—Baek, ¿Tienes mi apunte de inglés?

—Sip, ¿Dónde te lo pongo?

— ¿Aquí? Oh bueno, ponte en cuatro.

— ¿Perdón? —el castaño lo miro con el ceño fruncido, sonrojándose furiosamente.

— ¿Qué? —el pelirrojo levanto una ceja, acomodando sus lentes. — ¿O prefieres contra la pared?

— ¡KyungSoo!

—Ta bueno, ya me apuro. — bufo el pelinegro, terminando de pasar el trapo por las mesas. El chico de cabello rubio lo miro con las mejillas aun encendidas, murmurando que era un pervertido y atrevido. KyungSoo solo atino a ocultar su risa ante la adorabilidad de su novio.

KyungSoo y BaekHyun llevaban juntos cerca de dos años y en ese tiempo habían puesto una cafetería pequeña que levanto mucha más fama de la que esperaban y que les daba un buen ingreso como para mantenerse en la universidad. KyungSoo era el más serio e intimidante de los dos pero amaba a su chico y no tenía reparo en demostrarlo; BaekHyun era muy energético y se sonrojaba con mucha facilidad si se trataba de su novio.

—Entonces, ¿Lo hacemos en el cuarto o contra la barra?

— ¡KyungSoo!

—Yah, hablo de la tarea. —bufo con una media sonrisa, mirando como su novio apretaba el trapo con el que estaba limpiando la mesa solo para no aventárselo en la cara.

—En la barra, así será más fácil y podremos estar mejor atentos en caso de que vengan clientes.

— ¿Te imaginas que estuviéramos haciéndolo y entraran clientes? O mejor aún, mi hermano. —la risa maquiavélica de KyungSoo ya no le daba miedo a BaekHyun mientras a los demás sí. —Seria magnifico que entrara cuando me viniera en ti. — el trapo le dio justo en la nuca, haciéndolo inclinarse hacia la barra.

—Nada de eso, SeHun posiblemente no nos haría caso si viniera con YiXing. — comento BaekHyun jalándole una mejilla. —Y no lo haríamos con las persianas arriba. — le guiño un ojo con coquetería, desapareciendo por la puerta de la cocina.

—Oh Byun BaekHyun, de esta no te salvas. —gruño ladino, caminando hasta la entrada para voltear el letrero a Cerrado y seguir a su travieso novio. Estaba por llegar cuando su móvil sonó, haciéndole gruñir antes de ir a contestar. — ¿Qué? — su mueca de desagrado fue aumentando hasta hacerlo gemir de enojo.

— ¿Qué sucede? —BaekHyun salió con dos tacitas de té y una rebanadita de pastel. Miro a su chico maldecir en chino, idioma de donde solo conocía groserías y empezó a reírse cuando KyungSoo subió el volumen de sus insultos. —Es SeHun. — afirmo empezando a comer el pastelito.

KyungSoo y SeHun eran hermanos, siendo su chico el mayor, pero se llevaban de una manera muy curiosa y graciosa. KyungSoo era gruñón, arisco y serio mientras SeHun era bromista, juguetón y serio en algunas ocasiones; ambos eran celosos y posesivos pero disfrutaban molestarse entre sí y hacer tonterías. Los adoraba aunque a veces lo sacaran de quicio y quisiera darles de sartenazos.

Para cuando KyungSoo dejo de intercambiar vastos conocimientos de groserías chinas, termino de limpiar la cafetería después de comerse la mitad del pastel. El pelirrojo se le abrazo como koala como cada que peleaba, según él, con su hermano.

— ¿Qué paso ahora?

—Pregunto dónde estaba su jodida camisa azul.

— ¿La que le regalo YiXing?

—Aja, esa que lave ayer.

—Eres malvado, Kyung. Sabías que hoy iba a salir con XingXing.

—Se lo merece, me estropeo la cita del sábado. — bufo igual que un niño pequeño, haciéndolo girar para besarle las mejillas. Su KyungSoo también era adorable en varias ocasiones y esa era una de ellas.