Capítulo 23 | Hazel

Hazel

Termino dando vueltas en la cama una y otra vez sin poder dormir pensando en Easton y Daniel, cuál sea que sea la relación entre ellos dos, estoy segura de que no es buena.

Siempre he pensado que, en algunas ocasiones, el pasado de alguien no lo define por completo. Y pienso en que aquello aplica para Easton.

Después de unos minutos, decido salir de la cama a por un vaso de agua y como sé que me cuesta quedarme dormida, decido comenzar a limpiar, no es que esté muy sucio, pero eso ayuda a calmar mis nervios de cierto modo.

Para cuando termino, es alrededor de las cuatro de la mañana y estoy cansada, voy directo a la cama sin importarme la hora y me quedo profundamente dormida.

Cuando digo profundamente, lo digo en serio porque ni siquiera oí el despertador para comenzar a alistarme para el trabajo y cuando me despierto, me doy cuenta que voy tarde.

Me meto a la ducha lo más rápido posible con intención de despertarme por completo porque aún me siento un poco somnolienta y me maldigo por no haberme ido a acostar de nuevo cuando tuve oportunidad.

No es que yo fuera obsesiva con la limpieza, pero a veces limpiar calmaba mis nervios y anoche eso había ayudado.

Antes de salir de casa, me apresuro a tomar conmigo la botella de insecticida para no olvidarme de rociar la entrada como siempre y las escaleras hasta que consigo llegar a mi carro con éxito y conducir al trabajo.

****

─¿Te encuentras bien? ─Es lo primero que Sheila me pregunta al verme y asiento de inmediato.

─Claro.

─¿Segura? Nunca sueles llegar tarde al trabajo ─enarca las cejas.

─Segura, es solo que me quedé dormida.

─Suena raro viniendo de ti.

─Bueno, tuve una larga noche.

Digo, cosa que es algo cierto. Tan pronto como le explico que me ha costado dormir y he terminado limpiando en vez de intentar irme a la cama como era correcto, me da los platillos que debemos elaborar para el día y comienzo a cocinar como siempre.

Me concentro lo mejor que puedo, aunque mi cabeza sigue aun rondando en Easton y Daniel. Cuando le doy una mirada a Easton para ver qué está haciendo, veo que tiene el ceño fruncido mientras decora uno de sus platillos, me he dado cuenta que casi siempre hace eso cuando se concentra, aunque la mayoría del tiempo da la impresión de estar algo enojado.

Easton alza la mirada en mi dirección y no me da tiempo voltear a otra dirección que termino sonrojándome por ser atrapada viéndolo, esquivo su mirada de inmediato y vuelvo a concentrarme en mi platillo, para la hora de descanso, termino almorzando uno de los postres de más que hemos preparado con la intención de volver a preparar otro más tarde.

─¿Hazel? ─Pregunta Herbert cuando aparece frente a mí, dejo de usar mi celular para prestarle mi atención, él me ofrece una media sonrisa antes de volver a hablarme─. ¿Te importaría acompañarme a mi oficina?

─¿Ahora?

Pregunto y él asiente.

Me levanto de inmediato de mi lugar y lo sigo hacia su oficina sin importarme si alguien me ha visto seguirlo, aunque teniendo en cuenta que ha venido a buscarme a la hora del almuerzo y no soy la única aquí, es obvio que se han dado cuenta de ello.

─¿Pasa algo malo? ─Pregunto en cuanto entramos en su oficina.

─Oh no, tranquila. No es nada malo, espero ─dice mientras se dirige hacia su escritorio y se sienta detrás de este, me hace una seña para que tome asiento en la silla frente a él y lo hago─. Tu padre ha llamado, Hazel.

─¿Ah sí?

─Sí ─aprieta los labios en una mueca─. Ha estado un tanto preocupado por tu estadía aquí en el restaurant y aunque él me ha hablado del anonimato que has querido que mantengamos sobre ti y él, se interesa por saber si te sientes realmente cómoda con la idea de toda esta clase de competencia.

Ahora soy yo quien aprieta los labios con fuerza, no debería sorprenderme que papá intente recurrir a Herbert para tener las conversaciones que evito tener con él.

─Estoy cómoda ─me apresuro a responder tan pronto como puedo─. Y aunque no lo crean, estoy conforme con la idea, quiero decir, sería injusto que solo me diera el titulo de chef estelar porque soy su hija cuando puedo demostrar que realmente lo merezco, además, es justo para Easton.

─Supongo que lo es, aunque sinceramente no esperábamos que durara mucho aquí.

─¿Por qué?

Siento curiosidad, Herbert suspira y se recarga en su asiento.

─Porque tiene talento al igual que tú ─dice con un leve asentimiento─. Los chicos como él y tu no suelen durar mucho aquí y no es porque no merezcan el trabajo, sino que por lo general suelen irse, ya sabes, emprenden su negocio.

─Oh ─siento un poco de alivio con esa respuesta, no sé que otra clase de respuesta esperaba, pero puedo decir que no era una buena─. Ya veo.

─Bueno, no quiero quitarte más tiempo, pero solo quería confirmar que realmente estás bien aquí.

─Lo estoy.

─Perfecto ─eleva las cejas con una sonrisa─. Y por favor, cualquier cosa que necesites, no dudes en decírmelo a mí o a tu padre.

─Gracias ─digo levantándome de mi asiento─. Lo consideraré.

Salgo de su oficina lo antes posible, al regresar a la cocina, Sheila y Johan ya están trabajando en lo suyo y por suerte no me hacen ninguna pregunta, hago mi esfuerzo por perfeccionar los siguientes platillos a mi manera y para cuando termino mi jornada de trabajo estoy más que cansada.

Ayudo como de costumbre a ordenar la cocina, lavar los platos y barrer, esta vez me percato de que Easton también parece quedarse y no irse temprano como de costumbre, imagino que tal vez hoy tiene otra clase de asuntos o irá más tarde, sea cual sea el motivo no le pregunto y tampoco hablo con él hasta que me lo encuentro en el estacionamiento ya que hemos estacionado nuestros autos juntos.

─¿Vas a casa?

Me pregunta cuando me ve detenerme frente a la puerta de mi auto.

─Sí ─respondo y hay un pequeño silencio─. ¿Y tú?

─No.

─¿Visitarás a tu madre?

─No hoy.

─¿Por qué?

Pregunto sin importar si sueno chismosa, una mueca se dibuja en él, pero aun así responde.

─Quede de cenar con mi hermana y su familia.

─Oh.

─Sí ─dice con una pequeña mueca.

─¿Prepararás la cena?

Ríe.

─Afortunadamente, mi hermana es de las que prefiere ordenar pizza cuando me ve en vez de exigirme cocinar, sabe que paso demasiado tiempo en la cocina.

─Vaya, que afortunado ─me veo sonriendo ante la idea de ello─. Además, nadie puede resistirse a la pizza.

─Supongo que no.

─No.

Hay un pequeño silencio entre los dos.

─¿Qué hay de ti? ¿Cocinarás al llegar a casa?

─Tal vez ─me encojo de hombros─. O tal vez ordene pizza también.

Por unos instantes ninguno de los dos dice una sola palabra hasta que él decide romper el silencio de nuevo, pero se ve interrumpido por su celular y no puede decirme lo que sea que quería decir. Con un gesto de disculpa me dice que debe responder la llamada y yo asiento antes de abrir la puerta del auto y decidir ir a casa.

***

Justo como le he dicho a Easton, termino ordenando pizza y comiéndola con un poco de vino mientras veo televisión después de tomar otra ducha porque he llegado cansada a casa y necesitaba relajar mi cuerpo.

Tiempo más tarde, alguien llama a mi puerta, le bajo el volumen a la televisión antes de ir a ver quién podría ser. Admito que no me sorprendo del todo cuando veo a Easton en la puerta porque prácticamente es mi único vecino cercano, si así podríamos llamarlo.

─Hola.

─Hola ─repite de inmediato en cuanto lo saludo y hace una seña hacia su mano, veo que trae un plato con pastel─. Mi hermana ha insistido en que debía traerte pastel.

Una risita nerviosa se sale de mí y lo acepto cuando me lo extiende, si hay algo que me gusta son los postres, en especial el pastel.

─Gracias, ¿quieres pasar? ─Pregunto y una mueca se dibuja en él.

─Gracias, pero tengo aun cosas que hacer.

─Oh ─respondo con una diminuta mueca que disimulo de inmediato─. Gracias por el pastel.

Lo señalo y él asiente antes de desaparecer.

Voy a la cocina donde dejo el pastel en la barra mientras tomo un vaso para servirme un poco de leche, justo cuando termino de servirme leche, escucho que vuelven a llamar a mi puerta y pienso en que tal vez es Easton de nuevo que podría haber cambiado de parecer, por mucho que no quiera admitirlo, siento un pequeño revoltijo en el estomago y me digo a mi misma que debería ser mejor un malestar en vez de cierta sensación que me rehúso a admitir.

Tan pronto como abro la puerta y veo que no se trata de Easton, mi semblante se vuelve serio y estoy segura que hasta mi rostro palidece cuando veo a mi padre frente a la puerta.

─Buenas noches, Hazel.

Me saluda con un intento de sonrisa que luce como una mueca.

─Papá, ¿qué haces aquí?

Ni siquiera soy capaz de saludarlo como él lo ha hecho conmigo.

─Ya que sigues ignorando mis mensajes y llamadas he pensado en que seria bueno pasar a buscarte, ¿puedo pasar?

Si la persona que tengo como vecino no fuera mi compañero de trabajo, lo más seguro es que lo estaría rechazando y negándole la invitación a pasar a mi departamento, pero termino haciendo todo lo contrario a lo que deseo cuando me hago a un lado para que entre lo antes posible.

─¿De qué es lo que quieres hablar? ─decido ser directa.


*****

Hola a todos, ¿cómo están? he tenido dias muy malos y ajetreados en el trabajo que no he podido escribir como me gustaria, esperaba que este capítulo fuera más largo pero como siento que he demorado bastante, he decidido actualizar, en especial porque la historia ya llegó a las 10k lecturas.

Realmente significa mucho para mí que le den la oportunidad a la historia de leerla y que sean pacientes con mis actualizaciones aunque sean lentas! De corazón, gracias por las diez mil lectura y espero que esten disfrutandola hasta ahora!<33

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top