El día que Percy llego, fue el día mas odiado en su vida, el muy idiota no se dejo hacer el recibimiento que los hijos de Ares le hacen a los novatos y encima la insulto, ella definitivamente tenia ganas de matarlo. 

Las cosas empeoraron cuando todos descubrieron que el era hijo de Poseidon y su odio creció mucho mas, cuando ella descubrió que el había vencido a su padre, eso era algo imposible. Ni los mejores guerreros se les ocurrió intentar derrotarlo.

El era el dios de la guerra y la sangre derramada, era imposible que un estúpido hijo de Poseidon  lo haya vencido, eso hizo que todos los miembros y especialmente ella lo odiaran y aunque nunca lo admitiría eso cambio cuando la ayudo a encontrar el carro que su padre la había dejado conducir. 

El día que su padre apareció ante ella, se asusto mucho, ella no le tenia miedo a nada, pero su padre era impotente, estaba vestido con una chaqueta de cuero y pantalones de jeans del mismo color, era obvio que estaba en su forma humana. 

Ella reconoció que era su padre, por que el se bajo las gafas y vio sus ojos que parecían llamas, estaba nerviosa, ninguno de sus hermanos lo había visto en persona y aunque tenia miedo, se sentía afortunada. 

- ¿ Te ha comido la lengua el gato ? - el le pregunto.

- No, Padre - ella dijo.

Clarisse estaba tratando de no estar nerviosa, aunque eso era imposible, por que el único recuerdo que ella tenia es de le gritándole cuando era un niña pequeña.

- No estoy acostumbrado a tener hijas - dijo el - pero te he estado observando y me di cuenta que eres diferente -

Clarisse no sabia que sentir, era eso un cumplido de su padre, eso era raro, por que ella sabia perfectamente como era con sus hijos o hijas en este caso.

- ¿ Ves esto ?- el pregunto.

- Si - dijo ella.

- No te escucho - dijo el y se acerco a mi en forma amenazadoramente.

- SI - ella dijo.

Eso pareció gustarle a su padre, por que una sonrisa apareció en su rostro y sus llamas parecían bajar la intensidad. 

- Esta es la llave de mi coche - dijo el - solo mis hijos son capaces de conducirlo, pero confiare en ti y te dejare conducir -

Clarisse agarro las lleves sorprendida y emocionada, esto era una prueba enorme de confianza de su padre.  Después de que el dijo eso, su padre desapareció como por arte de magia, ella sonrió ampliamente y se fue hacia el carro de su padre. 

Lamentablemente mas tarde ese día, sus "hermanos" inmortales decidieron hacérsela a ella,  hicieron desaparecer el carro y ese día Percy estuvo allí para ayudarla, fue muy feo para ella saber que el mayor enemigo de su padre la había ayudado.

Sabia que su padre estaría decepcionado de ella, y por eso amenazo a Percy que si el llegaba a decir algo de lo que paso, el tendría una visita de la pequeña Melivea que era un monstruo que su padre le había regalado a sus hijos como "protección" para la cabaña. 

Todos los dioses le habían dado a sus hijos, un monstruo que los ayudarían cuando sea un caso de suma importancia y sabiendo que su padre odia a Percy Jackson no le molestaría que ella llame a Melivea.  

El le prometió que el no diría nada y así es como ellos empezaron una amistad, aunque ninguno de ellos iba a admitir eso.  Por que su padre odia a Percy, y el respeta demasiado su vida para que un perro lo ataque. 

A/N: ¿ Que les parece ? ¿ Les gustaría leer los pensamientos de Ares ?