XXXV Nebelwerfer
----- Jueves 1 de septiembre de 1938 Cuartel nazi Rocky Arbor 1:26 AM-----
Amira tenía en una camilla a Scarlett quien estaba atada con cinturones. Sabía que en los próximos minutos se tendría que despedir de su pequeño, que aun ni siquiera conocía el mundo. La pelirroja estaba llorando amargamente y procesando todo lo que estaba por pasar.
—Debiste dejarlo que hablara. — Habla Amira comenzando a inyectar a Scarlett. — William puede ser un hijo de puta...Pero es de palabra.
—Cállate...— Scarlett comienza a sentir el líquido recorrer su cuerpo al dejar la jeringa. — Vender a mis amigos ¡No es una opción!
—Tenías más posibilidades de salvar a tu bastardo Scarlett ¡Que asco! Que prefieras ser una amiga antes que una madre— Amira prepara una segunda inyección la cual aplica directamente en el vientre.— ¿Le has puesto sal a una babosa?
Scarlett repudiando a la judía, volteo el rostro y comenzó a derramar lágrimas de la forma mas silenciosa que puede. Amira decidió seguir echando sal en la herida.
— Así mismo se mirará tu bastardo...se retorcerá como babosa al sentir tanta sal entrar en su sistema. —Dreno la solución salina poco a poco y miraba como el llanto de Scarlett se hacía más continuo. — ¿Lo sientes?
Sin poder responderle, Scarlett derrama lagrimas de amargura y Amira disfruta del momento.
«Perdóname cariño...No tendremos la dicha de conocernos. Pero quiero que sepas que, Te amamos con todo nuestro corazón...Yo y tu padre»
— Descuida, en un momento dejaras de sentir todo movimiento...Y después lo extirpare.
—¡QUIERES CALLARTE! — Tragándose el llanto. — ¿Dónde está tu maldito lado materno? ¡Acusaste a Mía de abortar a su bebe! Y tú... le ayudas a William a deshacerte de los no nacidos.
—¿Mi lado materno? — Río de forma cinica. — Jamás existió.
—Entonces, querías hacer pensar a Carter que Mía Campbell era como tu...Fría, sin sentimientos y sobre todo ¡Enferma!
—Creo que... no sabía hasta donde llegaba mi nivel de cinismo. — Se coloco el estetoscopio y se aseguró de no escuchar ningún corazón latir. — Pensé que una vez teniendo a Dedrik Wolf para mi...regresaría a ser quien soy.
—Y tu sin saber que ya eso que llamamos "alma" se había muerto desde hace mucho tiempo.
—Siempre fue una excusa...y muy en el fondo, lo sabía sin quererlo aceptar. — Le mostro una última jeringa con líquido desconocido. — Pero ahora, es personal lo que tengo en contra de la gitana...Se puede quedar a Dedrik si quiere.
—Eso también lo dices sabiendo que no es cierto.
— Mi lealtad...esta con William Wolf.
La última inyección comenzó a inducir a Scarlett a tener contracciones. Amira se arremango las mangas y comenzó a extraer al no nacido.
Scarlett estaba una vez más llorando amargamente al sentir como le despojaban de forma tan cruel a su pequeño.
—Y mi corazón también...—Reveló Amira mientras seguía haciendo la extracción. — Supongo que se veía venir...Nadie sigue con tanta lealtad a un hombre por miedo.
Scarlett sintió como es que Amira terminaba de extraer a su pequeño. Con sus manos ensangrentadas sostenía lo que hace unos minutos era un bebe formándose con vida.
—Déjame...déjame conocerlo...cargarlo. — Pidió extendiendo los brazos. — P-por favor.
Amira haciendo caso omiso, ignoro la petición de Scarlett. Comenzó a trabajar en silencio mientras con su propio cuerpo impedía que la pelirroja mirase a su pequeño. Amira escuchaba el llanto desesperado de la mujer sin siquiera tener una pizca de empatía.
Después de unos minutos la judia se limpió las manos y se acercó a Scarlett. Ambas con odio se desafiaron con la mirada.
—¿Dónde está mi hijo Amira? — Buscaba con su mirada sin poder encontrarlo. — ¿Lo vas a tirar? Como si fuera un objeto sin valor.
—¿Quieres que te termine de matar Scarlett?— Un silencio se formo entre ambas. Decidió dejar las cosas que cargaba en sus manos y fue por William.
Ella al tocar la puerta de William, este le dio el permiso de pasar. Ella admiro que se divertía con Walker aún.
—Dale un respiro...no soportara mucho.
—Deberías estar trabajando ¿Sucedió algo?
— Todo en orden. — Miro de reojo los dedos de John desechos y morados tornándose a negros y deformes . Su rostro estaba desfigurado y la necropsia de la ponzoña de la araña, se extendía violentamente. — Pero a decir verdad...te tengo un pequeño obsequio.
—¿Obsequio? ¿No es el cuerpo de Scarlett?— Al terminar de decir eso, con sus manos quebró otro dedo mas de John Walker. Lo escucho gritar una vez más y bañado en sangre a duras penas se movía.
—Algo mejor que eso. Scarlett está viva.
John al escuchar esto, exhalo un poco más tranquilo.
—Pero, necesitas llevártelo a él también!— Pidió la caprichosa judía al nazi.
William sin dudar de Amira, desencadeno a Walker. Arrastrándolo por el piso cual animal moribundo. El dolor físico era insoportable, pero, tenía esperanza de seguir viendo a Scarlett.
Una vez las puertas se abrieron, entraron Amira y William arrastrando a John, Scarlett siente una flecha atravesar su pecho al ver a su esposo con los huesos desechos y siendo cruelmente torturado.
— Bien...— Amira, se acerca a su escritorio y coge un objeto envuelto en una sábana. — Un trofeo que, tienes bien merecido.
William arquea una ceja, al cruzar mirada con Amira, percibe esa maldad en ella. Cual niño pequeño, se emociona y comienza a desenvolver el obsequio. De entre las sábanas, se aprecia un frasco con un feto diseccionado flotando en liquido desconocido.
Ha sido el golpe de gracia para Scarlett. El llanto que comienza a emitir es desgarrador. No necesita decir nada para que todos los presentes sepan que el dolor que pasa es muy grande. John Walker, al mirar a Scarlett gira su mirada a donde William y nota que tiene ese frasco y una sonrisa sínica se dibuja en su rostro. Al parece, aun no cae en realidad debido al dolor físico y la ponzoña.
—Premio a los padres del año. — Ríe William , restregando en el rostro de Scarlett y Walker el frasco, agitándolo con fuerza.— ¡Creo que sigue teniendo ligeros movimientos!
—Puede ser...movimientos involuntarios de los músculos.
—¡DEJALO! — Scarlett forcejea con los cinturones que tiene sobre su cuerpo. — ¡LOS VOY A MATAR!
William se acerca a Scarlett cargando el frasco cual trofeo. Lo mueve de un lado a otro a escasos centímetros de ella.
—Permanecerá en mi oficina... como mi premio. —La tomo del mentón mientras ella sentía asco hacia William. — ¿Puede andar bien? Puta ramera...
—Sin problemas...sentirá ardor y dolor. — Revisa su pulso. — Pero nada que no pueda aguantar la puta pelirroja.
—Bien...— Gira su rostro hacia ella y nota que sigue gritando y maldiciéndolos. —¡ESCUCHA!¡CONTROLATE! — William le entrega el frasco a Amira y decide golpear a la pelirroja. —¡TRANQUILA!
Los golpes comienzan a surtir efecto y Scarlett ha gastado todas sus fuerzas. William ve que la mujer ya tiene marcas de golpes en el rostro, mejilla roja un ojo morado y el labio reventado.
—Necesito que entregues un mensaje... a James Campbell.
—El y yo ya no somos aliados.
—No tengo interés en eso. — Se acerca escasos centímetros a los labios de la pelirroja, susurra el mensaje que tiene que entregar. La mujer abre los ojos como plato y sabe que tiene que avisarle a James del peligro.
William comienza a liberar a Scarlett y la acompaña hasta las puertas de salida dando la orden de que no la maten o la lastimen.
Scarlett aun adolorida con cada paso que da, mira a William y este le asegura que nadie le disparará por la espalda.
—Soy de palabra...Tu esposo se quedará a hacerme compañía y a asegurarme que regresaras.
En silencio comienza a andar por mera supervivencia.
Andrew observa esto y se acerca a William confundido.
—Mi musculoso amigo...— William mira a Andrew.— Tienes una tarea.
—¿Tiene que ver con ella? — Apunta a Scarlett.
—Asi es...— Se acerca a ver a Andrew y le da la orden. — La vas a seguir, sin que ella sepa que es vigilada...Una vez llegue con James Campbell, regresas y me proporcionas la ubicación. Sin que nadie te vea.
—¿No temes que la mate?
—Regresara por su esposo...si no es que James la mata primero. — Apunta con el dedo índice hacia donde se fue Scarlett. — No me falles.
Andrew se retira comenzando a rastrear a la pelirroja, para cumplir su misión.
William mira al bosque y en silencio se espera unos minutos hasta que decide regresar dentro.
Acerca una silla que decide poner frente a Walker quien sigue goteando sangre por todos lados. En silencio ve que este hombre esta agonizante, su brazo comienza a empeorar y el vómito se comienza a hacer presente.
—Sabes que...de aquí no saldrás vivo. — De forma cínica comienza limpiar su arma con tranquilidad frente a él.
Walker sin responder nada ignora a William y se aguanta el dolor que siente a cada segundo.
—Tu mujer...es el anzuelo perfecto para encontrar a James.— William inyecta más del antídoto en Walker para prolongar su vida y apaciguar su dolor.— Vivirás...para ver a tu esposa ser despellejada, violada y desmembrada ¡Los pondré frente a frente para que los dos vean como mueren uno y otro!
—Tengo información que te sirve...
—No la necesito.
—Sobre... Mía... C-campbell...
William alza las cejas emocionado. Ahora si se ha captado su interés.
— Pero tienes que jurarme...Dejar a Scarlett.—Habla Walker una vez mas.
— Si la información que compartes es verídica...Con una simple marca de tu pulgar ensangrentado...lo tomare como una firma y mandare a Scarlett a Norwich. Alejándola de esta masacre. — Saco un contrato. — ¡Escúpelo! Rata Soplona.
Walker tomando un suspiro y con un nudo en el estómago habla.
—T-teníamos... un lugar... al cual escapar... si nos encontrabas...estarán encaminándose a ese lugar.
—Me das asco ¡John Walker! — William ríe satisfecho. Presiona su pulgar con el papel firmando por el y quedando pactado con sangre. — Se necesita ser un cobarde, hipócrita y una escoria para vender a tus amigos, por...un par de nalgas.
— Es una guerra. — Agacha la mirada sintiéndose un asco. — Ya perdí mucho por ellos...Les toca perder por mí.
—En verdad lo lamento por Campbell...Walker. —William se pone al lado de él festejando su victoria. — Tu esposa será una santa...comparado a todo lo que tengo en mente con ella...Solo por el simple hecho de joder al pequeño Dedrik.
—Mejor solo mátala y ya...Tampoco es que merezca que sufra y agonice...ya ha pasado por mucho.
—Bueno...Muchas gracias por mandar a tu colega al mismísimo infierno. — Le dio unas palmadas en las mejillas. — Espero sigas vivo...par que veas.
—¡MATAME YA!
William hizo caso omiso
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Las horas habían pasado y Scarlett a paso lento estaba llegando al campamento de James. Al divisarla, uno de los hombres de James decide avisar al mismísimo mafioso.
No fue necesario que pasaran muchos minutos para que James llegase a ir a ver a Scarlett. Ella al verle se arrodilla sin poder soportar el dolor.
James intentando ser precavido antes de cualquier cosa, la revisa para asegurarse de que no sea una bomba humana. Cachea a la pelirroja, al pasar sus manos por sus piernas, observa que su mano esta manchada de sangre.
—¡Perdí a mi bebe! — Habla desecha y con fiebre bastante alta.
—Llévenla dentro ¡ATIENDANLA!
—¡ESPÍA! — Grita un hombre apuntando hacia la dirección por la que venía Scarlett. La presencia de Andrew se hace notar. El fornido hombre se hecha a la fuga. — ¡QUE NO ESCAPE!
—¡LO QUIERO MUERTO! — Decreta James al ver que Andrew intenta escapar. — Si lo perdemos...estaremos expuestos a que sepan nuestra ubicación.
Mínimo una decena de hombres, incluyendo a James, se encaminan a ir tras Andrew. A estas alturas, Andrew tiene dos opciones, deshacerse de los enemigos, o llegar a la base nazi y que los entregue.
----Jueves 1 de septiembre de 1938. Camino a lugar de encuentro 5:43 PM-----
Mía intenta mantener la primera guardia. Lucha por no quedarse dormida...pero también ha estado excediendo su límite; Una rama siendo destrozada por pisadas la comienzan a hacerse despertar.
«¡MIERDA! ¡Me he dormido!»
Mira el reloj de bolsillo que tiene y nota que ha dormido alrededor de cuatro horas.
«¡Carajo! ¡Estúpida! ¡Estúpida!»
Golpea su cabeza ligeramente con el arma mientras se sigue maldiciendo. De repente, recuerda el estado en el que dejo a Carter.
Con su mirada busca al hombre y se percata de que ya no está en ese lugar.
—C...Carter. — Lo sigue buscando con la mirada de un lado a otro. — ¡Pssst! Carter. — Sin obtener respuestas decide levantarse y comenzar a explorar la zona.
Mía sale con cautela y extremo cuidado. No quiere seguir perdiendo gente, ya a estas alturas, Kaya la tenía con el corazón desgarrado por su perdida. Le había fallado a una niña.
A paso lento y cauteloso, avanzaba Mía intentando saber quién rondaba por su zona. Intentaba encontrar también a Carter, pero al parecer en ese momento, la suerte no jugaba a su favor.
La gitana tenía dos opciones. Retirarse con la gente que aún tenía viva y desaparecerse por completo de la faz de sus enemigos; O seguir dándole vueltas a la ruleta y probar hasta que la suerte juegue a su favor. A estas alturas del partido, hasta los enemigos de Campbell sabían que haría. Para ella, abandonar su familia y amigos, sería algo que no la dejaría dormir por nada del mundo. Le comería el cerebro y terminaría peor que en esos momentos.
Campbell intentaba pensar en todas las posibilidades que podía enfrentar. Desde la más favorable hasta la más complicada. Perdida en su mar de pensamientos y con las pupilas dilatadas caminaba por el bosque a paso lento.
En fracciones de segundos, Mía se topa con uno de los depredadores más peligrosos en ese momento. Comiendo las vísceras y removiendo el cuerpo de un hombre , se encontraba un oso negro bastante hambriento. La mestiza sintió su piel helarse y comenzó a retroceder lentamente para dejar al animal en paz. No sería el más imponente, pero, comparando fuerza, si la podía matar de forma fácil.
Unas manos tapan la boca de Mía y la jalan hacia los arbustos, desapareciendo de manera silenciosa para el animal. Alterada, con la sangre helada, el corazón bombeando a mil por hora y el sudor en frio, Campbell temía lo peor.
—Shhh.— Dedrik tiene el dedo índice en sus labios queriendo calmarla.
Mía intenta controlarse y su mirada cambia de asustada a una ligera molestia. El nazi aun le tapa la boca y espera a que se calme.
—Guarda silencio...Ese oso no es el único que nos pone el día difícil. — Apunta hacia la otra dirección con la mano que tiene libre. — William...
Mía comienza a moverse de forma violenta y Dedrik tiene que utilizar su fuerza para tranquilizarla. Siente su respiración agitada en su mano y con la otra la sostiene del pecho y logra sentir igual las revoluciones de su temeroso corazón.
—Necesito que te tranquilices mujer. — Seguía forcejeando con ella, al sentirla alterada, intento probar con otro método. —No estás sola y no dejaré que nada te pase.
Mía comenzó a hacer respiraciones para tranquilizarse, sus fuerzas comenzaron a menguar. Se concentro en inhalar por la nariz, retener en los pulmones y exhalar por la boca. Su pecho que se movía con brusquedad, comenzó a normalizarse.
Carter sabía que Mía estaba ya regresando los pies a la tierra. Así que comenzó a soltarla del agarre con que la tenía y dejarla moverse con libertad. Poco a poco ambos se tranquilizaron y pudieron dialogar.
—¿Cómo sabe dónde buscar? — Mía cautelosa intentaba no perderlo de vista. A estas alturas sabía que, tratándose de William, podía estarles tendiendo una trampa. — Parece que huele nuestra sangre o miedo.
— A veces creo que no es un humano normal...— Habla Dedrik mirando que han descubierto donde se escondían y los pocos indicios les es más que suficiente a William para saber que son ellos. — Y ya tiene una pista de sus víctimas.
—¡ENCUENTRENLOS! — Comienza a dar órdenes y a pesar de que se ve molesto, su rostro refleja satisfacción. — ¡LOS QUIERO VIVOS!
Mientras hay movimiento en la zona, e intentan peinarla de un lado a otro. William sostiene unas pelotitas en la mano las cuales las utiliza para matar el aburrimiento que le puede llegar a causar el tener que esperar a matar a alguien.
—¡TENIENTE WOLF! — Un hombre llega corriendo a toda velocidad con noticias.
William ve a su alrededor y espera a la llegada del hombre. Una vez esta frente a él le hace el saludo fascista mientras su pecho se mueve con violencia.
—¡Firmes Soldado! — Le da unos segundos para poder respirar y le ofrece agua de una cantinflora.— ¿Qué noticias me tiene?
El hombre le toma unos segundos más normalizarse. Toma del agua fría que corre por su garganta y se siente saciado.
— Andrew fue visto por gente de James y le siguen.
—¿Podemos con ellos? ¿De cuantos hombres hablamos?
—Al menos una docena...está llevándolos al campamento en estos momentos... Si nos acercamos al rió...los interceptaremos y podremos agarrarlos.
—Buscamos a dos peces gordos... no tengo tiempo para...
—El mismo James Campbell le sigue teniente Wolf.— Interrumpe a su mayor sin omitir detalle.
William al escuchar esto se le ilumino el rostro. Se freno en seco y giro su atención al soldado.
—Iremos todos...en ese caso.
William lanza una bengala para reunir a sus hombres; Mía ha escuchado fuerte y claro, han marcado a su padre.
—¡Capitán teniente! — El mismo hombre pide la palabra una vez más y William le mira, permitiéndole hablar. — Al prisionero le sigue avanzando la necropsia en el brazo...Está comenzando a delirar y su fiebre no baja de los cuarenta grados ¿Qué ordena señor?
— Cauteriza esa herida y manténganlo vivo si no puedes cauterizar..Amputarle el puto brazo ¡Esa es mi orden!
—Pero...pero Señor
—¡Quiero vivo a John Walker! De lo contrario, a quien terminare torturando será a ti.— Lo tomo del cuello de la camisa amenazándolo sin chistar.—¿Si fui claro?
—Como el agua señor...
William lo suelta y nota que sus hombres ya se han reunido.
—James Campbell está moviéndose a nuestra base. — Se escucho un bullicio de emoción entre los presentes. — Traigan a ese payaso imbécil vivo ante mi...y serán recompensados... — Los nazis comenzaron a cargar sus armas
Mía se sentía aterrada al escuchar a William comenzar a alentar a sus hombres a ir por su padre. Dedrik solo se limitaba a prestar atención y ver como Mía se inquietaba, sus ojos se cristalizaban al tener tantas cosas pasando en el momento.
—Y una cosa más...Asegúrense de dejar que Andrew llegue con vida...en cuanto nos marque la ubicación de esos bastardos...nos moveremos, exterminaremos a cualquier persona que sea simpatizante. — William estaba moviendo sus piezas en ese gran tablero de ajedrez y parecía estar por hacer el jaque mate. — Sin prisioneros...a menos que se trate de Walter Hoffman, Scarlett de Walker, Dedrik Wolf o Mía Campbell.
—¿Qué pasa si nos superan en número?
—Tenemos los Nebelwerfer... serán nuestras ratas de experimento. — Los nazis comenzaron a gritar y a vitorear a William.
Él ya mencionado, con su mirada intentaba buscar rastros de vida de Mía o de Dedrik. Sabía que estaban cerca y quería ver si sus peces gordos mordían el cebo.
— ¡VAMOS!
Conforme los nazis comenzaron a abandonar el lugar Mía y Dedrik podían comenzar a moverse con lo que tuvieran.
—¿Qué mierda es un Nebelwerfe?— Le mira esperando encontrar una respuesta en el ex nazi.
Carter sin siquiera perder el tiempo comenzó a caminar lo más rápido que le permitían sus posibilidades para avisar del inminente peligro. Pero, en su estado seria complicado.
—¡CARTER! ¿QUE ESTA PASANDO?
— Nebelwerfe es un arma que lanza gases...se utiliza para crear niebla y así poder tener ventaja en el terreno. — Explica comenzando a trazar su rumbo hacia la base de James.
—Entonces ¿Solo los hace perder la visibilidad?
—William los usa con gases altamente mortales ...¡Los va a matar como si fueran cucarachas!
—¡PERO QUE!
—Lo que escuchaste mujer. — Desesperado alzo la voz. — Si no nos apuramos...caerán como insectos y su muerte será inevitable.
—Pero...
—Si William va a sacar la Nebelwerfer posiblemente ya la están transportando y solo se atrinchere con James para ganar tiempo más que cualquier otra cosa.
—William ...Hijo de ¡PUTA!
A estas alturas Mía comprendía la diferencia entre Andrew y William. Andrew se movía por la rabia y era muy fácil hacerlo cegarse y dejarse llevar por lo que sentía. Si las cosas no salían como él lo tenía planeado; William de manera inteligente movía las fichas y sabía que si las jugadas no salían como el las tenías planeadas, tenía múltiples opciones, Incluso la capacidad de trazar un nuevo curso...sin importarle quienes estuviesen de por medio. No se dejaba cejar por el coraje y las pocas veces que lo habían hecho no era un grado de perder la cordura.
Dedrik sabía que las cosas se comenzaban a complicar y si no lograban erradicar los movimientos nazis para el próximo año, las cosas en vez de mejorar se irían complicando.
—Mía...—Freno en seco buscando su mirada.
Campbell al ver directo a los ojos a Carter ...descubrió que había incertidumbre, miedo, rabia, odio y desesperación.
—A partir de ahora...—Trago grueso tomándola de los hombros. — Por favor...regresa a Norwich
—¡QUE! — Sus pupilas se movían de un lado a otro. — ¡NO!
—¡Esta no es tu guerra! ¡PIÉRDETE!
—¿Qué no es mi guerra? — Campbell comenzó a manotear frustrada y a alejarse de Carter.— ¿Sabes lo que significa un triángulo marrón?
—Mía...por favor...
—¿Qué si sabes lo que significa el "Puto triangulo marrón"? — Lo miro al borde la las lágrimas. — Y no te hagas el idiota Carter.
Carter tomo aire e intento calmarse sin negar lo innegable. Se tranquilizo, expulso aire por la nariz y encaro a Mía.
—Marca para los gitanos...
— "YO" soy una gitana...sangre contaminada, mestiza, inmunda...para que tu gente lo entienda.
—No es mi gente...
—LA PUTA DE AMIRA ME METIÓ EN LA GUERRA— Se limpio las lágrimas y espeto encolerizada. — Y tú me dices que esta no es mi guerra ¿Me explicas?
—Me encargare de Amira...
—No...
—No manches tus manos de sangre por quien no lo vale...
—Ya crucé esa línea Carter. —Al mirar a Dedrik nota que se sorprende. —Todo me lo arrebato... a mi prometido, mi seguridad, mi reputación y lo más importante. — Con los ojos llenos de agua se hecho hacia atrás. — Mi esencia...
—Quiere decir que ¿Tu...
—Por eso entre a prisión...y cuando escape...—Lleno sus pulmones de aire, hizo su cabello hacia atrás intentando contener sus emociones. —Había alguien en mi camino...que representaba un peligro para mí y mi grupo.
—¿Tenias opciones?
—Era matar o morir.
—La diferencia es que...aquí te estoy dando una opción. —Dedrik se acercó poco a poco a ella para intentar consolarla. — Aun tienes tu esencia.
—La Mía Campbell de hace un año atrás no era así...Pero... ¡Oh sorpresa! — Extendió las manos haciendo un gesto de asombro. — Te arrebataron tus recuerdos.
—Pero regrese a ti...Y no necesito de mis recuerdos ... ¿Correcto?
—No uses esa lógica conmigo.
—Bueno...que tal esta lógica...—Se llevo el dedo al mentón para acomodar sus ideas. — Todo indica que Jack Carter que llego a Norwich...no era como el que soy actualmente...¿Correcto?
—Concuerdo...
—Pero tu aun así sigues...aceptándome y...
—¡Si! Sigo enamorada...—Levanto su dedo índice. — Pero voy descubriendo cosas nuevas...y etapas nuevas.
—Pues eso...Yo sigo descubriendo etapas nuevas tuyas.
Campbell miro fijamente a Dedrik, sabiendo que no le mentía...Sin decirle nada con la simple mirada le transmitió esa seguridad que el ex nazi quería lograr en ella.
—Démonos prisa...tenemos que avisarle a James Campbell...De lo contrario...William los exterminara como ratas.
Próximo capitulo titulado "Dentro de mi cabeza I" ¿Ideas?
https://youtu.be/42bMxkRv6Ek
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