Ya era el último día de las competencias, lo cual para Roger Taylor significaba una cosa muy importante.

Competencia de disfraces.

Muy contento, en la mañana se colocó su disfraz de Luke Skywalker y se fue a la escuela.

Al llegar vio a John, quien estaba de Qui Gon Jinn, acompañado de Freddie, quien iba maquillado, pero con ropa casual.

Otros alumnos también se encontraban con disfraz representativo de su equipo.

El rubio se acercó efusivamente a sus dos amigos.

— ¡Hola! —saludó—. ¿Cómo están?

— Bien —saludó John devuelta— ¿Y tú?

— ¡De maravilla! —exclamó Roger—. Aunque algo triste, porque las competencias van a terminar.

— Ay, pero querido, volverán el año entrante —lo tranquilizó Freddie.

— Pero aún queda mucho para eso...

— Bueno, a veces hay que aprender a esperar —dijo John—. Además, se acerca Navidad.

— ¡Verdad! —exclamó el rubio contento—¡Se acerca Navidad!

En eso, se les acercó Brian.

— Hola —saludó—. ¿Cómo están?

— ¡Genial! —exclamó Roger—. ¡Me enteré que queda poco para navidad!

— Y aún más poco para Halloween —sonrió Freddie.

Los ojos de Roger brillaron.

— ¡Sí! ¡Es en dos semanas más!

— Justamente, querido.

— Creo que deberíamos irnos a la barra —propuso John viendo como empezaban a quedarse solos,

— Oh, cierto —dijo Freddie—. Vamos o nos dejarán solos.

Fueron a donde estaban los demás de su equipo. Los jueces les pidieron que los que habían ido disfrazados se colocaran en un fila en la cancha del gimnasio, así que Roger y John fueron rápida y efusivamente.

Allí sumaron los puntajes correspondientes y denominaron que el mejor disfraz fue uno exacto de Frodo del Señor de Los Anillos, de un chico de este mismo equipo, claramente.

— Bueno, no gané, pero nunca lo hago y estoy feliz, porque estoy disfrazado —comentó Roger volviendo con John.

— Aún así, tú disfraz está genial —comentó Brian.

— Gracias —le sonrió Roger.

Luego vieron como John participaba en el Cake-Fast y Freddie en el Glam Festival. Brian había participado el día anterior en el Sabiondo.

Estaban bastante felices, la estaban pasando bien.

Freddie terminaba de participar cuando Katherine se les acercó muy exaltada.

— Brian, necesito que participes en el Kiss Stand con Amanda —le pidió—. Sé que es mucho pedir, pero por favor... es urgente, viene después del Glam Festival y Jared, que iba a participar con ella, se enfermó del estómago en el Cake-Fast.

— Yo... —tartamudeó Brian, Roger y John se miraron.

— Por favor, prometo no pedirte nada más, por favor —le rogó la chica.

— ¿Y por qué yo? —preguntó.

— Amanda quiere —respondió Katherine—.  Por favor...

— Eh... Bueno, pero...

Brian iba a seguir hablando, dispuesto a preguntar qué se hacía exactamente en la actividad,  pero Katherine ya lo llevaba de la muñeca hacia el escenario.

Roger miró al suelo, cabizbajo.

— Hey, ¿Estás bien? —preguntó John.

— No... —respondió el rubio—. Me prometí olvidarlo, pero... simplemente no he podido...

— Oh, Rog... —John lo abrazó.

— "Mucho brillo", "mucho brillo" tendrá su cabeza cuando se la rape por idiota... —masculló Freddie reclamando por la crítica que, nuevamente, le habían hecho en el Glam Festival—. ¿Hm? ¿Qué pasa?

— Amanda metió a Brian al Kiss Stand para besarse con él.... —respondió John.

— Mira la tú, la perra astuta —soltó Freddie arrugando el entrecejo—. Maldita mujerzuela, nunca me agradó.

— Sí, sí —dijo John—. La cosa es que Rog no se siente bien, así que lo voy a llevar al baño...

— No —interrumpió Roger—. Quiero quedarme.

— Oh, cielo, no seas masoquista —lo regañó Freddie—. Deja que John te lleve al baño así no tienes que verlo.

— Quiero hacerlo —puntualizó Roger—. Para superarlo de una vez por todas.

— Roggie... no tienes que hacer esto...

— Sí, sí tengo.

Freddie suspiró.

— Bien, entonces no me queda más remedo que apoyarte —le dijo sentándose a su lado.

Brian los miraba desde el escenario, su turno llegó.

— Bueno, ya sabes lo que hay que hacer —le sonrió Amanda pícaramente dispuesta a colocar sus delgadas manos tras el cuello del de rizos.

El chico solo miraba a Roger.

— Hey, estoy aquí —le dijo tronando sus dedos frente a su rostro.

— Yo... —tartamudeó viendo como Roger comenzaba a irse—. Lo siento, Amanda, no puedo.

Luego se fue corriendo tras el rubio por los pasillos.

— ¡Rog, espera! —lo llamó, el rubio paró y se dio la vuelta a verlo confundido.

— ¿B-Brian? ¿Qué estás haciendo aquí? Deberías estar besándote con Amanda... —le dijo.

Brian se acercó hacia donde estaba.

— Creo... creo que me di cuenta que de ahora en adelante quiero besar a una sola persona, y esa persona está al frente mío —admitió con las mejillas algo rosadas, las de Roger se volvieron de un intenso tono carmesí.

— Esto es para ilusionarme... ¿verdad?

— No, Rog... —suspiró Brian—. Yo... me di cuenta que... me gustas.

— E-Estoy soñando —sonrió Roger.

— Si estuvieras soñando ¿Haría esto? —preguntó Brian tomándolo por la cintura y besándolo en los labios.

Roger correspondió al instante sin poder creérselo y colocó tímidamente sus brazos tras el cuello del de rizos, formando así un pequeño abrazo.

Sus labios estaban literalmente hechos para los del otro, calzando perfectamente, moviéndose con la misma sincronía.

Brian no podía creer cómo había sido tan idiota para haber rechazado al rubio anteriormente, sus labios eran tan dulces, tan suaves...

Roger, por otra parte, seguía pensando que quizás aquello fuese una broma, pero luego de un rato descartó aquel sentimiento y lo reemplazó por uno de felicidad plena tras sentir los cálidos labios del de rizos.

Se separaron por falta de aire, se miraron a los ojos, y se volvieron a besar.

— Dios... ¿Cómo fui tan idiota como para rechazarte? —preguntó Brian mirando directamente a los azules orbes que tenía al frente.

— No sé —rió Roger—. Solo sé que estoy en el paraíso.

— Roggie —dijo Brian—. Sé mi novio, por favor.

— Claro —respondió Roger y se volvieron a besar, ya por tercera vez en ese día y a fin de cuentas hasta aquel momento.

— Jamás pensé que besaría a Luke Skywalker —bromeó el de rizos, el rubio rió—. Mucho menos que sería mi novio —acarició su mejilla.

— Jamás pensé que esto pasaría —sonrió Roger.

— Pero pasó, y no me arrepiento de ello —dijo Brian y besó su frente.

— Ese fue mi primer beso —admitió el rubio con algo de vergüenza.

— ¿En serio? —preguntó Brian—. Pues déjame decirte que lo hiciste fenomenal.

Roger sonrió y rió de forma leve.

— Gracias, Bri.

— De nada, novio.

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NO ME MATEN QUE YA SON NOVIOS

me gustó mucho  escribir este episodio, y medio estúpido que cuando se besaron estaba escuchando Animal de Def Leppard, después Play The Game y después se puso Atomic Punk de Van Halen¿ Mi Spotify y sus cambios raros xdd

Bueno, eso, gracias a todos los que leen, votan y comentan uwu

bai

- Em