Capítulo X
La paloma es blanca, del bien, mas el cuervo es negro cual odio y mal hay dentro de su ser.
La urraca es blanca y negra. Pues aún no eligió su camino.
El cuervo llevará a la urraca a la destrucción,
la paloma blanca la llevará a la paz eterna.
La paloma debe guiar a la urraca por la oscuridad, pues más allá de esta se encuentra la luz, y alejarla de su camino hacia la perdición.
13041930
John se despertó de golpe. Vio que una manta le cubría y que Ayuki estaba tumbada a su lado, dormida. John se levantó y le colocó la manta a ella. Le retiró el cabello del rostro y luego se dirigió a la cocina para prepararse algo de comer. Mas no hacia otra cosa que pensar en ese sueño tan extraño que había tenido. "La paloma debe guiar a la urraca por la oscuridad, pues más allá de esta se encuentra la luz, y alejarla de su camino hacia la perdición. 13041930" aquellas palabras se repetían en su cabeza. ¿Acaso significaban algo? No, no lo creía.
Salió de la cocina y empezó a dar vueltas en el salón, pensativo. En ese momento9, su mirada chocó con su violín. No lo había tocado desde que Ayuki había llegado, y la verdad es que se sentía con ganas de hacerlo. Se acercó a este, lo sacó de su funda y lo colocó en posición para tocar la canción.
Ayuki despertó por una extraodinaria música que venía de abajo, en la primera planta. Atraida por la maravillosa sinfonía, bajó las escaleras con cuidado e ingresó al salón encontrándose con la grata sorpresa de John tocando el vioín.
-Hola Ayuki- La saludó el muchacho dejando de tocar.
-Por favor, continúa. Tocas de maravilla- Dijo ella encantada por la música. John se sonrojó lebemente por el cumplido de la muchacha y miró su violín.
-¿Quieres intentarlo?- Ayuki asintió frenética y se acercó a John, quién le explicó cómo debía sostener el violín y cómo debía tocar colocándose detras de ella. -Ahora, toca- Dijo. Ayuki deslizó el arco por las cuerdas haciendo que sonara un chirrido horrible.
-Es muy dificil...- Comentó ella con tristeza.
-Es cuestión de practica- Respondió John cogiendo el violín -Pero no te niego que es difíci- John colocó el violín en posición y continuó tocando aquella canción bajo la atenta mirada de Ayuki, quien escuchaba con asombro.
Tras terminar de tocar la canción, a John le entró una curiosidad en la mente, y se acercó a Ayuki.
-¿Qué pasa?- Preguntó Ayuki.
-Ayuki, ¿dónde estan tus padres?- Pregúntó John sin rodeos. Ayuki agachó la cabeza y se puso a jugar con la falda de la ropa que John le había prestado. _Si-siento si la pregunta fue incómoda, no respondas si no quieres.
- No lo sé- Respondió Ayuki. -El coordinador del circo me dijo que mis padres trataron de matarme y que él me había salvado la vida... De modo que no me quedó de otra nada más que quedarme con él
-¿Por qué?
-Porque no tenía otro lugar a dónde ir...- Un silencio innundó la casa. John no quiso seguir hablando de esto, así que subieron arriba juntos, pues ya era tarde, y sus padres estaban por llegar.
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