▭▬ CLASES DE ESPAÑOL
a johnny orlando fanfic◡̈
𖥻 ﹙ VEINTE !﹚

Sonreí inocentemente y me voltee lentamente.

Johnny estaba justo al frente de mi con una ceja alzada, el agarre en mi muñeca seguía pero no era tan fuerte.

—Estoy esperando tu respuesta.—soltó mi muñeca.—¿A dónde ibas? si faltan...—miro su teléfono.—5 minutos para entrar a clase.

—Yo, yo, iba a ca...—justo cuando iba a comenzar con mi mentira el timbre sonó.

Johnny abrió los ojos un poco sorprendido, en cualquier momento el pasillo se llenaría de estudiantes y más grave aún de profesores los cuales podrían suspendernos por estar aquí.

Me tomo de la muñeca e hizo lo que hace unos minutos yo iba a hacer. Mis pies reaccionaron cuando estábamos en la calle fuera de la escuela.

—Johnny no podemos irnos.—seguía corriendo tomando su mano. Ya estamos un poco lejos.

—No tenemos tiempo para arrenpentimientos.—rió un poco.

᪤๋݊˖໋˟🍰ꕀ˖๋໋☕╯໋

—Pasa, supongo que no hay nadie. Mi mamá debe estar de turno en el hospi...—la puerta del cuarto sono e instantáneamente se hizo presente el sonido de los tacones de mamá.

Empuje a Johnny quien parecía un poco confundido y nos escondimos rápido en la cocina.

Estábamos debajo de la mesa del comedor, mamá estaba terminado su plato de cereal. Juraría que estaba de guardia desde temprano, pero ya caí en cuenta que no.

Luego de 10 minutos, se levantó por fin, lavo su plato y salió de casa un poco apresurada supongo por la hora 10:40 am.

—¿Qué acaba de pasar?—salí de la mesa.

—Fuimos niños malos y nos escapamos de clases, luego tu mamá casi nos descubre.—sonrió.

Estuvimos hablando un poco sobre que haríamos en las siguientes 2 horas. No podíamos quedarnos en casa ya que corríamos el riesgo de que mamá nos viera. Y tampoco iríamos a casa de Johnny por el mismo motivo.

—Tengo una idea.—Johnny agarro nuestras mochilas sujetó mi mano y cuando menos lo pensé ya estaba afuera de casa.

La fresca brisa chocaba contra mi cara, la verdad no tenía muy en claro hacia donde estábamos caminando, pero lo que sí sabía era que lo estaba disfrutando.

Johnny comenzó a tararear una canción, no recordaba su nombre pero sabía que la había escuchado antes. Caminamos un poco más hasta llegar a un parque, pero no era un parque cualquiera. En el parque estaban muchas personas con niños pero lo más importante era la cantidad de personas que estaban paseando a sus hermosos perritos por ahí.

Nos sentamos en uno de los banquitos mientras observábamos el paisaje.

—Entonces... ¿Eres una chica rebelde ó intentabas serlo?—Johnny sacó su botella de agua y bebió un poco de esta.

—Ninguna de las dos.—reí un poco.—es sólo que últimamente no puedo canalizar bien el estrés y pues no me va del todo bien en Matemática y estaba molesta, supongo que actúe por impulso.—me encogí de hombros.

—En ese casó estas hablando con el chico correcto.—me miro sonriendo.—no es por presumir pero soy muy bueno con los números bonita. Tal vez podría ayudarte, bueno. Si así lo deseas.

Menos mal que no querías presumir.

—¿Hablas enserio?—el asintió varias veces.—lo abrace.

Sentí un pequeño pellizco en la pierna, baje la mirada encontrándome con una pequeña niña pelirroja de unos 5 años.

Me separe un poco de Johnny para poder verla mejor, el antes nombrado imito mi acción.

—Hola pequeña.—ella estiró sus bracitos como pidiendo que la cargara y así lo hice.

—¿Cómo se llama este pequeño angelito?—Johnny pellizco su mejilla provocando una risita de su parte.

—Hola, me llamo Alice, pero mi hermana me dice Ali. ¿Y ustedes?—agarro un mechón de mi cabello entre sus pequeñas manos y comenzó a jugar con este.

—El es Johnny y yo soy Sofía

—¿Ella es tu novia?—le pregunto a Johnny.

—Aún no.—susurro sonriente, recostó su cabeza del banco y cerró los ojos.

—El es muy lindo.—susurro Alice en mi oreja.

—Si, lo es.—reí un poco mirando a Johnny que seguía en la misma pose de antes

—Yo quiero un novio así cuando sea grande.—se bajó de mis pierna y corrió hacia una chica la cual supongo es su hermana.

Me levanté y camine hacia ellas dejando a Johnny ahí quien todavía no se había dado cuenta de mi ausencia.

—Hola mucho gusto.—estrechamos nuestras manos.—Mi nombre es Sofia.

—El gusto es todo mío, gracias por cuidar a esta pequeña traviesa. Mamá me mataría si se perdier...—la chica llevo las manos a su boca.

Sentí un brazo pasar por mi cuello y justo en ese momento supe que todo sería un caos.

Era una fan de Johnny.

—¿Estas bien?—tome sus manos, estaba frías.

Si se desmayaba aquí juro que luego lo haría yo.

—E- e- el es ¡Johnny Orlando!—chillo lo último.—¿Podríamos tomarnos una foto? ¿Son novios? ¿Qué hacen aquí solos?

Oye, oye, tranquila hermana respira.

Johnny se tomo la foto con la chica, quien no dejaba de gritar. También le firmó el brazo, mientras tanto Alice prometió guardar nuestro "secreto" ya que le había inventado a su hermana que éramos primos lejanos y nos habíamos conocido hace poco.

Simplemente no queríamos rumores ni cosas falsas, además de que Johnny no quería que me acosaran ni nada de eso.

᪤๋݊˖໋˟🍰ꕀ˖๋໋☕╯໋

Volvimos a mi casa, entramos. No había nadie ya que Diego tendría prácticas hasta tarde con el equipo de fútbol y mamá ahora si estaba en el hospital de turno.

—Deberíamos empezar con las clases de español.—deje mi bolso sobre la mesa.—Mañana tenemos examen y no queremos que repruebes.—toqué la punta de su nariz.

—Tienes razón, comencemos.—se sentó y empezó a sacar sus libros.

Estuvimos practicando hasta aproximadamente las 6. Las horas pasaron muy rápido, Johnny ya había avanzado demasiado. Comimos un pastel de chocolate que había hecho mi mamá y luego el se fue pues mañana tendríamos clases.

—Hasta mañana, sofi.—beso mi frente.—No te quedes despierta hasta tan tarde.—lo abrace mientras asentía para luego verlo caminar hasta su casa.

Entre a casa, no cene. Había quedado bien luego de comer el trozo de pastel. Me despedí de mamá y junto con Diego fuimos a hacer FaceTime con Valentina.

—Habla claro gafa.—Diego comenzó a gritar en cuanto la imagen de Valentina apareció en la pantalla.

—Epale, cabeza de brócoli.—ambas reímos recordando cuando Valentina le decía así a Diego y el se picaba.

Después de un rato en el que ambos se burlaban uno del otro Diego se fue a dormir.

—Buenas noches, jala bolas.—Valentina rodó los ojos y le sacó el dedo del medio.—Espero que tengas la suerte de soñar conmigo.

—¿Para que coño quiero soñar contigo si puedo soñar con papi Johnny?

—¡UHHH!—Diego fingió tristeza para después irse a su cuarto.

Seguimos hablando un rato más, luego de que Valentina llegará a Venezuela las cosas cambiaron para bien. Se fue a vivir con su papá quien ahora era el responsable de ella y de vez en cuando hablaba con su mamá.

—Bueno hasta mañana gafa.—me lanzo un beso.

—Buenas noches hasta mañana idiota que descanses.—sonreí.

—Espero que la próxima vez que me llames seas novia de Johnny.—reí ante su comentario.—Es al verdad, gafa, los veo muy quedados, en fin. Besitos de chocolate me voy.

Hice un gesto de despedida con mi mano y colgué la llamada.