mElAnIe

¿Morir? No nunca pensé que sucedería a esta edad, tan joven, no viví lo suficiente, No me lo suficiente, no fui suficiente para mi madre.

Cuando despierto me doy cuenta que estoy en mi cuarto, en la habitación de la casa de mi padre. No tengo conocimiento de cómo he llegado aquí.

—¿lani?— la voz de mi padre me tranquiliza. Corro a abrazarlo y él me toma en sus brazos. —¿qué sucede pequeña? el muchacho de anoche esta abajo esperándote.

—¿Estefan?

—no corazón, su hermano— me sonríe y me deja sola.

¿Su hermano? No, No puedo permitirme y si él también me quiere lastimar. Intento la manera de salir de aquí ¡por la ventana! Cuando era pequeña salía por la ventana para escaparme al parque con mis amigas.

Tomo el auto de mi papá y conduzco hasta la casa de mi madre.

—vaya, mira a quien tenemos aquí— mi madre me mira sonriente. Tienen maletas y bolsas alrededor de ella.

—¿te marchas?

—si, y tu puedes ir conmigo si prometes alejarte de los raritos de los CoOpEr— ella me toma de las manos esperando a que acepte.

Tengo tanto miedo de lo que Estefan pueda hacer que soy capaz de irme hasta a Vietnam con ella.

—si mami llévame contigo.

Ella me abraza, me duele ese abrazo, ella me necesita, me necesita porque soy la única heredera de mi papá y porque por medio de mí, sólo de mi puede conseguir cualquier cosa de él.

No llevo ropa en este viaje sólo mis documentos más importantes.

Iremos a la playa, mientras menos información sepan mis "amigas" sobre donde estoy mejor. Comienzo a recordar lo que sucedió ayer, no tengo ni idea de cómo llegue a casa de mi papá y la razón de que GaBrIeL estaba en su casa, sus ojos, me duele recordar sus ojos de Estefan eran de un color verde menta, como los ojos rojos de mis pesadillas. Me duele no conocerlo lo suficiente como para saber quién es realmente, me duele tanto amarlo que quema en lo profundo de mi ser.

Unos golpes desesperantes interrumpen mis pensamientos. Tengo miedo de quien pueda ser, así que tomó una navaja y pregunto a la puerta.

—¿quién es?

—Soy yo mi cielo— es la voz de mi madre pero esta cambia a una más grave mientras dice la frase —soy tu madre—

La puerta se abre de golpe y yo salgo volando contra la pared. Estefan corre hacía donde me encuentro, quiero correr pero mi cuerpo no responde, me levanto rápidamente en dirección al baño pero él es aún más rápido y me toma del cabello, me toma fuerte hacia atrás, en su boca se asoman un par de colmillos que toman mi cuello.

Despierto precipitadamente ¿todo ha sido un sueño? Á sido tan real que he vuelto a mojar la cama. Comienzo a llorar de la desesperación, no quiero temerle a Estefan, no a él.

Salgo de la habitación en dirección a la playa, Me siento observada talvez es el pánico o algo más, no lo sé y ni siquiera quiero imaginarlo. Me quedo paralizada ante la sonrisa diabólica y perversa de Samantha quien me mira desde la playa, parpadeo y rasco mis ojos en espera de que esto sea una alucinación pero es inútil ella está ahí en vivo y a todo color.

—Hola desaparecida— Samantha me abraza y yo no puedo moverme. —necesito que me acompañes con EstEfAN.

—No— una voz fuerte y bastante reconocida se encuentra detrás de mi, al voltear es el, es Gabriel

—¿Qué haces aquí?

—La pregunta hermanita, es que haces tu aquí.

—Vengo por ella esa fue la instrucción de EsTeFan.

—Corre— me dice Gabriel, tomándome del brazo para apartarme de Samantha.

No decido voltear hacia atrás, pero comienzo a correr como si mi vida dependiera de esto, lo cual es tan cierto mis pies se dirigen al mar, no, no otra vez, sea quien sea está de nuevo tomando control de mi cuerpo haciendo que me dirija al mar y aquí estoy hundiéndome, deseando poder nadar, pero por más que lo intente yo no controlo mi cuerpo.

Mientras pierdo el conocimiento puedo ver a EsTefAN él está, él está ...

GaMrEl

Ella es mía, y nada ni nadie podrá parar los planes que tengo para con ellos. Los hermanos cooper y Waldon.

mElAnIe

¿Morir? No nunca pensé que sucedería a esta edad, tan joven, no viví lo suficiente, No me lo suficiente, no fui suficiente para mi madre. No pude disculparme con Estefan, ¿realmente fui buena amiga? Fui lo suficiente buena para merecer ser llamada amiga. Si tan solo pudiera saberlo.