—Mi amor, ¿Por qué tan apagado? —KyungSoo sonrió con ganas, deslizando su índice por la barbilla del castaño. — ¿A caso no te hace feliz tenerme aquí?

—M-Muy feliz, muy feliz...— respondió inmediatamente, asintiendo con temblores en todo el cuerpo.

— Entonces sonríe para mí, Baek.

El chico se tensó cuando el pelirrojo le tomo de las mejillas, acercando demasiado su rostro. Tras notar que el chico le estiraba las comisuras de los labios, BaekHyun intento lo mejor que pudo de sonreír, logrando una mueca que estaba lejos de ser una sonrisa aunque a KyungSoo no le importo.

— ¿Lo ves? — asintió complacido, revolviéndole el pelo. —Si solo eres un chico bueno, nada malo va a pasar. ¿Entiendes, cariño?

BaekHyun asintió, mirándolo con nuevas lagrimas asomándose. KyungSoo frunció el ceño, apretando su agarre en sus mejillas, haciendo jadear al castaño de miedo.

—No, no, no Baek. — el pelirrojo lo obligo a mirarlo. —No vas a volver a llorar por ellos, ¡Mucho menos por el! ¡Jamás! — grito colérico, zarandeando su cabeza con fuerza. — ¡Eres mío!

BaekHyun, mordiéndose los labios y sin dejar de temblar, asintió mirándolo a los ojos. —Soy tuyo...

KyungSoo volvió a sonreír, colocándose detrás del castaño para abrazarlo de la cintura y pegar su pecho a su espalda, empezando a tararear la canción favorita de BaekHyun.

BaekHyun seguía temblando, congelado entre los brazos del que creía era el perfecto hermano mayor de su novio. Do KyungSoo era mayor que ambos por dos años, estudiando una carrera con excelentes calificaciones y ganándose solo buenas opiniones de la gente hacia él. El pelirrojo no era fiestero o busca problemas, siempre era muy amable con todos e incluso les ayudaba con sus tareas cuando lo necesitaran.

KyungSoo jamás se portó mal con él, tampoco le hizo comentarios de doble sentido, no intento tocarlo y mucho menos le coqueteo con o sin ChanYeol presente. Siempre lo había visto como un ejemplo a seguir y como un hombre al que admirar. No hubo señales de nada, ni de su secuestro ni de las lesiones que le infligió a su hermano y a YiXing, el novio de SeHun, otro de sus amigos, para que lo dejaran ir.

No se esperó que hace dos días, mientras jugaba baloncesto con Yeol y YiXing, KyungSoo llegara con bebidas para los cuatro y que tres de ellas estuvieran llenas de droga para dormir. Al sentirse mareados y con el extraño discurso que empezaba a soltar KyungSoo acerca de la belleza de BaekHyun y de lo mucho que había esperado para tenerlo para él, intentaron alejarse del pelirrojo, siendo ChanYeol el primero que intento evitar que se le acercara y siendo al único al que le pego con el mango del bate que llevaba y que habían ignorado. YiXing no dudo en intentar tumbar a KyungSoo, recibiendo un golpe con la parte de arriba del bate antes de caer al piso, inconsciente y con una herida en la cien.

BaekHyun no dudo en gritar lo más fuerte que podía a pesar de la pesadez de su cuerpo, siendo callado y cargado con una facilidad que daba miedo. Sabía que KyungSoo iba al gimnasio pero no conocía el alcance de su fuerza y no está seguro si le daba más miedo averiguarlo o verlo sonreír de la manera en la que le sonreía.

El primer día no dudo en gritar por ayuda, pidiendo por ChanYeol, por YiXing o SeHun, siendo callado por los gritos de KyungSoo y un fuerte agarre en la mandíbula. El pelirrojo estaba desquiciado, él estaba asustado y sinceramente, no estaba seguro de poder salir de sus brazos.

KyungSoo estaba loco, jodidamente loco.

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