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 —No creo que sea buena idea... —murmuro Luna sentada frente al espejo de su habitación, el cabello rubio caía a sus costados y las pupilas verdes resaltaban por las pestañas largas y tupidas.

—Eres lo más parecido a la abuela, lo harás bien – le alentó Nicolás – son como dos gotas de agua, solo te falta completar el disfraz.

—Pero existe un problema—hablo Leonardo – Luna es más amable que la abuela.

—Necesitamos un cebo para practicar— hablo otro de los hermanos presentes. Todos se miraron entre sí, y una sonrisa surco los labios de uno de ellos, al comprender todos comenzaron a reír

—hay no..—musito Luna

—No creo que sea buena idea...—murmuró Luna al ver a sus hermanos jalonearse hacia el despacho

—Papá no sabe de esto, es una estupenda idea— opinó Nicolás.— además ocultamos tu esencia con ese perfume y con la ropa de la abuela, el no sospechara que se trata de ti si actúas como te enseñamos. Si logras engañarlo a él engañaras a los cazadores.

—si él lo descubre le dirá a Kyle, y estaré en serios problemas...— a Luna le parecía totalmente estúpida esa idea.

—Kyle tiene la culpa, él fue quien te ablando – a Leonardo comenzaba a cansarse de la actitud de su hermana – tú eras como la abuela hasta que él llegó.

Tal cosa. Por lo más raro que sonara había ofendido a Luna

—No es cierto!!— gritó ella

—Bien— uno de los hermanos de Luna golpeó la puerta del despacho — demuéstranos lo 

 —Adelante— respondió el padre de Luna del otro lado de la puerta.

Nathan revisaba y ordenaba algunos papeles, mientras que una ligera sonrisa se le asomaba al pensar en Estrella, su esposa.

Al ver que no avanzaba uno abrió la puerta mientras el otro la empujo. Luna cuatropeo un poco y al girarse la puerta ya había sido cerrada.

<<Maldición!>>

Dio media vuelta en su entorno y tomó aire. No sabía cómo actuar, su abuela siempre había sido brusca e irrespetuosa. Ella jamás se atrevería a levantarle la voz a su padre nomas porque si –eh... —se aclaró la garganta para intentar que su voz se escuchara un poco más a la de su abuela – Na-than... eje je je... — se rasco la mejilla. Odiaba este plan lo aborrecía.

Él la miró un momento, dejando de lado los papeles que antes tenían su atención. Entrecerró los ojos y asintió con la cabeza, dando a entender que la escuchaba.

—mmmh... retrocedió un paso, no lo aria. "—si te rindes ahora, los cazadores sospecharan. Y no solo nosotros estaremos en peligro, también lo estará tu prometido y tus amigas—"hablo Nicolás en la mente de la chica "—solo haz lo que yo te diga. ¿De acuerdo?—"

Luna tomó aire y cerró sus ojos intentando concentrarse. Al abrirlos inclinó su cabeza y entre cerro sus ojos para señalar su cara con el dedo índice

— acaso tengo algo pegado en la cara?— alzó una ceja – deja de mirarme así!— exclamó. Luna se acercó al escritorio del despacho para tomar asiento en una de las sillas y subir ambos pies al escritorio – algún reporte respecto al clan Nathan?— preguntó.

Nathan alzó una ceja y simplemente suspiró.

—Realmente nada que tú no sepas ya— respondió—. Solo que el viaje a Italia ya está confirmado.

Soltó el aire lentamente. Algo aliviado a decir verdad.

–es una estupenda noticia. Mi Estrellita ya echa de menos este lugar. Es muy grosera de tu parte y de tus hijos no llamarla— acusó

 Nathan soltó una risita. 

—Bueno, tu tampoco la llamabas— dijo tranquilamente mientras acomodaba los papeles que antes leía— Por cierto, escuche a mis hijos decir que no estabas. A donde habías ido?  

 Luna abrió sus ojos, en ese instante todas las voces de sus hermanos le llegaron de golpe en la cabeza. Todo tan revuelto de excusas que no sabía cuál decir. No hizo más que darles algún orden.

–hee, sí. Fui al aeropuerto— tomó su frente – ya sabes cómo son mis hijos, quieren que vaya por alguna tontería y luego me llaman para decirme que siempre no soy requerida— suspiro – un día de estos van a matarme.

 Nathan la miró un momento. 

—Entiendo— murmuró, no muy convencido—. Y cómo fuiste al aeropuerto y volviste tan rápido?

Entre cerró los ojos

–me fui anoche y volví ahora en la mañana. –excuso sonando natural

—Anoche?— repitió Nathan, quien se encogió de hombros— Si tu lo dices... por cierto, hay algo que mis hijos quieran decirme? Desde hace rato siento su presencia tras la puerta... 

 Y ahí fue donde todos se esfumaron

<<Demonios!>> pensó

Ahora Luna tendría que improvisar.

–pff – miro de un lado a otro— de seguro están aquí por... por, porque piensan que hablemos de quien estará a cargo ahora? Diego no está, Luna tampoco y ahora tú te irás con mi hija, y Kyle no puede tomar palabra ya que aún no es el esposo de tu hija. De seguro se mueren de ganas por saber quién estará a cargo ahora. — a decir verdad. Ni ella había pensado en ese detalle.

—Ya habíamos hablado de eso— le recordó Nathan—. Y de hecho, fue anoche... 

 Miro de un lado a otro –ya lo se... —suspiró – pero, de seguro ellos pensaron que lo íbamos a decidir hoy.. emmh— Luna bajo las piernas y se puso de pie. Necesitaba cambiar de tema – hablando de otras cosas. Crees que mis hijos acepten a Kyle para ser tu sucesor?

—Fuiste tu quien dijo que sería difícil pero no imposible— dijo Nathan, mirándola fijamente. 

—Lo sé— rodó los ojos— pero te recuerdo que tu no les agradas, y me atrevo a decir que solo te toleran – se le agotaban las ideas. –solo quiero saber qué es lo que piensas al respecto.

—Quieres saber que opino?— Nathan se acercó a ella y dejó un pequeño silencio entre ellos— Opino que si Lucy se entera de que te estás haciendo pasar por ella estarás en serios problemas, jovencita.

Luna abrió los ojos asustada. Todos sus hermanos le gritaban que alzara la voz, que actuará como Lucy y que exclamara qué, qué falta de respeto era esa. Que actuará como la diva que sería Lucy en esa escena.

Luna entre cerro sus ojos

– lo siento papi— habló.

"—DÉBIL!—"Todo los hermanos en sincronía le gritaron mentalmente  

 Nathan asintió.

—Todos ustedes, vengan aquí inmediatamente— ordenó en voz alta, claramente dirigiéndose a los hermanos de Luna. Miró a su hija y le murmuró— Tan machos y tan cobardes.

Esbozo una sonrisa pero eso no le quitaba el temor del regaño que iba a recibir.

Las puertas se abrieron al par el los hermanos de Luna entraron a regañadientes. Al estar al lado de su hermana unos voltearon a verla con desprecio y uno que otro la culpaba mentalmente llamándola "inútil". Ella solo giro su vista a otra dirección.

Todos se miraron entre sí y desde el fondo Nicolás fue lanzado por sus hermanos ya que después de todo de ellos, él era el más pequeño.

—Si de algo sirve...—comenzó— todo esto fue idea de la abuela.

Nathan los vio con severidad.

—Y ustedes, como todos unos hombres educados, solo la obedecieron, no?— riñó— Saben acaso lo que pudo haber sucedido si los cazadores hubieran sido los que descubrieran a su hermana?— se acercó un paso más a ellos— Su deber es protegerla, no ponerla en riesgo! Porque no mejor uno de ustedes se pone una peluca y sale con los cazadores, eh?— miró a la chica— Y tu, Luna, vale más que ya no te dejes influenciar por este grupo de cachorros si no quieres que todo el clan se vea en problemas con tu prometido, quien les recuerdo a todos que será nuestro líder.

Luna entre cerro sus ojos algo confundida. Sintió una ligera punzada en su cabeza y tomó esta con ambas manos – pero que "deja vu" más raro...— musitó para sí misma.

—Padre – hablo Leonardo – nosotros tampoco estábamos del todo de acuerdo con este plan. Pero la abuela nos ha insistido que esto es totalmente necesario.

—ella tuvo problemas con su clan y con la otra parte del nuestro en Italia. Los exiliados están por todas partes y los cazadores son el menor de los problemas por ahora –dijo uno de los hermanos mayores de la chica. El que estaba a su lado siguió hablando por el – Para los cazadores la abuela es un familiar lejano y como tiene más experiencia en la exploración del territorio los D'Lioncurt pide constantemente avances del territorio en caso de que nosotros dejemos algún rastro.

—Como sabrás— siguió Nicolás – El imbécil de Kristoff fue descubierto y herido de bala y a pesar de que no fue nada grave nos ha dejado al descubierto. La abuela necesita dar el reporte de que solo fue un inútil nómada para que dejen de buscar. Por eso es necesario que nuestra hermana lo de por ella, es la única que puede hacerlo.

—Ellos se verían horribles con peluca y labial— apoyo Luna alzando sus hombros .

 Nathan suspiró algo cansado. Porque los hijos tenían que crecer?

—Bien— murmuró sobándose las sienes can ambas manos—. Aun así, debieron pedirme ayuda. Soy su padre, además de que eh convivido con Lucero desde mucho antes que ustedes nacieran, como creyeron que podrían engañarme?— negó con la cabeza y soltó el aire—. Les dejaré seguir con su "plan" solo porque el color de cabello de Lucy no les combina a ninguno de ustedes— los señaló— Y Luna, Lucy no titubea y siempre mira a los ojos a la persona con quien está hablando. Mejora eso y será más creíble. 

Sonrió y asintió 

– prometo mejorar eso

—Aun así no despegamos la vista de nuestra hermana – aseguró Leonardo — la estaremos vigilando lo más cerca que podamos y estaremos ahí por cualquier cosa. 

 Nathan asintió y caminó a la salida, pero antes se giró y miró a su hija.

—... Tu prometido sabe que harás esto, verdad? 

—eh...—solo sonrió

Los hermanos de Luna se giraron para verla confundidos 

–¿Kyle no lo sabe?— preguntó Leonardo enfadado.

—el jamás me dejaría hacerlo – hablo y se cruzó de brazos. Aún seguía molesta por el problema de los nómadas y el hecho de que él no le dijese nada.  

—Por Dios...— murmuró Nathan, entre preocupado e irritado— Luna, esto va a ser un problema, sabes? Si por alguna razón Kyle se llegara a enterar esto sería otro inconveniente entre clanes. Así que llámalo para que esté al tanto.

Frunció las cejas y negó

– no lo haré –afirmó

Uno de los hermanos pasó una mano por su cara frustrado

–y otra vez va a empezar con sus niñerías.

Ella dirigió su vista al reloj

– es esta ocupado

—¿cómo lo sabes?

—por que ayer me dijo que no iba a asistir a la comida porque tenía asuntos importantes que hacer. –Rodó los ojos – de seguro tampoco sabe que estoy aquí.

—qué?!—le gritaron todos al mismo tiempo.

—Indie tiene mi cuartada no se alteren. —suspiro — Kyle tiene cosas más importantes que atender ahora, cosas de las cuales se suponen que no estoy enterada .

Nathan apretó los labios.

—Ojala que tengas razón, Luna— dijo para retirarse. 

Soltó el aire y miró a sus hermanos quienes ya la observaban

— y un una palabra de esto a Kyle— sentenció – si con alguien se va a enfadar será conmigo. Se lo diré mañana que llegue. –murmuró. 

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Luna tocaba su estómago, los nervios la carcomían. Lo único que la alentaba era el saber que tenía que esperar hasta la cena para tratar con cazadores

—Lucy!— exclamaron las mujeres que bajaban las escaleras. Había hablado demasiado rápido. – Ethan es muy amargado y nos echó de aquí – una de las mujeres tomo a Luna del brazo – Acompáñanos a casa, si nuestro padre se entera que estuvimos aquí cuidando de Ethan nos asesinara.

—p—pero... –musito Luna, no la dejaron terminar cuando ya la llevaban a rastras hacia la casa de los cazadores.

++++++++++ 

Luna miraba a su alrededor, estaba sentada en la sala y ya no era el ambiente tan alegre somos solía recordar.

—mamá!!— exclamó una de las chicas que estaba ahí – dile al estúpido de mi hermano que deje de tocar mis cosas!, me faltan tres dagas, una glock 17!

—la tomé porque en la cacería pasada me perdiste la mía!— exclamó el chico detrás de su hermana

—a quien le preste mi libro!, no sean así era del bisabuelo Jank aun no acabo de estudiar las huellas –gritó otro chico a sus primos.

Luna se sentía completamente excluida, no sabía qué hacer y cómo actuar exactamente en ese lugar.

Luna soltó un suspiro y se puso de pie para explorar el lugar

—Lucy!— escuchó una voz detrás de ella. al tirarse vio que se trataba de una de las primas de Ethan — necesito que me ayudes con los niños— la tomó del brazo y prácticamente la arrastró hacia el patio trasero 

++++++++++

—Porque es necesario que sepan Latín – opino Luna consternada. Ella no sabía latín y ni siquiera tenía idea de que su abuela lo supiera.

—Ya tuvimos esta conversación antes Lucy— le contestó una cazadora. Eso daba indicio de que Lucy tampoco lo sabía— para nosotros es importante saber dominar varios idiomas incluido el latín, las que ponte a estudiar junto a los niños.

Rodó los ojos con fatiga, justo como lo haría su abuela

—no te entiendo Aria!— gritó un niño aventando el libro por los aires— quiero al primo Ethan!— gritó

—Eso no está a discusión Evan – le regañó la chica que se levantaba a recoger el libro

—es cierto, quiero al tío Ethan él explica mejor – exclamó una niña dejando caer su cabeza al libro que tenía frente a ella.

—no empieces tú también Sally –la reprendió la mujer que minutos antes hablaba con Luna.

Luna soltó una risa – Ethan bueno en estas cosas?, si , claro – hablo.

La cazadora alzó un ceja – de qué te sorprendes?, Ethan fue el mejor de su clase—

—y eso que faltó casi todo un semestre – Aria volvió a tomar asiento al lado del niño.

"Lucy" junto las cejas – Ethan?— preguntó. Ella lo conocía más... despistado al momento de estudiar.

—en esta casa no se menciona ese nombre Lucero— Se escuchó una voz ronca. El líder de los cazadores se detuvo a observarlas y dirigió su vista a la pequeña Luna. Se tomó su tiempo para hablar como si analizara cuidadosamente las palabras que diría— tenemos que hablar – hizo un gesto con su cabeza para que le siguiera. Justo ahí Luna sentía como si el alma le saliera del cuerpo, temía que el cazador la hubiera.

Subió las escaleras siguiendo los pasos del anciano. Tomaba y soltaba el aire con discreción desviando su vista a los cuadros familiares de las paredes, unas eran de las familias de los tíos y primos de Ethan, incluso había una foto de Ethan cuando era más pequeño con sus padres y una pequeña Elisa a un lado. Muchas personas que estaban ahí ella las desconocía por completo, muchas fotos incluso era demasiado viejas.

—adelante

Luna se giró para ver al cazador que le abría el paso de entrada al despacho del anciano.

Tomó asiento frente al escritorio y miró al cazador atenta.

—he meditado tu propuesta— comenzó el hombre, Luna soltó el aire. El líder de los cazadores no la había reconocido, no sabía si era porque el disfraz era muy bueno o por la edad avanzada del señor

—eres una manipuladora!— exclamó el hombre – no sé qué ganarás al convencerme de tu absurda idea!

Luna juntó las cejas confundidas solo alzo una ceja y miró al hombre a los ojos. Tenía que escuchar el consejo de su padre y hablar sin vacilar— pero de qué me hablas esta vez?— pregunto

—ya te dije que Ethan no quiere volver a esta casa. Después de tu torpe discurso. Sé que Christian hizo mucho por mi familia esa noche, salvo a Elisa.

Luna alzó ambas cejas, esa versión no se la sabía

—pero no me vas a volver a manipular como cuando éramos jóvenes, ahora estoy casado, Lucero. Me enamore y me case con una cazadora.

Y esa versión mucho menos

—no sé de qué hablas. Yo siempre ame a Christian – contesto por impulso naturalmente ofendida.  

—Y nadie dijo lo contrario— entre cerro sus ojos confundido. — quiero que dejes de meterte en nuestros asuntos. A Ethan se le dio una opción y él la rechazó.

—por qué no simplemente le dejan estar con quien él quiere. Qué hay de malo en un licántropo— espetó.

— que sólo es aun etapa. Yo lo estaba de ti pero cambié de opinión.

—Tu querías matarme — murmuró entre cerrando los ojos por lo visto su abuela yo le había contado todo.

—no debiste verme usado desde un principio— el hombre se puso de pie.

Soltó el aire y se dejó caer al respaldo de la silla. Si era cierto lo que decía este hombre entonces ella tenía que seguir la corriente — pero lo mío era diferente. Yo me imprime de Cristian.

—Sólo alejarte de mis nietos— habló con autoridad — aquella vez prometí matarte. Y aquella otra te perdone y te debía una por lo que Christian hizo por mi nieta, pero en cuanto los exiliados se sigan esfumado todo volverá a hacer como antes.

Luna no sabía que responder a aquello. Sólo no apartó su vista del cazador e intentó no mostrarse intimidada.

Unos golpes en la puerta interrumpieron a ambos.

—Lo siento abuelo...— murmuró Zamira abriendo la puerta. —pero la cena está servida. 

Luna salió tras el anciano, soltando el aire. Por lo que había escuchado la cena era el único lugar donde ambos clanes conviven juntos.

Ella giro su vista en el pasillo y observó a Maggie discutir con una mujer a gritos. Al parecer era con su madre.

—déjame en paz Jenia !!— gritaba.

—deja de ser tan berrinchuda Margaret, le diré a tu padre!

—tu no me mandas, no eres mi madre! — o al parecer no era su madre — no te mato solamente porque estas con mi padre, pero te advierto que si te vuelves a meter en mi camino date por muerta! — vociferó.

— Así es todo los días — rodó los ojos Zamira al notar que Luna los observaba. 

Tomó aire la mayoría de los cazadores ya estaban en la mesa. Enseguida se veía la división de los Dlioncourt y los Jager. De un lado tan animado y el otro tan... tan seco y carente de ánimos. 

Todos comían en silencio, era algo incómodo Luna hizo una mueca pues le había servido un gran trozo de carne de venado.

Luna odiaba la carne de venado.

Luna no podía comer carne.

Sólo desviaba el trozo para sólo comencé las verduras.

—y bien, dime que es lo más raro que has cazado?— se pregunto un cazador a otro

— un wendigo, esas cosas son horrendas — respondió otro entre risas.

—por favor!— exclamó un cazador de la otra familia — un Wendigo?, esas cosas son lo más fáciles asesinar sólo les aprendes fuego y ya está! un rougarou esas cosas si son complicadas de localizar.

—no, quieres algo difícil, las Shtriga, tienes que cazarlas mientras se alientan.

—Las wiccas son más desagradables— murmuró Nina. Con desagrado

— Señorita Lucero— habló el señor D'lioncourt cortando el ambiente relajado que tenían los jenger. — Porque ni iniciamos con los asuntos importantes. — Aclaró su garganta. — el lobo que estaba en el bosque y que por accidente a los jenger se les escapó.

—oh...— murmuró Luna, se aclaró la garganta pues estaba algo nerviosa. La voz de su padre al decir que tenía que ser firme y mirar a los ojos a las personas cuando hablaba con ellas. Pero para ella los cazadores eran como otros exiliados en el fondo Luna les temía.

—Sí— alzó su vista para mirar al cazador, se enderezaron y subió los codos a la mesa, su abuela siempre hacía eso y a Luna le enojada. — Era sólo un nómada, pero ya nos hicimos cargo de él — contestó.

—así de fácil?, como están tan seguros de ello?— pregunto — como saben que no venía acompañado o que era un nómada.

—Los nómadas viajan solos— alzó una ceja— cualquier cazador lo sabe — soltó el aire con pesadez— además dimos un recorrido por todo el bosque, no hay rastros de más.

—y que hay del cuerpo?— preguntó maggie

—lo que se hace con todo licántropo, lo quemamos— algo sus hombros y dio un gran bocado al trozo de carne— aún así seguiremos al tanto, nos decidiremos en más grupos para cubrir el área, como di dijimos, haremos dobló posible para mantener a esta gente a salvo y de asesinar a toda anomalía que se presente a interrumpir la paz de este lugar.

Los cazadores miraban con curiosidad a Luna. — te ves... pálida....— murmuró uno de los D'Dlioncourt.

Luna se sería nerviosa pero no se doblegó — estoy algo enferma, ayer salí sin mi abrigo — murmuró.

Maggie miró a su padre quien ya la observaba. — bien. Está clan insta muy disciplinado, debería educar mejor a sus nietos Darwin — habló el cazador dando por finalizada la conversación.

Habían pasado las horas y casi darían las diez, Luna había vomitado y al salir Luna soltó un suspiro de alivio se había retirado por una "emergencia".

No sentía a sus hermanos cercas así que decidió avanzar un poco por el campo para ir directamente a su casa. De su bolsillo sacó su celular, se sentía mal por no decirle a Kyle lo que había ocurrido, miró el número de este y al momento en el que iba a marcar sintió una respiración detrás de ella, no era ni uno de sus hermanos. Trago saliva y se dio media vuelta, un licántropo mostraba sus dientes llenos de sangre gruñendo a Luna, sus ojos eran de un color miel y el pelaje era muy. Un rubio muy claro casi dando a blanco.

"—eres una mentirosa—" le acusó mentalmente.

Luna trago saliva y retrocedió lentamente pero por más extraña que sonará no se sentía asustada. Al tiempo que ella intentaba alejarse el lobo se acercaba, a Luna se parecía... familiar

"— me metiste!!!— " volvió a gritarle y dio un gran brinco hacia ella, Luna cayó al suelo

—Tu fuiste...—musito Luna — los ganados tú fuiste...

El lobo de gruñó y abrió el gran hocico cuando o una sombra gris se balanceo sobre el lobo lanzándose lejos de Luna.

—Diego— murmuró Luna sentándose en el suelo, una chica corrió hacia Luna ayudándole a ponerse de pie.

—cielos estás bien?— le pregunto, era alta, pálida su cabello largo y lacio unos ojos oscuros y rasgado.

—Reichel. —murmuró Luna y asintió. Vio como el Licántropo y su hermano forcejeaba.

—basta...— murmuró — basta Diego! —grito alejándose de la chica — le lastimas por favor sueltan!!!— gritó.

Su hermano muy confundido soltó al licántropo totalmente confundido el cual salió corriendo al bosque. Luna soltó un suspiro de alivio

Al tomar su forma humana se acercó a bancadas a su hermana— quien era?— le gritó.

Luna miró el bosque y sólo alzó sus hombros.

—no sabías quién era y me quitaste que lo soltara?!, estás loca!!!!— vociferó, Rachel se acercó para tomar el brazo de Diego y sonrió con dulzura — basta, gritarle a tu hermanita no ayudará en nada.... mejor vamos a casa.

y. sorpresivamente eso calmó a Diego — bien....

Luna alzó ambas cejas— deberías enseñarme a hacer eso...— murmuró.

Rachel sonrió— mañana investigaba e interrogar a tu hermana... tus hermanos nos esperan en casa para la cena de despedida — tomó a Luna del brazo para que caminaban los tres juntos.

—ni creas que te salvas de esta Luna— dijo Diego entre dientes. 

al ver a todos sus hermanos sentados en la misma mesa, hacía sentir nostalgia en Luna, sólo hacía falta su madre para que. la familia estuviera "completa", y que todo fuera como antes.

—Entonces se casarán en Italia— hablo Evan a su hermanito mayor.

—Así es— contestó Rachel.

—la abuela nos dijo que Kyle verá a nuestros tíos— habló diego a Luna.

—sip— contestó sonriente

Pero sus hermanos se vieron los unos a los otros no muy contentos como ella

—Sí, sé que no será fácil— murmuró.

—no te preocupes, Lucy te ayudará — alertó Rachel sonriente.

—A demás no sólo es la decisión de nuestros tíos la que importa— alentó Diego.

—está vez es diferente, al casarse con nuestra hermana Kyle no sería sólo un familia más, sería también un aliado a tratar.

—No ayudes Kriatoff— hablo Nicolás entre dientes. 

— No dije nada malo — rodó sus ojos.

—Si no tienes nada bueno que decir, no hables kristoff— acusó Andrew.

—Kriatoff tiene razón, al romper el trato Luna se convirtió en la firma de la familia

—nuestra familia no haría eso.

—ya lo hizo dos veces la firma del año pasado fue Jacqueline.

Luna se puso de pie, ya no deseaba hablar al respecto 

— me siento algo cansada y le dije a Kyle que llamaría. Así que me retiró, provecho...

Los hermanos de Luna observaron como Luna subía las escaleras hasta desaparecer.

—Baboso la asustaste— exclamó Leonardo dándole un zape a su hermano. 

Soltó el aire, Luna se sentó en la orilla de la cama de Kyle, al menos en esa habitación por una extraña razón no se sentía tan fría y sola como en la suya.

Ya había tomado una ducha y se había cambiado. Miro a Orión quien movía su cola de un lado a otro observado a la como incitando que hiciera la llamada de una vez por todas.

Miro su celular y dejó que la llamada se marcará, sabía que Kyle iba a estar molesto por llamar tan tarde pero era mejor eso a que estuviera molesta la mañana siguiente.

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 Jack y Megan veían una película en la sala, comiendo palomitas de maíz.

Tresh e Indie entraron, hablando de algo trivial.

— Si que se tardaron bastante— dijo Jack, sin dejar de ver la pantalla— Que hicieron?

— Retoque de tatuaje— respondió Tresh con simpleza—. Indie se terminó el suyo, también.

Jack juntó las cejas.

— Indie tenía un tatuaje?— preguntó en un murmuro a Megan.

Indie rodó los ojos pero aun así sonreía

— ya te había dicho, el día que perdiste el día que perdiste a Luna en el centro comercial.

— sí, la llevé conmigo el día que yo me hice el mío pero la muy chillona no aguantó — contestó Megan sin desviar la vista del televisor y llevaba un puño de palomitas a su boca.

—y está vez no dolió mucho — sonrió Indie.

Tresh soltó una risita.

Jack se encogió de hombros.

—Lo había olvidado.

—Alguna novedad?— preguntó Tresh.

— Si. Tu cabello es un asco. No debiste cortarlo tú mismo.

—Jack...

—Bueno, bueno. Al parecer nos iremos en la madrugada, pero quien sabe.

—No estás seguro?— inquirió Tresh, alzando una ceja acusadoramente.

Jack rió.

—Bueno, es que Luna no a llegado de donde quiera que haya ido... y Kyle está bastante molesto. Pero él no dice nada al respecto— respondió Jack, encogiéndose de hombros.

Tresh se tomó la frente, consternado.

— Y Kyle?

—En el despacho.

Tresh miró fugazmente a Indie para después murmuran un "ahora vuelvo" e ir en busca de su hermano.

— Luna a de estar bien, tal vez sólo olvido llamar — Indie alzó sus hombros. Pero eso le preocupaba.

—Luna siempre hace este tipo de cosas.

Kyle miraba el bosque desde la ventana del despacho, su semblante era impredecible. Su padre y su madre se habían retirado ya hacia un rato y Estrella le había llevado una taza de té, misma que ahora estaba vacía sobre el escritorio.

Tresh abrió la puerta con cuidado.

—Hey.

—Aún no llega— murmuró Kyle, respondiendo a la pregunta que su hermano aún no hacía—. Tampoco ha llamado.

Tresh apretó los labios y cerró la puerta tras de sí.

— Jack dijo que estabas muy molesto— comentó—, pero no parece que...

—Lo estoy— cortó Kyle, dándole la espalda a la ventana para mirar a su hermano sin cambiar su expresión—. Pero ya me cansé de discutir con ella siempre de lo mismo; hace cosas que la ponen en riesgo sin decirme— soltó el aire.

Tresh asintió.

—Con esto que armamos hoy supongo que estarán a mano— comentó.

—Luna es más importante que yo— respondió Kyle de inmediato—. Si le pasa algo...

—Para ella tú eres lo más importante, también.

Kyle apretó los labios. Tresh tenía razón.

Tresh iba a decir otra cosa, pero fue cortado por el sonido de llamada del celular de su hermano. Sonrió y se despidió de su hermano con un ademán mientras éste respondía la llamada.

—Hola— contestó Kyle, con voz neutra—. Pensé que ya no llamarías...

Luna hizo una mueca, Kyle estaba molesto. lo sabía.

—Yo también te extrañe — hablo intentando sonar inocente — lo siento mucho amor, quise llamar más temprano pero las cosas se me complicaron un poco y después mis hermanos organizaron una cena para despedirnos a mí y Nicolás y para festejar el compromiso de mi hermanito mayor. Y su prometida Rachel es muy estricta prohibió los celulares en la mesa — explicó. — apenas ahora me dejaron libre.

Kyle murmuró un "Ya veo" y luego suspiró.

—Nosotros partiremos en la madrugada— avisó—. Llegaremos a dos horas de que su avión se vaya...— tomó un pequeño silencio— A mis padres les hubiera gustado despedirse. Priya me dijo que te mandaba muchos abrazos.

Apretó sus labios y pasó una mano por su cabello que aún estaba húmedo— estas molesto verdad? — pregunto a pesar de ya conocer muy bien la respuesta.

Kyle soltó el aire.

—Te mentiría si dijera que no— respondió.

Asintió y se puso de pie, caminito de un lado a otro

— si hice algo arriesgado hoy — confesó— no voy a mentirte, no me gusta. Pero Kyle por todos los cielos, ya no soy una niña ¿por qué no confías en mí?, no siempre estarás ahí para protegerme y tendré que verlas por mí misma. No soy tan torpe.

—Confío en ti— respondió calmado—. Tanto lo hago que estuve de acuerdo en que volvieras a experimentar con ese veneno que casi hace que todo acabara. Creí que lo habías notado— suspiró—. Sé que no siempre estaré ahí para protegerte. Créeme, lo tengo presente desde que ese exiliado casi te lleva con él hace dos años, y también cuando caí estúpidamente en una de sus trampas y te dejé sola en el bosque. Lo sé, claro que lo se— tomó un respiro—. Solo... ponte en mi lugar un momento, amor. No me dices que haces ni por qué. Solo te vas. Cómo no quieres que me preocupe?

Entre cerro sus ojos — oh, claro que sé que se siente estar de ese lado, porque al parecer no soy única que hace cosas sin consultarle al otro— soltó el aire — pero bien, no importa no tengo razón por la cual reclamar verdad?

Él miró por la ventana.

—Ya se que ustedes se habían enterado de todo— dijo—. Zeth no pudo con el sentimiento de culpa y me lo dijo... debo tomar esta acción tuya como una pequeña venganza por no decírtelo?— por más que lo intentó, no pudo evitar esbozar una sonrisita divertida— Porque si así fue, entonces pido tregua.

Apretó los labios para no reír y sonar un poco más dura — no digas tonterías, no fue por eso — alzó una ceja — tal vez lo considere, no sé. Buenas noches.

Kyle soltó una risita.

—Sigues siendo una gruñona como cuando te conocí— bromeó—. Buenas noches, Luna.