XXV Deudas Saldadas

-----Jueves 2 de Junio 1938 Algún lugar de Chicago 1:31 AM-----

La inspectora tenia horas escondiéndose e intentando abrirse paso por la gran ciudad. No confiar en nadie...ni en la propia policía era un reto para ella. Se sentía sola y sentía una gran preocupación por Hoffman.

« ¡Calma Campbell! Pensando con claridad y con la mente en frió podrás llegar a la estación Roosevelt»

Una incertidumbre rodeaba a la inspectora. Desconocía quien le seguía, solo sabía que habían abierto fuego a quemarropa sin pensar en que podrían matarla. Sin ninguna clase de distintivos le costaba mucho más saber si había más de una persona siguiéndole. Y cualquier persona podía ser su enemiga.

Escondiéndose en uno de los barrios bajos de Chicago la inspectora estaba en un edificio que tenía pinta de estar abandonado. Estaba detrás de unas enormes cajas intentaba recuperar el aliento.

El ruido de unos zapatos con el concreto la pusieron alerta y una vez más se ocultó lo mejor que podía. Con cuidado cargaba su luger intentando quitarle el seguro. Pero era inútil, la finca al no ser habitada y tener solo objetos cumulados generaba un eco.

La inspectora por un hueco entre dos cajas logra ver los zapatos del hombre que la sigue.

Con bastante cautela logra distinguir que quien le ha seguido todo este tiempo es Jack Carter. Campbell siente que su corazón se acelera a mil por hora. No quiere enfrentarlo, asi que decide tomar la opción de escaparse de el en cualquier descuido.

A la finca llegan cuatro hombres más que parece ser que están del lado de William en este momento.

— ¡Dedrik!— Pausan y el joven Wolf dirige su mirada hacia ellos. — William tiene a Hoffman...

— ¡El desgraciado lo consiguió después de todo!

— ¿Señales de la gitana?

—No...Pero ayúdenme a buscar en los edificios siguientes, si todos nos quedamos aquí abarcaremos menos áreas en más tiempo. —Ordena sin rodeos. — William la quiere lo más presentable posible...así que tengan cuidado.

Obedecen y deciden dejarlo solo mientras Dedrik continua buscando en esa finca. De la manera más tranquila coge un cigarro y lo prende para tranquilizarse. Da una enorme calada y arroja el humo del cigarro tranquilo junto con un suspiro.

— ¿Por qué mierda regresaste a Chicago? Gitana...

Campbell al escuchar que se dirige a ella siente su corazón bombear al mil por hora y se llena de miedo. Sigue guardando silencio para ver si es una trampa y solo quiere obligarla a salir o si en verdad sabe dónde está.

Dedrik camina tranquilo hacia las cajas donde se encuentra Mía y con su encendedor da luz al poco espacio donde está escondida.

—Te hice una pregunta... ¿No te enseñaron a responderle a tus superiores?

—No veo donde diga que eres mi superior...Cart...Wolf. — Sale elevando las manos sabiendo que Carter le puede abrir la cabeza con esa arma que le apunta a ella.—¿Por qué no me has entregado?

—Por qué no te quiero deber nada...—Espeta, extendiendo el brazo. — Pero necesito tu arma...no me pienso arriesgar a que me perfores la maldita espalda para escapar.

Campbell sabe que está en posición de desventaja y sin más se quita el fajo con la funda de su arma y se la entrega.

— ¿Por qué tienes una Luger P08?...Solo los alemanes tenemos Lugers.

—Me la dio Hoffman...en Norwich.

Dedrik tiene un destello de recuerdos y se queda perdido en sus pensamientos unos segundos.

— ¡Cuídala! — Ella se sorprendió al ver el arma. — Es más precisa que los Enfield a diferencia de estos revolver, esta alcanza a los 25 metros muy fácil— Río un poco al ver su arma. — Entre más lejos puedas tumbarte a ese puto loco...mejor...—Una vez más miro a la inspectora. — ¡Cuídala! ¡Enserió! Es un trofeo de un asqueroso nazi...

—Lárgate... ¡Estamos a mano y no te debo nada!...Si te atrapan ya no será mi problema porque yo no te entregue.

Mía un poco dudosa analiza la situación y decide darse media vuelta chocando de frente con el ilusionista.

— ¿Estabas por traicionar a tu propio hermano Dedrik?

El menor de los Wolf frunce el ceño al saber que ha sido descubierto y le puede costar caro.

—Connor ¿Por qué no usas tu magia barata y te largas a otro lado a husmear? No te metas en mis asuntos...

— ¡Se por muy buenas fuentes que tienes la maldita espalda hecha una mierda por ser un tremendo pendejo! ¿Crees que si te entrego puedan dejarme ver eso?

—Piérdete...y no me fastidies...solo estoy saldando deudas con la mestiza.

Connor se acerca a coger del brazo a Campbell y la empuja hacia Dedrik con fuerza.

— ¡Espósala y llévatela!— Ordena a Dedrik con un aire de superioridad. — ¿No? Me la llevare yo enton...

— ¡Ya escuche!— Arroja el cigarro al piso molesto y coge a Campbell. —Ahora me tienes que seguir mestiza...

Carter de manera tranquila quien aún sostiene su arma se encuentra tenso y fastidiado por el chantaje que le quiere hacer este sujeto.

— ¡Nunca viste nada Connor!... ¡Lárgate!

—Me asegurare de que la entregues a tu hermano...— Detrás de este ilusionista vienen llegando tres hombres más que deciden hacerle escolta.— Tú la custodias...yo manejo.

Pasan los minutos y meten a Mía a un auto, de un lado tiene a Dedrik y del otro a Connor quien le ordena a un hombre que maneje para ir vigilando las acciones de Wolf.

Wolf saca un nuevo cigarro y comienza a fumar dentro del auto viendo las calles y percatándose que la ruta no es ni siquiera la más parecida al escondite subterráneo.

—Por aquí no es...

-----Subterráneo nazi 2:12 AM-----

William viene arrastrando como si de un animal muerto se tratase a Hoffman. Bajan por el elevador y el coronel a pesar de poder ver todo...Le es hasta imposible hablar.

Ahora sabe las calles el edificio y como entrar, pero, ¿De qué sirve si ese lugar será su tumba?

Reed una vez llega al piso de subterráneo sigue jalando del pie a Hoffman quien ya tiene dejando un rastro ligero de sangre.

Blackwood al verlo llegar con alguien deja de hacer sus experimentos habituales y apaga la maquina al instante.

— ¿Qué te tardo tan...— Sus ojos se dilatan y sus cejas se elevan.— ¡Lo veo y no me lo creo!

— ¿Un pez gordo no?— Ríe satisfecho poniendo su zapato en la mejilla del inmóvil y herido Hoffman. — ¡Atiéndelo Amira!

— ¡Deberías de comenzar a sacarle información!

—No me apetece...atiende sus heridas, ponle una transfusión de sangre... les dices a los soldados que lo dejen atado en el mismo poste donde Dedrik fue disciplinado. — Reed sin duda esta emocionado. — Lo necesito recuperado por que este maldito no hablara tan fácilmente...

— ¡Te darán una noche de descanso viejo!

— Y no se te olvide...que le quiten la ropa...lo quiero desnudo en ese maldito poste.

— ¡Eres un desgraciado! ¡Más humillado un coronel no podrá estar!

—Cuida tus palabras Amira... en cuanto termines te vienes a mi despacho... Necesito aprovechar mi deseo y la ausencia de mi hermano para romperte ese hermoso culo....¡No tardes!

— ¿Dónde está Dedrik?

— ¡Lo mande por la gitana!... ¡A trabajar! Que tenemos un invitado especial.— Da la espalda moviendo las manos como si tuviese una melodía de victoria en su cabeza.

Antes de ir a su despacho acerco de entre sus curiosidades saco dos grandes y enormes varillas de acero. Seguido de unos cables que mostraban ambos lados con los cables de cobre expuestos.

Reed miraba como es que los hombres y Amira se encargaban de dejar a Hoffman tal cual el había pedido y satisfecho una vez más comenzaba a temblar de emoción. Su adrenalina estaba en aumento.

Amira de la manera más rápida le termino de colocar una bolsa de sangre para hacerlo que se recuperase y suturo sus heridas apropiadamente. Dejando al coronel Hoffman en un estado más que decir humillante para él.

Blackwood entro al despacho de Reed y este hombre solo espero a que cerrara la puerta para acorralarla en la pared y comenzar a besarla de forma agresiva. Blackwood comenzó a quitarse su ropa y Reed la tomo de las muñecas con fuerza.

— ¡Así! ¡Hoy yo te quito la ropa a mi antojo!— Con sus dos manso cogió las caderas de Blackwood y con la fuerza de Reed le fue sencillo comenzar a romper su ropa sin siquiera importarle arruinarle sus prendas.

Blackwood se sentía tan excitada ante tal muestra de poder que no puso objeción y le dejo continuar.

Estando aun de pie los dos Reed la va dirigiendo hasta su sillón donde se quita su cinturón y la amarra de las muñecas con fuerza. Mientras el de forma violenta al acomoda en cuatro y comienza a explorar su zona íntima con sus dedos.

— ¿Por qué tardas tanto? ¡Necesito que me folles Reed!

— ¡Tan sucia y ramera como siempre!— Comienza a torturarla prolongando el acto de penetración y se limita a solo con sus manos aumentar el deseo de Amira.

— ¡Mierda Reed!

El la tira al piso de forma agresiva se sienta en el sillón, coge a Amira de forma agresiva por el cuello y pasa su mano libre a sostenerla por su cabello. La restregar entre su entrepierna provocándole a Reed una excitación más fuerte que la de hace unos segundos atrás.

— ¡Abre con la boca mi cremallera! — La coge del mentón y le escupe en la cara humillándola aún mas. — Si me gusta como trabajas...te doy lo que quieres.

-----Lugar desconocido mini base nazi 2:35 AM-----

— ¿Qué mierda es esto Connor?— Dedrik está molesto por que lo han llevado a un lugar que claramente el desconoce.

— ¿Podemos hablar en privado afuera?— Abre la puerta del coche esperando a que el salga para dialogar.

Dedrik sale molesto y ve que Connor se aparte del coche y le sigue de mala manera. Fastidiado ve al ilusionista y de reojo nota que Campbell está bien vigilada. Sin embargo ha estado observando que esos hombres han estado tragándose con la mirada a la gitana.

— ¿Qué quieres?

—Un acuerdo...— Habla tranquilo y relajado. — Tú la cagaste...al yo ver que la estabas por dejar libre... y yo necesito algo a cambio.

— Expón tus términos Connor.— Se pasa las manos por el cabello  de muy mal humor.

—Tu hermano nos prometió hembras... Y le hacemos un muy buen trabajo en muchos aspectos...Y las hembras no llegan...

—¿Tengo cara de tener vagina? ¿Quieres que le llore a mi hermano por que no puedes coger?¡Tienes a la maldita ninfómana de tu asistente!

—Jacky ...es lo mismo todos los días...a veces nos cansamos de lo mismo...Yo me preguntaba...si puedes hacerte idiota por aquí dos horas  tal vez tres y eso es más que suficiente para los cuatro saciarnos y descargarnos en.— Apunta hacia el coche donde esta Mía.— Esa mestiza. 

—Eso es...

—Sabes que una vez llegue a manos de tu hermano...no será de nadie más...

Saco una bolsa con dinero y se la entregó a Dedrik...

—Tres horas y soy una tumba con tu hermano.

Dedrik saco otro cigarro y lo prendió molesto. Miraba hacia el auto y después el dinero. No le gustaba la idea de que le hicieran algo así a la gitana.

—De menos ten la decencia de explicarle lo que le quieres hacer...— Expulso el humo del cigarro. — ¡Dame cinco minutos!

— ¿Le das explicaciones a tus prisioneras?

— ¡Tómalo o déjalo!

Connor levanto las manos dándole a entender que no quería más problemas con él. Chasqueo los dedos y al instante bajaron a Campbell del coche y les dieron su espacio a ambos. 

Dedrik espero a que se alejaran más y sosteniendo el cigarro con una mano se mostraba nervioso y molesto. 

—Te dije que corrieras...Y te quedaste como idiota mirando mujer...Ahora las cosas no pintan nada bien.

— ¿Qué es este lugar? ¿No es tu lugar secreto?

— ¡No!— Dio una fuerte calada al cigarro y frunció el ceño mirando a Campbell.

— ¿Qué hacemos aquí?— El silencio de Dedrik la ponía nerviosa...veía que sus manos seguían cada vez más temblorosas y su mirada se oscurecía más. —Te hice una pregunta...

— ¿Te has vendido por sexo?

— ¿Qué? ¡NO!

—Pues...esos cuatro sujetos de allá. — Apunto a Connor y los tres hombres más.— Necesitan vaciar las pelotas...Dado que yo no tengo una maldita vagina...¿Adivina quién tiene que hacer ese trabajo?

A Mía se le estaba viniendo el mundo al escuchar eso. Sus piernas temblaban  y  trago saliva. Sus ojos se llenaron de agua y se sentía que Jack Carter la seguía lastimando.

— ¡No te atreverías...Carter...

—Deja de decirme Carter, mujer...Es Dedrik

— ¿Estás hablándome enserio?— Sus ojos estaban tan perdidos y llenos de agua que no podía creer que el hombre con el que se sentía más segura...la estuviese regalando a unos depravados. — ¡No puedes hacer eso! ¡CARTER!

— ¡NO! ...Me digas Carter. — Le apunto con el dedo índice mientras expulsaba el humo del cigarro en su rostro. — No tengo nada en tu contra gitana...Pero si no lo hago ¿Sabes lo que pasara después?

Ella negó con la cabeza  y Dedrik continuo.

 —Pues me van a matar a mí...y luego te van a matar a ti mujer. — Se pasó los dedos por el cabello molesto y al ver a Campbell tenía su mirada clavada en el.—¡No me mires!

—Carter yo...

—¡No me mires a la puta cara mestiza! ¡TE DIJE QUE CORRIERAS!¡TU CULPA! ¡TU PUTA CULPA!

Sintiendo una mezcla de sentimientos dentro de él se alejó de ella y chasqueo los dedos para que Connor y sus tres hombres se la llevaran dentro de la finca. Antes que nada se regresó con ella a encontrarla con la mirada ya derramando lágrimas. 

—Abre las piernas...y no pongas resistencia...será más fácil para los hombres acabar...si te lubricas ...el daño no será tan fuerte...

—¡Como me dices esa mierda!— Mía cacheteo fuerte a Dedrik  y este la recibió sin problemas. Sabia que lo merecía.

Dedrik se alejó de ella al ver que ya la comenzaban a coger para encerrarse con ella en esa viaja finca.

—¡NADA DE GOLPES! ¡LA QUIERO TAL CUAL SE LAS ENTREGO! — Molesto condiciono a Connor y a los demás.

— ¡CARTER! ¡CARTEER! ¡POR FAVOR! — Mía gritaba sin ser escuchada.

Los gritos de Mía se perdieron una vez los hombres cerraron la puerta de la finca, para Dedrik eran casi imposibles de escuchar.

Se subió al auto y comenzó a mover las piernas de desesperación a cada segundo que pasaba. Su mente le trajo un nuevo recuerdo que lo dejo perdido por unos segundos.

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Se acercó a besar sus labios y coloco sus manos sobre la de la inspectora donde cubría esa marca, retirando su mano lentamente y comenzando a pasar sus labios por esa herida de manera delicada.

— Es parte de ti... Que no te avergüence

—Me obligaron a que fuera parte de mí. — Bajo el rostro recordando lo sucedido.

—No podemos regresar el tiempo. —Le beso la frente. — Aquí y ahora, es parte de ti.

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Dedrik regreso en si, sin darse cuenta su cigarrillo ya estaba partido con sus dientes de lo tenso que se sentía. Reviso su reloj y se percató que habían pasado tan solo cinco minutos desde que la habían encerrado en esa finca vieja para saciar sus ganas.

« ¡No es tu problema Dedrik! Pasa todos los putos días...»

Una vez más miro su reloj y fastidiado se percató de que el tiempo seguía corriendo.

«Esto me pasa por imbécil»

Mientras Dedrik tenía sus pensamientos. Mía estaba luchando con todas sus fuerzas por escaparse de estos cuatro sujetos. Ya había logrado darle unas patadas y golpes al menos una vez a cada uno de ellos.

Connor cansado de su fuerte oposición le da una fuerte cachetada que le marca la mejilla al instante. Uno de los hombres la coge de las manos recostándola en una mesa mientras que uno de ellos le sostiene una pierna, el tercer hombre le sostiene la otra pierna dejándola inmóvil.

— ¡CARTER!...¡CARTEEER!

— ¡Deja de gritar asquerosa sangre contaminada! ¡Y coopera!— Connor introdujo sus dedos dentro de su pantalón y no sintió ninguna clase de humedad en ella. — Si no cooperas...tengo la opción de destrozarte el culo, lo cual se sentirá más apretado.

—N-no...

— ¿Puedes soportar a dos hombres al mismo tiempo? Doble destrozada...solo tenemos poco tiempo  ¡Sostenla!

Connor dio la orden de que en efecto esa violación fuera a otro nivel en vez de atender a uno cada cierto tiempo tendría que soportar las embestidas de dos animales salvajes.

Una patada agresiva y violenta abrió la puerta y los cuatro hombres miraron a Dedrik como tenía una mirada agresiva, oscura y penetrante.

— ¡Esta contaminada!— Fue directo al grano y expreso a los cuatro. — La gitana tiene gonorrea...no metan su polla en esa cavidad.

— ¡Creo que te arrepentiste!—Connor extiende el brazo. —¡Dame mi maldito dinero si no me vas a dejar correrme dentro de ella!

— ¿En qué momento te dije que había reembolso?... ¡Aléjate de la gitana!

— ¡Buena idea!— Se comenzó a acomodar y a guardar el miembro en su pantalón tranquilo. —Me largare y le iré a decir a tu hermano que te faltan cojones...y que te pone sensible que se follen a la gitana.

Una bala perfecta perforo el cráneo de uno de los hombres de Connor que seguía manoseando a Mía Campbell. En un tiro limpio y sin mostrar remordimiento acabo con la vida de uno de ellos.

— De aquí nadie va a salir...vieron cosas que no saben guardar en secreto...y me quieren chantajear... Solo saldrán con los putos pies por delante.

—Acabemos con ese imbécil...Mato a Turner.

Campbell nota que los tres hombres restantes se le dejan ir a Dedrik , sabiendo que sus vidas corren peligro.

Uno de ellos le torció la mano con la que sostenía la luger, su arma cae al piso. Sin importarle el dolor Dedrik da un fuerte golpe con la planta de su pie sobre la tibia, en cuestión de segundos parece de gelatina haciendo que el hombre grite de dolor. Al poco tiempo que el peso de su cuerpo cae sobre su pierna, el hueso se parte perforando la piel de su pierna y dejando expuesto el hueso partido, los tendones y los músculos que sin duda le causaba un grito al hombre.

Dedrik se fastidia de este grito que siente que su tímpano esta por reventar.

— ¡Deja de gritar! ¡Y coopera!

Con una daga que guarda a la altura de su cintura le perfora el mentón de abajo hacia arriba, atravesando toda su boca. La hoja de la daga queda expuesta y su lengua junto con su paladar queda clavados. Los gritos del hombre se comienzan a apagar pues se comienza a ahogar con su propia sangre y tiene su campanilla y lengua desechas debido al corte mortal que el menor de los Wolf ha causado.

—¿Qué tal si mejor a ti te destrozo el culo? ¿Te suena a un Dejavu?

Las lágrimas en el rostro del hombre son evidentes. Dedrik desentierra la daga haciendo que el hombre caiga al piso en un estado de shock y termina clavando la daga justo en su recto ocasionando un severo desgarre y sangrado.

—¡¿Qué se siente?!— Dedrik estaba confiado en ese momento.

El último sujeto que sigue a Connor le enrosca una cuerda en el cuello y comienza a querer asfixiar a Dedrik. Campbell nota que el pulso de Dedrik comienza a disminuir sabiendo que le está cortando el aire.

Mía se acerca a patear con fuerzas el rostro del hombre y Dedrik aprovecha a darle codazos en la boca del estómago hasta lograrse soltar de su agarre. Se quita la cuerda del cuello y la enrolla sobre la del hombre pasándola por una viga enorme y jalando con fuerzas hasta elevarlo y dejarlo colgando. Los músculos y fuertes brazos de Dedrik se miran  junto con sus venas saltadas...de la forma más rápida hace un nudo y el hombre comienza a sentirse que el aire se le acaba. Patalea por quererse soltar pero le es imposible.

Connor es ahora quien se abalanza sobre Dedrik y le hace un corte limpio ligero en la mejilla.

El menor de los Wolf siente una rabia inexplicable que comienza a golpearlo con fuerzas en el cuerpo hasta que logra ponerse sobre de el. A puño cerrado comienza a golpear al ilusionista. Connor siente como su nariz es trozada y su rostro recibe el impacto  y la rabia de los puños de Wolf.

Dedrik entra en un frenesí descontrolado y con un trozo de madera grueso golpea el rostro de Connor de manera más que violenta.

—VIOLADOR DE MIERDA...

Connor ya no tiene movimiento desde hace unos minutos. Sin embargo Dedrik continúa golpeando hasta lograr deformar su cráneo con los golpes de la madera. En segundos su masa cerebral comienza a salir expuesta por un costado y sus dos ojos revientan del puré que Dedrik está haciendo con la cabeza de Connor.

—¡CABRON DE MIERDA! ¡USA TU PUTA MAGIA PARA APARECER DE NUEVO!

Los chorros de sangre salpican sobre el sin siquiera importarle quien lo vea.

Al enfocar su mirada en los pies que aún se mueven del sujeto que está colgado. Dedrik decide soltarlo del agarre y es el quien decide ponerle fin a su vida.

Jala esa cuerda con fuerzas hacia arriba y su nuca comienza a pegar con el techo comenzando a abrir ligeramente.

Chorros de sangre comienzan a caer al recibir tantos golpes en la nuca. Dedrik al ver que el hombre sigue teniendo ligeros movimientos de dedos. Se enfurece y suelta al hombre al piso. Quien cae aun estando consciente intenta mover su brazo para alcanzar el arma que hicieron soltar a Dedrik. El menor de los Wolf con una calma que lo hace lucir mas peligroso que nada con su pierna comienza a acercarle el arma para que él la pueda tomar.

—¡Estaban en el lugar equivocado! — Dedrik ya había cogido la daga con la que masacro al sujeto y sin remordimiento alguno le abrió el cuello y lo dejó desangrarse.

Campbell había estado presente que aquel hombre del cual estaba enamorada. Era ahora un asesino a sangre fría. No quería moverse, estaba tan impactada de lo que había visto, que sentía que cualquier movimiento o cosa que dijera lo haría enfurecerse.

Dedrik miro a Campbell con esa mirada vacía y penetrante que a la inspectora se le heló la piel al ver que se acercaba a ella.

—¿Estas bien mujer?

Un silencio invadía el lugar y el menor de los Wolf sabia que la mestiza estaba asustada por lo que había visto.

—¿Te hicieron algo? —Al no tener respuesta de ella de nuevo frunce el ceño molesto. —¡HEY!

—E-estoy bien...— Intenta hacer el mínimo contacto físico con Dedrik.—¿Por qué has...

—Por qué teníamos una deuda...y ya te dije que no quiero deberte nada... ¡Lárgate y no regreses! —La cogió del brazo con fuerza y la reincorporo.

—¡Puedo sola! — Pidió intentando hacer que el le soltara el agarre. Ella noto que él se molestó por su respuesta. —¡L-lo siento! Hoy han pasado muchas cosas...En verdad lo siento...por mi culpa hiciste algo horrible...

—No me agrada que me quieran chantajear...—Dedrik soltó a Campbell...Noto que aun tenia unas esposas en las manos y se alejó de ella para buscar entre los cuerpos la llave. Una vez la encontró sin problemas se dispuso a dejar libre a Mía, se quitó el saco y su blanca camiseta mostraba manchas de sangre en la espalda.

—Creo que te hirieron en alguna parte de la espalda. — Dedrik al escucharle hablar dirige su mirada a ella una vez más. — Tienes sangre en la espalda.

—No es nada...— Se levanta la camisa mostrándole que son heridas que mayormente ya están cicatrizando.

Escucha que se reincorpora y comienza a alejarse de ese lugar dejándole solo. Dedrik se siente tan cansado que se hecha en el piso y cierra los ojos para dormir un rato.

No pasan ni diez minutos cuando escucha como es que un gran bote de agua es puesto casi al lado de el. Abre sus ojos y se encuentra a la gitana que tiene un trapo ya completamente húmedo.

— ¿Qué quieres?...No te dije que te largaras...Piérdete mestiza

—Necesitas, atenderte esas heridas. — Habla con voz firme. —Sácate la camisa.

—Tengo mujer que me atienda...No somos amigos...

—Si no somos amigos ¿Por qué me ayudaste?...No eres tú el hermano de William Wolf...

—No tengo que darte respuesta...Solo déjame dormir...tengo días o semanas sin poder dormir.

— ¿Enserio te dormirás entre los cadáveres?

—Si...lo peor que puede pasar es que cuando despierte estén llenos de moscas.

—Dedrik...Necesitas que te atienda las heridas...

—No quiero deberte nada más...y ¿Quieres un consejo mío?— Levanto medio cuerpo quedando a escasos centímetros de la inspectora quien seguía poniéndose nerviosa ante la presencia de este hombre. — Piérdete...porque esos muertos no son los únicos con ganas de vaciar las pelotas...

—Sería un poco estúpido que te tomaras tanta molestia para que no me tocaran y al final tú me obligaras...Sin mencionar que tienes quien te ayude con tu problema de descargas.

—No me gustan las orgías...Yo solo puedo satisfacer a una hembra.— Se acostó en el piso cerrando los ojos. Espero que con esa última advertencia fuera suficiente para hacerla que se fuera.

Campbell de la manera más delicada comenzó a levantar su camisa y pasar con el trapo por las heridas reabiertas de Dedrik.

Viendo que sería inútil hacerla que se fuera no dijo más y se quedó en silencio dejándola aproximarse a él.

—¿Eres la amante de Hoffman?¿Lo haces sentirse joven de nuevo?

—Hoffman es mi coronel, Dedrik...Y tengo algo que pedirte.

—Ya saldamos deudas...

—Si tienen a Hoffman...tienes que ayudarme... llévame a mí y dejas escapar al Coronel...Si me llevas no habremos saldado nada.

—Deja de tocarme las pelotas mujer... En cuanto pises ese lugar serás la puta de mi hermano. —Chasqueo los dedos a escasos centímetros de Campbell. — Y Amira te hará mierda.

— ¡No importa!— Habla firme haciendo que Dedrik haga contacto visual con ella.— Hoffman es clave para mucha gente...

—Hoffman es una rata boca floja...

— ¿Te consta?

—Confió a ciegas en mi hermano...Deja de fastidiarme.

—Escuche a ese tal Connor decir que tu hermano te rompe la espalda a golpes...¡He trabajado para Hoffman por bastante tiempo y jamás a puesto una disciplina así a alguien!

— ¿Sabes en verdad para quien trabajas?.... ¿Cuantas veces a la semana te coge para que te hagas la idiota?

— ¿Lo sabes tu?...Dime si en tu mundo todo se arregla como dices "cogiendo"— Hizo la comillas con los dedos. — ¿Quién te cojea ti?¿Tu hermano o tu prometida?

Dedrik se fastidia por escuchar a esta mujer seguir diciendo insolencias frente a el. Se levanta cogiéndola del cuello y poniéndola en el piso con una habilidad y fuerza increíbles.

Mía le decide dar un golpe a puño cerrado y este ni se inmuta y no deja de mirarla con coraje.

— ¿No te enseñaron a cerrar la puta boca? ¿A aprender a buscar tus malditas peleas? ¿Quieres terminar como esos pobres payasos?

Dedrik nota que ella comienza a quedarse sin aire y la suelta al instante.

—Tienes tres para largarte de mí puta vista...

Dedrik coge su arma y la carga quitándole el seguro.

—Si tienes los putos cojones...Dispararme en la cabeza...Que no quiero ir cargando mis malditas viseras con la mano.

—¡UNO!

Se reincorpora mirando que no planea quitarse.

— ¡DOS!— Se acerca a ella encarándola y mirando que no hay miedo en sus ojos. Al contrario ella coge el arma de Dedrik y se la pone justo en el pecho a la altura del corazón. —LÁRGATE MALDITA ¡LÁRGATE!

— Jala ese puto gatillo...Tu hermano ya hubiera jalado el puto gatillo...solo eres su maldita sombra, ni la mitad de lo cabrón que es el.

Dedrik está más que encabronado con esta mujer. Mientras ambos se retan con la mirada logra descubrir que es lo que ella busca en ese momento.

—¡TRES!

Se salpica la sangre por todos lados.

Próximo capitulo titulado... "Mas abajo del infierno" ¿Ideas?

*Las canciones de los capítulos estarán hasta la parte de abajo de ahora en adelante.*

https://youtu.be/qDuuH3nA8-s

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