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Años habían pasado desde que Clarisse estaba en el campamento, ahora ella tenia 14 años y era muy respetada en el campamento, ella era consejera de la cabaña de Ares y se llevaba bien con todos sus hermanos.
Con el tiempo Clarisse y Jonah empezaron a llevarse bien, ella paso a ser la "protegida" de la cabaña Ares, ellos sabían que su hermana podía cuidarse sola, pero eso no significaba que ellos no la cuidarían, especialmente de cierto hijo de Hermes que le gustaba ver como practicaban en la arena.
Clarisse tenia buena relación con algunos chicos del campamento, pero la persona que ella llega a soportar ademas de sus hermanos es Silena Beauregard, una hija de Afrodita que se puso como titulo la mejor amiga de Clarisse.
Aunque al principio a todo el campamento le pareció extraño, ambas eran demasiado diferente para ser amigas, pero contra todo pronostico su amistad creció, las hermanas de Silena no aprobaban su amistad, pero a ella no le importaba.
Los hermanos de Clarisse, le pareció gracioso y aunque al principio no les gustaba pero despues se acostumbraron a verla en la cabaña cada vez que ellos no estbaan practicando porque la arena estaba ocupado por otro grupo.
Era la única que se atrevía a entrar en la cabaña de Ares sin miedo, ella se dirigía directo a donde estaban en las habitaciones de las hijas de Ares y ahi pasaba horas cuando por alguna razón Clarisse no quería salir o estaba enferma.
Si Clarisse veia sufrir a su amiga ella se encargaba de que se arrepientan de haberlo hecho y aunque Silena era tranquila nunca intentes verla enojada porque al igual que su amiga era bastante peligrosa si se metía con Clarisse, aunque ella podía defenderse sola, por que era hija del dios de la guerra.
En este momento ellas estaban acostadas en la cama de Clarisse, solo mirando el techo y hablando de Charles. el chico del que su mejor amiga estaba bastante interesada, Clarisse escucho a su amiga atentamente aunque ella estaba pensando en otra cosa.
-¿ Que te ocurre Cla ? - ella le pregunto.
- Nada - le dijo su amiga.
- No me hagas usar mi encanto vocal - ella dijo mirando a su amiga.
Amabas cruzaron miradas por unos segundo, Clarisse no le tenia miedo a nada, pero sabia que su amiga usaría su poder para que le diga la verdad por las buenas o por las malas. Estuvo mirándome por unos segundos mas, hasta que se cubrió su boca con la mano.
- ¿ Se trata de un chico verdad ?- pregunto ella.
- No - dijo Clarisse rápidamente.
- Lo sabia - dijo ella con una sonrisa - Te gusta alguien, te gusta alguien -
Clarisse inmediatamente puso sus manos en la boca de Silena para que deje de hablar, cuando ella se había calmado, ella saco sus manos y Silena empezó a sonreír por su amiga.
-¿ Quien es el afortunado ?- ella pregunto.
- No creo que sea afortunado - dijo Clarisse.
- Admites que se trata de un chico, lo sabia - dijo ella aplaudiendo.
- Cállate - Clarisse dijo molesta.
- Esta bien - dijo Silena - pero dime quien es -
- te voy a decir, pero promete que no le dirás a nadie - dijo Clarisse.
Silena levanto las manos y le prometió que no le iba a decir a nadie. Clarisse se lo dijo en el oido y después de eso, ella grito emocionada.
-¡ Oh Mis Dioses !- ella dijo - Sabia que algo especial había algo entre ustedes -
- No hay nada entre nosotros - ella le dijo - solo me parece lindo -
- Niégalo todo lo que quieras - dijo Silena - pero soy la hija de la diosa de la belleza y el amor y yo se de esto -
Su conversación termino cuando Clarisse escucho que sus hermanos entraron en la cabaña, Silena se fue de la cabaña no sin antes hacerle una broma a Clarisse que solo ella entendió.
A/N: ¿ Que les parece ? Siempre pensé que Lucy Hale haría una perfecta Silena Beauregard.
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