Megan sonrió, y aun que no pareciera posible en verdad lo pensó unos segundos por obvias razones. —acepto — concluyó con una sonrisa — pero antes de eso quiero conocerte bien, ¿quién es Jack? Como no sé qué eres uno de esos tipos que seducen a las chicas para después abusar de ellas, matarlas y enterrar sus cuerpos en el bosque. Créeme he visto muchos casos así... en Discovery Investigation, pero existen. — lo pensó — es más, ¿cómo no sabes que yo soy una asesina en serie?, he estado en prisión y no te he dicho por qué. — se excusó sonriendo.

Jack no pudo evitar reír un poco.

—Buen punto, señorita Megan "Holmes"— dijo, sonriendo divertido—. Bien, hay que conocernos mejor. La pregunta es ¿cómo lo haremos? Solo nos quedan dos días y medio.

—Tres días y medio, si cuentas el día extra que tenemos que quedarnos por el vuelo — aclaro su garganta — muy bien, mi querido "Watson", creo que tendremos que hacer una investigación a fondo para poder solucionar este problema.

—Me parece excelente— respondió Jack— ¿Como sugiere empezar?

—bueno — lo pensó — empecemos con un tema, y después surjan las preguntas. Así se inicia una investigación según mi profesor. Iniciemos con eso. Has un resumen de tu vida y yo are el mío.

Jack asintió.

—Bien. Veamos...— lo pensó— Tuve una niñez bastante tranquila, se podría decir que era un niño muy bien portado, hasta que cumplí los cuatro. Me comenzaron a interesar las armas, tanto blancas, de caza y de fuego. A los once mi padre accedió a que yo aprendiera a manejarlas, desarmarlas y también algo de combate cuerpo a cuerpo. A los catorce fue que por fin pude transformarme. A los dieciséis me perfore la oreja. Cuando tenía veintidós fue que fuimos a la casa de Luna por primera vez, mi madre nos mandó a Ian, Tresh y a mí porque Kyle estaba en problemas. Íbamos a entrenar a sus hermanos y en el primer entrenamiento le dispare una flecha a uno— se encogió de hombros—. Detalles. Ahora tengo veintidós. Si de experiencias personales hablamos... bueno, ya sabes que soy virgen— recordó—, aclarando que no por eso significa que sea inexperto en ese tipo de cosas. Lo que me da más miedo... es Kyle furioso, pero también ya lo sabías— la miró— ¿se me escapa algo?

—sip — contesto — muchas cosas a ser sinceran. Por ejemplo: lo que te gusta y disgusta.

Jack asintió.

—Bien, bien— dijo, sonriendo—. Lo que no me gusta... bueno, realmente son pocas cosas; que se metan con mis hermanos, lo detesto. Las traiciones, creo que son lo peor. Las personas pesadas que se comportan como zoquetes, que son odiosas, hijos de mami y papi, y un largo etcétera. No me gusta que intenten manejarme, y.... bueno, acepto que aborrezco el brócoli y las películas románticas — sonrió—. Lo que me gusta... eso es más fácil. Me gusta practicar tiro al blanco, los deportes extremos, mi música favorita es el Metal, el color rojo es mi favorito, me gusta dar paseos de noche, es relajante... y acepto que cocinar no fue tan malo, tal vez lo intente más seguido.

Ella asintió apretando sus labios algo ansiosa — interesante –suspiro —Muy bien voy yo, emmh. Como sabrás mi nombre verdaderamente no es Megan – se encogió de hombros – pero créeme are lo que sea posible porque así sea. Gracias a que mis padres no tuvieron el apoyo necesario por parte de su familia tuve que crecer en un barrio de condiciones del asco para serte sincera. Así que no es del todo sorprendente del porque soy así. A diferencia de ti, yo no era una niña tranquila, era demasiado problemática y mis amigos de la calle les decía que me dijeran "llina", ya sabes por mi nombre. Pero estos idiotas pensaban que me llamaba Ginebra y lo escribían "Gina". Qué más da, me gustaba como se escuchaba y lo adopte. –se encogió de hombros para hacer memoria— a los quince le pregunte a mi madre que si podía hacerme una perforación y me dijo que no. Esa misma tarde fui castigada dos semanas. A los quince entre al internado Imperiatore siendo un prodigio becado, no tarde en rehacer amistades, por desgracia mismas que tenía en mi hogar, eso me envolvió a más problemas. A los dieciséis le pregunte a mi padre si podía tatuarme, me dijo que no y ya sabes que paso. Cuando tenía los diecisiete empecé a notar cosas raras en mí. También una chica nueva llego a la escuela y enserio que jamás me había sentido tan acosada en mi vida, por más que le molestaba y le hacia la vida imposible no dejaba de hablarme. De hecho, empezó a acosarme poco después de que le había gastado bromas de mal gusto, en verdad me daba miedo llegue a pensar que le gustaba o algo por el estilo. Luego resulto que ella tenía explicaciones a todo lo que me pasaba y que solo quería ayudarme a controlarlo. Sip, esa chica era Luna. Me hice su amiga y al volverse loca planeo escapar, me conto de este lugar me llamo la atención y eme aquí— suspiro – y si de ese tipo de experiencias personales hablamos, bueno... a mi último exnovio lo apuñale con unas tijeras al querer obligarme. Para mi desgracia sobrevivió e intento meterme a prisión – Jack alzo una ceja, Megan negó rotundamente– no quiero hablar de eso– suspiro – así que jamás he tenido esa experiencia. Y mi fobia pues...— señalo el lago con el dedo índice— si alguien me obliga a entrar ahí prometo que le dejo sin hijos.

Jack asintió, con una sonrisa por lo último que había dicho Megan.

—¿Cosas que te gustan y disgustan?

—Bueno... —murmuro Megan pensándolo detenidamente — lo que no me gusta emmm, no me gustan los exámenes, las matemáticas. Las niñas Barbie, los chicos que se creen la última coca del desierto. Las mentiras las odio. Lo que me digan que debo hacer, como lo debo hacer, cuando lo debo hacer. Las normas no son lo mío. Que me utilicen, me llamen por conveniencia, esto lo he visto demasiado. Odio ir de comprar, lo aborrezco ¿qué más? Detesto el chocolate, me gusta, pero a cierto punto me parece empalagoso al igual que la Nutella. — sonrió — lo que me gusta. Bien me gustan los Skittles wild berry y jugar futbol. Escuchar música, genero... bueno no tengo definido me encanta de todo tipo, ya que me gusta bailar y viajar mucho, también amo las carreras ya sea verlas o participar en ellas. Competir y también me gusta el rojo, pero no en mi cabeza. Gastar jugarretas y dormir amo dormir dos días seguidos si es posible. después de una semana muy dura de trabajo — suspiro — ¿alguna interrogante "Watson"?

Jack fingió pensarlo.

—Bueno, mi estimada "Holmes", a decir verdad, tengo una interrogante andando por mi cabeza— dijo— ¿qué fue lo que pensaste de mi cuando me conociste por primera vez?

—pues...— Chasqueo la lengua y vaciló antes de hablar —para serte franca, Luna me hablo mucho de ustedes cuando estábamos en el internado. Por eso cuando Indie y yo los vimos en el bosque nos sentimos algo aliviadas porque la verdad es que estábamos perdidas. Solo que no lo quería admitir, oh amado orgullo. — suspiro — en fin. Me conto todo lo que paso y lo que le dijiste cuando la viste, cuando jugo a las escondidas, el entrenamiento, todo. Y a pesar de que ella dijo que no podía juzgarte por qué no te conocía del todo, yo asimile mis prejuicios. En resumen... lo primero que pensé fue un "que patán"

Jack rio con ganas.

—Si, bueno, realmente mentiría si te dijera que esa no es la primera impresión que le doy a todos— dijo, y se encogió de hombros—. Y te confieso que cuando te conocí y vi lo fácil que te podía hacer enojar pensé "va a ser divertido molestarla".

—no Jack, no es divertido molestarme — volvió a hablar — y no solo pensé que fueras un patán, también pensé que eras un engreído estirado y mimado. Aparte de molestarme me evadías, en verdad me desesperabas. Tenía ganas de matarte mientras dormías.

—Si que me gane tu desprecio— rio Jack—. Aunque supongo que no te culpo.

Entre cerro sus ojos — enserio, ¿qué te hizo pensar que me gustaba Tresh?

Jack suspiró.

—Bueno, es una larga historia— comenzó—. Nunca se me ha dificultado tontear con las chicas que me parecían guapas, pero eso era porque nunca era nada serio. Entonces, después de molestarte y conocerte más comencé a frustrarme un poco por qué no sabía son acercarme más a ti, como hablar contigo sin comenzar una pelea— negó—, entonces fue lo de la fiesta de los cazadores, yo quería que fueras conmigo, pero no sabía cómo pedírtelo, nunca había hecho algo así. En resumen, Tresh se me adelantó, y me sorprendió que aceptaras fácilmente, además de que siempre me pareció que ustedes dos se entienden más que tú y yo, así que cuando Indie me dijo que a ti te gustaba y los vi bailando y riendo en la fiesta...— se encogió de hombros—, me lo creí.

— que querías que hiciera, yo intentaba entablar una conversación decente contigo y tu solo.... — Megan sonrió y extendió su mano para revolver el cabello de Jack de forma amistosa — y luego te ibas...— suspiro — además, nunca suelen invitarme a algún lugar y no me quería ver grosera...

Jack le dedicó una sonrisa a Megan.

—Lección aprendida. Invitarte primero.

Indie patinaba al lado del niño sonriendo. Miro a Nathaniel que ya se habia soltado para intentar a andar por si solo.

El niño perdio el equilibrio sentándose en el suelo y con la misma levantarse para volver a andar.

Indie volvio su vista para ver a Megan y a Luna con una sonrisa. Algo curiosa inclino su cabeza.

— Tresh, ¿puede hacerte una interrogante? ¿Una aparte de esta? — pregunto.

Tresh medio rió.

—Si, dime.

—pues — inclino su cabeza al otro laso — ¿la imprimación es un sentimiento o un instinto?

Tresh alzó ambas cejas. Giró su vista a sus hermanos, ambos sonreían a sus respectivas chicas.

—Bueno, se puede decir que es algo de ambas— dijo, volviendo a mirar a Indie—, pero deja ver si me puedo explicar; cuando te imprimas de alguien tienes un sentimiento en el pecho tan profundo que asusta. Es... es como un amor tan sincero que parece irreal, como de esos cuentos de hadas. Pero también es como un instinto. Como si por inercia terminaras junto a esa persona, ya no solo piensas en ti mismo, sino que tienes esa gran necesidad de ver por la otra persona y tratar de hacer lo mejor para ella— le sonrió—. Eso es lo que Ian y Kyle me han dicho.

—pero... si es un instinto... ¿no te estaría obligando a sentir? — volvió a preguntar.

Tresh miró a Indie.

—Cuando amas a alguien, tu instinto siempre te dictará que lo protejas. Digamos que es el sentimiento el que te obliga a tener el instinto.

—aun así no lo entiendo — suspiro — los humanos eran complicados para mí, agregarme otra especie no me ayuda en nada.

Tresh medio sonrió.

—Supongo que lo comprenderás cuando te suceda— le respondió—... ¿no estabas enamorada del hermano de Luna, Nicolás?

La sonrisa de Indie se desvaneció, trago saliva y desvió la vista hacia el suelo— llevo nueve años gustando de él, y ni siquiera parece importarle — bufo.

Tresh juntó un poco las cejas.

—Tanto tiempo...— murmuró. Torció un poco el gesto, hasta que algo se le vino a la mente— ¿y por qué no haces lo mismo que tú y yo hicimos con Jack y Megan?

—¡claro!— exclamo Indie — ... ¿que fue exactamente lo que hicimos?

Tresh rió un poco.

—Le hicimos creer a Jack que Megan estaba interesada en otro chico— se apuntó a él mismo—. Podemos hacer lo mismo con Nicolás, y también descubriremos si le importas o no. No deberías gastar tu tiempo en él si no hay ni una posibilidad.

—no creo que funcioné —murmuro. —corrección. No funcionará.

—Indie, no te rindas antes de intentar— la animó—. Esa no es la Indie que conocí hace algunas semanas— le sonrió—. Hay que intentarlo, no perdemos nada.

 —si tu dices...— murmuro no muy contenta.

El la miro y asintió. Pero aun así no le agradaba ver el triste semblante en el rostro de la chica—Vamos, dame una sonrisa— dijo Tresh, sonriéndole amistosamente.

Indie tomo aire para soltarlo y así sonreír un poco. Tresh giró la vista a Jack, tomó aire y lo soltó en una sonrisa amplia.

—Por lo menos esos dos parecen ir mejorando ¿no lo crees?

—si....— suspiro Indie — ahora sé que le debo diez dólares a un niño de cuatro — suspiro — mi único consuelo es que si todo sale bien. Se que tu hermano si cuidaría de Megan y no como los patanes que ha tenido por novios ella.

Tresh asintió.

—Quien lo diría— dijo—, mis dos hermanos menores han sentado cabeza y yo sigo soltero— negó, pero sonreía.

Indie bufo — por dios. La pregunta seria esta, ¿por qué yo?, siendo mayor y más guapa que estas dos ¿sigo estando soltera? — sonrió —... ah,, espera. ya recordé. — murmuró.

Tresh rió.

—Creo que tú y yo seremos miembros del club de los solteros.

encogiéndose de hombros — pertenecer a este club tiene sus beneficios. Los miembros tenemos pay y viaje a las Vegas gratis.

Tresh le sonrió.

—No estaría nada mal ir a las Vegas un día— dijo—, y me encanta eso del pay.

—vez, pertenecer a este lado también tiene sus beneficios; incluiría un gato de regaló, pero no soy muy fanática

Tresh negó.

—A decir verdad, yo prefiero los perros.

Indie hizo una mueca — yo prefiero los Elefantes

Tresh sonrió divertido.

—Bueno, nunca eh tenido un elefante, así que no sé qué decir.

—oh, créeme, es muy entretenido — sonrió.

Tresh rio un poco.

—No lo dudo ni un poco.

— cambiando de tema — hablo Megan aclarando su garganta — has tenido alguna novia antes?

Jack sonrió y se revolvió un poco el cabello.

—¿Novia? No— respondió negando—, nada de eso— la miró—... y tú, ¿cuántos novios has tenido?

—emmmh — Megan alzo ambas cejas, rasco su mejilla —¿tres? — vacilo desviando su vista de vuelta al lago.

Jack alzó una ceja, divertido.

—Mentirosa— rió un poco—. Anda, dime.

Ella tardo en responder, se notaba que no estaba cómoda con el tema— es complicado, no quiero sonar como una zorra al decirte que ni siquiera tengo la menor idea — confesó enseguida

Jack asintió.

—No pienso que seas una zorra— le dijo—, ni que suenes como una. Creo que todos hemos tenido nuestras experiencias pasadas, pero eso no tiene que afectar ahora.

—bueno, si lo resumimos — suspiro — no lo sé... pero que yo recuerde y haiga durado algo de tiempo. Tres. — Se encogió de hombros soltando un suspiro— ¿alguna otra duda?

—Si— respondió Jack— ¿cuándo y cómo fue que comencé a gustarte? —alzó ambas cejas.

—esa si es difícil — hablo Megan, mordió su pulgar intentando pensar. —No tengo, ni la menor idea. ¿quién gusta de alguien que te ínsula?, ¡eso se llama masoquismo!

Jack rio con ganas.

—Entonces los dos somos masoquistas— dijo—. Pero, vamos, por lo menos debes de saber por qué comencé a gustarte.

—bien — lo pensó una vez más — creo que fue desde la única vez que fuiste amable conmigo.

Jack hizo memoria.

—Ah. hablas de aquella vez que me disculpe contigo por hacerte enojar— dijo—. Si, fue la vez que te dije que me gusta tu cabello... ¡oye! no ha sido la única vez que eh sido amable contigo— renegó riendo.

—¿ah, sí?— Megan alzo una ceja — entonces dime porque no te fue tan difícil adivinar "la vez que fue"?. Por qué deje decirte que sonreírle y alejarte, evadirme y no dirigirme la palabra, y habla solo porque están los demás presentes ... no es ser amable conmigo — sonrió

Jack apretó los labios.

—Bien, tu ganas— se rindió, pero sonreía—, esa si fue la única vez que fui amable contigo. Lo admito.

—así que así se siente tener la razón —murmuró con una sonrisa — se siente bien. Debería tenerla más seguido.

tengo otra pregunta. — volvió a hablar Megan — tal vez no haigas tenido novia. ¿pero alguna vez has besado a una chica? Digo tienes veintidós, eres un chico atractivo. Así que, si me dices que no, bueno, en mi mundano mundo eso sería poco creíble y muy inusual.

Jack asintió.

—Si, eh besado a varias chicas— dijo, mirándola—. Eso y otras cosas más que... bueno, sería algo incómodo para ti, supongo.

Alzo una ceja— ah, ¿sí?, y según tú, Jackson, ¿qué es "incomodo", para mí?— ironizó

Jack desvió la vista.

—Bueno, más bien sería incómodo para mi decírtelo— murmuró—... ya sabes, es... me da pena.

—de acuerdo — hablo no muy convencida — bien, cooperare tus ultimas preguntas. ¿desde cuándo y por qué?

Jack volvió su vista a ella.

—Bueno...— lo pensó—, debo aceptar que desde que te vi me pareciste muy guapa, además de linda— se encogió de hombros—, luego tu personalidad. No todas las chicas tienen un sentido del humor como el tuyo, y también tienes carácter. El cuándo... fue justamente después de esa vez que te pedí disculpas, empecé a verte diferente después de ver tu reacción cuando dije que me gustaba tu cabello.

Megan sonrió, aún tenía otra cosa más que preguntar. Pero se debatía a si misma entre hacerla o no. — Jack — empezó — sabes que me iré. ¿que pasara después?

Jack pasó saliva.

—Eh pensado mucho en eso— dijo, tomando tono serio, sin bromear—. Se que no puedo interferir en tus planes y pedirte que te quedes conmigo, sería muy egoísta— la miró—. Y creo que la opción de irme contigo sería demasiado apresurada para ambos... por eso creo que, si estás de acuerdo y quieres seguir con esto, sería mejor llevar nuestro paso, yo podría visitarte en donde estés, salir juntos y esas cosas. Yo estaría dispuesto a esperarte... ¿tú que dices?

Megan miro a Jack y con la misma bajo la vista soltó un suspiro — me parece bien — respondió — Pero yo nunca estoy en un lugar "fijo".de los únicos días que podrías verme sin problema en el internado son cuando crean los eventos. —sonrió — y sirve que también visitas a Emily. Dos pájaros de un tiro. — se encogió de hombros— y cuando me quede de paso de algunos de mis viajes podría pasar a verte, ni no te molesta. Claro.

—No me molesta para nada— le sonrió, sincero, mirando la a los ojos.

Le sostuvo por un momento la miraba. Y la desvío para volver a mirad el lago. Inclinó la cabeza al ver a Indie y a Luna. Ambas comenzaban a reír sin razón aparente. ella solo frunció el ceño.

— Jack. ¿Te puedo pedir un favor?

Jack también miró al lago.

—Si, dime.

—bueno...— murmuro — ¿podrías enseñarme a hacer eso? — señaló a Indie y a Luna. — hablar mentalmente con alguien. Me siento excluida cuando lo hacen.

Jack sonrió.

—Claro— dijo, se acercó un poco más a ella y tomo su rostro con ambas manos, haciendo que lo mirara a él—. Solo concéntrate bien en la persona, en este caso yo, y piensa lo que quieres decir con mucha fuerza.

Entre cerro sus ojos mirando fijamente a Jack. El alzó una ceja y sonrió.

—No tienes que entrecerrar los ojos, eso lo hace muy obvio— le indicó—, solo concéntrate.

—ya, ¡lo intente no puedo! — exclamo.

—Tranquila— la calmó—. Solo relájate y concéntrate en mí. Piensa que ya estas dentro de mi cabeza y dime que es lo quieres decirme.

—bien — Megan intento concentrarse, pero nada llevo un buen rato intentado lograr algo "— odio las habilidades, las detesto!, aparte como me pides que me concentre, ¡si te tengo justo enfrente!—"

Jack soltó una carcajada.

—Yo hubiera preferido un "Jack, eres muy guapo"— dijo, con una sonrisa— ¿Ves? Ya lo lograste.

—¿en serió? — pregunto incrédula — tantas cosas que pensé, ¿y solo eso salió? — bufo. — ¿y puedo intentarlo con alguien más?

Jack rió un poco.

—Si, puedes intentarlo.

—por cierto — miro a Jack — ya te habían dicho que eres un vanidoso egocéntrico?

Jack se encogió de hombros.

—Varias veces— sonrió—, no es nada nuevo.

Megan solo negó aun sonriendo.

Ella volvería a intentarlo así que fijo su vista a Luna.

Intento concentrase en ella, pero al ver que Luna no se inmutaba sabía que no lo había logrado. Tomo aire para intentarlo una vez más, pero nada. Ella se acomodó en su lugar para volver a intentarlo solo que esta vez le fue imposible evitar hacer una mueca y entre cerrar sus ojos.

En cuestión de segundos Luna tomo su cabeza soltando un chillido.

Megan soltó una leve carcajada al ver la reacción de la chica; pero a Luna no le había padecido gracioso

"—vuelves a hacer eso en mi cabeza. ¡Y te prometo que te arrancaré de un jalón esa cosa del ombligo que tienes mientras duermes! —" grupo Luna en la cabeza de Megan, se veía realmente molesta.

—auch!— exclamo Megan aun sonriendo cubriendo su vientre con ambas manos.

Jack miró a Megan medio riendo, adivinando la travesura de la chica.

—esto es algo divertido — volvió a hablar Megan pasando un mechón de su cabello detrás de su oreja. —¿aparte de esto podemos hacer otra cosa?

Jack asintió.

—¿Como que se te ocurre?

—no lo sé — suspiro — no veo mucho que hacer por aquí.

Jack soltó el aire.

—Ni a mí se me ocurre algo.

—¿por qué no me enseñas otra cosa? — alzó sus hombros — tampoco se sentir presencias u oler las escénicas.

—De acuerdo— asintió Jack, levantándose de su lugar—, pero para eso iremos al bosque— le extendió la mano.

Megan tomo la mano de Jack impulsándose para ponerse de pie. 

Nathaniel volvió jalando a Indie un poco.

—si?— le pregunto

—tengo sed.

Indie asintió y patino hasta la orilla en busca de la botella de agua para el niño.

—En el auto hay algunas botellas con agua— le dijo Tresh a Indie.

Tresh miró a Nathaniel.

—¿Te estas divirtiendo?

—sip — contesto Nathaniel — mis papás prometieron que estaría en problemas en cuanto tocara suelo irlandés. Así que intento disfrutar lo más que puedo

Tresh apretó una sonrisa.

—Bueno... tienes un buen punto. 

—sabes Tresh, tuve un sueño muy raro — confesó el pequeño.

Tresh miró a Nathaniel y se agachó a su altura.

—¿Qué fue lo que soñaste?

—soñé con perros gigantes — hablo con simpleza — y que yo montaba uno por una extraña razón.

Tresh alzó ambas cejas ¿Sería posible que Nathaniel no estuviera del todo dormido en el camino? O tal vez se había despertado en el trayecto.

—Es un sueño muy interesante— dijo, con interés— ¿te dio miedo?

Nathaniel no pensó ni dos veces en negarlo.

—Entonces...— continuó Tresh— ¿era divertido?

—si — contesto sonriendo — casi igual de divertido como cuando mamá Gaby se transforma en un Lobo y me lleva de paseo junto a papá. Esperó y Belli también pueda hacerlo. Así mientras papá hace la guardia; mamá, ella y yo daríamos paseo juntos — suspiro con una sonrisa dando media vuelta para volver a patinar. No se habia molestado en esperar a Indie.

Tresh quedó sorprendido, de piedra. 

Indie patino de regreso con la botella de agua. Al no ver a Nathaniel cercas se frustro un poco al haber ido por "nada". Indie volvió su vista a Tresh algo confundida —¿hola?, tierra llamando Tresh — Indie movió una mano frente al rostro del sujeto.

Tresh parpadeo y miró a Indie.

—Nathaniel ya sabe que su madre es una licántropo— dijo—, dice que quisiera que Megan "también pueda convertirse en un lobo para dar un paseo con él".

Indie le miro con rareza — no lo creo, la madre de Megan o dio a a muerte su propia especie. Tal vez escuchaste mal, recuerda que el niño no habla al 100% este idioma.

Tresh negó.

—Nathaniel me lo dijo exactamente cómo te lo acabo de decir— dijo—. Pero, aun así... sigamos manteniendo apariencias.

—Fijo su vista al niño — igual de raro que la hermana — murmuro.

Tresh suspiró y se giró a Indie.

—Si, curiosamente... 

—me pregunto si su padre lo capacita como capacito a Megan — murmuro inclinando su cabeza.

—¿Que clase de capacitación?— preguntó Tresh.

—si — respondió — ella me decia que su padre siempre la llevaba al bosque de cacería. Si su consentimiento la entreno para ser una cazadora.

—Ya veo— dijo Tresh.