vii.
-¿Quién te golpeó?
-¿Me creerías si te dijera que me estrelle contra una poste?
-No.
-Entonces me pegó mi perro.
Ésta es la razón por la que el mentir no se me da.
Yoongi me había llevado a los vestidores de varones, no había nadie a esa hora, pero siempre estaban abiertos, a menos que la escuela cerrara. Me había dejado un momento en lo que fue por un pequeño botiquín de emergencias, para curar mi pobre herida que, a mi parecer, no merecía tanta atención. Los minutos en los que estuve solo intenté volver a analizar mis sentimientos hacia Yoongi, mis acciones, el por qué lloré, el por qué me duele.
Me llegó a doler la cabeza incluso, estaba de mal humor ahora, no tengo idea, no sé que sucede conmigo.
-Yoongi.
-¿Mm?
-Hazmelo. Ten sexo conmigo.
Yoongi me miró serio, mientras colocaba un líquido de fuerte olor en un algodón. Me encontraba sentado en unas de las bancas de los vestidores, con Yoongi arrodillado frente a mi y el botiquín de emergencias abierto a mi lado. Los ojos de Yoongi me miraron con una gran seriedad, me puse tenso en el momento, tragando saliva e intentando mantener mi mirada en la de él.
-Esto puede que te duela. - Fue su respuesta, refiriéndose al algodón. En el segundo en el que lo dijo, estuve a punto de replicar, pero cuando el algodón fue presionado contra la herida en mi labio, lo único que salió de mi boca fue un gemido de dolor y palabrotas.
-¡Dijiste que puede que lo haga, no que lo hará! - Intenté alejarme, pero con su otro brazo me retuvo, tomándome con fuerza de mi nuca.
-Si te hubiese dicho que te dolería, hubieses corrido lejos.
-Quiero correr lejos ahora.
Volví a moverme, medio brusco buscando que dejara de ponerme el algodón del diablo. Después de una lucha intensa en la que yo le daba de manotazos y Yoongi me maldecia, gané, haciendo que Yoongi se sentará inconforme en el suelo y tirara el algodón por ahí, recargando su espalda en los casillero y viendo hacia otro lado, molesto.
Admito que no me gustó verlo molesto.
-¿Quién te hizo eso? - Preguntó en voz baja, una voz ronca que me hizo estremecer.
-Ya te dije que mi pe--
-No el golpe, sino el chupetón en tu cuello.
No pude responder. Yoongi volvió su vista a mi, y esos ojos molestos, llenos de oscuridad y frialdad, me congelaron por completo.
-Dijiste que te dolió que Diana me besara en el aula hace rato, pero parece que no te duele que alguien más te bese a ti.
Con que se llama Diana el gnomo ese...
-Es diferente. - Respondí, cruzandome de brazos al mismo tiempo. Por alguna razón, yo también me sentía enojado.
-¿Por qué?
-Porque yo si me detuve, pero tú no detuviste a la pulga esa.
-Se llama Diana.
-Me importa una mierda como se llame.
Nos quedamos en silencio. Estaba tan enojado, dios santo, jamás me había sentido así, ¿las emociones siempre habían sido así de fuertes, de intensas? Quería tanto lanzarme a besar a Yoongi y pedir por que me follara dura aquí mismo, de la misma manera que quería darle de golpes y obligarlo a pedirme perdón por hacerme llorar... y también besarlo.
Diablos, quería besarlo mucho.
-¿La persona que te hizo el chupetón es la misma que la que te golpeó?
-Quiero que me folles.
-Maldición, Taehyung.
Ahora Yoongi si estaba molesto, más que molesto. Jamás me había visto de esa forma, sus ojos tan oscuros y el ambiente a nuestro alrededor tan tenso. Me sentía acorralado, como si fuese la presa y él el depredador, yo siendo pequeño y débil. Me abrace por puro instinto, como si eso fuese a protegerme de su fuerte mirada y de su pesada aura.
-Quiero que--
-No. Tu y no no volveremos a tener sexo. Nunca.
No.
No digas eso.
No lo digas por favor.
¿Por qué me afectaron tanto esas palabras? Mi pecho se sintió oprimido, sentí como si alguien me hubiese golpeado en el estómago muy, muy fuerte, y el labio herido lo dejé de sentir. Mi vista se puso borrosa, creo que son lágrimas, no lo sé, no me dejaban ver bien a Yoongi, el cual no me miraba a mi ahora, estaba viendo al suelo, a sus pies cruzados jugando con la cinta de sus zapatos.
Mirame.
Mirame y dime que es una broma, por favor.
-¿Por qué no? - Mi voz salió pequeña, estaba por llorar.
-Porque cada que te toco me duele, Taehyung - Me sonrió, por fin mirándome. -. Todo de ti... me gusta, pero me duele a la vez. No puedo seguir con esto, me vas a terminar rompiendo y no quiero eso.
Eso es lo que pasa cuando un come almas como yo quiere besar a un alma brillante. Esto me pasa por querer sentir su amor. Esto me pasa por querer más de lo que puedo dar.
-No... - Y no quería dejarlo. No, no y no.
-Taehyung, te estoy diciendo que me gustas - Me habló serio, estoy seguro que notó las lágrimas acumuladas en mis ojos, pero las ignoró. -, no puedo sólo tener sexo contigo y estar de acuerdo con que tu vayas y lo hagas con otros. No voy a poder soportarlo, prefiero terminar con esto antes de que me enamore de ti y me sea más difícil dejarte.
-¿Esto es por el pitufo de tu clase? - ¿No puedo ser más estúpido?
-¿Qué? - Incluso Yoongi veía mi estupidez. - ¿estás escuchando lo que te digo?
-No.
-Eres... eres todo un caso, ¿lo sabes?
Yoongi suspiró, pasándose las manos por la cara y mirando todo el vestidor, yo lo continúe mirando a él, porque por el momento, era todo lo que me importaba. Yoongi... sólo Yoongi y nadie más.
-Mis compañeros hablaron de ti cuando nos vieron en la cafetería - Dijo de pronto, llamando mi atención rápido recordando aquella vez en la que me senté en sus piernas en pleno almuerzo. -, ellos me dijeron un montón de cosas de tu reputación, rumores y todo eso. Uno de los que me llamó la atención fue el que decía que tu no te metes con la misma persona más de una vez, ¿es eso cierto?
-Si.
-¿Y por qué te metiste conmigo de nuevo? - Me vio un tanto agresivo. -. Tres veces, Taehyung, sólo lo hicimos tres veces, y ahora quieres una cuarta.
-Tal vez también luego quiera una quinta, o una sexta, séptima, novena, décima... ¿qué sigue de décima?
-¿Por qué no seguiste esa regla conmigo?
¿De que sirve responder si me vas a dejar de todas formas? Bobo.
-Es... diferente. - Ese fue el momento en el que me puse de pie, dispuesto a por fin liberar todos mis sentimientos, de decirle a Yoongi de ese dolor de estómago que me provocaba, y que también me masturbe pensando en él un par de veces.
Estando de pie, di unos dos pasos al frente, hasta llegar a él, y me senté, poniendo una pierna a cada lado de sus caderas, sentandome en sus piernas. Yoongi no me dijo nada, sólo me miró, y cuando me tuvo en sus piernas, acarició las mías. Eso me relajó, me hizo sentir mejor, la tensión de antes, mis lloriqueos, todo se fue a la mierda en ese momento.
Por fin me estaba tocando de nuevo.
-Mira - Tomé su mano derecha y la lleve a mi pecho, a mi lado izquierdo, a mi corazón. Coloqué su mano sobre mi corazón latiendo, mirando la pequeña conexión entre nosotros ahora con una sonrisa. -, late rápido, ¿verdad? No sé por qué lo hace, pero llegué a la conclusión de que, debe de ser porque pronto moriré.
-Taehyung no creo--
-Déjame terminar.
Solté su mano, y él la alejó de mi, sin que yo se lo dijera. Nuevamente, no pude mirarle, porque por primera vez me iba a desnudar de una manera que nunca lo había echo, y me ponía muy nervioso.
-Primero empezó con la vez que te vi en los vestidores, yo me estaba metiendo con un compañero de mi clase, y tu entraste. Yoongi, tienes una mirada única, ¿lo sabes? El primer síntoma fue congelarme, tus ojos me congelaron y no me pude mover incluso cuando saliste de los vestidores. El segundo síntoma fue mi piel quemándose, cada que me tocabas con tus frías manos, que me besabas con tus labios de amor y que me veías con esos ojos de hielo, me quemabas, y eso también me excitada. El tercer síntoma fue el no poder sacarte de mi mente, estabas bastante metido en mi ya, y no me molestaba eso, me gusta pensar en ti, me pone tranquilo, casi tan tranquilo como ahora, que me estás tocando. Y el cuarto y último síntoma es no soportar el amor de otro, mi cuerpo sólo quiere el tuyo, mi alma sólo pide la tuya... estoy seguro de que me voy a morir si me dejas.
Yoongi me abrazó, fuerte, sus brazos en mi espalda y los míos en sus hombros, enterrando mi cabeza en su cuello y él haciendo lo mismo conmigo. Respire su aroma, olía a comida, posiblemente la que comió antes, y a Yoongi, el olor único de él y que apestaba todo su apartamento. Cerré los ojos disfrutando el aroma y un par de lágrimas fueron derramadas. Quería quedarme así para siempre, con Yoongi en mis brazos, en los brazos de Yoongi.
¿Es posible? Me gusta abrazarlo y que me abrace.
-Taehyung. - Susurró en mi oreja, justo antes de besarla. No lo sentí erótico, más bien... lindo.
-¿Si? - Apenas respondí, el leve llanto que estaba teniendo y el disfrute de su tacto me tenía un poco ido.
-Creo que yo te gusto.
-Yo... creo que tienes razón.
¿Yoongi me gusta?
Había escuchado del término antes, "gustar", cuando comienzas a sentir atracción por una persona y toda esa mierda. Bueno, es posible, pero lo que yo sentía por Yoongi era más, mucho más; profundo, hermoso y brillante. Tengo la palabra en la punta de la lengua, pero me aterra decirla, así que voy a fingir por el momento que sólo me gusta, que esto es sólo gusto, y que mi amor por el amor de Yoongi no es algo más.
-Si ambos nos gustamos... ¿vamos a separarnos? - Eso era lo principal ahora, después puedo aclarar mi amor por Yoongi.
-¿Qué quieres de mi, Taehyung? Responde eso y luego te diré que quiero de ti.
-No, no, me da vergüenza, tu primero.
Yoongi rió y se separó de nuestro abrazo, el cual solté a regañadientes. Me tuvo frente a él y me acarició los brazos de arriba a abajo, yendo a dejar un beso a mi frente y después sonreirme de esa forma tan única suya.
-Quiero que seas mi novio, mi mejor amigo, y mi compañero de cama. Sólo mío, pues no estoy dispuesto a compartir tu belleza, tu amor y tu tan brillante alma. Eso es lo que quiero de ti.
-Vete a la mierda creo que voy a llorar.
Olvidenlo, ya estoy llorando.
Yoongi limpió mis lágrimas con sus manos y después besó suavemente mis mejillas, para más tarde meter sus manos bajo mi camiseta y dar caricias tiernas en mi piel desnuda.
Era mi turno de responder y estaba llorando. Que vergüenza.
-Quiero... quiero que jamás vuelvas a dejar que ninguna ser de baja estatura te bese, tampoco que nadie más lo haga; sólo tocame a mi, por favor, y sólo amame a mi. Yo lo haré... soy tuyo para ti, y tu mío para mi. Me... m-me gustas mucho, Yoongi.
Sentí mis mejillas calientes, me acababa de ruborizar, joder, esto no solía sucederme a menudo.
Pero estaba bien, ¿no? Cuando miré a Yoongi a los ojos, él me sonreía, y se veía hermoso. Mi hermoso príncipe de hielo, el cual me tocaba con amor, el cual me hacía el amor, y el cual es el único que puede hacerme sentir de esta forma.
¿Está bien amarlo de ésta manera? Sólo tuve sexo tres veces con él, y no hablamos mucho, pero cada que lo veo mi corazón se vuelve loco, y cada que lo escucho decir mi nombre, quiero sonreír como idiota.
-Quiero que me beses.
-Eso me parece correcto.
Yoongi me besó, con amor.
El amor de Yoongi se sentía bien.
Quiero sentir su amor por mucho tiempo más, y quiero darle todo el amor que pueda por el tiempo que me queda.
🍃🍃🍃
Un final feliz, pinches dramáticas, todas creyendo que no iba a terminar bien y que la verga.
Un beso 💋 porque cuando regrese de hacer mis mierdas familiares les caigo con las curiosidades.
#TG18DÍA7
Bais, escoria.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top