18
-Vaya, si que estas guapo.-Fue lo primero que dijo al abrir la puerta.
El chico sonrió sumamente avergonzado.
-Solo me bañé.-Confesó jugando con el moño que llevaba al cuello.
-Pero mira nada mas, el agua y el jabón hacen maravillas.-Cerró la puerta detrás de si y le saludo como era debido, con un beso en la mejilla.
-Como sea, usted se ve radiante. Esta noche señorita.-Extendió su mano para que ella la tomase.
-Lo sé, lo sé.-Respondió aceptando su mano. Comenzaron a bajar los escalones del pórtico.-¿En que vehículo nos transportaremos my lord?.
-En ese sofisticado vehículo de dos ruedas.-Mencionó caminando en dirección a la bicicleta que había dejado estacionada en la acera.
-Genial, pero, ¿puedes pedalear con el traje?.
-Si, no te preocupes, lo importante es que tu vestido no se atore en la rueda trasera.
-Oh aguarda.-Dijo antes de subir a la parrilla trasera de la bicicleta. Dio unos cuantos pasos dentro de su jardín.-¡Papá, ya me voy!.-Gritó. Vio por la ventana que daba a la sala un porrón de cerveza elevándose en el aire en señal de aprobación.-Genial.-Subió a la bici.-Andando.
El camino fue bastante divertido. Mas de una vez el peliazul tomo adrede algunas calles con imperfecciones o pozos con la intención de molestarla, (Tn) no paraba de gritarle que se detuviese, tantos saltos le estaban arruinando el peinado.
El clima esa noche era de lo mas agradable, no hacia mucho calor y tampoco estaba fresco, el tiempo estaba ideal para usar vestido y en cuanto al cielo, la noche estrellada se prestaba para una velada de lo mas encantadora.
El silencio reinaba entre los dos chicos, no era un silencio incomodo, sino uno mas bien de pausa después de haber reído tanto.
Heat pedaleaba cuesta arriba en una calle empinada, sus flacuchas piernas temblaban pero no se atrevía a darse por cencido frente a ella, evitando hacer evidente su esfuerzo, se mantuvo normal y continuo pedaleando en silencio.
(Tn), por otro lado, miraba los faros de las calles con pequeños atisbos de tristeza en sus ojos y con la melancolía instalada en su corazón.
El nombre de Nojiko no dejaba de dar vueltas en su cabeza, no podía caer en cuenta aun de que ella hubiese mentido con respecto a las cartas.
Era mas que obvio que no le caía bien la pelivioleta mas allá de que nunca hubiese hecho nada en contra de ella, el hecho de llamarle la atención a su amor platónico era el problema.
"¿Como lo hace?" pensaba "¿Que es lo que tiene ella que le llama tanto la atención?" volteo el rostro hacia la izquierda, vio su reflejo en la vidriera de una tienda "¿No soy lo suficientemente linda?" pensó.
Era lógico, que a esa edad ella no lograba entender que su apariencia no era el problema, de hecho, no había nada de malo con ella porque sin que ella lo supiese, el corazón del pelirrojo ya le pertenecía.
Es algo muy común en los adolescentes, mucho más en esta etapa de la pubertad en la que todo parece ser una carrera por desarrollarse en el que la apariencia parece serlo todo, el compararse con la otra persona.
Mirarse a uno mismo y compararse con alguien mas el primer paso a abandonar el amor propio.
¿Por que quieres ser como él?, ¿Por que quieres verte como ella?, ¿Por que no te ves a ti con la misma admiración con la que ves a los otros?.
¿Por que te sientes insuficiente?.
Entre los muchos factores que conforman esta sociedad, entre las miles de miradas que se posan en ti a diario, ¿Realmente crees que nadie te ve y quiere ser como tu?.
Es un circulo vicioso y constante el observar, el desear y el envidiar al otro tanto por su apariencia, como su sentido de la moda e incluso su personalidad.
Y el único culpable son los malditos estándares.
La sociedad esta tan estereotipada que incluso hasta la manera de hablar se vuelve una moda.
¿Que tan putamente enfermo debe estar el mundo como para que una niña de trece años se sienta insuficiente?.
¿Cuantas veces (Tn) se había sentido insuficiente?.
Algo estaba claro y era que si (Tn) realimente quería ser feliz, mas allá de estar o no estar con el amor de su vida, era darse cuenta de lo mucho que valía, lo hermosa que era y comenzar a quererse mas por lo que era.
Una chica únicamente asombrosa.
-¿Puedo hacerte una pregunta?.-pregunto el peliazul rompiendo el silencio.
-¿Que?.
-¿Por que quisiste ir al baile conmigo?.
-Oh, vaya.-Le dio algo de pena responder.-Veras, esto tal vez te moleste un poco pero.-Respiro profundo, dudaba al hablar.-Iba a invitar a un chico al baile pero él ya tenia pareja.
-No me molesta.-Respondió él aun manteniendo su tono de voz alegre.-Yo también invite a una chica pero ya tenia pareja.
-¿En serio?.
-Si. La habré ahuyentado con estas mierdas que tengo en la cara.-Se refirió a sus cicatrices.
-No digas eso.-Le pellizco la barriga.-Para serte sincera, tus cicatrices no se ven mal, te hacen ver rudo.
-No hace falta que seas amable por cortesía.-(Tn) no supo que decir, realmente no lo había hecho por cortesía pero era difícil hacerle creer eso.
Era la palabra de (Tn) contra la percepción suya.
-¿A quien habías invitado?.
-Te reirás si te cuento.
-Oh vamos, dime.-insistió.-No me reiré, no soy tan mala.
-¿tu a quien habías invitado?.
-Yo te pregunte primero.
-Si quieres saberlo primero tendrás que decírmelo tu.-Ella chasqueó la lengua disconforme.-¿Y bien?.
-Tu solo sigue pedaleando o se habrá acabo el ponche para cuando lleguemos.
Luego de evitar varias calles un tanto peligrosas y escapar de un vagabundo al cruzar el parque, llegaron al colegio.
-Oh oh.-Soltó el peliazul al bajar de su bicicleta.
-¿Que?.-Preguntó ella viéndose en el espejo de la misma, arreglando los mechones que se habían escapado de su peinado.
-Creo que he roto mis pantalones.-Se llevo la mano a la entrepierna, logro tocar sus calzoncillos con la yema de sus dedos a través el agujero descosido entre sus piernas.-Si, están rotos.-Afirmo.-¿Se me ven los calzoncillos?.-Preguntó volteándose y enseñándole el trasero.
-Mhm.-Se inclino un poco para observar mejor.-No se ve nada desde aquí, pero por si acaso camina y te digo.
El chico ató rápidamente la bicicleta con su cadena a el poste de luz de la entrada del colegio y comenzó a caminar hacia la entrada. (Tn) se quedo unos metros atrás viéndole el trasero.
-No.-Dijo alcanzándole de tres largas zancadas.-No se nota.
-Genial.-Suspiro aliviado.-Gracias.
-No es nada, corazón.
Ya en la entrada, Heat abrió la puerta dejando pasar primero a (Tn), se presentaron con el profesor de sociales en la entrada y dieron el presente, a continuación recibieron dos vasos descartables y fueron directo al gimnasio.
-Espera.-Dijo (Tn) antes de que el peliazul abriese la puerta.
-¿que pasa?.
-Tengo algo de nervios, ¿Sabes?.-Confesó mirándole a los ojos.
Él vio por primera vez ese algo en ellos que no supo como interpretar, hasta ahora solo conocía los ojos felices y los ojos cansados, estos estaban opacos, inquietos, generaban en el una sensación de preocupación que era inminente con cada vuelta que (Tn) le daba con el dedo a uno de sus mechones de cabello.
-¿Por que estas nerviosa?.-Se atrevió a preguntar.-Si te arrepentiste de venir...
-No me arrepiento de estar aquí para ti esta noche, Heat.-lo interrumpió, le dio una caricia en la mejilla.-Solo que ahí adentro esta el amor de mi vida con otra chica.-Su garganta se fue enredando.-Y no se que tanto resistiré hasta que se me corra la mascara para pestañas.
-¿Que es mascara de pestañas?.-Preguntó, ¿Por que usaría una mascara en las pestañas?, se veía realmente confundido.
-Maquillaje para las pestañas.
-Oh.-Comprendió lo que era el rimel.-Oh.-Mencionó alarmado luego de entender a que se refería con que se le correría el maquillaje.-Hey en ese caso.-Le tomó de la mano y la arrastro hacia el patio.-No entremos, es una lastima que se te ensucie el rostro, ¿y si vamos a los columpios?, no ha de haber nadie allí ahora, las tendríamos solo para nosotros.
-Pero Heat, el baile...
-Yo no necesito entrar ahí, seria aburrido sin mi mejor amiga.
-¿Mejor amiga?.
-Así es, eres mi mejor amiga, ¿No sabias?.
(Tn) no se había planteado hasta ese momento que tipo de relación mantenía con Heat. Lo había conocido el mismo año que se hizo amiga de Kid, desde el primer día que lo vio llegar al colegio nunca se le cruzo por la cabeza la idea de que el niño nuevo del grado terminase siendo su amigo, es mas, no siquiera se dio cuenta de en que momento paso, no se percato de en que momento el peliazul paso a ser su amigo.
"¿Quieres ser mi amigo?" eso nunca se lo habían preguntado, nunca habían hablado tampoco al respecto sobre su relación, simplemente aceptaron desde un principio que debían hablarse por estar en el mismo grupo de amigos y con el tiempo fueron conociéndose mas y forjando una amistad sin darse cuenta.
Al menos (Tn) no se había dado cuenta.
-No lo sabía, es bueno saberlo.-Le respondió con una genuina sonrisa.-Pero no hace falta que te quedes aquí afuera por mi, en cuanto se me pase entrare.
-Bien entonces.-Se sentó en un columpio.-Cuando se te pase, entramos.-Tomó la cadena de la hamaca contigua y la movió haciendo que (Tn) la tomase.-Mientras tanto pasemos el tiempo aquí.-Una sonrisa de lo mas tierna se dibujo en el rostro del peliazul.-Hablemos de algo, ¿Como es eso de que no sabias que eras mi mejor amiga?.-Incentivo a iniciar una charla amigable.
Ella sonrió y tomó asiento en la hamaca.
Tuvo un amigo verdadero y un apoyo incondicional todo este tiempo a su lado y nunca se había dado cuenta de ello.
El futuro es algo de lo que nada se puede esperar, todo lo que conocemos puede cambiar, nosotros estamos en constante cambio, todo a nuestro al rededor puede verse modificado.
O marchito.
Y como vivir es una incertidumbre constante ni Heat esperaba profundizar tanto su relación con (Tn), ni (Tn) pensaba que pudiera llegar a conectar con alguien de la misma manera en que lo hacia con Kid, ni Kid creía posible que alguna vez pudiera ser reemplazado.
El peliazul terminaría por ganarse ese puesto de mejor amigo de la chica con el paso del tiempo, y es algo que nadie se lo esperaba.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top