Era un lío de nacionalidades que Naruto prefería evitar, solo sabía que era Japones y con ello se conformaba, no había más y no había menos.

-Muy bien, iré a Totsuki y te alcanzare en el camino-Habló Naruto mientras que Minato sonreía ante aquello.

Su madre era la CEO de la línea hotelera de mayor prestigio de todo Estados Unidos y México, mientras que su padre era un Biólogo de la fauna de gran renombre apareciendo muchas de sus investigaciones en revistas de Biología a nivel global más importantes.

Sin mencionar sus estúpidos libros eroticos.

De verdad se avergonzaba de eso de su viejo.

-Esta decidido, ve y pateale el trasero a tu adversario-Hablo Minato mientras que Naruto asentía con una sonrisa.

Minato ya había inscrito a su hijo en aquella escuela, después de todo las inscripciones habían terminado hoy, si esperaba su aceptación no hubiera podido hacer nada, bueno si hubiera podido inscribirle reclamando un par de favores pero no quería hacerlo.

Otro lugar.

Senzaemon Nakiri estaba sentado en su despacho, mientras revisaba cuidadosamente todos los perfiles de los estudiantes.

Habían dos tipos de estudiantes los "Pura sangre" y "Carbones", los primeros eran hijos eh hijas de chef de renombre, niños que ya traían en su código genético la cocina, los segundos eran los niños que no tenían a nadie dentro de la inadrustria aquellos que querían forjae su camino ahí.

Senzaemon no menospreciaba a nadie, para él sea hijo de chef o no no le importaba en realidad, si tenían lo suficiente para alcanzar la grandeza no importaba quien era tu padre sino tú.

Pero aquellos niños nacidos dentro de la industria contaban con una enorme ventaja, el último graduado "Carbón" había sido hace ya cinco años, después de ahí nadie había podido superar el tercer año sido expulsados en ese año.

-Todos somos aburridos-Se habló en voz alta Senzaemon ya que de los cien últimos ninguno había llamado su atención.

Esta generación prometía ser mediocre, con sus cálculos sabían que lo mucho solo 5 o 6 estudiantes podrían graduarse lo cual significaba 4 estudiantes menos que todos los años.

Pero entonces observó una hoja de presentación de un "Pura sangre", mientras que su sonrisa se extendía al leer todo lo referente a él.

Nombre: Naruto Uzumaki

Senzaemon soltó carcajadas al leer y confirmar que era el hijo de las únicas dos personas que le habían derrotado.

-¡Así que Kushina y Minato tuvieron descendencia! ¡Interesante! ¡Esto va a ser muy interesante! ¡PFT-JAJAJAJA!-Habló Senzaemon soltando carcajadas mientras que se levantaba de su asiento.

Si ese mocoso salia como Kushina y Minato esta generación no sería para nada aburrida.

Solo quedaba observar y disfrutar.

Senzaemon tenía que hacer todos los preparativos, no importaba si solo se graduada uno, por fin su sueño de alcanzar al chef perfecto se volvía realidad los otros 999 chef solo servirían como piedras de sacrificio.

Día de la pelea.

Naruto estaba sentado mientras que tenia sus audífonos puestos, oía música mientras que tenia sus manos extendidas.

A un lado de ellos habían un hombre vigilando sin decir ni una palabra y viendo cada segundo.

Un hombre ya terminando sus 40 años vendada la mano derecha de Naruto con la venda color salmón, la mano izquierda ya estaba vendada.

Naruto se relajaba escuchando música mientras que el hombre le hacía el vendaje sin preocupación alguna.

-Eh terminado-Hablo el hombre viendo al observador quien asintió ante aquello.

El observador rápidamente tocó las vendas y de aseguro que no tuvieran nada fuera de lo común.

Esto se hacía debido que habían múltiples químicos que podían endurecer cual piedras las manos de cualquiera por lo que se aseguraban que los participantes no hicierna trampa.

El X-2 aunque siendo la liga amateur de X-1 no podía darse el lujo de bajar el nivel de sus combates, aunque no tan brutales como los de la liga principal la audiencia de X-2 tampoco era tan mediocre teniendo hoy un aforo de 350 personas 200 presenciales y 150 virtuales.

-Si están bien-Hablo el hombre mientras que rápidamente sacaba un marcador y marcaba como buenas las vendas.

Naruto se quito los audífonos cuando sus vendas fueron comprobadas, ya casi era su pelea por lo que debía preparse.

El hombre al ver que no había nada que tuviera que hacer y ya con las firmas echas se retiro para informar sobre esto dejando solo al anciano y al muchacho muchacho.

Naruto recosto su barbilla en sus antebrazos cuando se cruzo de brazos, el anciano sintió un tic en su ceja al ver la mirada de Naruto.

-Si vas a decir algo mocoso, dilo ahora-Hablo el hombre mientras que Naruto bufaba.

-Sabes, me uniré a una academia Élite de Cocina, queda un poco largo por lo que no podré asistir regularmente a la academia-Habló Naruto mientras que el hombre le vio.

Jum-Hwan Choi observó a Naruto dándose cuenta que no mentía sobre esto, suspiro ya que era una pena perder a tan brillante peleador.

Jum-Hwan era un boxeador antes campeón mundial, le había enseñado a Naruto el boxeo que su maestro le había enseñado a él, el hombre sabía que lo que le faltaba a Naruto en estos momentos era la experiencia de las peleas, seria un monstruo una vez la tuviera.

El había tenido unas cuantas peleas después de perder su título ante Hideyuki, no por querer enfrentar a aquel japonés o al que le derrotó, sino más bien para juntar dinero y poder montar un gimnasio en pleno derecho, lo habia logrado.

Después de todo la sola mención de un Bicampeon mundial de boxeo atraería a muchas perdonas y así fue, su gimnasio había procreado a 2 campeones JBC, 3 Campeones OPBF y 4 campeones en peso Gallo y Minimosca.

Aunque era enfocado en el boxeo hace unos años (10 años) debido a cierto intruso habían añadido más artes Marciales siendo Jiu Jitsu, Muay Thai, Kick Boxing y MMA.

Aunque no se quejaban sus ingresos se habían disparado también.

Naruto siempre había estado ahí, desde pequeño, aprendido junto a ellos y desarrallonadose como peleador, el que estuviera aquí sentado era solo muestra de su trabajo.

-Ya te has decidido, ¿Entonces porque me cuentas?-Hablo Jum-Hwan viendo a su muchacho quien sonrió.

-No quiero dejarlo, quiero seguir participando en estas peleas, pero no podré ir regularmente, te iba a proponer que aunque no vaya regularmente me sigas buscando retadores, prometo que me mantendré en la mejor forma física-Habló Naruto mientras que Jum-Hwan se quedaba pensativo.

Parar ahora era echar todo su esfuerzo por la basura, si se detenía 3 años hasta los 20 volvería a tener un ritmo aceptable, si querían ir por kn título mundial debía iniciar las peleas profesionales apenas cumpliera 18 años.

-Pides mucho Naruto, sabes que eso seria favoritismo, en mi gimnasio no hay favoritos-Hablo Jum-Hwan mientras que Naruto sonreía de manera amagar.

Buscar otro gimnasio así de bueno no seria fácil, al gimnasio que iba en estos momentos iban seleccionados nacionales y incluso campeones de la JBC, también se reunían peleadores rankeados en Muay Thai y cintas negras de Jiu Jitsu, inclusive peleadores de MMA de diferentes agencias.

Solo iban monstruos.

-También lo pense-Hablo Naruto sintiéndose estúpido por pedir aquello ya que él lo sabía.

-Pero hágamos algo, entiendo ya que son tus estudios, accederemos a buscarte una pelea, pero te llamare unos días antes y veré que tal estas, si noto aunque sea un signo de estancamiento se te será revocado tal privilegio, además tendrás que asistir los domingos a los sparring-Hablo Jum-Hwan viendo a su pupilo.

Naruto abrió los ojos al oír que iba acceder a ayudarle de esa manera, una sonrisa de alegría se instaló en su rostro.

-¡Prometo esforzarme!-Habló Naruto mientras que Jum-Hwan asentía ya que más vale que fuera así.

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Fin del capítulo.

Sin más que decir se despide su amigo y pana del alma Escritor-san.