----- viernes 3 de junio 1938. Base nazi subterránea 4:11 AM-----

William seguía atento a cualquier acción o movimiento que sucediera en la puerta. Sin conocer a James de años y solo haber tenido unos encuentros...Sabia que su debilidad la tenía él, al tener a su hija  en su poder.

Lo que James Campbell no sabía, era que contaba con una carta extra que ni él mismo sabía que tenía de su lado.

Desde las sombras Dedrik ya estaba al tanto de la situación, por los gritos que había escuchado de la gitana, y por qué sabia la mente retorcida que podía llegar a tener su hermano.

El Wolf menor se acerca a James de frente. Este de forma rápida apunta con el arma, él levanta las manos mostrando que no tiene nada para que James peligre. En completo silencio, James le ordena que se aparten detrás de esa puerta.

Una vez ambos se alejan con pasos silenciosos, el mafioso lo somete con fuerzas poniéndole su brazo en el cuello.

—Dame una buena razón para no reventarte las pelotas, y la cabeza.— Levanto el dedo indice.

—¡Tu hija! está en manos de William.— Hacia fuerza para quitarle el brazo de su cuello.— Si ella no es una razón suficiente...Puedes abrirme la maldita cabeza. Mafioso bastardo.

James sin dejarle de apuntar con el arma, no se veía teniendo muchas opciones que aliarse con Dedrik por el momento.

—¿Desde cuándo al señor cabrón le importa mi hija? — Espetó molesto. — En prisión aquel día...la heriste y rompiste tu maldita promesa ¿Acaso vale tu palabra?

—No haga preguntas que no quiere saber la respuesta. — Dedrik esta vez fue quien se mostraba más agresivo. —No te queda de otra, más que confiar en mi...porque no veo que tengas muchas opciones y se te acaba el tiempo...¿Quién prefieres que toque a tu hija? ¿Yo? O ¿William?

—¡No tientes tu suerte! Degenerado de mierda...No tienes permitido volverle a poner una mano encima a Mía...de lo contrario te arrancare esa mierda de la cual te enorgulleces.

 Dedrik regalo una media sonrisa.

—Que ella decida...

—Cabrón hijo de ....

Su platica se vio interrumpida cuando escucharon un ligero quejido que ambos sabían perfectamente que provenía de Campbell, junto con una cínica risa de satisfacción del Wolf mayor.

—Tu sabrás si te quedas aquí como inútil sin hacer nada viejo. — Con brusquedad, le quito el brazo y le quito el cañón con que le apuntaba. — Yo iré a ayudar a esa mujer.

James estaba un tanto pasmado de ver los pantalones tan bien puestos que tenia Carter al encararlo así. Generalmente siempre era dócil y nunca le respondía de esa forma. Así que sin remedio alguno decidido aliarse con él.

—¡Bien! Pero si me intentas traicionar ...será tu fin.

—Vas a tener que confiar en mi...

Dedrik lo encamino al cuarto de William donde, de forma fácil pudieron acceder al cuarto de armas que tenía repleta.

—¡Ese hijo de puta!

Dedrik en ese momento comenzó a tener otra ola de recuerdos.

...

Jack estaba listo marcar un nuevo ritmo a esa noche llena de deseo... Se fue introduciendo muy lentamente sobre su amada inspectora y sintió que al primer contacto de penetración ella se abrazó al cuello de él.

— ¿Sientes que te estoy forzando? — Se detuvo de todo movimiento.

—N-no. — Susurro al oído de Carter y eso le dio tranquilidad a él. — Solo me llegan episodios mentales de lo que pase hace...

—cuarenta y un  días. —Respondió Carter. Sorprendiendo a la inspectora que el llevara la cuenta a la perfección de lo sucedido. — Si crees que es muy pronto...

—Jack...Tú no me das miedo.

...

Con la mirada perdida y a punto de romper en llanto, regresa a la actualidad. Observa que James lo está mirando en silencio.

—¿Qué?

—Pensé que te estaba dando un paro cardíaco y estaba listo para dispararte y ahorrar tu patetico sufrimiento ¡Lastima! Solo fue una falsa alarma.

Dedrik comenzó a armarse también con diversas armas. Al terminar con una mirada cómplice con James, el confundido "nazi" comenzó a ver la entrada oculta que tenía su hermano.

—Posiblemente por aquí se movieron él y Amira. — Rodando sus ojos hacia arriba miro las escaleras pequeñas. — Utilicemos esta misma ruta a ver si tenemos ventaja.

—¿Qué tanto conoces a esa mujer? La Doctora.

—No tengo recuerdos muy claros...pero sé que me la cogí varias veces desde que nos encontramos en prisión...— Miro hacia la nada y regreso en sí. — La versión más corta...era mi prometida.

—Te dieron gato por liebre. — Comenzó a subir las escaleras hacia arriba. — En marcha...Mía corre peligro con ese infeliz, payaso loco.

—Yo saco a la gitana...tu encárgate de William.— Opino, sin sentirse listo para enfrentar a su hermano.—Seria un estorbo y causaría la muerte de todos.

—¡Creo que se te cayeron las pelotas! — Dio una sonrisa ladina fastidiando a Dedrik.— Yo me encargo de tu infeliz hermano.

Conforme ambos comenzaban a moverse y hablar sobre el plan para sacar a Mía. Dentro de ese cuarto se encontraba William impaciente por enfrentarse a James. Era un competidor nato, y si sentía que alguien estaba a la altura de él, hacia lo posible por enfrentarse con esa persona a muerte para seguir reclamando su territorio.

—Creo que tu moribundo y anciano padre te ha dejado sola...— Con tono burlón, una vez más jalo a Mía y con la fuerza que tenía comenzó a romperle sus pantalones dejándola en su ropa interior y su camisa. — Ayúdame mestiza...usa fuerza en esos brazos que tienes...Que se note tu entrenamiento.

Campbell manoteaba como podía con él. Cuando William sentía que ponía más fuerza, se limitaba a soltarla de las caderas y dejar que su pierna herida, cargara su propio peso. Lo suficiente para que ella se calmase de nuevo.

De forma más tranquila, William comenzó a desabotonar la camisa de Campbell y cual caballero le quito el sostén dejándola en bragas.

Con fuerza, la gira hacia él y nota que ella apoya la mayor parte de su peso sobre su pierna que tiene en perfecto estado, y con sus brazos se cubre los pechos.

—¿Eres penosa? —Intento quitarle las manos de su pecho. — ¡Querida! Relájate...

William paso sus manos por la cintura de Mía y sus yemas tocaron su cicatriz de la H con la corona . Campbell intentaba con sus codos, sin descubrir sus pechos, quitarle las manos a William.

—¿Te duele?

Al no recibir respuesta de ella, William río ligeramente y se agacho a la altura de su abdomen comenzando a olfatear a Campbell. Detallaba a la gitana de arriba a abajo. Una vez mas se reincorpora, de nuevo la coge de las muñecas y con fuerza le quita las manos de sus pechos, dejándolos descubiertos, para que él pueda contemplar su desnudo cuerpo. Al instante nota que tiene un moretón en su brazo el cual cubría igual.

—¿Qué te paso en ese brazo?

Una vez más, ella no le respondió nada.

— Te revolcaste con mi hermanito... ¿Verdad?

Estaba logrando penetrar esa coraza de fuerza de Mía, veía como sus labios temblaban y su mirada estaba llena de agua.

—¿Qué te hizo para que cedieras? — En brusquedad, soltó sus muñecas y estrujo con fuerzas sus senos. — ¿Te lo hizo salvaje? ¿Te gusta que sea salvaje contigo?¡Estas con el hombre indicado!

—No sé de qué mierda me hablas...

Campbell sentía un dolor horrible en los pechos al William estar empleando tanta fuerza en sus manos al tocarla. Un gemido de dolor salió de Campbell.

—P-para...

—O quizás te toco con sus manos hasta que te volviste loca...y te viniste...¿Te vienes para mi tambien? — William estaba hurgando entre sus braguetas. Nota que entre más intimidad comparte con ella, más se comienza a romper a la ex inspectora.

Dedrik interrumpe abriendo la puerta. William al encontrarse con él, se sorprende. Sin embargo, no es mera casualidad que Dedrik hubiese entrado en ese momento. Él y James han estado observando todo.

William aun así le apunta con el arma y da un disparo de advertencia. Dedrik se queda inmóvil levantando los brazos.

—¿Por qué sigo viendo tu cara si sé que eres el que me traicionaste?

—¡¿Disculpa?! — Cruza mirada rápida con Mía y la observa vulnerable. — Esa mujer me tendió una maldita trampa...

—¿Y te voy a creer nomas por qué sí? — Espetó molesto. — Me dijiste que la habías incinerado...

—Por qué no quería que nadie arreglara mi miradero. — Explicó—...Juro que le tome el pulso y estaba muerta.

—Yo le siento el pulso demasiado bien.  

Habla poniendo su mano sobre su pecho izquierdo y apretando una vez más con fuerza. Mía lanza un quejido de dolor. William con sus manos urga entre su intimidad y siente aun humedad.

—W-illiam...P-para...

Dedrik le arde la sangre al ver  que su hermano disfruta de tocar a la gitana.

—Y un aroma a que esta viva y lista para que se la cojan...¿A quien te cogiste desgraciada?— Apunto a Dedrik.— A ese idiota de enfrente...Toda mujer que pasa por ese idiota  tiene que pasar por mi también.

— Pues solo tarde lo que vine para encubrir y esconder los cuerpos...— Dedrik interrumpió para captar la atención de WIlliam.—Y fue cuando llegué y no la encontré...me dejo encerrado en un sótano viejo. Y estaba incomunicado.

—¿Y quién les dijo donde estábamos?

—Connor el idiota del circo. Vi cuando ella le entrego dinero. — Dedrik saco unos paquetes de billetes gruesos y se los arrojos llenos de sangre. — Ese imbécil te estaba jugando chueco todo este tiempo...Nada de qué preocuparse, no te será una molestia...Sin mencionar que Connor es quien se la cogía...los encontre en pleno acto y me toco despedirlo.

—¿Y el idiota de James?

—Creo que solo vinieron por Hoffman, él anciano se estaba muriendo por la infección... Dudo siquiera que supiera que su hija estaba aquí. De lo contrario no sería tan imbécil para dejarla sola contigo.

—Si ese es el caso...—William cogió a Mía para cargarla sobre sus hombros. — Escóltame a mi cuarto...

—Tenemos que movernos de base. James posiblemente está planeando regresar para venir por ti. Vayámonos a Milwaukee ...esa base está mucho mejor que esta...es impenetrable.— Dedrik  comenzaba a escoltar a su hermano.

—Llévame al cuarto...tengo que sacar cosas importantes. — Espetó. — Por cierto...Esta idiota mujer  creo que dejo malherida a Amira...

—Primero esta cubrir tu puto trasero, eres mi superior... pero no quita que me dé asco saber que ella se revuelca con alguien más.

Dedrik abrió la puerta encaminándose a cubrir a su hermano, mientras él le seguía tranquilo, cargando a Mía.

Una vez llegaron a donde estaba el corralón y al área principal, William deja caer a Mía al piso. Se quita el látigo que siempre tiene afianzado a sus caderas y lo azota en el piso, ese singular ruido le hace dar un escalofrió hasta la médula, tanto de Dedrik, como de Mía.

—¿Y ahora qué? — Dedrik intenta intervenir—¿Te canso? Para llevármela yo...

—Castígala...

 Ambos amantes se quedan en silencio al escuchar la orden de William.

Los hermanos Wolf cruzan miradas. William sigue sintiendo que algo trae su hermano entre dientes y decide ponerlo a prueba.

—Pero...

El mayor de los Wolf se acerca a entregarle el azote a su hermano.

—Azótala frente a mi...Si tu lealtad hacia mí es cierta y no me estas mintiendo...Un escarmiento no te será tan difícil de llevar a cabo...Quiero que le desprendas  la maldita piel de la espalda...que el látigo penetre hasta sus huesos.

Dedrik toma el azote. Busca con la mirada a Mía sin encontrarla donde la dejaron. Ambos hermanos notan que se ha reincorporado, cojeando intenta ir al elevador.

William le quita el látigo a Dedrik, se apresura, a paso veloz lanza el primer azote que le rompe la espalda a Mía, trazando una herida  prominente. 

Los ojos de Mía se dilatan y se traga el primer grito. Intenta agarrarse la herida y solo siente como la sangre comienza a escurrir.

—¡NO TE MUEVAS! ¡PUTA SANGRE CONTAMINADA! — William ha soltado gran parte de su furia en ese primer azote. — ¡RAMERA ASQUEROSA! ¡TE COGÍAS A CONNOR PARA SACARLE INFORMACIÓN! ¡ERES IGUAL QUE CUALQUIER PUTA!

El dolor hace que se arque de la espalda y cae al piso intentando apaciguar el dolor. William aprovecha a tomar una cubeta de agua helada y la arroja  en la espalda de Mía.

—Q-que te jodan...puto cerdo genocida... tú y tu payaso a quien llamas líder...Es un hijo de p...

—¡CÁLLATE! ¿TU CERDO PADRE NO TE ENSEÑO MODALES? ¡SOY TU SUPERIOR! ME ENCARGARE DE EDUCARTE A PUTOS AZOTES...RAMERA PUTA...

William la azota un segundo, tercero y cuarto azote, molesto por la insolencia que va a decir.

 Campbell para en seco y grita a todo pulmón al sentir la furia del Wolf mayor sobre su espalda. En el piso intenta cubrirse lo mejor que puede. Una vez está cerca de ella le pone el zapato en su cuello y la nota derramando lágrimas.

—Si le faltas al respeto...Te juro que tu estancia será un purgatorio. —Humillaba a Campbell. — Sabes que toda acción lleva a una consecuencia... Bienvenida al infierno, ¡Maldita asquerosa mestiza!

William esta por darle un azote más y siente su muñeca ser detenida con fuerza por Dedrik.

—¡Me toca!

William controla su temperamento, le entrega a Dedrik el azote. E intenta analizar la situación.

—Veinte azotes hermanito, diez en la espalda, cinco en las piernas y las otras cinco destrózale el culo...que no se pueda ni sentar la asquerosa.

Dedrik ahora teniendo el azote en su poder está listo para dictaminar el castigo. Levanta el mano listo para dar el primer azote. 

En un movimiento rápido se gira hacia su hermano y este siendo aún más ágil que Dedrik, detiene el azote con su mano. Hay una tensión entre ambos.

—¡Oh! — William comienza a enredar el látigo en su brazo jalando a Dedrik hacia él. —¡Sabia que ya te la habías cogido tu!— La mano de William comienza a sangrar sin importarle el dolor  sigue arrastrando a Dedrik hacia el para destrozarle la vida.

—¡Fuiste tu quien me azoto! Tú me hiciste pensar que todo este tiempo había sido Hoffman.

 Dedrik Jalaba con fuerzas hacia su lado apretando el brazo aprisionado de William. Un ligero temblor salía de William al sentir dolor en su brazo, pero, su confianza seguía intacta.

—Te estoy ofreciendo el perdón con Alemania... y tus malditos errores del pasado serán absueltos ¡No arruines esta segunda oportunidad! — William seguía jalando a Dedrik hacia su lado arrastrando sus piernas mostrando fuerza mayor. — No te puedes sentar en dos mesas a comer hermanito...elige.

Dedrik sabía que William estaba impacienté por derramas sangre, su pulso era acelerado, su mirada oscura , sombría, su mandíbula estaba tensa, y escuchaba claramente el crujir de sus dientes.

—Elige...El camino de la gloria con Alemania.—Ambos seguían forcejeando para tener el azote a su disposición.— O, te quedas con la gitana y seras alimento para las aves de rapiña...por que te voy a destruir la puta espalda...te voy a arrancar los putos brazos y piernas  y  veras como meto a un puto horno a la mestiza.

Mientras ambos forcejeaban.  James sale del cuarto de William y dispara al Wolf mayor. El impacto queda incrustado en su muslo, muy cerca de donde él había herido a Mía. William no le queda más remedio que soltar el azote. Y apuntar a quemarropa a James.

El mafioso sin chistar, coge a Mía, mientras ve como Dedrik  dispara a William. James llega al elevador dejando a Mía y le pone su saco encima para cubrir su desnudez.

—Aquí quédate mi niña... Voy a ir a ayudar al imbécil de Carter...No te asomes, ni te expongas.

James sale corriendo y comienza a arrojar granadas de humo. Dedrik quien era el único que estaba en el lugar inhala gran parte de ese humo y comienza a toser de forma desesperada.

William había previsto que entre los dos intentarían atacarlo, así que forcejear y centrarse en Dedrik, no era una opción viable, para salir victorioso. Se atrinchero en una ubicación desconocida para ambos. Se hizo un torniquete en la pierna y comenzó a analizar sus opciones. Haciendo sus técnicas de respiración, comenzó a controlar su pulso, para pensar con claridad.

—¡SAL DE TU CLOACA! ¡RATA  FASCISTA COBARDE! — James da dos disparos de advertencia al aire. — Te metiste con mi más preciado tesoro...y vas a pagar.

William seguía confiado a pesar de la desventaja. Sabia el plan de Amira y aprovecharía a reventar esas tuberías para causar una fuerte herida. Causaría fuertes estragos con un disparo. Pondría en su lugar a los dos rebeldes.

—No me estoy escondiendo. — Terminando de decir esto, unas alarmas comenzaron a sonar y el sistema de incendios comenzó a arrojar chorros de cera  hirviendo. — Solo espero a que la peste se queme.

James y Dedrik comenzaron a sentir como la cera comenzaba a caer por su cuerpo.

—¡Quema!

—¡Teneos que irnos! — Dedrik a paso veloz comenzó a sentir que su saco comenzaba a tener agujeros por el estado de la cera.

James quien había dejado el saco a Mía sentía esa cera comenzar a quemarle la piel en cuestión de nada. Sin gustarle el retirarse, se dirige al elevador; divisa con facilidad como William estaba saliendo de su escondite, debajo de unas escaleras donde, estas impedían que la cera le causara estragos a él.

William mirando a James cerrar las rejas del elevador, se toma su tiempo y apunta haciendo un disparo limpio, en el rostro. James brama de coraje y un salpicón de Sangre se esparce por el elevador.

—¡Papa! —Mía intenta moverse sabiendo que su padre ha recibido un disparo en el rostro. Sin embargo, siente como su piel trozada de la espalda le impide seguir moviéndose.

—¡Estoy bien! — Espeta James, viendo a su hija, y a Dedrik.—Salgamos de aquí...tengo hombres que nos escoltaran...¿Tienes la anestesia?

—Aquí esta. — Habla Dedrik, y la inyecta al instante en Mía para apaciguar su dolor. — Te hará caer en sueño profundo.

Una vez salieron del subterráneo, Mía ya comenzaba a sentir un sueño y cansancio muy profundo. Sus ojos comenzaron cerrarse y solo sintió que alguien la tomo entre sus brazos y la cargo con toda la delicadeza del mundo.

James chorreaba de sangre por su rostro debido al disparo que recibió. Y aun así sostenía a su hija. La cargaba cual padre cuida a su hija pequeña.

Una vez llegaron con sus hombres James la metió en un coche y se aseguró de que, estuviera perfectamente bien cubierta y dormida.

Dedrik miro que Mía estaría en buenas manos e intento irse de manera pacifica.

—Me tengo que ir...mi hermano...

James interrumpió a Dedrik con un chasquido de dedos, siendo una clara orden concisa para su gente. Ellos comenzaron a golpear con fuerzas al Wolf menor, con manoplas,  puños y patadas.

James no dirigía la mirada hacia él, y no era por miedo o por que se sintiera que era injusto con él. En su mundo, así se movían las cosas.

—No iras a ninguna parte...Payaso. — Lo pusieron de rodillas, frente a James mientras él se ponía un paño en la zona de la herida. — Tenemos una charla pendiente...Y yo tengo que cumplir con mi palabra.

—¡MALDITO TRAIDOR!

James dio una fuerte patada en la boca del estómago a Dedrik. Él al ínstate, sintió como le faltaba el aire, sus pupilas se dilataron. Con desesperación intentaba jalar aire para que llegaran a sus pulmones.

— ¡Soy un mafioso! No un policía...¿Creíste que seriamos amigos? Que nos tomaríamos de las manos y brincaríamos por los campo de lirios. — Una vez más James le planto un fuerte golpe en la quijada. — Lastimaste a mi hija...ahora los términos y condiciones han cambiado.

Dedrik en silencio había caído en cuenta que estaba en manos de alguien igual o más peligroso que su hermano.

— Vamos a que cantes...canario...alemán.

Otro chasquido fue suficiente para que los hombres se llevaron a rastras a Dedrik. Amordazándolo y golpeándole fuertemente en las costillas y el hígado, dejaron limpio el lugar.

—¡Ordenes James!

—No dejes que mi hija, ni Hoffman se enteren que tenemos a este payaso. — Hoffman dio una orden clara y concisa. — ¡VAMONOS! Necesitan servicios médicos algunas personas.

...

Dentro de las instalaciones el fascista alemán espero a que las tuberías dejaran de bañar con cera hirviendo el lugar. Analizaba todos los movimientos de su hermano y la situación que tenían. También se miró el torniquete y mientras el calentaba su singular daga de la hoja, él mismo se realizaba el proceso de extracción de munición.

«Ya ha elegido su camino» 

William  realizo un corte en su pierna que al instante sangro, y se extrajo la munición tal cual hizo con Campbell. Solo que él, no mostraba algún signo de dolor. 

« Y todo gira en torno, a la maldita gitana» 

Una vez extrajo la bala, con la hoja caliente cauterizo la herida y una vez más se hizo un torniquete.

Salió tranquilo de su escondite cuando la cera dejo de fluir, encaminándose hacia donde había dejado a Amira. Al abrir la puerta, encontró que la judía se había arrastrado para que la cera fluyera dándole esa ventaja al Wolf mayor.

La coge entre sus brazos, al mover parte de sus piernas, Amira experimenta un dolor inmenso, a pesar de tener anestesia.

—El que te duela...es buena señal. — Habla William, moviéndose lo más rápido que puede con la judía entre brazos. — ¿Por qué lo hiciste Amira?

—P-por lealtad. — Expresó.

William en silencio comenzó a caminar entre la cera caliente cargando a Amira. Una vez llego, espero el elevador para sacarla de ese lugar.

—No habrá nadie sobre de ti Amira, más que yo...te daré un poder único, y podrás dar órdenes...Me encargare de que te eleven a una posición superior y te libren de maldición de ser judía.

—¿Estas...

—¿Enamorado? No...Necesito gente leal... Ya miraste lo que hizo Dedrik.— Sintió la respiración de la judía detenerse. Y era hora de inyectarle veneno para seguir corrompiendo a esta mujer. — La gitana lo atrapo en sus garras de nuevo... Te lo han arrebatado una vez mas.

Amira en silencio seguía abrazada de William. Estaba dolida...a pesar de no tratar dignamente a Dedrik y ser una completa cabrona con él, su orgullo estaba siendo pisoteado. Con el resultado del combate, no le servía mucho también tener el marcador parejo.

Su cuerpo temblaba. Mas que de dolor, era un sentimiento que le pudría hasta los huesos. Envidia, ira, celos, rabia, venganza.

—Kann ich Sie um einen Gefallen bitten ... William (T-te puedo pedir un favor...William)

—Hat das mit dem Zigeuner zu tun?( ¿Tiene que ver con la gitana?)— El escucho como claramente afirmo con un sollozo cargado de rabia.— Ich höre dich...( Te escucho...)

—Es lebe ... und auch an Dedrik. (Viva...y también a Dedrik)

—Und deine seltsame Liebe zu Dedrik? (¿Y tu amor extraño por Dedrik?)

William acomodaba a Amira en un automóvil modificado para poder hacer su escape antes de que los interceptaran.

—Ist gestorben (Se ha muerto)—Trago grueso, con lágrimas que rodaba por sus mejillas.— Ich möchte, dass er fühlt, was ich fühle ... es aus erster Hand erlebt ... Ich fühle mich, als würde ich lebendig sterben. (Quiero que sienta lo que estoy sintiendo...que lo viva en carne propia...Siento que me muero en vida.)

—Oh ... Dann habe ich zu tun ... Gott sei Dank hat Logan Hunt uns Namen und wertvolle Informationen gegeben.( Oh...Entonces tengo trabajo que hacer...Menos mal Logan Hunt nos dio nombres e información valiosa.)—Afirmo mientras conducía a la nueva base, sorprendiendo a Amira.— ¿Te suenan estos nombres?

Reed comenzó a redactar, como si estuviese prediciendo el destino de esas personas.

—Si...pero ellos están en...

—Que mueran mientras ella sigue viva...es un sentimiento muy parecido al que tienes Amira. — Miraba por el retrovisor a la judía quien se le comenzaba a formar una sonrisa en su rostro. — Tenemos trabajo...mucho trabajo que hacer.

—Necesitamos recuperarnos. — Dictó. —Y necesitamos sacar a Andrew.

—¿Confías en él?

—No, pero, te he visto hacer cosas impresionantes William.

William ya había leído el expediente de Andrew, sabia sus debilidades y fortalezas. Era hora de utilizar la vara de hierro con el cazador.

—Haremos que nos encuentre la base donde se esconden...Pero, no nos precipitaremos.

—¿Qué tienes en mente?

—Hace tres días... se por el último informe que, Utha, Ohio, Texas, Washington, New York, y Chicago está incluido. — Expresó. — Están debilitándose, les tomara más de tres años recuperarse. Solo falta ver que haremos con su maldita flota en Pearl Harbor. Pero, si todo sale conforme lo planeado, mandaremos a algún aliado a atacar su puerto.  Con algo de suerte, se mantendrán fuera de la guerra y no podrán ayudar mientras nosotros avanzamos...Para cuando se recuperen, ya seremos la potencia más impresionante...someterlos y acribillarlos, será pan comido.

—Sabes que Estados Unidos es una potencia. Tiene muy buena relación con el Reino Unido.

—Inglaterra sufrirá bombardeos por todos lados a su debido tiempo...Norwich está en la lista. — Decretó con autoridad. — Debido al caso Andrew, se ha hecho importante y está concentrando masas de personas.

Reed comenzó a ver como Amira comenzaba a tener una vez más dolor en su espalda baja. Sabia que la judía estaba en una situación delicada.

—Primero, tu recuperación. — Ambos se miraron por el espejo retrovisor. — ¿Sientes tus piernas?

—Si...pero mis dedos de los pies no han querido responder.

.....

El recorrido había pasado la hora cuarenta minutos. Pero nada que no pudieran recorrer ellos.

Una vez llegaron William fue recibido por quienes operaban la base de Milwaukee, sin poner objeciones, le permitieron tomar el control de la base y atendieron a ambos.

—¡Ordenes señor! — En posición de firmes hizo el saludo distinguido entre los alemanes nazis.

—Necesito hacer una llamada.

William dejo que atendieran a Amira. Él fue encaminado a su nueva oficina donde le dieron su privacidad. En cuanto cerraron la puerta, él la aseguro y pegando su oído a la puerta, se percata de que no hay gente pasando, ni ve sombras por debajo de ella.

Coge el teléfono y pide ser conectado a Alemania mediante sus contactos, para que no graben ni rastreen la llamada; El teléfono suena una vez y la llamada es atendida.

—Führer (Líder).

—Lass es mich wissen, William (Infórmame William)

—Wir haben die Untergrundbasis in Chicago verloren. (Perdimos la base subterránea de Chicago.)

Claramente escucho como su líder bufo molesto. Sin embargo lo dejo continuar.

— James Campbell und seine verdammten Ratten haben uns überfallen und Hoffman verloren. (James Campbell y sus malditas ratas, nos emboscaron y perdí a Hoffman.)

—Wo ist dieser James Campbell? (¿Dónde está ese James Campbell?)

—Unbekannter Ort... (Paradero desconocido...)— Sabia que no eran buenas noticias para su líder. Pero no le mentiría. — Ich brauche Menschen. Ich werde sie einen nach dem anderen vernichten, aber ich weiß, dass dieser Gangster Macht hat, und ich kann die Größe seiner Verbündeten nicht kennen. (Necesito gente. Los aniquilare uno por uno, pero sé que este mafioso tiene poder y no logro saber la magnitud de sus aliados.)

—Sie werden Ihre Männer haben... Aber ich will ihn am Leben und auf der Linie. (Tendrás a tus hombres...Pero lo quiero vivo y en la línea.)

William esta vez no movería simples peones, para herir de forma sutil. En su mente ya estaba exterminar a James Campbell y sus hombres. 

Andrew los ayudaría a rastrearlos en el bosque de una u otra forma.

William colgó la llamada y salió dando una orden.

—Saquen a Andrew Cook King de ese lugar y tráiganlo... El perro tiene trabajo por hacer.

Próximo capitulo titulado "Dudas" ¿Ideas?

https://youtu.be/t_gL4jO-FhQ