Parado frente al espejo que esta en su habitación México mira su reflejo con aparente recelo, sus mejillas nunca habían estado tan abultadas, sus piernas y brazos parecen haber adquirido volumen pero, lo más importante era aquello de destacaba entre sus ropas esa pancita chelera de la que tanto había huido ahora estaba ahí, como un frío recordatorio de lo olvidada que ha estado su dieta esos ultimos meses.

ㅡ¿G-gordis? ㅡllamó México tímidamente. Se alejó del espejo para luego ir a su cama donde USA y él momentos antes veían una películaㅡ, ¿Desde hace cuando salimos?

Estados Unidos entrecerro los ojos mirando con cierta amenaza al mayor quien, solo atino a reír un poco sintiendo los colores subir a sus (ahora) rechonchas mejillas, Estados Unidos dejo su rebanada de pizza sobre una de las cuantas cajas que habían pedido, México frunció un tanto su ceño formando un puchero, a pesar de antes estaba "criticando" su cuerpo el olor a comida parecía ser demasiado fuerte y tentador ahora.

ㅡ¿Te refieres a salir en citas o ser novios oficiales?

México lo medito un poco y sabiendo el problema en el que se metería si osaba responder incorrectamente, no tenía otra opción:

ㅡSalir en citas, obviamente.

Estados Unidos cambio su expresión dejando en claro que México estaba a salvo de un berrinche, por el momento claro. Volvió a tomar la rebana de pizza, contando en voz baja antes de responder.

ㅡOcho meses y medio.

ㅡYo diría que hace unos diez kilos más o menos.

Estados Unidos solto una sonora risa causando que México tomará una de sus almohadas para pegarle un par de veces a su pareja.

ㅡ¡No es gracioso! ㅡgritó haciendo un mohín con sus labiosㅡ, Tú... ¡Tú no has subido de peso!

El menor dejo a un lado definitivamente su comida mirando con cara de cachorrito regañado a México, se acomodo en la cama quedando frete al mayor.

ㅡ¿En serio crees eso?

ㅡSi ㅡ"No" pensó el mexicano, cualquiera que viera a USA sabría que él también había ganado unos muchos kilos.

ㅡPero, pero ¡Si mi papá dice que me engordas! ㅡEstados Unidos cruzo sus brazos mirando acusadoramente al dueño de los ojos verdesㅡ, si tu has subido diez kilos yo creo haber subido veinte, falta poco antes de que sospeche que me has dejado embarazo.

México aparto la mirada con un notable sonrojo, balbuceando cosas sin sentido, Estados Unidos sonrió abrazando a su novio dejando un sonoro beso en sus mejillas de paso. México aparto al menor ocultando su rostro con ambas manos.

ㅡ¡Ya deja de sonrojarme! ㅡchillo con voz infantil.

ㅡ¡Pues tu deja de engordarme! ㅡrepusó USA con una pequeña sonrisa acomodando su cabello.

ㅡ¿¡Me estas culpando de nuestra obesidad!?

ㅡPues tu cocinas mucho ㅡsusurró con falsa inocencia Estados Unidos, México dejo de cubrir su rostro.

ㅡTú eres quien me lleva a comer hamburguesas ㅡdijó enseñándole la lengua, el rubio sonrió.

ㅡPero te gustan.

ㅡY a ti te gusta mi comida.

ㅡSi engordar fuera un crimen estaríamos presos.

México suspiro dejándose caer en la cama con un gesto derrotado, sus mejillas seguían algo rojizas y, el olor a comida le seguía pareciendo muy tentador, sus ojitos verdes se empezaban a cristalizar y, en unos segundos el mexicano había comenzado a llorar, Estados Unidos miró preocupado a su pareja antes de envolverla en un abrazo.

ㅡ¿Qué pasa darling?

ㅡYa no me vas a querer si estoy gordo ㅡchilló el mayor abrazando con fuerza a Estados Unidos.

ㅡEso es mentira, yo te voy querer siempre.

México oculto su rostro en el pecho del menor dejando un rastto de lágrimas a su paso.

ㅡ¿Aún estando gordo? ㅡpreguntó con voz débil.

ㅡAsí te ves más hermoso.