—Mira, Guren, el circo llegó—exclamó un chico de ojos esmeraldas, agitando un folleto que tenía entre las manos—. Vamos al desfile.

—Pareces un niño pequeño—Guren suspiró con pesadez. Su hermanastro nunca dejaría de ser un niñito para él—. ¿En serio te llama la atención eso? Ya estás grande, madura.

—Los equilibristas, más bien conocidos como "Los Gemelos"—leyó en aquel papel arrugado—. El famoso presentador "Ferid Bathory" y para el final del espectáculo, ¡El gran Mikaela!

—¿Y cuál sería el espectáculo de ese tal Mikaela?—preguntó el mayor de los dos con el ceño fruncido.

Sí, ese último título también había llamado la atención de Yuuichirou. Acercó aquel papel amarillento a sus enormes ojos verdes pero aquella imagen de tinta negra no sería nítida para nadie.

—No veo nada, ¿quieres intentarlo?—le tendió el folleto.

Guren examinó cada imagen de aquel papel hasta dar con el les había llamado la atención. Sin embargo, la foto parecía más bien una mancha, como si alguien le hubiera derramado café encima de ésta.

—Si este folleto te estafa, imagina cómo lo hará el circo—comentó el Ichinose ya harto de aquel tema. No le gustaban esos lugares en absoluto, prefería evitarlos a toda costa.

—Por eso tenemos que ir al desfile.

—¿Qué gano con eso?—repuso, incrédulo.

—Ver a los integrantes del circo.

Sin esperar la afirmación de su hermanastro, el menor comenzó a correr lo más rápido que pudo hasta donde se esucuchaba un gran alboroto. Gritos, trompetas y tambores, algún que otro llanto de un niño se podía distinguir desde lejos.

A Guren se le escapó una especie de rugido al ver cómo su familiar huyó sin siquiera esperarle.
No tuvo otra alternativa que largarse a correr ya que si no lo veía de cerca, se metería en líos como siempre.

Pronto vieron cómo el desfile se aproximaba hacia ellos. Al frente de todos iba un hombre de cabellos lila, alto y delgado con un bastón que lo movía de lado a lado en su marcha.

—¡El circo ha llegado, el circo ha llegado!—anunció y alzó los brazos al cielo—. Todos son bienvenidos, no olviden comprar sus entradas para el show de este fin de semana.

De pie entre el tumulto de gente, comenzaron a ver cómo todos los miembros pasaban frente a ellos.
Había un hombre con unos zancos de madera que caminaba y saludaba a los niños, quienes lo miraban con ojos brillosos.
También había dos jóvenes muy similares que iban de pie encima de dos elefantes. La chica tenía cabello rosado y el chico de un color violeta; Caminaban de un lado a otro con admirable balance en aquel gran animal.

—Guren, eso debe ser los equilibristas, ¿no?

El joven azabache parecía aficionado con aquella gente. Era de esperarse, nunca en su vida había concurrido a un espectáculo cirquense.

Guren miró el folleto para luego ver a los dos jóvenes.

—Sí, aquí se ve que son ellos.

Los miembros siguieron desfilando. Pasó una mujer baja de ropa y maquillaje colorido que le hacía reverancias a los niños, los cuales la saludaban con una sonrisa.
Después vieron a un hombre disfrazado de payaso quien era de la altura del Ichinose y a través de aquel maquillaje vio unos irises azules oscuros, algo que le heló la sangre. Él le tenía fobia a los payasos.

Casi a lo último, delante de dos osos con correas y vestidos rosados, venía un hombre fornido con un latigo en la mano. Claramente sería el domador de leones, pero no podían llevar un animal tan temeroso en medio del pueblo.

Pasaron otros icónos del espectáculo y aquel azabache tenía la duda de quien sería el tal Mikaela, ya que usualmente los más destacados venían con un animal a su lado. Parecía que no estaba ¿sería todo una mentira? ¿Una estafa?

—Me hiciste perder tiempo y no viste a una de las mayores atracciones—replicó Guren—. Te digo que es una estafa.

—Pero...pero...—su hermanastro ya se daba la vuelta—. ¡Podríamos preguntarle al presentador!

—¿Y crees que nos dirá?

—Puede que sí...

Y en menos de un parpadeo, el menor de los pelinegros salió corriendo hasta donde terminaría el desfile. Es decir, en la gran carpa que se veía desde la enorme distancia.

Luego de varios minutos de ir trotando por las calles empedradas, se detuvo frente a la carpa rojiza. Sin aliento, apoyó sus manos en las rodillas mirando aquella inmesidad. No se veía a nadie cerca, si entraba estaba seguro de que sería comida para los osos. ¿Con cuál excusa entraría?

Escuchó un gemido lastimero dentro de la carpa y eso logró explotar su curiosidad.

Sumergido en sus pensamientoa, levantó la lona para encontrarse con nada más que la penumbra, en donde hubiera estado más obscuro si no fuera por las luces tenues que colgaban. Frente a él, encontró una jaula enorme tapada con una manta negra donde probablemente provenía aquel quejido. Lo volvió a oír y se aseguró de que de trataba de un humano.

—¿Quién está...ahí?—preguntó Yuu ingenuamente, preso de su estupidez y curiosidad.

Dentro de la jaula, el chico rubio se tapó la boca para que no se oyera su respiración. Había alguien infiltrado, parecía alguien que entró sin malas intenciones por lo que deseó que se encontrara con Ferid y no con el dueño del lugar.

—Vaya, vaya~ ¿qué tenemos por aquí?

Al escuchar esa voz Yuuichirou volteó bruscamente y se encontró con el presentador. No pudo evitar farfullar.

—Yo, eh...quería hacerte una pregunta—titubeó unos segundos.

—¿Sí?—el hombre se acercó a él, examinándolo de arriba a abajo.

—No vi que el famoso "El Gran Mikaela" estuviera en el desfile y me preguntaba si no estaba más aquí...—su voz intentó sonar lo más clara posible.

Sus esmeraldas se volvieron a dirigir a la jaula, donde otra vez se escuchó un ruido.

—Ah...entiendo—canturreó—. Pero Mikaela es la principal atracción del espectáculo, por lo que sólo se da a conocer cuando hacemos el show.

—Ya veo...—murmuró algo desilusionado.

Ferid sonrió al ordenar sus ideas.

—Joven, ¿te gustaría obtener una entrada para el circo?

—¿¡Eh!?—sus ojos se iluminaron—. ¡Claro que me gustaría! ¿Pero cómo...?

No tenía suficiente dinero para eso y a pesar de su edad, no tenía idea de cómo ganarse la vida. Guren tampoco le prestaría dinero, eso estaba más que asegurado.

—¿Acaso no te gustaría trabajar en el circo?

Toda su euforia saldría a flote con esa simple pregunta.

—Sí, lo amaría—sonrió— ¿Pero qué tendría que hacer? No sé si tengo talento algu...

—¡MOCOSO! ¿¡Qué haces allí!?

Guren apareció detrás de Yuu y le dio un fuerte sermón en la cabeza. Éste le dedicó una mirada asesina mientras se sobaba su parte adolorida, otra vez arruinaba su momento.

Ambos vieron cómo un hombre con el disfraz de payaso puesto y con el maquillaje algo removido se acercó hacia ellos. ¿De dónde es que salía tanta gente?

—Ferid, dice Crowley que...—se detuvo en seco al ver a los dos pelinegros.

Guren tragó con dificultad a ver quien había sido el payaso de aquel desfile. El hombre tenía el cabello blanco y lacio, los ojos de un color azul oscuro y parecía tener su misma altura y edad. Su rostro era de un color blanco por el maquillaje y debajo de su párpado tenía pintada una gota de color celeste.

—Shinya, este joven es un nuevo integrante del circo—el presentador le dio una palmada en la espalda a Yuuichirou, el cual se extrañó al ver la mirada entristecida del peliblanco.

—¿Así es? Te deseo suerte—sonrió incómodamente y luego dedicó su mirada a Guren, quien permanecía estupefacto—. ¿Y tú? ¿También eres nuevo?

—No...yo...—¿acaso Yuu era nuevo en el circo? ¿En qué momento sucedió eso?

—Oh, ¿también te interesa entrar para ver el espectáculo de Mikaela?—cuestionó Ferid.

El Ichinose se dio una palmada en el rostro. ¿En serio su hermanastro entró al circo por un estúpido show? Sus padres lo matarían si se enteraban de eso, en verdad no podía quitarle los ojos de encima.

—Si este imbécil entra, yo también tendré que hacerlo.

Y así Ferid se abalanzó sonbre ellos para darle la bienvenida. Mikaela, por su parte, comenzó a desesperarse dentro de la jaula. ¿Dos personas entraron al circo por su culpa? ¿En serio lo hicieron por su show? Por un momento tuvo ganas de gritar pero, a pesar de que todos tenían sus dificultades, él era siempre el que más sufría.

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Capítulo dedicado a la admin más activa de Mikayuu es Más Canon que tu vieja ♡ ¡Feliz cumpleaños y disculpame por la tardanza! Espero que la pases muy lindo ^^

♧Me tenté a ponerle Gureshin porque la idea me pareció muy linda y aproveché la temática.