La planicie de Katze era un territorio maldito por un sin fin de guerras que ocurrieron a lo largo de las eras, siglos de batallas donde Miles i quizás millones perdieron la vida, esa tierra maldita, estéril y fábrica de no muertos, el lugar favorito de Re-Estize y Baharuth para su batalla anual, dado el amplio espacio y los obstáculos casi nulos.

El emperador había mandado a sus caballeros para estar listo para la batalla, sus Caballeros Imperiales estaban en posición, esperando la orden para avanzar sobre las fuerzas del reino, Nueva América seguía sin llegar y hasta ahora parecía que seguían más enfocados en sus propias bases y la construcción de infraestructura.

Ese año el Reino había reunido una fuerza de 240.000 efectivos, era la fuerza más grande que habían reunido hasta el momento, casi un cuarto de millón de hombres preparados para la guerra, o al menos esa era la idea a la que aspiraban.

La realidad es que había pocos soldados entrenados entre las filas del reino, una parte de ellos también podrían ser aventureros jubilados que estaban al servicio de algunos nobles, pero la realidad es que la mayor parte de esos números eran campesinos reclutados a la fuerza, sin motivación o moral para luchar más allá de defender sus propias vidas.

Por otro lado, el imperio había movilizado 6 de sus legiones, un total de 48.000 hombres, pero a diferencia del reino, ellos estaban bien entrenados y equipados, su moral estaba alta y aunque las fuerzas enemigas eran muy superiores en número, ellos estaban confiados en ganar está batalla.

Al frente del ejército se encontraba se encontraba Katari, la Campeona Imperial, ella al principio estaba destinada a ser el arma secreta para ganar la batalla contra Gazef Stronoff y darles la oportunidad de avanzar por el campo de batalla y ahora invadir la ciudad de E-Rantel.

La disposición de la batalla estaba casi lista para comenzar la batalla, pero el imperio parecía cauteloso, los observadores del reino se preguntaban que planeaban, hasta que se dieron cuenta de una serie de nubes de humo que se acercaba, avanzaban a una gran velocidad por el desierto hasta llegar a las cercanías del campamento imperial.

Se trataba de decenas de bestias de hierro, de dónde bajaban soldados con ropas y quemaduras extrañas, todos estaban preparando para la batalla, traían consigo algunos elegantes de hierro y extraños objetos con un tubo alargado en el frente.

Al lugar había llegado Roget, quien por mandato de la Presidenta de Nueva América había recibido control total de 10.000 soldados y varios equipos, listos para probar varios tipos de arma en oponentes, para después calcular el daño que podría causar en ellos.

Hasta el momento todo parecía en calma, se reunió con Katari y Ninble, uno de los Caballeros Imperiales, hasta el momento parecía estar todo en orden, los cañones y artillería lanza cohetes múltiples estaban en posición para lanzar un barrido inicial, además de los tanques que se encontraban en la vanguardia, la meta era causar un gran daño al ejército del reino para evitar su acción conjunta.

Su estrategia se basaba en la Guerra Relámpago alemana, Roget había llevado al General Patton, ya que le había prometido al emperador Jircniv avanzar hasta la ciudad de E-Rantel, la guerra parecía demasiado lenta, pero ellos solamente estaban allí para un empuje inicial y después aplastar por completo a las fuerzas de Re-Estize.

Estaban bastante avanzados en cuanto a su capacidad de ataque rápido, sus aviones de reconocimiento estaban vigilando los dominios de Terranova y Sadera ante una posible actividad para responder al ataque, hasta el momento permanecían en silencio, sin responder a las acciones agresivas de Nueva América contra el reino.

Dejarían el sur en par por ahora, no planeaban acercarse a ese pedazo de tierra invadido por semi humanos y que representaba quizás la región más pobre del reino, pero noto un gran movimiento más al norte, habían logrado encontrar indicios de un nuevo país que estaba listo para atacar, pero tampoco intervendrían, sabían que Mordor estaba en la región y la presidenta no necesitaba preocuparse por ese país infernal.

Roget por ahora quería acercarse a Arcadia, un país comercial bastante poderoso y que serviría de mediador en caso de una guerra, estaba llegando el momento de la batalla y el comandante supremo de las fuerzas armadas tuvo que salir de su tren de pensamiento para hacer caso a los asuntos del momento.

La artillería se preparaba la el ataque, los comandantes esperaron la confirmación, el infierno estaba por desatarse en la tierra, pero como poco más que un protocolo se mando a Katari para que diera el último aviso, una oportunidad de salvar vidas, aunque no precisamente la dignidad del rey.

La guerrera avanzo por tierra de nadie en un caballo negro de seis patas, portando con orgullo su armadura, avanzo entre la arena y logro llegar a las líneas enemigas, dónde fue recibida por un noble, quien miro con desagrado a la mujer que estaba a la cabeza del ejército imperial.

Katari: el Emperador Jircniv Rune Farlord El Nix les da una última oportunidad para la rendición de la ciudad, permitiremos que se retiren a salvó a E-Rantel y después a su tierra, también se a ofrecido un Salvoconducto para cualquier ciudadano del reino que dese retirarse, pero de no aceptar vamos a marchar si te ustedes, si aceptan van a levantar bandera blancas, de no hacerlo en quince minutos vamos a hacer que la irá del hierro caiga sobre usted

No espero ni un segundo para dar media vuelta y regresar a las filas del imperio, el noble llevo el mensaje al rey, quien en ese momento estaba pasando por un mal momento en la política interna, los desastres de Terranova, las invasiones semi humanas, sin contar que tuvieron que pedir ayuda a Terranova para salvar sus pellejos en la invasión del emperador demonio, todo eso había mermado su imagen entre los nobles y necesitaba una victoria en la batalla anual para poder reponerse.

Gazef pensó que haber dado la ciudad al imperio podría ser menos desastroso que luchar contra ellos ahora, ese país con la bandera de franjas rojo, azul y blanco, quienes tenían armas semejantes a las de Terranova, el asunto fue descartado y Ramposa eligió el camino de la guerra, convencido de al menos lograr mantener la integridad de su reino ese año.

En secreto había pedido la ayuda de Terranova, pero Siegfried fue muy claro y contesto de manera tajante que "A menos que Re-Estize sea masacrado, humillado y este por desaparecer, ellos no intervendrían en una batalla sin significado como esa perdida de tiempo de batalla anual", la frase después de eso fue un desperdició de memoria, ya que enfatizó la debilidad de Re-Estize y su incapacidad de combate en el extranjero, pero nadie quería escuchar a un vampiro humillar a la Realeza.

Cuando llegó el ultimátum de la guerra, Ramposa decidió no contestar y se ordenó el avance de la primera ala del ejército, 70.000 soldados al mando del marqués Boullope avanzaron de inmediato, pese a que aún había tiempo para considerar la oferta decidieron actuar mientras los soldados enemigos no tomaban la iniciativa.

El militar de Nueva América observó con atención el avance enemigo, con una sonrisa cruel marcada en su rostro, sabiendo que solamente marchaban a la muerte, los soldados del imperio permanecían a la espera, en posición defensiva, pero lo que se acercaba era una masacre contra los soldados de Re-Estize.

Se dio la fatídica orden de comenzar la batalla, las 50 piezas de artillería convencionales y 15 lanzadores de cohetes múltiples, fue entonces que se desató un evento que horrorizo a todos.

Cuando disparo una gran lluvia de hierro y fuego impacto a las fuerzas de Re-Estize, los proyectiles explotaban en el piso o a una altura que permitía que el proyectil causara tanto daño como fuera posible.

El bombardeó fue selectivo, atacando blancos específicos para dejar vivos a algunos elementos específicos, en tan solo 20 minutos de ataque eliminaron a cerca de 50.000 personas y causaron un caos generalizado, las bajas fueron atroces, había más heridos y todos parecían entrar en pánico.

Las ametralladoras comenzaron a disparar contra los soldados de Re-Estize, quienes corrieron por sus vidas, los soldados imperiales vieron con horror como los soldados del reino caían como moscas, sin oportunidad de luchar o defenderse, era como estar en un matadero, dónde las víctimas solamente pueden aceptar su muerte o tratar de escapar de sus verdugos.

Roget: ¿Cuándo van a avanzar? Se supone que solamente vamos a barrer una sección, ustedes deben hacer de verdugos para avanzar hasta la ciudad —El general estaba sonriendo, como si estuviera a mitad de un evento divertido o un entretenimiento particularmente bueno—

El bombardeó al fin cesó, las ametralladoras silenciaron su movimiento, dejando tras de si varios gritos de dolor provenientes de los soldados que estaban agonizantes, Katari observó el campo de batalla y tomo su espada, observando a Gazef Stronoff todavía de pie al otro lado del campo de batalla.

Para Re-Estize solamente quedaban escapar por sus vidas, pero el sentido de lealtad del Capitán Guerrero le obligaba a permanecer en el campo de batalla, para intentar ganar tiempo para que su rey escapé junto a los soldados, por lo que espero en medio del campo de batalla, con su espada sujetada a dos manos, pero nadie avanzo, solamente la Campeona Imperial fue quien monto un caballo y fue en dirección a Gazef.

El imperio tenía pánico de avanzar contra Re-Estize, no tanto por temor a su fuerza, temían que mientras avanzan ellos fueran los siguientes en morir por una descarga de fuego de los magos de Nueva América, Roget observó desde la distancia y ordenó a sus aviones avanzar tras Re-Estize, evitando atacar en medida de lo posible, ya habían demostrado su fuerza, y Tara seguramente lo reprendería por utilizar demasiado la fuerza.

Cuando los dos individuos más fuertes de cada país llegaron sus miradas chocaron uno contra el otro, ambos eran guerreros curtidos en combate, con experiencia diferente pero habiéndose consagrado al camino del guerrero.

Katari: ¿Por qué no te rindes de una vez? Normalmente mato sin piedad, pero siento que serías más útil estando con vida —Enterró su espada en la tierra, mostrando que no tenía intenciones de atacarlo por ahora— te doy la oportunidad de irte, estando herido no tendrías oportunidad de hacerme un solo rasguño

Gazef: es una buena oferta, pero me temo que no puedo retroceder ahora, el orgullo y dignidad de mi señor están en juego, si escogiera correr como los demás solamente dejaría en ridículo el nombre del hombre que me salvó —En lugar de bajar su arma, la elevó en contra de la Campeona Imperial, quien grupo de mala gana y tomo su arma de nuevo—

Katari: nunca entenderé a los hombres que ofrecen sus vidas ciegamente a causas perdidas, me ponen de mal humor y muestran su estupidez —Levanto su arma y está vez se dispuso a luchar contra el Guerrero del reino—

El Capitán Guerrero atacó de inmediato a una gran velocidad, para ser un humano tenía una fuerza y velocidad insuperables en su país y el imperio, sin contarla a ella claro está, ya que todos los ataques de Gazef fueron rechazados sin muchos problemas, cortes de luz y movimientos a velocidades altas eran lo que más caracterizaba a Gazef.

Su fuerza también era sobresaliente, Katari en una ocasión tuvo que aferrarse un poco a su espada para evitar que saliera volando por los aires, pero el tiempo se agotaba para Gazef, con cada ataque lo único que hacía era cargar la espada con energía y prepararla para un ataque devastador.

En un punto Gazef logro acercarse a ella y tratar de forcejear, la pateó en el estómago pero ella no se movió ni un centímetro, en su lugar ella respondió con un puñetazo en la frente del Capitán Guerrero, quien retrocedió un par de pasos y se dio cuenta que su frente estaba sangrando.

Trato de luchar de nuevo, pero se dio cuenta que ahora era la Campeona Imperial quien tenía la iniciativa en el combate, con cada choque de espada la hoja del arma de la joven se iluminaba, estaba cargando un primer y último gran ataque, ella había conseguido la energía suficiente para derribarlo de un golpe.

Los dos se prepararon para atacar, el Capitán lanzo cortes de luz, que fueron rechazados por un domo de energia, la chica entonces mostro una sonrisa felina, como la de un gato jugando con su comida, esta vez ella ataco con su espada, ataco el estomago de Gazef con la empañadura de la espada, sacándole el aire y despues le dio un cabezazo en el rostro para desequilibrarlo.

Aquel ilustre guerrero ahora retrocedía ante un implacable ataque de la chica, quien parecía inhumana, ya que se podía doblar sin problemas y despues salto sobre Gazef, el hombre trato de darse la vuelta, pero la espada de Katari lo atravesó por la espalda, saliendo hasta el estomago, el shock fue inmediato y la joven le dio la vuelta a la hoja para agrandar el daño.

Katari: ¿Sabes algo irónico de la vida? que muchas veces sus soldados luchan sin saber a quien matan o porque lo hacen realmente, tu morirás y creerás que hiciste alguna diferencia, pero lo único que hiciste fue desperdiciar tu vida —La energia de la espada comenzó a quemar la carne cercana y parecía dispuesta a hacer explotar la energia para dividir a Gazef por la mitad— la muerte les llegara desde el cielo

Los ojos del guerrero miraron como varios aviones caza pasaban por sobre sus cabezas en dirección a la retirada del reino, esta vez era seguro que no dejarían nada en pie, trato de moverse pero en ese momento Katari saco la espada y la utilizo para bloquear un ataque de un hombre de cabello azul que trato de cortarla con una Katana.

Esquivo los ataques y despues hizo un corte en el aire, la energia se disparo y al golpear su objetivo rompió la espada y despues le abrió una herida severa en el viento, lo pateo a un lado y despues observo a un chico con una brillante armadura plateada, que rebano su espada, pero ella sonrió con diversión.

Katari. Diez Cortes Felinos —Sus pupilas se alargaron y un par de orejas de gato salieron de su cabeza, ataco y en lo que pareció un parpadeo corto la espada en tres secciones diferentes, para despues despedazar la armadura, pero dejando al chico sin un rasguño— nada mal, pero si serás un poste para rascar entonces deberías buscar algo mas resistente

Su mano mostraba unas afiladas garras y estas emanaban vapor debido a la fricción, podría seguir luchando y acabar con tantos como pudiera, pero nadie le pagaba horas extra y estaba segura de que Roget no le pagaría un bono de productividad, por lo que limpio su espada con un pañuelo y se retiro a donde se encontraban las fuerzas imperiales.

La masacre fue brutal para el ejercito de Re-Estize, quienes se tuvieron que retirar a la ciudad lo antes posible para intentar no ser exterminados, de los imponentes 240.000 efectivos iniciales, se retiraron con tan solo 100.000 soldados y muchos heridos, los aviones acosaban la ciudad, esperando cualquier provocación u orden para reducir E-Rantel a una pila humeante de escombros.

El rey se encontraba de nuevo en crisis, su hijo mayor desapareció, su ejercito fue destruido en batalla sin siquiera pelear, incluso su mejor guerrero ahora estaba en cama con heridas casi fatales, todo estaba colapsando sobre si, pero empeoro tras una noticia que termino por dar una estocada a su viejo corazón, un pais no humano ataco por el norte y había destruido al menos tres ciudades, ademas de haber invocado a criaturas de pesadilla que estaban marchando en dirección a la capital.

Con esa noticia, Ramposa III colapso de su trono, un infarto lo derribo y todos entraron en pánico, decenas de médicos llegaron para intentar estabilizarlo, pero el daño estaba hecho, el rey quedo postrado en cama, dejando la decisión de rendir la ciudad al imperio con la condición de mantener la promesa de un salvoconducto para los que deseaban retirarse.

El emperador Nix ahora mismo estaba aterrado tras haber presenciado el alcance y magnitud del poder de Nueva América, no habían investido ni dos horas en la masacre colectiva de un ejercito, además de amenazar una ciudad por completo, no estaba ni cerca de poder plantar una resistencia, seria un suicidio.

La guerra al final fue una masacre, pero lo que estaba por suceder marcaria un precedente, un antes y un despues en la historia del reino y de toda la humanidad en el Nuevo Mundo.

Norte de Re-Estize

El Reino Hechicero estaba listo para desplegar sus fuerzas sobre Re-Estize, Mordor había dado luz verde acerca de que las amenazas eran mínimas, en cuanto a la movilización de Terranova y otros paises, por lo que las fuerzas heteromorficas avanzaron por el norte sin ningún problema.

Los soldados estaban en el sur y aun ellos habrían sido insuficientes para parar el avance de innumerables criaturas que estaban llegando por todas partes, Caballeros de la Muerte, Devoradores de Almas, un ejercito de criaturas que vivían en las pesadillas de algún demente, ya habían destruido cuatro ciudades por completo.

Matando a todos para impedir que se diera a conocer su avance, aunque no contaron con la presencia de algunos soldados de Terranova actuando como espías, por lo que la destrucción de las ciudades y pueblos llego mas pronto de lo que esperaría cualquiera.

Katerin calculo las perdidas iniciales en al menos un millón de personas entre combatientes y civiles, eso era un crimen de guerra en toda guerra, pero no movería un dedo hasta que estuvieran a las puertas de la capital, sabia que Mordor estaba tras ellos, por lo que esperaría un poco mas antes de comenzar movilizaciones serias.

Ryu estaba en alguna parte de la capital, la gente aun no sabia los horrores que venían sobre ellos, por lo que el aventurero se preparo para pelear, no podía alertar a nadie, los altos mandos estaban en la planicie, las tropas estaban fuera, no tenia mas opción que prepararse para ir a la batalla por su cuenta.

En medio de su preparación se dio cuenta que la gente comenzó a alertarse y estaban corriendo por sus vidas, el gremio aventurero estaba corriendo para escapar, la noticia ya se había corrido por todas partes, supuso que para Katerin mientras mas pánico exista mejor, ella necesitaba un pais endeble, por lo que no mandaría tropas y gastaría vidas de Terranova para defenderlos.

En su caminata se encontró con un grupo bastante peculiar, Blue Rose, las mujeres parecían apresuradas para ir a palacio, encontrando al aventurero enmascarado en su camino, quien para ellas se veía bastante tranquilo a pesar de los problemas.

Evileye: ¡Estamos bajo ataque! dicen que tenemos máximo seis horas antes de que lleguen los enemigos, hablan de no muertos y otras criaturas legendarias, miles están muriendo, vamos a hablar con la princesa Renner y quizás quieras venir con nosotras

Ryu: no me puedo ir, al menos no ahora, esta gente no puede morir, es una ciudad con mas de 500.000 habitantes, sin contar refugiados y otras personas, si los dejan morirán todos —Camino en dirección al muro norte, logrando ver ya las nubes de tormenta que se acercaban, seguramente para cubrir la incursión que se acercaba— nos veremos despues, tengo que prepararme

Tina: existe una diferencia entre valentía y suicidio, tu solo no podrás contra un ejercito, menos salvar esta ciudad

Ryu: nunca sabre si puedo si nunca lo intento, además... para ganar una batalla no necesito matarlos a todos, solo que sepan que perderán mas de lo que podrían ganar 

Con esas palabras se retiro del sitio a gran velocidad, Blue Rose ignoro eso y se preparo para ir al castillo, aunque Evileye logro ver como el enmascarado se daba la vuelta para verla y despedirse moviendo la mano y despues haciendo una reverencia, la mujer continuo con su camino, preguntándose que tenia planeado el aventurero.

En el castillo había una reunion de emergencia con lo que había disponible, algunos nobles menores, con Zanac a la cabeza y Renner a su lado, la situación era desesperada, aun con los reclutamientos era una fuerza de combate patética, la princesa no tenia ninguna idea viable para actuar mas allá de escapar y pedir ayuda a Terranova o Sadera, pero ya seria muy tarde, el enemigo era muy rapido, avanzando grandes distancias sin comer o dormir.

El príncipe estaba regresando de su batalla en el sur, victorioso y habiendo logrado dar esperanza a su pueblo, pero ahora se enfrentaba a una crisis que amenazaba con ser la ultima del reino, aun tenia a los mercenarios y fuerzas expedicionarias de Sadera, pero posiblemente preferirían escapar antes que luchar por una causa perdida.

Ahora mismo estaban con la única mujer en el continente capas de hacer que las tropas de Terranova avanzaran para proteger al reino, pero las noticias no eran alentadoras.

Katerin: lo lamento, pero el emperador dice que no estamos en posición para enviar tropas e involucrarnos en una guerra ajena, pero estamos dispuestos a ofrecer un salvo conducto, crearemos una linea de defensa fuera de la capital, podremos utilizar nuestros trenes y evacuar a tantas personas como podamos a nuestras líneas defensivas

Zanac: pero necesitaríamos miles de soldados para soportar la envestida inicial del enemigo, sin contar el tiempo requerido para la evacuación de tan solo una parte de la población —Katerin entonces le dirigió una mirada fría como tempano, dando a entender que ese no era su problema— lo entiendo, le agradezco que nos ayude

Ahora era momento de hacer lo mas sensato para salvar tantas vidas como fuera posible, Terranova pondría una larga linea defensiva a dos kilómetros al sur de la capital, que protegería el sur del reino, pero tendrían que avanzar por su propia cuenta, sin contar algunos trenes que estarían ayudando a evacuar civiles.

Mientras tanto en el muro norte se podía ver a Ryu con los brazos cruzados, de poder ver sus ojos, podrían ver como el fuego morado se movía de manera amenazante, sabia que se acercaba una batalla imposible de ganar, pero su maestro le dijo que a veces hacer lo correcto implica no hacer lo bueno, sino lo mejor.

Podía ver a los monstruos acercándose a kilómetros de distancia, su maestro no estaba por ninguna parte y estaba solo, los guardias escaparon despavoridos, era el ultimo hombre en el castillo y era su turno de demostrar que Ezra hizo lo correcto al pagar por su vida, miles murieron por su culpa, ahora saldaría esa deuda salvando cientos de miles aunque tuviera que perder el otro brazo o incluso la vida.