HeeWon les tiraba agua a sus sudados compañeros, ella estaba ligeramente enferma así que no hizo el entrenamiento que tuvieron que hacer sus compañeros.

—Siento que voy a morir...

—Me duelen los brazos...

—Necesito comer pulpo...

Se lamentaban ellos.

La rubia como es costumbre, abrió su casillero, pensando en que chocolate habría hoy. Y había una barra entera, únicamente de chocolate amargo, el favorito de ella.

"Bella HeeWon..

Una barra entera no es suficiente para expresar todo mi amor hacia ti, pero es lo que puedo conseguirte por ahora, he visto que intentas buscar mi nombre y preguntas por la academia sobre un tal Dabi, no lo intentes, no encontrarás nada.

Te ama, Dabi."

—Esta vez la barra compensa lo poquito de la carta.

La rubia partió pedazos pequeños, para darles a sus amigos. Mirio al ser el que estaba más lejos, le lanzó el pedazo directamente a su boca, con una puntería perfecta.

A Tamaki se lo dio en la boca directamente (causando un sonrojo del mismo) y a Nejire le dio un pedazo muy grande, demasiado como para caber en su boca.

Y así, se fue cada uno a sus respectivas casas.