4. Soleada primavera
ChanYeol había jalado consigo uno de los pupitres más cercanos al asiento que KyungSoo ocupaba. Habían pasado fácilmente veinte minutos desde que la campana del final de las clases se escuchara.
Los alumnos regulares se habían ido a sus casas, los chicos pertenecientes a algún tipo de club permanecían dentro de las instalaciones. KyungSoo se dedicaba a organizar las tareas a entregar para la siguiente semana.
El joven Park disfrutaba de ver como el más bajito ordenaba sus documentos, totalmente concentrado, acomodando los anteojos sobre el puente de su nariz de cuando en cuando. Se mantenían en completo silencio, no hacía falta llenar el espacio con sonido, el simple hecho de poder admirar a KyungSoo lo hacía bastante feliz. ChanYeol estaba recargado sobre la mesa del pupitre, con la cabeza acomodada entre sus brazos cruzados, observando con detenimiento cada una de las acciones del menor.
KyungSoo por su parte había terminado de apuntar en su agenda todo el itinerario a realizar antes de salir de vacaciones.
Los árboles habían florecido a principios de mes, la temperatura habían aumentado varios grados centígrados y el aire que se respiraba emanaba un embriagante dulzor. Se había quitado el suéter del uniforme y había aflojado la corbata de su cuello.
—¿Qué harás en vacaciones? — preguntó ChanYeol luego de darse cuenta que KyungSoo empezaba a guardar sus cosas dentro de la mochila.
—Tengo los cursos del pre universitario— comunicó KyungSoo con total naturalidad, sin prestar mucha atención a los gestos que su pareja a un lado le lanzaba.
—¿No irás al festival de primavera? — indagó a manera de parecer indiferente.
—No creo que vaya a estar en la ciudad— negó el de anteojos antes de poder dirigir su atención al más alto a su lado.
—Pensaba que podríamos ir juntos...— mencionó ChanYeol abultando ligeramente los labios, permaneciendo con la cabeza apoyada sobre sus brazos.
—Iré al pueblo natal de mi padre, siempre visitamos a los abuelos— explicó el de baja estatura —¿Tú que harás en vacaciones?
—No lo sé...— levantó uno de sus hombros —Tal vez vaya por ahí.
—¿Estudiarás para los exámenes de admisión?
—¿No me vas a extrañar? — interrumpió ChanYeol de repente —Te irás todas las vacaciones... seguro que querrás verme ¿No? — el más alto mostró una media sonrisa.
KyungSoo frunció el entrecejo ligeramente, permitiendo que sus mejillas se iluminaran de un rosado tinte digno de la estación del año —S-supongo...
El más alto dejó salir una risita, KyungSoo se mostraba todavía renuente a hablar abiertamente de sus sentimientos, parecía que la barrera que había construido a su alrededor iba ser difícil de desquebrajar, sin embargo, Park ChanYeol era un tipo perseverante.
ChanYeol se irguió, deslizando una de sus manos sobre el mentón de KyungSoo, atrayendo su rostro al propio para unir sus labios en un tierno beso. Sus belfos se acoplaron entre sí a los segundos. KyungSoo cerró los ojos y ladeó el rostro apenas un par de centímetros para hacer más cómoda la posición, permaneció quieto mientras su pareja se inmiscuía dentro de su boca a lengüetazos.
"Cielos..." la mente de ChanYeol viajaba cientos de años luz cuando era capaz de compartir un profundo beso con KyungSoo, era complicado hacerlo aceptar muestras de cariño más apasionadas, pero de un tiempo a la fecha, el más alto notaba que el menor correspondía las muestras con más facilidad. Incluso cooperaba en el acto.
Abriendo sus bocas mínimamente, sus lenguas pudieron acariciarse.
ChanYeol llevó otra de sus manos hasta el rostro del bajito y con sutileza y sumo cariño comenzó a acariciar la piel de su mejilla, profundizando aún más el beso compartido. Sus dedos se deslizaron hasta su quijada y los pulgares viajaron dejando gentiles tactos hasta su oreja, jugueteando con el lóbulo entre sus yemas.
"Es como si se derritiera en mis labios" pensó ChanYeol notando como el mismo KyungSoo presionaba sus labios contra los suyos. El intercalar de pieles era tan delicado, que ambos se perdían completamente en el tacto.
"No..." rectificó el más alto sosteniendo el rostro de KyungSoo entre sus manos, prolongando la muestra de afecto "...es más como si..." ChanYeol abrió ligeramente los ojos, para poder ver el rostro de su novio, sus mejillas sonrosadas, sus largas pestañas detrás de los cristales de sus lentes, lucía tan apuesto "...es más como si cuerpo se calentara...".
KyungSoo percibió la extraña sensación recorrer su cuerpo, así que haciendo caso a sus instintos, en medio del beso abrió los ojos, topándose con la mirada de ChanYeol. Se apresuró a empujar al más alto.
—¡Deja de verme! — se escandalizó el de baja estatura, interponiendo sus brazos estirados como una barrera para impedir que ChanYeol volviera a besarlo.
—Tú estabas viendo también— sonrió el mayor, acomodándose mejor en su asiento.
—¡Porqué tú me estabas viendo! — acusó el más joven.
ChanYeol soltó una sonora risa y antes de poder darse cuenta de las intenciones de KyungSoo un defensivo golpe amistoso por parte del menor lo hizo callar.
Ambos chicos tomaron sus cosas y dejaron el aula, caminando en compañía hasta el lugar más alejado donde pudieran separar sus caminos.
Los meses habían pasado, su relación estaba abiertamente establecida. ChanYeol se sentía contento de poder pensar en KyungSoo como su novio, a pesar de que raramente se mostraban como una pareja dentro de la institución, entendía que para el más joven todavía era un poco vergonzoso ser visto como un típico adolescente enamorado.
Más allá de sentir un profundo cariño y apego por KyungSoo, ChanYeol se sentía un poco frustrado.
"Es primavera..." pensaba mientras sus pies se arrastraban por el largo pasillo de la segunda planta del edificio escolar "¿No se supone que es la primavera cuando las hormonas se disparan en las parejas?" su rostro lucía completamente serio "¿Deberíamos dar el paso hacia la adultez los dos juntos? No es que no me interese... en realidad quiero hacerlo... Pero parece que a KyungSoo simplemente no le importa"
El más alto sentía la imperiosa necesidad correspondiente a su edad de dejar los besos y tiernas caricias detrás, percibía que su cuerpo le insistía por un contacto físico más íntimo y prolongado. No podía sacar de su mente lo suave que se sentía la piel de su espalda debajo de sus dedos. Tampoco podía dejar de pensar en aquel erótico quejido que KyungSoo le había regalado cuando tocó su torso desnudo.
Quería tocarlo, besarlo, olerlo... pero ChanYeol creía que era un tópico que a KyungSoo no le interesaba puesto que raramente iniciaba un simple beso. Así que la idea de establecer un contacto mayor que eso quedaba descartado.
"Me gustaría que fuera un poco más propositivo" ChanYeol llegó finalmente a la oficina de profesores, tenía dudas al respecto y conocía a una única persona capaz de responder sus cuestionamientos.
—¡Proooofesor Kim! — ChanYeol había abierto la puerta de la sala de maestros de par en par, buscando a aquel que clamaba como su enemigo.
—¿Qué haces aquí? Es hora del receso, déjanos descansar de ti— reclamó el profesor JongWoon en cuanto reconoció al estudiante de último año.
El más alto sonrió —Es solo que estaba pensando algunas cosas y me surgieron un montón de dudas.
—¡Regresa a tu salón de clases! — volvió a regañar el profesor Kim.
—Creí que usted podría ayudarme— seguía hablando el joven —Es que quería saber cómo es que dos hombros logran tener sexo.
—¡AHHHH! — gritó el profesor Kim, atrayendo la atención del resto de los profesores —¿Qué cosas estas diciendo Park? A ja ja — rio incómodamente, poniéndose de pie en un santiamén —Debe ser el calor que te hace decir está clase de estupideces, ven vamos, te llevaré a la enfermería.
ChanYeol no pudo evitar reír en voz baja mientras el profesor Kim lo sacaba de la sala de profesores.
Ambos caminaron en medio de una infantil discusión hasta la azotea de la institución, ahí donde había un amplio balcón donde los estudiantes más problemáticos solían reunirse, pero dada la cercanía de las vacaciones, ningún alumno se atrevía a pescar un reporte.
—¿Qué es lo que quieres? — preguntó el profesor Kim con molestia, mientras buscaba en el interior de su saco un cigarrillo que fumar.
—Lo que le pregunté recién— confirmó ChanYeol sacando una cajetilla de su bolsillo de pantalón, ofreciendo tabaco al profesor.
—Dame eso, no puedes traerlo a la escuela— el docente le arrebato la cajetilla de cigarros, sacando uno.
—Es la única persona con experiencia que conozco así que por eso pensé en preguntarle a usted— siguió charlando ChanYeol, yendo hasta el barandal del balcón para recargarse sobre sus antebrazos.
—Que tenga experiencia no significa que te lo voy a explicar con manzanas.
—Estuve documentándome en unos mangas que encontré en el cuarto de mi hermana pero lejos de ayudarme solo me hicieron tener más dudas— ChanYeol parecía ignorar todo lo que su profesor le reclamaba —¿En serio es así de fácil meterla?
—¡AH! ¡Deja de decirlo! — JongWoon encendió su cigarrillo y fue hasta donde ChanYeol se encontraba para evitar que nadie más que ellos dos escuchara la conversación —Entiendo que estás en esa tortuosa edad hormonal pero estás a punto de graduarte, deja de pensar en tus necesidades sexuales.
—Realmente quiero hacerlo— insistía ChanYeol —Dame algunos consejos, profesor ¿Debería ser gentil o exigente con KyungSoo?
El profesor Kim no pudo sino abrir los ojos con desmesura al escuchar que la formalidad había sido abandonada pero aún más al reconocer el nombre de otro de sus alumnos, se atraganto incluso con el tabaco dentro de su boca.
—Supongo que tendría que ser suave...— susurró el más alto —Después de todo... Definitivamente KyungSoo es virgen.
JongWoon puso los ojos en blanco, dando una bocanada de tabaco a su cigarrillo, guardó silencio un par de segundos antes de dar su punto de vista.
—Supongo que no dejarás el tema en paz— dijo el maestro Kim —Así que teniendo en cuenta que se trata de KyungSoo...
ChanYeol giró su mirada hasta el mayor, definitivamente sentía que entre su novio y aquel profesor pudo haber existido más que un simple amor platónico.
—Deberías ser noble con él.
El adolescente no despegó su mirada del docente quien continuó fumando sin preocupación.
—Sobre todo porque estamos en época de exámenes de admisión y KyungSoo necesita estar tranquilo si queremos que pase la prueba de la Universidad Nacional de Incheon.
—Uh...— suspiró ChanYeol, regresando la mirada hasta los alumnos que jugaban en la cancha de baloncesto —Si, supongo que si...
Ambos guardaron silencio una vez más.
—La Universidad Nacional de Incheon...— mencionó ChanYeol, experimentando una serie de sensaciones desconocidas —De Incheon...
El profesor Kim levantó una ceja, sin dejar de fumar giró el rostro para observar como la expresión de ChanYeol iba de la indiferente tranquilidad a la extenuante sorpresa.
—¡¿LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE INCHEON ESTÁ EN INCHEON?!
—N-naturalmente— respondió con miedo de haber hablado de más.
—¡¿KyungSoo va a ir a la Universidad Nacional de Incheon en Incheon?! — volvió a preguntar con un descoloco emocional.
—Uy...— se limitó a decir el de mayor edad al darse cuenta de que había soltado información importante por error.
—¡Gracias, profesor Kim! — ChanYeol hizo una reverencia y dejó la azotea en una emotiva carrera de velocidad.
—Debo medir mis palabras...— se dijo el profesor Kim viendo como ChanYeol había abandonado el sitio con rapidez.
ChanYeol había escuchado a KyungSoo varias veces, lo había escuchado enlistar sus opciones universitarias, conocía su elección predilecta, un pequeño campus dentro de la misma ciudad, pero era la primera vez que escuchaba a la Universidad Nacional de Incheon como opción.
Incheon estaba a kilómetros de distancia.
Aquel día, KyungSoo había abandonado la escuela por su cuenta, diciéndole a ChanYeol que debía llegar rápido a sus clases de pre universitario. El joven Park lo aceptó, diciendo que pasaría por él a la salida.
De esa manera, ChanYeol esperó durante toda la tarde a las afueras de la escuela donde su novio asistía a clases extra.
—ChanYeol— habló KyungSoo en cuanto reconoció a su novio sentado en la banqueta afuera de la escuela.
—Hola— saludó el más alto con sencillez. Se puso de pie y ambos caminaron juntos hasta una de las plazas públicas que solían tener cierto nivel de privacidad.
Justo aquel lugar con la fuente donde habían compartido su primer beso.
ChanYeol había comprado un par de gaseosas para los dos, se habían quedado en silencio todo el tiempo. A diferencia de los establecidos silencios, este se sentía incómodo y tenso.
Los chicos se sentaron sobre uno de los múltiples escalones alrededor de la fuente principal. La noche había caído y las luces de los postes ofrecían su servicio al par de sujetos que bebían de las botellas sin decirse nada.
KyungSoo presentía una mala noticia. Pero no mesuraba la importancia de lo que ChanYeol tenía que decir.
—Hoy hablé con el profesor Kim, el de música— contó ChanYeol balanceando la botella de gaseosa entre sus dedos.
KyungSoo abrió los ojos, ligeramente sorprendido.
—Incheon es un sitio lindo— mencionó el joven Park, conteniendo sus impulsos de soltar la bomba gritando.
El de baja estatura se mantuvo en silencio, sabiendo ya de que se trataría la plática.
—...— ChanYeol giró el rostro en dirección del más bajo, dedicándole una fría mirada —Y sigues sin decir algo...
KyungSoo enfrentó la expresión de su pareja con nerviosismo —Yo...
—¿Por qué no me lo dijiste? — preguntó por fin —¿Por qué no me dijiste que planeas irte a estudiar a cientos de kilómetros de distancia?
—Yo iba a decírtelo— respondió KyungSoo, apretando la botella de refresco entre sus manos —Sólo no encontraba el momento indicado para hacértelo saber.
—El momento indicado— sonrió ChanYeol con ironía. Se puso de pie y con la gaseosa tambaleándose entre sus dedos continuó hablando —Cuando tomaste esa decisión ¿Pensaste en nuestra relación? ¿O en el tiempo o la distancia que nos separará?
—¡Lo pensé! — afirmó KyungSoo —lo tuve siempre presente.
—Y aun así no me lo dijiste...— ChanYeol negó con la cabeza, decepcionado —Está bien... no, no está bien en lo absoluto. Lo que quiero decir, es que está bien que hayas tomado esa decisión, pero... ¿Por qué tuve que enterarme por un error del profesor Kim?
—En serio iba a decírtelo— continuó hablando el más bajo.
—No— dijo el contrario —No ibas a decírmelo hasta que fuera inminente ¿No es así? No querías decírmelo porque es una decisión que no cambiaras y sólo estabas postergándolo para no tener que pelear conmigo estos meses ¿No es así?
KyungSoo negó con la cabeza, sintiendo construirse un nudo dentro de su garganta.
—No ibas a decírmelo hasta que tuvieras que mudarte y tuvieras que irte...— dijo ChanYeol soltando un suspiro —Hasta que nuestra relación tuviera que terminar...
—¡No es así! — KyungSoo se puso de pie apresuradamente, conteniendo las lágrimas, levantó su palma para estrellarla contra la mejilla más próxima de ChanYeol y hablar con gran sentimiento —¡Yo en verdad iba a decírtelo!
—...Mh— ChanYeol se llevó una de las manos hasta la mejilla para calmar el emergente dolor sobre la piel.
—¡Tú tampoco me dices nada! — señaló el de baja estatura —Siempre intento preguntar por tus opciones después de la graduación y siempre me evades, no quieres decirme que harás, no quieres responder mis preguntas. ¡No sé nada de ti!
El más alto mordió su labio inferior, sopesando las palabras dichas por su pareja.
—Tienes razón...— confirmó ChanYeol, observando el rostro del menor —Parece que después de todo... no sabemos nada el uno del otro.
KyungSoo se calló de manera abrupta, sintiendo las palabras del mayor como una puñalada al corazón.
ChanYeol tomó la gaseosa por el cuello del recipiente y con gran enojo lo arrojó al suelo, ocasionando que el gas de la bebida produjera una pequeña explosión —Deberíamos dejar de vernos por un tiempo...
El de menor edad no contradijo las palabras, se limitó a observar a ChanYeol retirarse del lugar, quien se había arrepentido en el mismo instante de lo que había dicho. Con silenciosas lágrimas de frustración dejó el sitio.
KyungSoo fue dejado atrás y finalmente pudo permitir que sus lágrimas fluyeran con libertad.
Tal vez había sido muy poco el tiempo que dedicaron a conocerse verdaderamente, quizás lo que existía entre ellos, estaba destinado a no durar más allá de dos veranos.
Durante el tiempo restante antes de las vacaciones de primavera, ChanYeol había acatado lo prometido, no había buscado a KyungSoo y el más joven tampoco tenía intenciones de contactar con el mayor. Muy a pesar de que su estado anímico hubiera decaído por las declaraciones hechas la noche de su distanciamiento.
Las vacaciones de primavera habían llegado. KyungSoo estaba bastante ocupado con los preparativos para sus exámenes de practica a las universidades de su elección, se había decido por la sede principal después de platicarlo con sus padres quienes apoyaron la idea. KyungSoo se sentía triste por el nulo apoyo recibido por parte de ChanYeol, más que por cualquier otra cosa, si bien, se había demorado en decírselo, esperaba que entendiera las razones por las que no había podido ser sincero.
ChanYeol por su parte, sin planes para las vacaciones ni para su futuro, se pasó el tiempo en casa de su mejor amigo; JongDae.
La temperatura de Abril estaba subiendo mucho más de lo esperado, ChanYeol estaba tirado en el suelo de la sala mientras JongDae jugaba videojuegos.
—Me aburro— hablaba el de más alta estatura, cansado de existir en medio de una ola de calor.
—Duérmete— sugirió el contrario con la atención bien puesta sobre la pantalla del televisor.
—Uh...— ChanYeol rodó por el fresco suelo de madera —JongDae ¿Qué harás después de la graduación?
—Seré un técnico— respondió con simpleza.
—¿En serio?
—Sí, seré un técnico, ya envié mi solicitud— respondió el más de edad —¿Y tú que harás?
ChanYeol pensó detenidamente en aquella pregunta —¿Qué haré? — se preguntó más a sí mismo que cualquier otra cosa.
Se dio cuenta entonces, de la razón por la que evadía las preguntas de KyungSoo sobre sus planes a futuro, se sentía avergonzado de no tener nada en mente. Se sentía inferior si se comparaba con su novio quien ya tenía toda una vida lista para ser ejecutada, con decenas de opciones universitarias, preparándose para la admisión con meses de antelación. KyungSoo era estudioso, perseverante y muy inteligente. Sin duda iba a ser admitido en cualquier escuela de su preferencia, mientras que él, superaba las expectativas de los profesores con creces, sus notas no resaltaban entre el resto y no había pensado nunca en tener una carrera universitaria, el estudio no era cosa suya y todavía no se sentía listo para tomar una decisión tan importante. Tenía vergüenza de admitirlo.
Y su rechazó a hablar del tema lo había hecho despotricar contra KyungSoo quien lidiaba con sus propios problemas.
—¿Harás algo en vacaciones?
—Ah... volví a perder— musitó JongDae, pausando el juego, dirigiendo su mirada hasta un ChanYeol embarrado en el suelo de su sala —Iré a Daegu.
—¿Daegu? ¿Por qué ir tan lejos? — preguntó con inquietud.
—¿Quieres venir?
ChanYeol torció los labios en una mueca de escepticismo, pero terminó aceptando la propuesta al no tener nada más que hacer durante el resto de las vacaciones de primavera.
El joven Park no tuvo problema al obtener el permiso de sus padres, iría de viaje con su mejor amigo.
Encontraron un pintoresco y solitario lugar de bajo costo donde pasar las próximas tres noches, tenían un itinerario divertido, después de todo, serían las últimas vacaciones que pasarían juntos antes de separar sus caminos indefinidamente.
—No puedo creer el precio de esto— mencionaba JongDae sumergiéndose hasta la barbilla en la fuente de las aguas termales del hostal donde se hospedaban.
—Es bastante increíble contando que también pagamos el transporte— aceptó ChanYeol peinando su cabello con el agua caliente del lugar —Ah~— suspiró con relajación al dejar que las propiedades térmicas del agua hicieran lo suyo.
Los chicos se quedaron en silencio, disfrutando de la compañía y de la relajante sensación de exfoliación.
"Este lugar es tan genial" pensaba ChanYeol, con los ojos cerrados, habían pasado todo el día andando en moto y ya con el sol oculto, era sumamente relajante pasar el tiempo metido en las aguas termales "Me gustaría venir aquí con KyungSoo..."
JongDae también pensaba en lo divertido que había sido ir a ese viaje improvisado con su mejor amigo, a quien había notado bastante decaído en los últimos días e inusualmente distante de aquel otro chico que recientemente había conocido; Do KyungSoo, todavía tenía muchas preguntas que hacer sobre el bajito, pero ChanYeol se las ingeniaba para responder ambiguamente.
"Demonios..." ChanYeol frunció el entrecejo "Ahora solo estoy pensando cosas pervertidas con KyungSoo"
—ChanYeol— llamó JongDae después de armarse de valor.
—¿Qué sucede? — el mencionado abrió uno de los ojos para prestar atención a su amigo, dejando atrás las fantasías de tórrido romance adolescente.
—...— el de menor estatura dejó salir un último suspiro antes de hablar —¿Estás saliendo con KyungSoo?
ChanYeol abrió los ojos apropiadamente, se acomodó en su sitio y con una ligera sonrisa asintió —Si, estoy saliendo con él.
JongDae abrió los ojos, completamente sorprendido.
—¿Por qué? — quiso saber ChanYeol con una sospechosa mirada —¿Te molesta?
—¡Ah! ¡No, no, no! ¡Nada de eso! — se apresuró a decir JongDae —Quiero decir... ¡No me molesta en lo absoluto!
ChanYeol soltó una risa al ver el aprieto en el que había metido a su amigo.
—Es solo que es sorprendente...— confirmó el contrario —¡Sorprendente de que tengas una pareja! — se apresuró a reafirmar.
—¿De qué hablas? — preguntó —KyungSoo no es la primera persona con la que salgo.
—Me refiero a que... — quiso iniciar a hablar JongDae —Estoy feliz por ti, no me malentiendas, por favor. Es solo que... siempre estuviste tan desinteresado cuando hablábamos de chicas, incluso cuando salías con alguna, no te importaba en lo absoluto si te dejaban y siempre aceptabas a todas las chicas que se te declaraban...
—Uh... ¿En serio?
JongDae asintió con la cabeza rápidamente —Por un tiempo pensé que simplemente eras un cretino.
—¡Oye!
—Pero luego— JongDae esquivó la ola de agua que su amigo lanzó en su contra —Comencé a creer que eras ese tipo desdichado de gente que no se puede enamorar... pero cuando comenzaste a frecuentar a KyungSoo... tu semblante realmente cambio.
—Mh— ChanYeol no pudo evitar sonreír con sinceridad.
—Supongo... es por "eso" — JongDae se levantó de hombros.
—¿Eso? — preguntó el más alto con una ceja levantada.
—Ya sabes... tu primer amor— dijo JongDae con naturalidad —KyungSoo es tu primer amor ¿No?
El más alto escuchó aquello con atención, recordando la primera vez que había visto a KyungSoo cantar en la soledad del aula que solían compartir, lo embelesado que se sintió por su imagen y lo instintivamente atraído que se sintió por su voz. Sus mejillas se colorearon y todo su rostro enrojeció.
—¡Estás todo rojo! — se burló JongDae —¡Cielos, no!
—¡Tú tienes la culpa! — se quejó ChanYeol ocultando su rostro detrás de sus manos.
—¡Ahora estás todo burbujeante! — se rio JongDae lanzándole agua a su amigo que no hizo nada más que sumergirse dentro de las aguas termales.
ChanYeol no había pensado en KyungSoo como un primer amor o una primera experiencia, pero tras la declaración de una persona que veía desde afuera, todo parecía esclarecerse, justo como había declarado meses atrás; KyungSoo era su número uno.
Y a pesar de que ChanYeol se sentía mucho más cómodo con la idea de dejar ir a KyungSoo, el bajito no podía parar de darle vueltas al asunto. Se sentía culpable y se sentía frustrado por la reacción de su novio. Sus exámenes de práctica habían sido un rotundo fracaso.
No por un mal desempeño, sino porque KyungSoo era incapaz de presentarse al examen.
Era una particular manifestación de un exorbitante sentimiento de agobio. Había pasado por primera vez durante sus exámenes de admisión a la preparatoria, se había sentido tan presionado por sus padres y por sus propias exigencias que había sido incapaz de subirse al tren que lo llevaría a las escuelas para presentar los exámenes de admisión a sus instituciones favoritas, la ansiedad y los nerviosismos lo atacaban en forma de pesimistas pensamientos sobre su desempeño.
De esa manera y naturalmente, había sido rechazado a las escuelas de primera elección y la única opción a la que fue capaz de presentarse había sido al instituto donde actualmente estudiaba.
Era un proceso que sucedía cuando estaba sumamente estresado, su cuerpo comenzaba a temblar, sus nervios crecían y todo a su alrededor se nublaba, por ello decidía no subir el tren. La única vez que ignoró los síntomas y subió a bordó terminó desmayándose en la estación.
Los guardias tuvieron que llevarlo a la oficina de seguridad, había ocurrido durante el primer día de preparatoria, la escuela fue a buscarlo. Ese día había conocido al profesor Kim JongWoon quien a pesar de su expresión desdeñosa se comportó de manera amable y cuidadosa con él.
Había sido una de las razones por las que KyungSoo posteriormente desarrolló sentimientos románticos por el docente.
Era tema del pasado.
KyungSoo volvía a sentirse bajo extrema presión, aprobar los exámenes de admisión universitaria, mudarse a una nueva ciudad, lidiar con la decepción que sentía por su relación, eran tantas las sensaciones que experimentaba que era incapaz de llegar a sus exámenes de admisión.
Ya lo habían descartado de varias de sus opciones.
Aquel día iba a sustentar el examen de práctica de la Universidad Nacional de Incheon y dado que aquella institución había sido el tema causante de su distanciamiento con ChanYeol, sus nervios aparecieron y comenzaron a hacer estragos indeseables sobre su persona.
KyungSoo no podía dejar de pensar en las palabras dichas por su novio "No es así" se decía a sí mismo "Si pensé en nuestra relación, siempre pensé en nosotros mientras enviaba la solicitud" su corazón latía apresuradamente, el frío sudor recorrió su frente, la gente a su alrededor comenzó a notar el enfermizo estado del chico a bordo del tren que fue encorvándose en su sitio hasta hacerse ovillo contra uno de los asientos del metro.
"No quiero que nuestra relación termine y ya..." pensaba mientras sentía que todo a su alrededor comenzaba a ponerse borroso. Su teléfono sonó y queriendo mantenerse anclado a la realidad, tomó su celular y aceptó la llamada.
—¿Diga?
—¿KyungSoo? ¿Dónde estás? — la profunda voz de ChanYeol llenó sus oídos.
—En el tren— respondió débilmente.
—¿Uh? ¿Estás bien? — preguntó de inmediato en cuanto notó la variación del tono.
—No— contestó con sinceridad.
—¿En qué estación estás? Iré a buscarte— comunicó el más alto con preocupación.
—Bajaré en la siguiente, es la ruta 23, estación 3...
ChanYeol no pudo escuchar más la voz de KyungSoo, lo único que pudo distinguir fueron desconocidas voces que llamaban por ayuda.
KyungSoo se había desmayado nuevamente. Dentro de su inconsciencia tuvo una lúcida visión con ChanYeol, ejemplificando una metáfora sobre el distanciamiento que se avecinaba.
—¡KyungSoo! — la repetitiva voz de ChanYeol había sacado a KyungSoo de su trance.
El joven Do estaba tirado en el suelo del andén del metro que había abordado en la mañana, su cabeza descansaba sobre los muslos de ChanYeol quien se mantenía batiendo sus manos delante de su rostro para ofrecerle más aire libre.
—¿Dónde estoy? — preguntó de repente, comenzando a recuperar la conciencia.
—Estás en la estación del metro— explicó ChanYeol —¿Estás bien?
—Si...— contestó el de baja estatura, ChanYeol colocó sus manos a cada extremo de su cabeza y KyungSoo pudo notar el reloj sobre la muñeca de su novio, dándose cuenta de la hora —¡¿Son las 9:30?!
—Si, recién dio la media hora— ChanYeol despejó el rostro de su pareja de un par de cabellos. La gente a su alrededor se dispersó al ver que el chico estudiante se encontraba bien.
—¡Voy a llegar tarde! — KyungSoo se incorporó rápidamente —¡Voy a fallar el examen! ¡Otra vez voy a fallarlos todos! — KyungSoo comenzó a hiperventilar nuevamente, sintiendo su nerviosismo invadir su cuerpo con rapidez.
—KyungSoo...— ChanYeol también se puso de pie, para tratar de tranquilizar al más joven —Está bien, KyungSoo.
—¿Estar bien? — preguntó conmocionado —¡No lo está! Sólo lo dices porque no se trata de ti.
—Si no hubieras fallado todos esos exámenes— dijo refiriéndose a las pruebas de admisión de la preparatoria —Nunca hubiéramos estado en la misma clase... Y nunca te hubiera conocido.
KyungSoo guardó silencio, se limitó a ver la amable sonrisa que ChanYeol le ofrecía.
—¡Vamos! Te llevaré— el más alto tomó a KyungSoo por la muñeca y lo condujo por todo el lugar hasta fuera de la estación suburbana.
Una vez en el exterior, ChanYeol se dirigió hasta el sitio donde se paraban los vehículos de dos llantas.
—Toma— le extendió uno de los cascos extras que llevaba.
KyungSoo tomó el casco y vio con asombro la motocicleta que ChanYeol estaba dispuesto a montar.
—Fui a Daegu con JongDae, tomamos un curso de conducción ¡Y obtuve mi licencia para motos! — explicó ChanYeol rápidamente, después de ponerse su propio casco, le indicó al más joven que subiera detrás de él.
KyungSoo se montó con temor, abrazándose del torso de ChanYeol, quien no pudo evitar sonreír con alegría.
Encendió la motocicleta y se pusieron en marcha.
—¿Sabes? — habló ChanYeol en voz alta —Hay unas aguas termales muy interesantes y económicas, deberíamos ir algún día.
KyungSoo no dijo nada, se mantuvo con los brazos apretados al cuerpo de su pareja, sintiendo el alivio de que su relación parecía haberse restituido. El sueño que tuvo mientras estuvo desmayado le mostró a un ChanYeol sonriente, diciéndole que las cosas estarían bien, aunque no volvieran a ser las mismas, definitivamente estarían bien.
—Quería llamarte mientras estaba allá pero había una señal del asco— contó ChanYeol, esquivando los autos que se interponían en el camino —Quería hablarte para disculparme.
KyungSoo escuchó con atención las palabras que el mayor tenía para él.
—Lamento haber actuado impulsivamente— dijo ChanYeol —Solo estaba desquitando mis frustraciones contigo porque a diferencia de ti no tengo un plan a futuro. Y es excelente que tú puedas tomar esas decisiones tan determinadamente, te admiro por eso.
El bajito tragó duro al sentir que no estaba tan seguro de las decisiones que estaba tomando.
—Puedes estudiar donde tú quieras, no tiene por qué molestarme— siguió hablando el más alto —Te apoyo en todo eso, puedo ayudarte con la mudanza si quieres ¡Puedo ir a visitarte en tus días libres!
KyungSoo hizo el abrazo mucho más apretado.
—Podríamos hacer planes— habló el más alto —Pero algo que definitivamente no planeo... es alejarme de ti.
—¡Yo tampoco planeo algo como eso! ¡Así que por favor no pienses que simplemente te dejaré ir! — dijo KyungSoo en voz bien alta, dejando que sus ojos soltaran silenciosas lágrimas de felicidad.
ChanYeol sonrió con más fuerza, aceleró y condujo con inteligencia hasta el lugar donde KyungSoo llevaría a cabo su examen de práctica.
—¡¿Qué horas son?! — preguntó KyungSoo una vez que llegaron a la escuela, dándole el casco a ChanYeol y colgándose la mochila.
—¡Las 9:50! — respondió ChanYeol con emoción.
—¡Aún hay tiempo! — dijo el bajito con esmero.
—¡Relájate! — animó el más alto desde la moto, viendo a KyungSoo acomodar sus ropas.
—¡Relájate! — se repitió KyungSoo con sentimiento.
—¡Concéntrate! — siguió hablando ChanYeol con una enorme sonrisa.
—¡Concéntrate!
—¡Esfuérzate! — ChanYeol ya solo hablaba para ver a KyungSoo repetirse sus palabras de aliento.
—¡Esfuérzate! — sonrió KyungSoo —¡ChanYeol!
—¿Mh? — el más alto giró el rostro en dirección a su novio, quien de manera audaz se había acercado a él para tomar su rostro entre sus manos para plantar un profundo beso sobre su labios.
ChanYeol se quedó petrificado en su lugar.
—¡Regresaré! — se despidió KyungSoo corriendo hacia la entrada, después de haberse despedido del más alto.
—...— ChanYeol aun boquiabierto, sacudió su cabeza para despedirse apropiadamente de su pareja —¡Te estaré esperando, bebé!
KyungSoo había escuchado aquello, el apodo cariñoso lo descolocó ocasionando que tropezara con sus propios pies. ChanYeol rio en voz baja y KyungSoo se incorporó rápidamente.
El bajito había logrado llegar a su examen de práctica justo a tiempo y con los nervios dispersos, pudo responder sin dificultad alguna.
ChanYeol por su parte había cumplido su promesa, dejó la motocicleta cerca de él mientras se sentaba en un sitio con sombra, el viaje de Daegu a su pueblo natal había sido agotador, así que estaba cansado. Sin problema se había quedado dormido en medio del campus de la escuela.
KyungSoo tardó poco más de tres horas en salir de su prueba, buscó a ChanYeol por los alrededores, encontrándolo dormitando, recargado sobre un bebedero. KyungSoo no quiso despertarlo, así que se limitó a sentarse a su lado en silencio.
—ChanYeol...— habló en voz baja.
—¡AH! ¿Me quedé dormido? — ChanYeol despertó de manera abrupta al sentir el gentil toque de KyungSoo sobre sus hombros —¿Cómo te fue?
El bajito se encogió de hombros —No lo sé.
—¡¿No lo sabes?! — se cuestionó ChanYeol.
KyungSoo había tenido un buen desempeño en la primera parte de su prueba, pero la segunda parte había sido más difícil de responder, así que no tenía la menor de sus resultados, ya se enteraría dentro de un par de días de su desempeño.
—No— negó KyungSoo con la cabeza —No lo sé... y realmente no me importa...
—¿Qué? — preguntó lleno de sorpresa —¿En serio?
KyungSoo volvió a mover la cabeza de lado a lado —Lo único que importa ahora es que estás conmigo.
ChanYeol se enterneció por las palabras —Sólo importa si estás conmigo...— repitió acercándose un poco más a KyungSoo —Quiero besarte...— admitió, teniendo en cuenta que a su novio no le gustaban las muestras de afecto públicas.
—Hay mucha gente— respondió con sutileza, observando en todas direcciones la cantidad de personas que los rodeaban.
ChanYeol abultó los labios y escondió su rostro entre sus brazos sobre las rodillas flexionadas —Tienes razón...
KyungSoo vio lo desanimado que su novio se había puesto, así que valientemente dejó atrás los prejuicios que él mismo tenía. Se acercó a su pareja, atrajo su rostro con la yema de sus dedos y con suavidad besó sus labios con timidez.
El más alto volvió a sorprenderse de lo proactivo que KyungSoo estaba siendo. Presionó con más fuerza sus labios.
El tacto terminó a los pocos segundos. Sin que ChanYeol quisiera alejarse.
—Otra vez— pidió el más alto.
—¡No! — se negó KyungSoo alejándose del mayor.
Pero sin lograr escapar de sus brazos que lo apresaron en un apretado abrazo lleno de cariño.
—Te quiero, KyungSoo.
El de menor edad giró su rostro en dirección al más alto, estaba dispuesto a ser formar nuevos recuerdos al lado de la persona que más quería, así que rodeó su cuello con ambos brazos, ocasionando que sus frentes se juntaron y las puntas de sus narices rozaran.
—Te quiero mucho más, ChanYeol.
El sonrojo de KyungSoo era inaudito. ChanYeol no pudo controlarse mucho más y apretó el cuerpo de su novio con gran cariño.
No importaba la cantidad de kilómetros de distancia que existieran entre los dos en el futuro, podrían lidiar con ello. Lo que era primordial era el presente que podían disfrutar.
FIN
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¡DESPUÉS DE UN AÑO!
Finalmente he concluido esta adaptación.
Doukyuusei es una de las obras yaoi que más me gustan, es tan bonita y fluffy y tierna... y es totalmente lo opuesto a lo que últimamente suelo escribir.
Así que se podrá notar un cambio en la redacción de este capítulo y los anteriores.
Pero lo que cuenta es la intención.
¡Si tienen oportunidad vean la película y lean el manga que es súper corititito!
uwu para todos.
Nos leemos próximamente.
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