𝚂𝚘𝚖𝚎𝚋𝚘𝚍𝚢 𝙴𝚕𝚜𝚎

Alerta: F/¿Infidelidad?

4:50 P.M

Esto es el colmo, no puedo creer que me siga haciendo esto desde hace más de dos meses...

-¡Te odio!

No voy a llorar...

-¡Te odio mucho, idiota!

No lo haré...

-¿Por qué? -Respondió como si nada mientras torcía la cabeza-. Mei, somos hermanastras. ¿Cuando lo vas a entender? -Se escuchó una pequeña risa salir de sus labios con burla- Qué ironía, si eras tú la que me lo repetía incesablemente.

-¡¿Y eso qué?! ¡¿Acaso no significó nada el beso que nos dimos anoche?! -Gritó mientras se cubría el rostro con ambas manos-. ¡No puedo creer que sigas de cariñosa con esa prostituta! -Sollozó, intentando reprimirlo con gritos ahogados.

-Vaya, de tan solo escucharte no te reconozco Mei -Caminó hacía ella pero la menor respondió dándole una fuerte bofetada en la mejilla-. "¡Auch!" -Sonrió falsamente- Con pegarme no vas a solucionar nada, ¿lo sabes no?

-Jódete...

-Deberías dejar de ser tan celosa con tu hermana mayor, pequeña...

-¡NO TE ME ACERQUES! -Habló furiosamente a punto de darle otra cachetada pero Yuzu la detuvo tomándola de la muñeca e intentando no usar demasiada fuerza como para lastimarla-. ¡Su-suéltame Yuzu...! -Forcejeó con los ojos llorosos-, no me toques después de haberlo hecho con esa...

-¿Cómo sabes eso? -Preguntó después de haber soltado la mano con la que iba a recibir la otra bofetada-. No me digas que aparte de tus celos absurdos también eres capaz de seguirme...

-¡No te seguí! -se limpió las lágrimas que caían de sus hermosos ojos violetas-. Simplemente las escuché cuando iba a la dirección por un llamado de mi abuelo...

-¿Eh?

-Esa zorra te pidió ir al patio de atrás para hacer "travesuras" justo cuando yo pasaba al lado de ustedes, ¡Y lo peor de todo es que tú aceptaste no sin antes darle un beso en la boca sin importarles mi presencia!

-Ayer... estabas hablando demasiado... ¿Recuerdas la forma en la que lograbas callarme? -Soltó un suspiro molesto-. Tú me ilusionaste, me enamoraste desde el primer momento en que te vi Mei. -Desvía la mirada-, y en el preciso momento en el que yo te confesé todo lo que sentía me pisoteaste y me trataste como a la peor basura que pudiese existir. ¡Yo era capaz de darlo todo por ti!, ¡Ahora no me vengas con que estás arrepentida y quieres una segunda oportunidad porque escúchame bien! -Apretó los puños con furia-. Yo estoy bien, pero que muy bien con Hanna. Y lo último que quiero es que andes con tu celos absurdos como si tú y yo tuviéramos algo. ¡Porque no es así! ¡¿Lo entendist- -

¡Slap!

-Solloza ruidosamente mientras sentía los ojos verdes de Yuzu devolverle la mirada con furia-. Lo-lo entendí perfectamente... -susurró para luego correr hacía la habitación que compartían las dos y encerrarse, dejando a la rubia en la sala con una mano en la mejilla por la bofetada que le dio.

No, no dejaré que me manipules así...

-¡¡¡Siempre es lo mismo!!! -Dijo en voz alta para que Mei lo escuchara desde la habitación-. Maldita sea, ¡Ya no te amo Mei! ¡¡¡Tú lo echaste todo a perder!!!

Grité rencorosamente mientras tiraba la mochila que traía colgada sobre los hombros para luego tomar mi skate y las llaves de la casa. Acto seguido salí del departamento con el uniforme de la academia dándole un fuerte azote a la puerta para bajar las escaleras rápidamente.

¡Estoy harta de todo, maldita sea!

...

...

...

-¡Tú! Tú fuiste la que lo echó a perder todo, Yuzu -Pensó la pelinegra mientras lloraba abrazando a Kumagoro con fuerza, sentada sobre el borde de su cama- Siempre huyes y te refugias en el alcohol, las mujeres y el sexo, realmente...

¡Eres una cobarde! Idiota, idiota, ¿no te das cuenta de lo mucho que te necesito? Creí que ayer iba a estar todo bien entre nosotras, ese beso... ese maldito beso reavivó mis esperanzas de volver a tenerte... porque sentí esa dulce calidez nuevamente, tus manos sobre mi cuerpo provocaban todo tipo de reacción en mí. Me sentía muy nerviosa al volver a sentir mi rostro arder por algo que solo tú podías hacerme, pero ahora sé que no es así. Hay otra que también es capaz de ver ese lado tuyo...

-¡Dios!, ¡Estoy muy celosa! -se muerde el labio con fuerza intentando no pensar en Yuzu y a dónde se había ido para evitar seguir hablando con ella-. Yuzu... -Cierra levemente los ojos para soltar un suspiro-. Es obvio que se fue a verla...

No entiendo que de bueno le ve a esa, si parece una garrapata pegada a MI Yuzu. Al tan solo verla me causa ganas de clavarle la punta de un lápiz en el ojo, torturarla hasta que Yuzu se canse de ella y vuelva a mí de rodillas.

Lo peor de todo es que madre también la trata como a una hija más cuando viene a cenar los viernes. Las tres nunca paran de hablar y reírse mientras yo me muero de celos al ver como Fujioka toma la mano de Yuzu por debajo de la mesa y entrelazan sus dedos.

-Ya es suficiente...

No puedo seguir así...

Me levanté de la cama dejando a Kumagoro en medio y decidí ir a darme un baño para relajarme debido a que al volver de la academia Yuzu y yo sólo volvimos a discutir por mi culpa, y no tuvimos tiempo de siquiera darnos una ducha o cambiarnos de ropa. Por cierto, se acaba de ir a quién sabe dónde con el uniforme puesto... Ya hablaré con ella más tarde...

10:28 P.M

¿En serio? Luego de hacer los deberes y ordenar mis libros para el día de mañana dormí un poco debido a este día tan ajetreado, ya pasaron cinco horas desde que Yuzu se fue y aun no regresa. Me la pasé meditando y pensando si debería preocuparme o no por ella hasta que luego de unos minutos escuché como la puerta principal se abría lentamente.

Caminé a paso lento y abrí la puerta de la habitación para ir hacía la sala, con la esperanza de que Yuzu estuviera ahí...

-Vaya a la hora que llegas, me tenías preocupa- -. -Se calla rápidamente por la vergüenza al percatarse de que esa persona que estaba en la sala no era Yuzu.

-¡Mei-chan...! Estoy en casa. -Sonrió una mujer de cabello castaño para darle un efusivo abrazo a la menor-. ¿Cómo estás?, ¿Y dónde está Yuzu? -Preguntó con una expresión curiosa.

-Bienvenida madre... -Sonrojada-. Yuzu... yo... no lo sé... -desvía la mirada-. Cuando volvimos a casa ella recibió una llamada y se fue sin decirme nada, creí que volvería pronto -mintió, no quería preocupar aún más a su madre al decirle que había discutido con ella.

-Eso es raro... -Respondió cambiando su semblante a uno preocupado-. Llamé a su celular para decirle que volvería esta noche pero al parecer lo tenía apagado. Sólo espero que no le haya pasado algo malo -suspiro.

-Madre... -susurró con culpabilidad y miedo al pensar en lo peor-. Quizá haya ido a casa de su novia, ya sabes... -Bajó la mirada intentando ocultar su enojada expresión.

-Alza una ceja en respuesta-. Es posible, pero no creo que por ello deje su celular apagado... aunque también pudo quedarse sin batería... -dijo de manera pensativa- ¡Pero bueno! Cuando vuelva hablaré muy seriamente con esa jovencita -Rió pícaramente-. Sólo espero que no me convierta en abuela tan pronto -miró a su hija menor con ternura-. Estoy segura de que tú tampoco quisieras ser tía a esta edad, ¿verdad Mei-chan?

¡YUZU, QUE NI SE TE OCURRA HACERME ESTO!

-¡NO! -sonrojada-. Por-por supuesto que no, madre -sonrisa nerviosa.

-Jajaja -acaricia su cabello oscuro cariñosamente-. ¿Tienes hambre? Estoy segura de que a Yuzu no se le ocurrió hacer la cena antes de irse así como si nada. Disculpa a mi hija por eso Mei-chan...

-No, no se preocupe por eso madre -La miró con una pequeña sonrisa-. Y sí, tengo un poco de hambre pero podría aguantar hasta que viniese Yuzu.

-Nada de eso señorita -negó con la cabeza-. No importa si a Yuzu se le enfría la cena, eso le pasa por tardona, y segundo, yo también me estoy muriendo de hambre así que no acepto un "no" por respuesta.

-Entonces está bien...

Madre volvió a sonreír mientras asentía en respuesta y se dirigía a la cocina, sé que no soy muy útil cuando se trata de cocinar pero quería ayudar, lo cual ella aceptó con gusto también poniéndome un mandil blanco como el de ella para hacer juntas en la cena.

Pasaron los minutos mientras ella me contaba lo que había estado haciendo mientras trabajaba, y los hermosos lugares que había visitado en Inglaterra. Sí, madre es una gran arquitecta muy reconocida en todo Japón e incluso se le daban nuevas oportunidades en otros países, aunque a veces a Yuzu y a mí no nos gusta que se vaya por meses a otras ciudades o países pues la extrañábamos mucho... Finalmente me terminé acostumbrando después de tiempo, pues Yuzu desde que era una niña según lo que me contaba madre vivía prácticamente sola y no la veía demasiado debido al trabajo... ¿Y quién cuidaba de ella? Pues le pedía favores a una amiga de mucha confianza para que la cuidase mientras ella estaba ausente...

-Suspiro triste-. Yuzu... -ensancha los ojos con sorpresa.

¡DEMONIOS, LO DIJE EN VOZ ALTA!

-Yo también la extraño Mei-chan -sonrió haciendo que las mejillas de la pelinegra se colorearan en un tono rojo carmesí-. Jaja te ves muy linda cuando te sonrojas.

-Ma-madre... -Mira hacía otro lado evitando que la viera más.

-Ya, ya no es para tanto -Sonrisa-. Ya casi está listo el Curry así que a partir de ahora yo me encargo... Puedes ir colocando los platos y cubiertos sobre la mesa, por favor Mei-chan.

-¡Sí!

Antes de acercarme a la alacena para sacar los platos se escuchó como alguien introducía la llave en el picaporte de la puerta principal, madre y yo nos miramos y ambas volvimos a observar la puerta. Se podía escuchar las risas desde afuera, y ya estaba claro de quienes se trataban...

"¡Eres tan increíble mi amor!"

"Ya lo sé, no hace falta que me lo sigas diciendo hermosa"

"Ay sí, olvidaba que mi novia no era tan presumida..."

-Jajaja, ¡Oye ya para y déjame entrar! -Siguió riendo mientras empujaba la puerta de su hogar lentamente, sintiendo las manos de su novia aferrarse a su cintura.

"Cof, cof"

-Eh~ -Voltea rápidamente percatándose de la presencia de su madre y la de Mei- Qué...¡¿Mamá?! -exclamó con una enorme sonrisa después de haber parpadeado un montón de veces, aún sin poder creerse lo que estaban viendo sus ojos-. ¡Hey~! Te extrañé mucho madre... -Dijo mientras soltaba el skate que traía y se acercaba rápidamente hacía la mujer para darle un fuerte abrazo.

Está cambiada... es decir... tiene otra ropa... ¡¿Se cambió en la casa de Fujioka?! ¡Eso quiere decir que antes estaba desnuda! Y entonces... las dos... tuvieron... sexo... ¿O me equivoco?

-Frunce el ceño mientras dirigía su mirada hacía la pelirosa quien se encontraba quieta en su mismo lugar, sonriendo al ver a Yuzu abrazar a su madre-. Fujioka-san... -La fulminó con la mirada.

-Huh~ -Le devolvió la mirada a la pelinegra mientras se cruzaba de brazos con una sonrisa triunfadora-. Aihara-san... -se lamió los labios.

-Mi bebé... -Sonrió Ume al sentir a su hija acurrucarse sobre su cuello-. Yo también te extrañé, pero ahora mira como me recibes. Tarde y con un olor fuerte a alcohol -suspiró dirigiendo su mirada hacía la novia de Yuzu-. ¿A dónde fueron, eh?

-Sólo fuimos a montar en skate. ¡La hubiera visto suegra! Parecía una experta mientras retaba y humillaba a todos los chicos que se encontraban en las rampas y las zonas de juego, ganó demasiadas apuestas. Realmente me sorprendió... -Dijo mientras sacaba de su bolso muchos billetes, en total 5000¥.

-Abre los ojos con sorpresa-. ¡¿Cu-cuánto hay ahí?! -Preguntó Mei muy sorprendida, volteando a mirar a Yuzu quien solo seguía abrazada de su madre.

-Mmm -sonrisa-. Teníamos 5500¥, pero queríamos beber algo así que tan sólo quedó 5000¥. Aún así es suficiente por hoy, ¿verdad amor?

-La mira de reojo para después asentir con una sonrisa-. Sí, ya fue suficiente... -soltó un pequeño suspiro mientras se separaba del abrazo que compartía con su madre-. Pensé que llegarías el próximo lunes mamá -Susurró.

-Lo sé, yo también pensé lo mismo pero terminamos el trabajo en poco tiempo. Realmente me sorprendió ya que no tendría que esperar demasiado para poder verlas -Respondió con una sonrisa dirigida hacía Mei y Yuzu- Por cierto, te felicito por ganar en tus apuestas. Pero no deberías preocuparnos así, Mei-chan te estaba esperando.

-Ah. -Observó a su hermanastra con recelo-. Lo siento Mei...

-Yuzu... -Baja la mirada- No importa...

-Mira a sus hijas con confusión por la manera en la que se hablaban, hasta que decidió preguntar por algo que se percató desde que su hija mayor llegó-. ¿Oye Yuzu esa ropa es tuya? Te queda muy bien...

-No es mía, Hanna me la prestó ya que para poder montar en skate necesitaba una ropa más cómoda y con el uniforme de la academia estaba claro que no podía -sonrió mientras se rascaba la nuca.

-Oh, vaya... -Asintió devolviéndole la sonrisa.

-Tú madre tiene razón amor, esa ropa aunque esté un poco ajustada para ti por tu estatura no te queda nada mal -Añadió mientras miraba a Yuzu con unas zapatillas negras, pantalones negros y una polera roja-. Estoy pensando seriamente en regalártela -rió logrando que la rubia sólo negara rápidamente.

-Es tuya nena, no pienso quitártela...

-Pero te la estoy regalando -puchero-. Además esa ropa ya no es de mi estilo, prefiero las blusas, los tacones y estas faldas que son más cómodas para mí -confesó mientras acariciaba su mejilla cariñosamente.

-¿De verdad?, Aún no sé cómo puedes andar con tacones, una vez me los puse y casi me caigo -susurró avergonzada logrando que su madre riera por su comentario-. ¡Ma-mamá!

-Jajaja, ¡Lo siento es que lo acabo de recordar! -siguió riéndose provocando que Hanna la mirase con curiosidad-. Pasa que cuando Yuzu tenía diez años se probó uno de mis tacones y era obvio que se caería por la talla, además de que se necesitaba acostumbrarse a ello.

-...Me terminaron doliendo los pies luego de eso...

-Sonrisa-. Estoy segura de que te hubieras visto muy tierna a esa edad -besó sus labios con ternura.

No puedo seguir viendo esto, ¡Odio cuando la besa! ¡Odio cuando MI Yuzu la abraza!

-Tsk...-Aprieta los puños-. Madre, será mejor que sirvamos la cena -Dijo haciendo que Ume la mirase con una leve sonrisa.

-¡De acuerdo!, Ya oyeron tortolitas -Anunció la mujer logrando que Yuzu y Hanna se separen del beso y le sonrieran nerviosamente mientras asentían en respuesta.

-Iré a guardar mi uniforme con Hanna en la habitación, luego regreso para cenar madre.

-Está bien~ -Se rió antes de adentrarse a la cocina junto con Mei-. ¡Pero no hagan travesuras, están advertidas...!

-¡Ci-cielos mamá! -Sonrojo intenso-. Cómo se te ocurre...

-¡No se preocupe suegra, intentaré no ser tan ruidosa! -Agregó la pelirosa siguiéndole el juego logrando que Ume se riera fuertemente desde la cocina.

-¡Eso espero chicas! Vayan rápido.

-¡Sí! -Dijeron las dos al unísono.

...

...

...

¡¿Cómo que intentará no ser tan ruidosa?! ¡YUZUUUUU!

-Mei-chan, ¿estás bien? -Susurró con preocupación al ver la terrorífica expresión enojada de su hija menor.

-Sí madre, no se preocupe -Intentó calmarse mientras soltaba un pequeño suspiro.

-¿Segura? -La mira asentir-. Muy bien entonces... ayúdame con los platos y los cubiertos...

-Sí...

¡No! No estoy bien, esa idiota puede aprovecharse de Yuzu. ¡Madre no te dejes engañar!

-Es una chica muy agradable, ¿no lo crees? -sonrió mientras sacaba una lata de cerveza y más bebidas para las otras tres.

Por supuesto que no...

-Entrecierra los ojos con fastidio-. Eso creo... -Mintió colocando los cubiertos sobre la mesa.

Luego de colocar todo sobre la mesa madre sirvió un poco de Curry a cada plato, esperamos unos cuantos minutos para que Yuzu y la zorra de Fujioka salieran de la habitación pero al parecer parecían quedarse mucho más rato ahí dentro. Me estaba empezando a molestar hasta que madre me pidió que las vaya a buscar sin hacer demasiado ruido, de inmediato asentí y caminé por los pasillos hasta llegar a la puerta de la habitación que compartía con Yuzu.

Antes de tocar decidí escuchar un poco lo que hacían, tal vez y estaban hablando de algo importante...

Coloqué ambas manos sobre la puerta con sumo cuidado y apoyé mi cabeza sobre ella de lado, esperando a que dijeran algo. Pero lo que escuché a continuación me dejó sin palabras...

"¡Ah~ah Yuzu!, más rápido amor..."

"Mmm, ¿así? Uf..."

"¡Ah! ¡Sí! ¡Mmmh! Sí, así... que rico..."

¡ASÍ LAS QUERÍA AGARRAR PUERCAS! Maldita seas Yuzu, no dudaré en aprovecharme de ti luego de esto. No me importa si me odias aún más, pero te haré mía. ¡Y tú me harás mujer! Serás la primera en darme "eso" con o sin amor.

Te volveré a enamorar...

"¡Me voy a correr! ¡Ahh!~ ¡Ahh!~ ¡Ahh!~ Yuzu ¡Mmmn! Más duro, ¡más!, ¡más!"

"¡Sí, sí! Ah... Me vengo nena..."

"¡Trátame mal Yuzu! ¡Duro~ ! Soy tu perra, azótame , Ahh~ Ahhh~ ¡Sí~ ! ¡Quiero que lo hagas!"

Se aprovecha sólo porque sigue ebria...

"¡Mierda~ ! Tu vagina le está dando un suave masaje a mi miembro... ¡Ya no aguanto! Me voy a correr..."

"Ahhh~ ¡Métemela entera, quiero sentirte toda!, ¡Sí! ¡Sigue mi amor!"

¡NO TAN RÁPIDO!

-Toca la puerta con desesperación mientras la pateaba a la par-. ¡YUZU!, ¡SAL DE AHÍ DE INMEDIATO! -Gritó sin dejar de tocar la puerta con una mano.

-¡Oye, Yuzu...! -Llamó no pudiendo ocultar por más tiempo sus lágrimas, pues se sentía traicionada al saber que Yuzu lo estaba haciendo con esa chica en la misma cama que las dos compartían-. ¡Yuzu, Yuzu...!

-¡Mei-chan! ¿Qué es todo este escándalo? -Se acercó Ume con preocupación al verla llorar mientras tocaba la puerta en donde se encontraba Yuzu-. ¡Mei-chan! -La toma de los hombros para que la mirase- Pequeña, ¿qué sucede...?

-Abraza a su madre con fuerza mientras ahogaba sus sollozos sobre su pecho-. Ma-madre, Yuzu...

-¿Yuzu...? -frunció el ceño mientras miraba la puerta-. ¡Yuzu, hija ya vamos a cenar! -Exclamó volviendo a golpear la puerta- ¿Por qué no sales? ¡Yuzu!

-¡Ya voy mamá! -Se escuchó la voz de Yuzu algo agitada.

-¡Date prisa!

Es una idiota...

Yuzu salió luego de unos segundos más, era más que obvio lo que habían estado haciendo. Su cabello estaba un poco desordenado mientras se veían muchas marcas visibles sobre el cuello de Fujioka, ¡Esa zorra no paraba de mirarme con mala cara! No me importa, Yuzu es sólo mía y no iba a permitir que siga revolcándose con ella por más tiempo.

-Hija, ¿qué estaban haciendo ahí dentro? -preguntó la castaña mientras se cruzaba de brazos.

-Ju-jugábamos... Ah...

-Estábamos jugando con las almohadas, por eso estamos un poco alborotadas -Le rectificó a la rubia mientras tomaba de su mano haciendo que esta solo sonriera nerviosa.

-¿De verdad? -sonríe por la manera tan nerviosa en la que actuaba Yuzu- Uhum, parece que se lo tomaron tan literalmente lo que les dije. Hasta asustaron a la pobre Mei-chan...

-Fulmina con la mirada a la rubia haciendo que ésta solo girara los ojos con una sonrisa mientras atraía a su novia en un abrazo por la cintura- N-no estaba asustada, sólo quería saber por qué se estaban tardando demasiado.

-Cómo sea, ¿Ya está lista la cena mamá? Muero de hambre -Indagó Yuzu haciendo caso omiso a las palabras de Mei mientras se acariciaba el abdomen con una expresión hambrienta logrando hacer reír a las dos mujeres que estaba ahí, excepto a la pelinegra quien solo se fue a la sala muy enfadada.

-Pues... -Mira a Mei quien se había ido, con algo de curiosidad y preocupación- Sí... -voltea a mirar a su hija rubia con una sonrisa-. Hice el favorito de ustedes dos, Curr- -

-¡¡CURRY!! -Le brillaron los ojos con emoción- ¡Genial! -Fue rápidamente a darle un abrazo y beso en la frente a su madre-. Extrañaba demasiado tu Curry especial madre. Qué bueno que regresaste -sonrió alegremente.

-Jajaja -acaricia su flequillo con una sonrisa-. Yo también me alegro cariño.

-suelta un suspiro para luego esbozar una pequeña sonrisa al verlas-. Yuzu tiene una debilidad y ese es tu Curry, madre -Dijo cruzándose de brazos-, pero a ella también le encanta lo que yo le preparo. Así que todavía no cante victoria -se señaló así misma victoriosamente, haciendo que Ume solo riera y asintiera levemente con la cabeza.

-Estoy segura de que serás una buena esposa para Yuzu, pero yo siempre tomaré la delantera con mi ingrediente especial -Alardeó, mirando a la pelirosa muy sonrojada por lo que dijo.

-¿De-de verdad cree que seré una buena esposa para Yuzu? -Susurró con emoción y un poco de miedo por la respuesta de Ume.

-Lo acabo de decir, y sí. -Asintió mirando a ambas- Las dos se ven muy felices juntas, aunque no me gusta del todo que siempre se escapen y regresen muy tarde sin mencionárselo a nadie. Al menos pueden tener un poco de confianza conmigo...

-Perdón madre -dijo una avergonzada Yuzu-. Lo que pasa es que hoy tuve una pequeña pelea con alguien y quería salir a despejarme un rato...

-sorprendida-. ¿Con quién?, ¿Fue en la academia?

-...-Mira a Hanna haciendo que esta le devolviera la mirada con una expresión comprensiva- No precisamente... -La mira asentir mientras recibía un beso en la mejilla por parte de su novia quien sólo se acurrucó sobre su hombro.

-¿Entonces...?

-Mamá, fue con Mei. ¿No te lo dijo? -Suspiro- Por esa razón es que salí, porque no quería seguir estando aquí con ella.

-Ensancha los ojos con sorpresa-. ¿Con Mei-chan...? ¿Qué paso entre ustedes? La he notado un poco rara desde hace semanas, y no solo a ella sino que también a ti, Yuzu. Dime la verdad, tú y...

-sonrojada-. Madre... qué... ¿Qué insinúas? Ella... -Traga saliva con nerviosismo- Sólo está celosa, quizá sea porque soy su hermana mayor y... pues ya no estoy muy apegada a ella como antes... Ya ha pasado un año desde que vivimos las tres juntas, por eso...

-Suspira sintiendo que su hija le ocultaba algo más, pero lo dejaría pasar por ahora-. De acuerdo, entonces creo que estaría bien que se tomen un día libre las dos para poder hablar y salir a algún sitio. Y recuperen el tiempo perdido, ¿qué opinas?

-Frunce el ceño sabiendo que la pelinegra iba a ser una rival más para ella, debido a la cercanía que tendría con su novia-. Yuzu... -susurró sobre su oído haciéndola estremecer-, miéntele...

-Es-está bien -nerviosa-. Lo haré madre, quizá sea este viernes o el sábado por la tarde. Así no tendríamos que preocuparnos demasiado por los deberes de la academia.

-Me parece bien...

-Je -se rasca la nuca con nerviosismo-, vamos a la mesa la comida ya se debe estar enfriando.

-¡Es verdad! Vam- - -Interrumpida por el sonido de un celular-, Eh... -Saca el teléfono de su bolsillo, viendo que se trataba de una llamada-. Vaya, es Sho. Atenderé su llamada, pueden ir adelantándose, vuelvo en un instante. ¿De acuerdo?

-Sí madre...

...

...

...

Hanna y yo nos dimos una mirada cómplice para luego darnos un beso que no duró demasiado, ella me abrazó y se acurrucó sobre mi pecho mientras avanzábamos lentamente hacía el comedor. Una vez llegamos...

¡Pero qué está haciendo!

-¡Mei! -Exclamé con enojo mientras soltaba a Hanna y corría rápidamente hacía ella y le quitaba la lata de cerveza que estaba consumiendo-. ¿Qué estás haciendo con eso?

-¡Cállate Yuzu y dámela! -Gritó levantándose de la silla para intentar arrebatarle la lata de las manos, estaba con las mejillas rojas por el alcohol y un poco mareada.

-¿Pero cuantas latas bebiste...? -Susurró una Yuzu preocupada mientras la sostenía de la cintura para que no se cayera- Mei, mamá se enojará si te ve en estas condiciones -dijo mirando las cuatro latas de cerveza sobre la mesa.

-Imagínate la resaca de muerte que tendrá mañana -se rió Hanna mientras tomaba las latas ya vacías de la mesa y las tiraba en el bote de la cocina-, qué niña tan rencorosa... ¿Cuándo lo vas a superar? Ya deberías... -Fue interrumpida.

-¡Hanna no digas nada más! -Advirtió Yuzu con el ceño fruncido haciendo que la pelirosa se callara inmediatamente- Mei... vamos a la habitación, no creo que quieras comer después de esto. Levántate...

-¡Nunca más! -Volteó a mirar a la rubia con odio- Entraré a dormir a esa habitación, ¡Nunca! -sollozó con lágrimas en los ojos-. ¡Lo que me hiciste es mucho peor a lo que yo te hice alguna vez! ¡¡¡Sí te estás vengando te digo que esto ya es suficiente!!! ¡¡Ya no lo soporto Yuzu!! -Gritó mientras lloraba desconsoladamente-, te odio, te odio mucho...

-Cállate... -La atrae a su cuerpo para sostenerla y abrazarla-. Mei... -Acaricia su cabello mientras la abrazaba con fuerza, sintiendo como la menor lloraba ahogando sus sollozos sobre su pecho-. Me-Mei... -Susurró con la voz temblorosa.

"No quiero..."

"Estar sola..."

"No quiero..."

"Dejarte ir..."

"Quiero sostenerte..."

"No quiero que las cosas terminen"

"No me dejes"

"No quiero que termine"

Siento algo caliente resbalar por mis mejillas, ¿También estoy llorando...? No, no lo soporto. No soporto más verte tan vulnerable, verte llorar es mi debilidad... Mei yo...

-Yuzu... -Mira sus labios fijamente mientras se acercaban inconscientemente la una a la otra. Sintiendo las manos de su rubia bajar lentamente hacía su cintura.

Eres... eres tan suave y cálida... hueles muy dulce aunque con un toque amargo por el alcohol... Mei, no puedo... no quiero arruinar lo que tengo... ¡Maldición! El roce de sus labios me enloquecen, sus delicadas manos sobre mi rostro...

-Perdóname por lo que te dije... yo... estaba asustada... -Acarició su mejilla sin dejar de mirar sus labios-, pero ahora tengo una respuesta más clara... de todo lo que siento... Yuzu...

-Mei... Yo... -Desvía la mirada mientras quitaba sus manos de su cintura.

-¡Es una lástima Aihara! -Exclamó la pelirosa luego de ver esa escena que sin duda alguna le enojó demasiado- ¡Ahora Yuzu me tiene a mí!, ¡Cuando ella se sentía mal por tú culpa yo siempre estuve a su lado! Nunca la juzgué por lo que sentía, y lo peor de todo es que yo le daba ánimos para que nunca se rindiera. ¿Y qué pasó después? Le rompiste el corazón, la hiciste llorar un montón de veces... ¡Tú siempre jugaste con sus sentimientos! -La señaló con odio-, así que no te vuelvas a atrever a tocar a mi novia de esa manera. ¿Me oíste?

-Yuzu no es tuya...

-Sonrisa-. Claro que lo es, ¿Nos escuchaste verdad? En la habitación...

-Qué ustedes hayan tenido sexo no significa nada...

-Oh, claro que sí. Pero tú nunca lo entenderías ya que sólo eres una...

-¡Ya volví, lamento la demora! -Anunció Ume con una sonrisa adornada en sus labios, haciendo que el ambiente se volviera más tranquilo-. ¿Todo bien? Las escuché gritarse un poco...

-Ah, mamá sí... -La miró- Te estábamos esperando para comer, ¿qué te dijo papá? -Preguntó Yuzu desviando el tema mientras hacía que Mei se volviera a sentar con cuidado por lo mareada que se encontraba.

Después de todo Mei no está muy acostumbrada a beber...

-Pues dijo que regresaría el viernes, así que posiblemente salgamos todos en familia ese día -Respondió, notando un poco extraña a su hija menor-, ¿seguras de que todo está bien? Mei, cariño te noto un poco hiperventilada...

-Me emociona saber que sensei vuelva, eso es todo... -Intentó normalizar su respiración mientras fingía una sonrisa.

-Te traeré un vaso con agua, ya vengo -le susurró Yuzu haciendo que la pelinegra solo diera un leve asentimiento con la cabeza-. ¡Por cierto, creo que será mejor recalentar la comida! -Añadió la rubia desde la cocina.

-Es verdad, pero ahora no sabrá como antes -suspiro-. Iré a encender la cocina...

-¡Yo le ayudo! -Dijo Hanna con una sonrisa mientras recogía los platos que estaban sobre la mesa.

-Gracias cariño -sonrió Ume para luego adentrarse a la cocina con la pelirosa detrás, pero esta la siguió no sin antes darle una mirada de advertencia a Mei.

-Estúpida... -Pensó la chica de cabello azabache con enojo-. ¿Qué se cree? Yo sé que Yuzu todavía siente algo por mí...

Regresé con el vaso de agua para Mei, aunque antes Hanna me advirtió que no hiciera algo raro con ella mientras nos encontrábamos en la cocina. Está loca, ¿verdad? No pienso...

Ah, ya se percató de que estaba aquí. Pronto mis pensamientos fueron despejados al ver sus ojos amatistas sobre los míos, a veces no sé que me pasa. Me siento dominada cuando me mira con su típica mirada fría, y sólo tengo que obedecer como un perro fiel a lo que me ordena. Solté un disimulado suspiro mientras me sentaba a su lado y le entregaba el vaso de agua, ella sólo me agradeció y bebió del contenido del vaso con tranquilidad mientras yo la miraba detenidamente.

-¿Cómo así se te ocurrió beber casi todas las latas de cerveza de nuestra madre? -Pregunté mientras apoyaba mi mentón sobre una mano y la miraba de reojo.

-Deja el vaso vació sobre la mesa para voltear a mirar a la curiosa rubia que tenía al lado-. Eso no te importa, y dime tú. ¿Cómo se te ocurre preocuparme de esa manera? Nunca antes te habías ido por más de seis horas, o al menos dejabas una nota. Incluso madre te había estado llamando desde antes, y todo para que resulte que al final la señorita se fuera con su prostituta barata a tener sexo por todos los rincones de su casa mientras tomaban. ¿No te jode? Creí que te había pasado algo malo -Le golpeó el hombro haciendo que Yuzu solo esbozara una sonrisa-, eres una idiota.

-Mei, ¿en serio te preocupaste? Tú fuiste la que se encerró en nuestra habitación y me dejó sola, ¿creías que iba a seguirte? Ya estoy harta de esta situación, yo sólo quiero estar bien contigo y tratarnos como lo debimos hacer desde un principio, como hermanas.

-Yo no quiero ser tu hermana Yuzu. Te amo, no podría soportar eso...

-¿Entonces piensas que soy injusta contigo?

-Injusta e idiota serían las palabras correctas -frunció el ceño al recordar lo que había escuchado en la habitación-. Nunca pensé que fueras a ser capaz de hacerlo con tu novia en la misma cama que compartíamos, creía que al menos respetarías aquél lugar en donde pasábamos tantos momentos juntas por más de un año.

-"Momentos juntas" Oye te recuerdo que tú y yo nunca nos dimos algo más que besos y caricias encerradas en esa habitación. Pero si te molestó, en verdad lo siento... aunque no lo hicimos precisamente en la cama...

-Abre los ojos con sorpresa-. ¡Espero no se les haya ocurrido tocar mi escritorio!

-Te compraré otro, lo prometo -dijo mientras se reía por la expresión que tenía la pelinegra en ese instante-. ¡Auch! Eso sí me dolió -se quejó por el golpe que recibió en la frente.

-Te la voy a cortar mientras duermes...

-Mejor hazme otra cosa mientras duermo -respondió con una sonrisa pervertida que cambió rápidamente al sentir la mano de Mei sobre su muslo-. ¡Oye sólo estaba bromeando! -Le reclamó pues esa mano estaba acariciando un poco más de lo debido.

-¿Qué te hizo Fujioka ahí dentro? ¿Ella se te insinuó verdad? Es una zorra...

-Me hizo lo mismo que me estás haciendo ahora. La única diferencia es que ella se arrodilló y bajó la cremallera de mis pantalones para luego desabrocharlos, ¿quieres que te siga dando más detalles? Y por favor, deja de seguir llamándola así.

-Sólo estoy diciéndote la verdad, no entiendo como una estudiante como ella pueda estudiar en nuestra academia -replicó con mucho resentimiento.

-Lo mismo pensaste de mí y terminaste "enamorándote" -hizo unas comillas con sus dedos-. De una delincuente como yo.

-Tú eres muy distinta al resto, y no eres una delincuente. Ya pareces mi abuelo asignándote esa palabra...

-Jaja muy graciosa -Respondió sarcásticamente.

-Mmm...

-Aleja tu mano de ahí.

-Qué tímida resultaste Yuzu...

-¡Mei! Madre nos puedes ver, déjate de juegos ¿quieres?

-Entonces, dices que ella se arrodilló, ¿no...?

-¡¡Qué demonios Mei!! Suéltame, estás loca -se retorció sobre la silla al sentir el cuerpo de Mei posicionarse encima del suyo, moviéndose y haciendo fricción contra su entrepierna-. Nos vamos a caer si te mueves de esa manera...

-No me importa... Yuzu... tócame, quiero que me toques...

-¡No, quítate de encima! -Ensancha los ojos con sorpresa al ver a su novia detrás de Mei con una expresión espeluznante-. ¡Hanna! ¡No es lo que...

-¿Niñas qué están haciendo? -Intervino Ume colocando unos platos con Curry sobre la mesa para luego observar a ambas chicas en la misma posición, sólo que esta vez la pelinegra dejó de moverse y no se atrevió a voltear por la vergüenza-. Mei-chan...

-Ah... Madre lo que pasa es que Mei se asustó al ver a una pequeña cucaracha en el piso... Y... por eso se subió encima mío y me abrazó...

-sorprendida-. ¿En serio? Qué raro, nunca he visto cucarachas dentro del departamento. ¡Pero bueno! Ya está lista la cena, así que acomódense para comer niñas.

-Okay...

Mei se bajó de encima para ubicarse en su asiento como cualquier persona normal, ¡Se paso! Casi nos descubren, pero estoy segura de que Hanna no se lo creyó para nada por la manera en la que nos miró a ambas.

Luego empezamos a comer el delicioso Curry que preparó mi madre, menos mal que el ambiente luego se tranquilizó luego de que mi madre preguntara sobre la lata de cerveza que había dejado en la mesa. Tuve que decirle la verdad, después de todo se iba a dar cuenta...

Pero para sorpresa mía y de Mei no se molestó en lo absoluto, es más, le sorprendió pues estaba más que obvio que a ella nunca le gustó la cerveza. Yo me levanté de mi sitio para ir a la cocina y abrir la nevera para traerle una lata a mi madre, ya que yo, Mei y Hanna sólo tomábamos agua en esta ocasión.

Tuvimos una charla normal entre todas, aunque Hanna se notaba muy molesta conmigo cuando me miraba a los ojos. Quiero creer que es por que estoy sentada al lado de Mei y no al lado de ella... porque para lo otro no tengo excusas...

-Muchas gracias por la comida señora Ume, estaba deliciosa -Dijo Hanna con una sonrisa dirigida a la mujer mayor, quien sólo asintió devolviéndole la sonrisa.

-No hay de qué pequeña, me alegra que te haya gustado...

-Sí -mira a Yuzu quien sólo desvió la mirada al instante-. Creo que ya es momento de que me vaya, nuevamente gracias por recibirme. Qué tengan buenas noches. -Se despidió la pelirosa sin volver a mirar a la rubia para caminar hacía la puerta con rapidez.

-¡Ah!, demonios ¡Hanna! -Exclamó Yuzu levantándose de la silla para correr hacía la pelirosa, pero esta hizo caso omiso a sus palabras mientras salía del apartamento sin querer escucharla-. Tsk... ¡Madre, ya vuelvo! Iré a hablar con ella.

-¡Espera un momento, Yuzu! -Dijo demasiado tarde pues la rubia ya había salido del apartamento para seguir a su novia-. Pero qué le pasa a esta chica... -Suspiró volviendo a tomar de su lata de cerveza.

...

...

...

11:43 P.M

¿De verdad se fue a seguirla? Esto ya no me está gustando...

-Mei, ¿Tienes alguna idea de lo que sucede?

-Niega con la cabeza-. Quizá Yuzu hizo algo que la molestó...

Mentirosa...

-Esta hija mía... -Sonrisa- Me recuerda un poco a su padre, él siempre era así de despistado con lo que hacía, aunque me causaba mucha ternura con la manera en la que se disculpaba. -Suelta un suspiro nostálgico- Siempre terminaba en una noche entera de pasión, él realmente era una bestia en la cama... Y hablo de la mejor manera... -Sonrió con las mejillas un poco rojas por el alcohol.

¡¡¡Demasiada información!!!

-Ma-madre, creo que debería dormir... -Sonrojada- Yo me puedo encargar de lavar los platos...

-Oh, gracias Mei-chan pero no es necesario. Todavía puedo quedarme despierta hasta muy tarde... -Dijo mientras dejaba su lata vacía sobre la mesa- ¿Quieres una?

-¿Eh?

-Me sorprendió lo que Yuzu dijo acerca de verte tomando una lata de cerveza. Y por supuesto que no me enoja ya que mi hija también bebe y sería injusto que tú no, pero, ¿Por qué?

-¿Por qué...? Mmm -se muerde el labio inferior con mucha pena-. Simplemente... tenía curiosidad por probar...

-¿Y te gustó?

-No demasiado... -Desvió la mirada.

-Jajaja ya veo. Yo empecé a tomar por la pérdida de mi difunto marido, sé que suena tonto, pero realmente me dolió su partida y caí en una fuerte depresión. Si no fuera por Yuzu seguramente ya no hubiera podido seguir más... -Susurró, pero luego movió la cabeza para volver a sonreír-. Además tener a Yuzu es como tener una copia idéntica a su padre, sus expresiones son muy parecidas... se ve que de tal palo tal astilla jaja

-Sonrisa-. Mi padre decía que me parecía mucho a mi madre biológica... pero solo pude verla en fotos...

-Me imagino... -Acaricia la mano de la pelinegra sobre la mesa- Estoy segura de que estaría muy orgullosa al verte, mira lo grande que estás. Eres la presidenta del consejo estudiantil, además eres una chica muy inteligente y linda.

-Asiente con una sonrisa-. Gracias madre...

-Solo digo la verdad Mei-chan, por cierto. ¿Mañana harás algo importante? Pensé en que Yuzu y tú tuvieran una pequeña salida para distraerse un rato...

-Alza una ceja azabache elegantemente-. No tenía nada planeado, pero. ¿Por qué exactamente?

-Creí que querías pasar más tiempo con Yuzu, si no quieres tampoco puedo obligarte. Pero escuché por ahí que estás celosa por la relación que mantiene con Hanna. ¿Es cierto eso?

-...

-Mei-chan...

-No estoy celosa madre, solo creo que Fujioka-san no es digna de Yuzu. -Respondió con un leve rubor en sus mejillas.

-Aww Mei-chan, eres tan tierna cuando te pones así -Rió enternecida la mujer mayor al ver su expresión-. ¿Entonces quien podría ser digna de mi bebé?

Estoy segura de que yo lo soy...

-No lo sé madre, quizá una chica más linda, inteligente, con unos ojos hermosos. Y dispuesta a todo por Yuzu...

-Mhmm... -Susurró pensativa- Mei-chan, ¿Puedo hacerte una pregunta y que me la respondas con total sinceridad?

-¿Qué es madre? -Respondió curiosa.

-A ti te gusta... ¿Estás enamorada de Yuzu? -Rectificó mientras la miraba con seriedad a través de sus ojos verdes.

-........

¡Eso no me lo esperaba en lo absoluto! Tiene que ser una maldita broma, y si le digo que "sí" podría alejarme de ella ya que Yuzu está de novia con Fujioka.

-¡No!, ¡No me gusta! ¡¿Por qué me pregunta eso madre?! ¡Sería muy raro, además...

-Esas miraditas que le das a Yuzu te delatan Mei-chan, no pienso enojarme si eso es verdad... por eso... ¿Te gusta Yuzu?

-...No... Sí... Quizá... Un poco... -Murmuró en voz baja.

-¡Mei-chan!

-¡Sí me gusta, estoy enamorada de Yuzu! -Confesó para luego cubrirse la boca con las dos manos mientras miraba a su madre con la boca abierta.

¡Siento mi cara arder...!

¡Qué vergüenza...!

-Sorprendida-. Va-vaya, entonces no fallaba con mis sospechas -cerró los ojos con una leve sonrisa en los labios- Muchas gracias Mei-chan...

-¿P-por qué? -Bajó la mirada intentando ocultar su fuerte sonrojo.

-Por decirme la verdad, ¡Eso quiere decir que me tienes confianza! Me siento orgullosa de mí misma... -Se señaló con una sonrisa.

-avergonzada-. Madre, creo que eso no es lo más importante ahora que lo sabe...

-Es raro el amor, porque se te aparece cuando menos piensas. -Asintió- Estoy segura de que no creíste enamorarte de Yuzu cuando la conociste, probablemente te causó muchos dolores de cabeza por la manera tan rebelde en la que se comportaba en la academia. Pero es lindo que lo admitas de esa forma...

-....

-Mei-chan, ¿Piensas ser digna de Yuzu?

-Sí, aunque en un principio no la traté como debía hacerlo... pienso cambiar para poder acercarme un poco más a su corazón... Madre, si esto le incomoda le pido una disculpa, ¡Pero quiero que Yuzu me vea con los mismos ojos que antes!, ¡Por eso daré todo de mí para alcanzarla!

-...-Sonrisa- No creí que Yuzu encontraría el amor al mudarnos a esta ciudad. Ella siempre decía que eso sólo era una distracción, que sólo quería vivir la vida loca; pero si Yuzu te veía con esos ojos estoy segura de que tocaste fondo en el terco corazón de mi hija. Y no me incomoda para nada Mei-chan, estoy muy feliz, pero... ¿Qué hay de Hanna? Ella también es una buena chica, con buenos sentimientos por la manera en la que trata a Yuzu...

-Yo solo quiero a Yuzu madre... a nadie más... ella le dio color a mi vida desde que la conocí, convirtió mis días aburridos en unos divertidos por las locuras que hacía sin pensar. Me enamoré y no lo quise aceptar, por eso la herí... y estoy arrepentida ya que debido a ello empezó a refugiarse en el alcohol, las chicas. Y entonces Hanna apareció en su vida para arrebatármela... -Sollozó en voz baja.

-Mei-chan... -Se paró de su asiento con preocupación para caminar hacía la menor y abrazarla amorosamente.

-Yo amo a Yuzu madre... ¡La amo!... -Lloró sobre su hombro soltando pequeños gritos- Es el amor de mi vida y no quiero perderla... Ya no quiero... No quiero cometer los mismos errores que antes...

-suspira mientras escuchaba los sollozos de la pelinegra sobre su hombro-. Está bien Mei... Llora todo lo que quieras... estoy aquí para ti pequeña...

Yuzu... Odio estar aquí sin hacer nada cuando sé que tú estás con alguien más esta noche... Te voy a demostrar que he cambiado, ya no soy la misma de antes porque me di cuenta de lo que perdí...

No supe valorarte, eso lo sé perfectamente...

Pero estoy dispuesta a darlo todo por ti...

Aun no es demasiado tarde, yo sé que no...

Somebody Else

Así que escuché que encontraste a alguien más

Y al principio pensé que no era verdad

Tomé todas mis cosas que hacen sonidos

El resto lo puedo hacer solo

...

No quiero tu cuerpo

Pero odio pensarte con alguien más

Nuestro amor se ha enfriado

Estás entrelazando tu alma con alguien más

Miro a través de ti

Mientras tu observas tu teléfono

Y luego te vas con alguien más

No, no quiero tu cuerpo

Pero estoy imaginando tu cuerpo con alguien más

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

Y vamos, nena (I know)

Esta no será la ultima vez que veré tu rostro

Y vamos, nena (I know)

Dijiste que encontrarías a alguien que tomará mi lugar

Oh, simplemente no creo que te lo hayas guardado

Porque vamos a seguir haciéndolo

Y cada vez que empiezo a creer en todo lo que estás diciendo

Me recuerdo que debería estar superándolo

...

No quiero tu cuerpo

Pero odio pensarte con alguien más

Nuestro amor se ha enfriado

Estás entrelazando tu alma con alguien más

Miro a través de ti

Mientras tu observas tu teléfono

Y luego te vas con alguien más

No, no quiero tu cuerpo

Pero estoy imaginando tu cuerpo con alguien más

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

"No quiero tu cuerpo, no quiero tu cuerpo"

¿Conseguir a alguien que amas?

...

¿Conseguir a alguien que necesitas?

...

¡A la mierda con eso, consigue dinero!

No puedo entregarte mi alma porque nunca estamos solos

¿Conseguir a alguien que amas?

...

¿Conseguir a alguien que necesitas?

...

¡A la mierda con eso, consigue dinero!

No puedo entregarte mi alma porque nunca estamos solos

¿Conseguir a alguien que amas?

...

¿Conseguir a alguien que necesitas?

...

¡A la mierda con eso, consigue dinero!

No puedo entregarte mi alma porque nunca estamos solos

No quiero tu cuerpo

Pero odio pensarte con alguien más

Nuestro amor se ha enfriado

Estás entrelazando tu alma con alguien más

Miro a través de ti

Mientras tu observas tu teléfono

Y luego te vas con alguien más

No, no quiero tu cuerpo

Pero estoy imaginando tu cuerpo con alguien más

(I know, I know, I know)

(I know, I know, I know)

(I know, I know, I know)

(I know, I know, I know)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top