Prologo - Brumacion

Johnny POV

Había vuelto al dojo para intentar despejar mi mente, ante mi tenía los trofeos de Peter y Miguel, me los dieron para ponerlos en la vitrina del dojo, estoy muy orgulloso de que haya ganado Peter y que lo haya hecho con honor, sin juego sucio, pero eso me lleva a lo que me está atormentando:

Miguel y Halcón.

La actitud de ambos durante el torneo me recordó bastante al antiguo Cobra Kai y no quería que la historia se volviera a repetir.

Mientras bebo un vaso de whisky oigo que la puerta del dojo se abre, me levantaba voy a ver quién es.

Johnny: ¿Peter? ¿Miguel?

Pregunto pensando que será uno de ellos.

Pero en la puerta veo una figura cubierta por la oscuridad que no corresponde a ninguno de ellos.

???: Felicidades.

Me congelo al oír una voz de alguien de mi pasado que pensé que nunca volvería.

???: Hoy por fin lo has conseguido, has ganado, Cobra Kai vuelve a estar en su sitio, en la cima, todo el mundo nos cerró las puertas, pensaban que estábamos acabados, ahora verán...

La sombra anduvo hacia delante y salió a la luz.

Era más viejo pero allí estaba el, con la misma actitud que hace tantos años.

Ante mi estaba John Kreese, mi sensei.

Dio una calada a su puro y volvió a hablar:

Kreese: Que nuestra historia acaba de empezar.

Empiezo a caminar hacia.

Johnny: Creía que habías muerto.

Kreese: No eres el único, estuve fuera durante mucho tiempo, me alegro de verte.

Extiende la mano hacia mi pero se la aparto de un golpe.

Veo que se ríe un poco.

Kreese: Aún tienes el carácter fuerte ¿eh? Pero me gusta, y tanto, por eso tu alumno ha ganado el torneo, lo has entrenado bien, igual que yo te entrene a ti.

Con eso ya tuve suficiente.

Le lancé un par de golpes pero el los bloqueo y me lanzo a un lado enviándome al suelo.

Kreese: Has olvidado que te enseñe todo lo que sabes.

Se ríe y vuelve a llevarse el puro a la boca.

Johnny: Todo no.

Le lanzo una patada desde el suelo que le da en la cara y hace volar el puro de su boca.

Mientras me incorporo veo como Kreese se ríe mientras se toca la mandíbula.

Kreese: No está mal señor Lawrence, nada mal.

Me lanzo contra el pero me esquiva y me estrello contra la estantería de los trofeos.

Vuelvo a por el y le lanzo un par de puñetazos que logra esquivar, me lanza un golpe a la cara pero me agacho y logró esquivarlo mientras aprovecho el momento para golpear sus costillas desprotegidas, Kreese se tambalea mientras se toca la zona herida, voy a por y comienzo a darle patada al cuerpo pero el bloquea cada golpe, viene hacia mí e intenta golpearme con sus puños, le bloqueo pero entonces agarra mi brazo y me golpea las costillas y la cara con el puño logrando aturdirme, me suelta y me da una patada alta en la cabeza y luego me lanza contra uno de los espejos que se rompe por el choque de mi cuerpo.

Kreese: Mira, no quiero pelear, solo quiero hablar.

Logro ponerme de rodillas.

Johnny: ¿Hablar de que? ¿Del juego sucio que me enseñaste? ¿Del trofeo que me rompiste? ¿O de cómo casi me matas?

Kreese: Esa no fue mi intención.

Corro hacia el y le hago un placaje que lo envía al suelo, le lanzo un golpe a la cara pero gira y logra esquivarlo, le atrapo por la cabeza y le hago girar para acabar yo detrás de él y lo pongo en un agarre de estrangulamiento.

Johnny: Vete a la mierda hijo de...

Antes de que pueda terminar mi frase veo en el reflejo del espejo roto la situación en la que estamos.

Me veo a mi mismo estrangulando a Kreese y mi mente vuela a 1984, después de perder contra Larusso, aún puedo recordarlo como si fuera ayer, Kreese rompiendo mi trofeo de segundo puesto, yo discutiendo con el y el atrapándome en la misma estrangulación en la que lo tengo yo ahora.

Y entonces le suelto.

No voy a convertirme en alguien como el, yo he cambiado, Cobra Kai ha cambiado.

Kreese se reincorpora hasta ponerse de rodillas.

Kreese: Que te apiades de un viejo es de buena persona... y de estúpido.

Y antes de poder reaccionar me hace un barrido que me hace caer y se lanza con el codo sobre mi estómago.

Ambos nos quedamos en el tatami tratando de recuperar la respiración, en ese momento me doy cuenta de que la papelera está en llamas, allí debió de aterrizar el puro de Kreese.

Y en ese momento salta la alarma de incendios y los aspersores empapándonos a ambos.

Menuda manera de comenzar el verano.

-Fin del Prólogo-

Continuara...

(A.N. Espero que os guste el prólogo del segundo libro, en el próximo capítulo tendrá lugar el fin de semana después del All Valley y la vuelta al entretenimiento.)

(Recuento de palabras: 845)

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