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—Sabes, cuando dije que le dieras con la enciclopedia yo... no lo decía enserio y mucho menos esperaba que tú lo hicieras.

—¡tú me dijiste que lo hiciera Chaewon!.

—¡No era enserio!

—¡¿qué esperabas que hiciera?! ¡esa estaba encima de mi soosito!.

Las tres omegas se encontraban junto a la alfa azabache fuera de la enfermería, esperaban pacientemente que la chica que fue literalmente golpeada con una enciclopedia saliera y les dijese que no las denunciaría por tal acto.

—Sooyoung seguro me va a dar un sermón por mi actitud.—hace un puchero, a su lado la pelirosa mantenía sus brazos cruzados y una expresión de "enojo" que a Hyejoo le daba hasta gracia.

—Vamos Jungeun unnie, admite que tu novia es una alfa ciega y boba que no se da cuenta de nada a menos que se lo expliquemos con manzanitas.—le bromea la azabache pero eso sólo provoca que la mayor—aunque no parezca que jungeun sea la mayor entre ellas—incremente más su expresión de enojo.

—Oh vamos unnie, Jinsoul no te está echando de lado.—chaewon le intenta sonreír a la pelirosa para calmarla.—sólo está siendo... un poco, demasiado diría yo, amable con esas omegas odiosas que me caen fatal,—hace una mueca de fastidio, corrigiendo su expresión a una sonriente de nuevo.—pero sí, sólo está siendo amable.

—Amable mi trasero, yo digo que a tu noviecita le hace falta un tornillo.—Hyejoo señaló a la pelirosa que intentó morder su dedo como acto de, aún, enojo.—¡no unnie! ¡no muerdas!.

—¡no insultes a Soulie!

—¡Y tú no muerdas!

—¡Ya basta!.—la voz de Sooyoung se escuchó notablemente firme, Jiwoo bajó su cabeza intimidada como primera reacción pero luego infló sus mejillas y frunció sus cejas.

—¡Tú! ¡traicionera!.—la señala, a punto de saltarle encina pero Hyejoo lo impidió sosteniéndola de la cintura.

—¿De qué estás hablando? no he hecho nada, amor.—se veía notablemente confundida, miró a Jungeun buscando explicación alguna pero no la encontró puesto que la pelirosa estaba peor de molesta que su novia, entonces, volteó a ver a Park.—¿me ayudas?.

—No debería pero bien.—suspira, cruzando sus brazos.—Jungeun y Jiwoo están enojadas porque Jinsoul y tú están pasando mucho tiempo con Dana y su grupito.

—Dani, se llama Dani en realidad.

—¡Ves! ¡ni siquiera lo niegas!.—la señaló de nuevo su novia, bufando.—esas chicas no están haciendo nada más que...

—Siendo amables, no están haciendo nada malo y me parece algo tonto que estén molestas por un motivo así, Jungeun, a Jinsoul no le gustaría saber que estás celosa y Jiwoo, honestamente a mi tampoco, ¿desconfían de nosotras?.—frunce su ceño, cruzando sus brazos mientras su novia agranda sus ojos indignada por la pregunta.

—¿Disculpa? Sooyoung, sabes que no es así.—lo negó rápidamente, jugando con sus dedos.—es sólo que, ponte a pensar. Si ustedes estuvieran en nuestro lugar sentirían lo mismo, pero como no lo están, pensarán cualquier cosa menos lo inseguras que nos hace sentir todo esto, Chaewon nos dijo las intenciones que tienen ellas y...—hace un mohín pequeño.—ya, déjalas y vayamos juntitas por un helado ¿si?.—casi suplica, no le gustaba estar peleada con Sooyoung.

—¿Es enserio Jiwoo?.—pregunta con ironía y negando con su cabeza se da la vuelta.—avísame cuando podamos hablar y no inventes ni juzguez a los demás.

—¡Pero Sooyoung! todo lo que dice Jiwoo es cierto.—Jungeun intervino, la más alta esboza una sonrisa ligera.—¿Qué te parece gracioso?

—Por su puesto que vas a estar de su lado si eres su mejor amiga, contra ustedes nadie puede, ¿saben qué? Jinsoul tenía razón, están siendo algo dramáticas e injustas.

La pelirosa sintió una sensación distinta a cualquier otra en ese momento, sintió enojo pero también tristeza, como si se hubiera decepcionado, miró a Sooyoung manteniendo con esfuerzo su expresión molesta y simplemente se giró sobre sus talones corriendo lejos, Jiwoo le dirigió una mirada molesta a su novia para después seguirla.

—Pensé que eras más genial y comprensiva, que lástima de verdad que ninguna de las dos quiera creerles.—Chaewon cruzó sus brazos sonriéndole con aires de falsedad.—escúchame Sooyoung, tú crees que es una tontería que se sientan inseguras con todo esto pero oye, quiero ver tu cara cuando otro alfa esté encima de Jiwoo y tú no resistas el molestarte, porque te voy a restregar un "te lo dije." —la señala con sus ojos entrecerrados.—sé lo que buscan esas cinco omegas, te lo dice alguien que sufrió por ellas.

—Sí, amiga, nada cool.—hyejoo se encoge de hombros desinteresada en seguir con esta charla.—vámonos wonnie, las chicas deben de sentirse fatal y por lo que veo, nadie estará para ellas.—rodea los hombros de su novia y juntas se van, dejando a la alfa sola procesando todo lo sucedido.

Suelta un suspiro sonriendo irónica, no podía estar hablando enserio.

. . .

O sí.

—¿entonces? ¿tú y Jiwoo terminarán su relación ahora? digo, discutieron feo.—Dani, aquella omega un poco más alta que Jiwoo, delgada, castaña y nada tímida a comparación de su novia, enredó sus brazos al suyo mientras estaban sentadas afuera del salón de música.

—¿Qué? espera, Dani, ¿cómo sabes que nosotras tuvimos una discusión?.—le preguntó, la menor primero hace un gesto lleno de sorpresa por caer en cuenta de lo tonta que fue al revelar algo así, sin embargo sonríe y deja caer su cabeza en su hombro.

—Perdona Sooyoungie, iba de pasada y yo las oí.—ríe levemente, pero a Sooyoung no le ha parecido nada gracioso.—ay, que feo de verdad que tu noviecita desconfíe así de ti, si yo, digamos que, si yo fuese tu novia,—hace énfasis.—no podría jamás desconfiar de ti, sé que eres una alfa digna y fiel.—acercó más su cabeza a su hombro, la mayor pestañeó pensando en lo que Chaewon le había mencionado.

—Sí pero, no es nada, nosotras lo resolveremos.—intenta no seguir hablando del tema y al mismo tiempo alejarla.—¿podrías ponerte de otra forma? me incomoda que estés así.—murmura con algo de pena, pero tras ver que la chica no parece triste por su petición se extraña, agrandando sus ojos cuando la menor se sienta casi sobre ella enredando sus brazos en su cuello.

—¿Y así qué te parece? ¿más cómoda?.—su voz había dejado de sonar fastidiosamente dulce para sonar algo más coqueto, Sooyoung no encontró mejor forma que empujarla fuera de sus piernas.

—¡Perdón! yo...—se disculpó cuando escuchó la queja de la menor ya que usó mucha fuerza y la tumbó al suelo, pero luego negó con la cabeza.—No, ¡Jiwoo tenía razón! intentabas seducirme, tengo novia y querías meterme en la cabeza cosas que no son.—la señala, pensando inmediatamente en los ojitos tristes que su novia le dio mucho antes de mostrarse enojada.—soy una estúpida.

—¡Por su puesto que lo eres!.—exclamó la Omega levantándose por si sola.—eres una estúpida, ¿qué no ves que yo te puedo dar todo mejor de lo que ella te lo da? pierdes la oportunidad de estar con alguien como yo ¿de verdad quieres dejar pasar esta oportunidad?.

—Que horrible, ¿todo este tiempo estuviste planeando hacerme terminar con Jiwoo?

—Soy mejor que ella, si me dieras la oportunidad de da-

—Se acabó tu juego Dani, y el de tus amigas, son unas manipuladoras.—en ese momento le llega a la cabeza Jinsoul, que estaba a solas con Sohee ayudándola a practicar el piano pero hace un rato que ya no oía alguna melodía así que se alarmó y corrió hacia la sala de música.

En el camino encontró a Jungeun yendo hacia la misma dirección que ella y se alarmó incluso aún más, no puede ser, iba a arder troya.

—¡No!.—gritó, la pelirosa la observa con una ceja arqueada.—d-digo, es que.. nada, olvídalo, ¿qué vienes hacer aquí Jungie?.—pregunta rápidamente, interponiéndose entre la puerta cerrada y prohibiéndole la entrada a la más baja por el bien de ambas.

—Vengo a buscar a Soulie, no me gusta estar molesta con ella y quisiera disculparme por mi boba actitud...—hace un puchero.— la extraño mucho Sooyoung, me ha echado a un lado por ellas pero si eso la hace feliz, el ayudarlas, yo lo aceptaré pero necesito aclarárselo.

Ayuda. Sooyoung se sintió fatal cuando la escuchó, pensó incluso en Jiwoo en el mismo estado y quiso pegarse la frente contra la pared por ser tan idiota y desconfiar ella misma de dos almas tan lindas como las son Jungeun y Jiwoo.

—Sí, claro, entiendo Jungie pero Jinsoul no puede verte ahora.—explica, intentando mirar adentro, viendo a la perfección como Jinsoul parecía estar incómoda con la cercanía de Sohee.

—¿Porqué no? la extraño mucho, sus besitos, sus abrazos, cuando me hace reír con sus tonterías y simplemente... Soo, la extraño muchísimo, déjame verla.—su puchero se intensifica y la mayor piensa un "no puede ser, deja de hacer eso" porque era un arma toda mortal y estaba por ceder ante sus encantos.

—Es que... Jinsoul está... ocupada, muy ocupada. Ella me dijo que te dijera que no entres, necesita la mayor concentración para enseñarles de una buena vez todo para que tengan el resto de la tarde juntas.—inventa de nuevo, sintiéndose una mala persona, bueno, peor de lo que ya se sentía.

—Sí, está muy ocupada seguramente besándose con Sohee, mejor vete por donde viniste y deja a mi mejor amiga ser feliz con quién le gusta.—la aparición de Dani arruinó todo lo que Sooyoung a duras penas había construido, la expresión de la pelirosa la hizo sentir que ya era suficiente, se puso al frente de Jungeun para defenderla.

—Ya está bueno Dani, no obtuviste lo que quisiste y eso no te da derecho a meterte con mi amiga ¿bien? Tú y tus amigas son las que deben de irse por donde vinieron porque lo único que lograron fue ocasionar caos y entiende de una buena vez, que mi relación con Jiwoo no va a terminar por capricho tuyo, la amo y es mi omega, si discutimos fue por tu culpa y no nuestra.—habló de una buena vez por todas, la omega frente a ella cruzó los brazos y soltó un chillido completamente rabiosa por no haber ganado esta vez, acercándose y tomando el brazo de Jungeun con fuerza.

—Tal vez yo no tengo lo que quiero pero Sohee sí, si ella gana yo también he ganado.—la arrastró cerca de la puerta y la abrió mostrando lo que sucedía dentro del salón de música.—ahí lo tienes.—hace un ademán con su cabeza y la pelirosa observa adentro, Sooyoung también se asoma lista para golpear a Jinsoul.

—¡Jung Jinsoul como te atreves a hacerle esto a Jungeun!.—entró dispuesta a reprenderla pero se silencia en cuanto ve a Jinsoul de pie lejos de la omega que mantenía una expresión indignada.

—Dijo que no le gustaba mi olor.—murmuró la chica con mechones rubios en su cabello oscuro, alzando su mirada.—¡es imposible que no le guste!

—No me gusta tu aroma y estabas muy pegada a mi, me tuve que apartar, no me gusta oler a otros aromas que no sea el de mi bebé de vainillita.—la rubia murmura justificándose, Jungeun sonríe y de inmediato corre adentro.

—¡Jinsouuul!.—se acerca a ella y le salta encima hasta abrazarla con mucha fuerza, estaba feliz de no haberla encontrado muy cerca de la otra Omega, eso la hubiera devastado.—lo siento por desconfiar de ti, soy una tonta por favor, perdóname Soulie.—jaló del hoodie que su novia llevaba tan cuál como un niñito queriendo llamar la atención de un adulto, haciendo un puchero.

Jinsoul sonrió, acercándose a su rostro una vez que se inclina, besando su adorable puchero ante las demás miradas, aunque dos pares de ojos la estuvieran juzgando y no había necesidad de recordar quiénes, era más que obvio.

Para cuando se apartó de la más baja quedó fascinada con la sonrisa que su novia mantenía, ambas abrazándose con mucha fuerza.

—Jungie, sé que soy una chica algo muy torpe, aveces siento que tengo dos pies izquierdos, no siempre tengo la mejor suerte, sabes la cantidad de cosas que me pasan pero déjame decirte algo importante, mi amor.—con sus manos colocadas en los costados de cada mejilla rozó sus narices con ternura.—jamás estuve tan segura en mi vida de querer tanto a alguien como te quiero a ti, por lo que, suena imposible pero no soy una idiota, cualquiera hubiera cedido pero yo..—niega con su cabeza, acariciando los pómulos de Jungie con sus pulgares delicadamente.—tengo a chica más hermosa como mi pareja y sería, la idiota más idiota del mundo si meto la pata y te alejo de mí.

—¡Woohoo! ¡Esa es mi amiga!.—Sooyoung interrumpe todo el momento silbando y aplaudiendo evidentemente feliz, la pelirosa quien le dirige una mirada molesta y eso la hace detener sus acciones lentamente.—uy perdón, sigan en lo suyo, yo me llevaré a estas dos lejos.

—¡Nosotras nos podemos ir solas!.—exclama enseguida Soohe toda frustrada, sooyoung las ignora y tomando con poca fuerza a las dos de sus hombros las lleva afuera de la sala de ensayo de música dejando a solas la dulce pareja que no dejaban de dedicarse sonrisas y tomar sus manos.

En cuanto las dejan completamente a las dos solas Jungeun se sonroja un poco, avanzando hasta volver a abrazarla pero ésta vez apoya su cabeza en su pecho.

—Jinsoul, de todos modos quiero preguntarte algo.—hace un pequeño mohín que la mayor pudo notar al mirar un poco hacía abajo.—¿Crees que soy una chica muy dramática? ¿y eso es fastidioso para ti?.

—¿De dónde oíste eso?.—preguntó rápidamente con sus ojos bien abiertos, aún así relajó su semblante y sostuvo una de sus manos suavemente.—tengo una idea, ¿te gustaría ir por un rico helado? hablaremos en un lugar mejor.—murmura con temor en que niegue hablar con ella, sintiéndose más aliviada una vez que la menor asiente.

—Está bien Soulie.—sonríe ligeramente, entrelazando su mano con la suya.—sabes que confío en ti.—se coloca de puntitas y se acerca a besar su mejilla ocasionando que la más alta sonría bobamente por lo hermosa y dulce que suele ser su novia aveces.—vamos, que quiero comer helado ya.—hace un mohín apresurando a la mayor.

Esa tarde, además de comer un rico helado juntas y reírse de la desgracia de Jinsoul—se le cayó el helado y Jungeun se estuvo riendo tanto que al final Jinsoul se unió a ella—ambas aprendieron algo muy importante, y es que debían confiar cien por ciento en la otra para que su relación mejore, compartieron sus inquietudes, o más bien la pelirosa lo hizo y mientras que la rubia le prometió que algo así no pasaría de nuevo, sellando su promesa con un delicado y dulce besito.

Cuando Jinsoul llevó de regreso a casa a su novia, ésta estaba suman feliz después de la agradable tarde juntas. Jungeun caminó ansiosa hasta la puerta de su casa, volteando para extender sus brazos pidiendo su mochila que Jinsoul traía por ella.

—Gracias por traerla por mí Soulie.—agradece con voz suavemente cariñosa, la rubia le entrega su mochila y seguidamente se inclina para dejar un beso en sus labios.

—Eres mi novia, mi bebé de vainillita y sé que te gusta que lleve tus cosas, no me importa llevarlas, si es por ti haría lo que sea con tal de verte feliz, sonreír tan bonito como lo estás haciendo justo ahora.—rozó sus narices oyendo la risita de la menor, quien luego hizo un puchero.

—Te quiero tanto, no sé cómo dudé de ti cuando nos conocimos, eres increíble Soulie.—se aferra a su cuerpo en un abrazo fuerte, acurrucándose en su pecho.—realmente me gustas mucho, cada día me enamoro más de ti y tus acciones, eres adorablemente torpe pero me gusta, algunas veces me haces enojar pero sabes cómo hacerme sentir suavecita de nuevo, eres todo lo que necesito.

—Me vas a hacer llorar Jungie, shh.—sostuvo sus mejillas cuando observa la expresión de su novia por haberla interrumpido y arruinado el momento, por lo que ríe y se encoge de hombros.—perdón, sabes quién soy.

asiente, relajando su anterior semblante serio.—sí, eres mi novia, mía, mi Seoulie bobita.—se apega más a ella, restregándose para dejarle olorosa a ella, cosa que Jinsoul amaba, verla frotarse como un gatito buscando cariño a ella es sumamente, una hermosa imagen.

—Y tú eres mía también... Vaya, decir eso se sintió muy bien.—ríe para luego besar su cabeza, baja hacia su frente depositando otro beso y en cuanto baja más encuentra a Jungeun estirando sus labios a propósito para recibir el beso, sonríe y ríe al mismo tiempo, acercándose para juntar sus labios por unos largos segundos en los que la pelirosa envuelve su cuello y ella la estrecha cintura de su omega.

Cuando se separan, Jinsoul se mantiene un poco inclinada hacia abajo para que sus frentes estuvieran unidas, y sintiendo sus corazones muy acelerados entrelazaron sus manos, observándose tímidamente una a la otra, pero con mucho amor.

Su relación, ahora estaba mejor que nunca.
Una cariñosa y torpe alfa junto a una sensible y gruñona omega, una mezcla sencillamente hermosa.