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La omega pelirosa miró con ojitos curiosos y llenos de sorpresa el cuello de una de sus compañeras omega que mostraba felizmente que su alfa la había marcado.

—¡Cuéntanos Yuri-ah! ¿cómo se sintió?—Chaewon preguntó emocionada, apoyando sus codos sobre la mesa espectante de la historia que contaría la castañita.

—¿Y te dolió? ¿mucho? ¿lloraste? ¡dime!—Jiwoo también atacó con preguntas a la chica con apariencia a un hamster, quien agrandó sus ojitos cafés nerviosa por tantas preguntas.

—¡Ya, ya! dejen respirar un poco a Yuri unnie, no sean chismosas.—Hyejoo regañó a las omegas, mientras que la pelirosa seguía admirando la marca en su cuello.

—¿Cuánto llevan juntas Yena unnie y tú?—fue su pregunta, finalmente apartando su mirada del cuello de la Omega con aroma a fresitas.

—Hmm.—lo piensa por unos segundos.—un año y tres meses, Yena estuvo esperando por mi desición para hacerlo, ahora estamos completamente conectadas.—sonrió tímida gracias a las risitas tiernas de sus compañeras igual de ansiosas que ella.

—Con Hyejoo llevamos nueve meses.—menciona orgullosamente la Omega, la azabache sonríe inevitable después de oír cómo su pareja lo decía con tanta felicidad.

—¡Sooyoungie y yo casi un año! tenemos un mes y medio antes de ustedes, eso creo.—se encoge de hombros pensativa, pero sonríe ampliamente sólo como ella puede hacerlo.—Jungeunie, ¿cuántos meses llevan juntas Jinsoul unnie y tú?.

Tras la pregunta la pelirosa se sonroja y no comprende el motivo, aún así juega con el lápiz levemente mientras hace un pequeño puchero.

—siete meses.—menciona en voz baja, Hyejoo frunce su ceño y con su codo golpea suavemente el brazo de su unnie.

—¿Porqué te pone triste eso? estás con tu alma gemela desde hace siete meses, ¿porqué no sonríes?—gruñe levemente pero no en forma de "alfa" que les daría miedo a todas las omegas presentes.

—Unnie, no importa que Jinsoul unnie y tú no tengan tanto tiempo juntas como Yena unnie y yo, es muy notable que la amas y que ella te ama a ti, incluso yo misma he llegado a pensar que tenían más tiempo de lo que mencionaste porque combinan tan bien que pareciera que llevan años juntas.—le sonrió a la mayor, quien asintió devolviendo el gesto hasta que la hora de la salida se hizo finalmente, la Omega agarró sus cosas emocionada por ver a su pareja.—¡me voy! adiós.

—Yo también me iré, Sooyoungie y yo tenemos una agenda apretada ésta tarde.—Jiwoo se levanta y con su mochila colocada entre ambos hombros despidió a sus amigas con un gesto de manos y una sonrisa para irse, Hyejoo instantáneamente parece recordar algo y toma la mano de Chaewon.

—¡no se me olvida que me prometiste un helado!—hace un mohín entre triste a protesta, la mayor estaba también por protestar en respuesta pero su semblante se relajó y luego soltó una risita.

—Es cierto, pero no tienes que ponerte como Jungeun unnie cuando no tiene lo que quiere.—cruzó sus brazos, inmediatamente la pelirosa hace mala cara al oír la comparación, inflamando sus mejillas.

—Pero yo no...—niega levemente, sonrojándose al recordar todas las veces que ha hecho increíbles berrinches hasta que Jinsoul, sus amigas, o incluso sus madres terminan por complacerla, cosas mínimas como cenar pizza o cariñitos en el cabello antes de dormir.

—¿Tú no? lo dice la omega más consentida por su alfa que conozco.—sonríe Hyejoo ésta vez, mirando como Jungeun estaba por reprochar pero sin embargo la vió cambiar sus ojos casi por encender llamas a convertirse en ojitos dulces, felices y brillosos.

Eso sólo significaba una cosa; bueno posibilidades, habían dos.

Una era que su Jinsoul apareciera y la otra su cachorrito.

—¡Soulie!.—saltó fuera de su silla y corrió a los brazos de su alfa en la entrada que sonrió torpemente por haber sido atacada por su blandita novia necesitada de afecto.—te extrañé.—hace pucheros, frotando su rostro en el pecho y cuello de la mayor impregnándose del aroma.

Para Jinsoul era un sueño, su novia últimamente era una masita andante que se enojaba fácilmente pero se ablanda con besitos o palabras bonitas, demasiado afectuosa y si no le devolvía los cariñitos lloraría.

Jungeun había estado dejando que poco a poco Jinsoul conociera todo de ella, sabiendo que suele tapar su dulzura siendo "amargada" con el mundo entero, pero la realidad es que su bebé es la persona más preciosa con sentimientos muy bonitos.

—Responde Soulie, ¿no me extrañaste?.—se apartó un poco con los ojos mostrando la próxima inseguridad así que rápidamente la mayor se encargó de acercarla nuevamente, rodear su cuerpo con sus manos y llenar de besitos dulces el rostro de la menor oyendo sus risitas.

—Por supuesto que te extrañé mi pastelito, ¿qué clase de pregunta es esa?.—arqueó una ceja, frunciendo un poco su ceño para verla así mientras la menor evitaba su mirada.—bueno, veo que no quieres decirme así que tendré que sacarte la información... ¡con cosquillas!.—exclamó sonriente atacando con sus dedos las costillas y cuerpo de su novia que en segundos se retorció divertida, era demasiado sensible a las cosquillas a comparación de Jinsoul que básicamente no tenía.

—¡Jinsouuul! ¡basta, estamos e-en un salón!.—exclamó entre risas, la mayor no se detuvo hasta que las carcajadas de Jungeun eran altas y entrecortadas, de fondo podía oír a Hyejoo y Chaewon reírse de ellas, fue suficiente así que se detuvo, atrapando a su agotada novia en brazos después de una intensa sesión de cosquillas, respirando agitada.—e-eres mal-malvada...

Jinsoul solamente rió, besando entre los rositas cabellos de su pareja en su cabeza con amor, meciendo sus cuerpos de un lado al otro mientras se abrazan.

—Yuri nos mostró su marca, Yena unnie la marcó.—le cuenta apoyando su mentón en el pecho de su pareja e inmediatamente la alfa suelta un ruidito lleno de sorpresa.

—Ese pato ingrato no me dijo nada.—bufó haciendo un gesto en donde arrugaba su nariz un poco haciendo sonreír a la menor —bueno, estaban listas para hacerlo, igualmente tenían bastante tiempo juntas, que felicidad por ellas.

La pelirosa asintió lentamente mientras se quedaba observando a su novia por unos segundos, inclinando su cabeza a un lado soltando una de sus preguntas bombas inocentes que a Jinsoul le provocan cortocircuito.

—¿Cuándo estaremos listas nosotras para hacerlo?

Sí, a esas preguntas me refería.

Todas las Jinsoul's dentro de esa cabecita con cabellera rubia se alarman, unas corren, otras se tropiezan y una se queda llorando. Evidentemente, Jinsoul lo tiene aveces complicado.

—Jungie.—rió un poco, buscando con sus manos las de su novia cuidadosamente para entrelazarlas.—Sí, bueno... aún no estamos listas, y-y... pasará un tiempo para que lo estemos, ¿si?—cerró sus ojos en espera de la explosión de su novia enojona, al pasar unos segundos y no oír una rabieta ni sentir que ella se alejaba, abrió un ojo con cuidado, mirando el sonrojo que adorna las mejillas de su Omega.

—Uhm... cuando Soulie esté lista yo también lo estaré.—menciona, apretando las manos de su mayor entre sus pequeñas manos, sonriendo con timidez.—sé que ahora estamos aún jóvenes para eso, pero mamá Hyunjin de hecho ha dicho que no hay edad exacta para hacerlo, el único requisito importante es que en ambas partes se quiera avanzar y dar ese paso, si tú no estás lista yo tampoco y si lo estás, yo lo estaré, pero quiero que sepas que no estoy apresurada por hacerlo, sólo me emociona el hecho de que me marques...—confiesa un poco tímida.—desde el primer instante, incluso si fui egoísta y exigente, desde ese momento te pertenezco y tú a mi, eres mi alfa a pesar y por sobre cualquier cosa sin importar que no tengas músculos y una fuerza brutal, en lugar de eso me mantienes feliz y amada siempre, eso es muchísimo mejor de lo que pedía, tu llegada me impresionó pero ahora no puedo imaginarme un sólo día sin ti.

Jinsoul sonrió con sus cejas fruncidas por lo hermoso que se había oído lo que su novia decía, mirándola con tanto cariño que la otra pareja pudo sentir las feromonas de emoción que Jungeun soltaba ante el amor que sentía tan sólo con ver los ojos de su alfa.

—Iugh, apesta a vainilla aquí.—Hyejoo reclamó tapando su nariz, a su lado Chaewon le propinó un golpe en el hombro mientras fruncía su ceño.—¿qué?.—habló con voz aguda, lo que provocaba que tapase su nariz.

—Silencio, y no arruines el momento en que... ¿Estás llorando, Jinsoul unnie?—preguntó ahora sin susurrar, Hyejoo volteó a ver e inmediatamente empezó a reírse de la rubia, mientras que Jungeun entraba en pánico al ver que efectivamente su alfa lloraba.

—¿Jinnie? ¿q-qué hice mal?... lo que sea que haya hecho p-por favor perdóname.—la pelirosa estaba tan preocupada de haber dicho algo que no le gustó a su pareja como para haberla hecho llorar, hizo un mohín con sus ojitos a nada de llenarse de lágrimas también.

—No hiciste nada malo, es que, me hiciste sentir tan feliz que lloré por eso.—ríe un poco avergonzada, el hecho de ponerse a llorar así era algo nuy vergonzoso más siendo una alfa, pero a la mierda eso, tiene sentimientos y al final, no es la misma alfa que todos son.—Me alegra tanto que comiences a expresarte mejor amor, y todo lo que has dicho... realmente me llena de emoción oír lo mucho que me quieres porque yo a ti te adoro tanto también.—acerca a la menor desde sus mejillas, besando cortamente sus labios.—soy una gran idiota y torpe alfa con una suerte increíble, porque mi omega es la más bonita y dulce de todas.

Ambas se sonrieron mientras se dedicaban a mirar profundamente a la otra con todo el amor del mundo, porque así se sentían.

—Dios, si me sigues mirando con esos ojitos voy a comerte a besos Jungeun.—Jinsoul desvío sus ojos de los hermosos ojitos de su pareja, la misma se emocionó demasiado con la idea de que su alfa la coma a besos, después del primer beso Jungeun se había acostumbrado a la muestra de afecto tanto que aveces tenían largas sesiones de besitos a petición de la menor.

—Pero yo quiero que me beses, quiero besitos.—soltó con voz ligeramente aguda, en un estilo de aegyo por conseguir lo que necesitaba en ese momento.—¡beso, beso, beso!—dio saltitos sobre sus talones pidiendo sus besos, mientras la mayor ríe y rápidamente toma la mano de su pareja tirando de ésta para que la siga.

—¡Nos vamos chicas, adiós!—Jinsoul gritó mientras salían, Jungeun se despidió de ambas agitando su mano torpemente cuándo su novia tiraba de su mano para llevarla afuera.

—Uhmm.—Hyejoo observa a la pareja irse sacando una única conclusión.—van a coger.

—¡Dios! ¿porqué tienes que ser así?—rodó sus ojos recogiendo sus cosas para meterlas en su mochila dispuesta a irse.—no todo en ésta vida es eso Hye, Jungie y Jinsoul son extra cariñosas, sólo van a darse mucho afecto a solas.

La mayor invita a su novia a irse igualmente cuando extiende su mano a su dirección, la menor sostiene su mano con una sonrisa traviesa.

—¿A dónde me vas a llevar? ¿por el helado o tú también quieres coger?

—¡T-Tú!... Ugh, cierra la boca Hyejoo.

La susodicha suelta una risa levemente, tomando el control avanza y ahora es ella quien lleva a la menor a su dirección.

—Primero vamos por el helado y luego a coger, listo, que buen cronograma.

La omega ya sonrojada pero molesta bufa, apretando la mano que sostiene la mayor.

—Te voy a coger del cuello y te voy a ahorcar si sigues de bromista.

—No sabía que tenías esos fetiches.—siguiendo con su broma se hace la sorprendida, encogiéndose de hombros después.—está bien, puedo con eso, te amo así con todos tus fetiches igualmente.

—¡Hyejoo!