Notas: Ningún personaje me pertenece, todo es obra de Hato Moa.

Advertencia: Pareja homosexual.

Hago estos drabbles porque participo en el concurso FickersGang.

No fue un gusto conocerte

¿Un placer? ¿Algo anhelado? ¿Un deseo hecho realidad?

Su primer encuentro con Kawara Ryuuji estuvo lejos de ser todo aquello. Más bien podría describirlo a algo similar a una molestia.

No lo negaría, al principio sí llegó a dejarse picar un poco simple curiosidad. Según todo lo que había oído, el doctor Kawara era una respetable eminencia en el mundo de la investigación... Y solo en ello no se equivocó...

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Suspiró por enésima vez, ignorando los balbuceos del pasillo cada vez que se cruzaba con una nueva cara y la pasaba de largo.

No necesitaba presentar ni saludar ni compartir ningún otro acto cercano a la familiarización o mariposeo social, como quisieran llamarlo.

Era tonto, inútil y no lo toleraba.

¿Por qué iba a guardar interés en compartir intercambios de palabras con los demás?

Eran sus supuestos colegas, lo entendía... pero nada más. En lo que respectaba a sí mismo, ellos le resultaban especímenes aburridos y sin información útil para sus propias investigaciones.

Si no le servían ¿Para qué molestarse en tratar con ellos?

Una pérdida de tiempo que no se daría. Seguir con su trabajo era mil veces más importante, por lo que siguió calmo paso hasta el laboratorio 7... Hasta que algo lo hizo caer en el suelo.

_¡...!

No tuvo ni tiempo de preverlo o esquivarlo. Solo había intentado ingresar por la puerta principal para cuando esta se abrió de golpe, empujándolo hasta caer de sentón al suelo y tirar algunas de las carpetas que traía consigo.

De pura suerte no dejó caer algo más, aunque ello no disimuló su obvia molestia.

_¿Uh? ¡O-oh, lo siento mucho! E-estaba apurado y no me fijé ¿Estás bien? Déjame ayudar. -Escuchó al poco rato, a la vez que notaba cómo intentaban ayudarlo.

Gruñó, ignorándolo y tratando de levantar sus cosas por sí mismo. No le importaban mucho su ayuda o disculpas, solo quería ir a encerrarse en si trabajo de una vez para dejar de toparse con personas molestas.

Ni siquiera pensaba dirigirle una mirada, pero el destino... quiso otra cosa...

_Oye, en serio lo siento. Si quieres, puedo compensártelo de algún modo -Seguía con su tono amable- Eres nuevo ¿No?

_Con todo respeto, yo no necesito que---

...Como que al levantar la mirada al fin, se topase con el único investigador digno de su admiración.

_...¿Usted es...? -Apenas alcanzó a pronunciar, sin notar que su tono ya no sonaba tan esquivo como desearía.

_¿Uh? ¡Encantado de conocerte! Soy Kawara Ryuuji, bienvenido. Tú eres Isa Souma ¿No? Déjame darte un recorrido en compensación ¿Sí, Isa?

...

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...No había palabras para describirlo.

No fue nada de lo que hubiera podido prever o imaginar sin duda alguna, pero ello no borraba un hecho innegable:

Jamás lo olvidaría.