O14

pov's jo haeri

Hace alrededor de unos tres años junto a TaeHyung, JiMin y Hoseok comenzamos a adentrarnos a un mundo 'adulto' escondido de los verdaderos adultos. Teníamos deudas que pagar, una familia que mantener y cosas deseando estar en nuestras manos, la propuesta de estar en aquellas carreras clandestinas llegó del cielo para nosotros. Tenía buen dinero para hacer algo relativamente sencillo, mi deber era arreglar los autos o motocicletas antes de la competencia y el deber de ellos era conducir a toda velocidad.

En ese tiempo vimos a muchos salir gravemente heridos. Sin embargo, ellos supieron manejarlo incluso siendo los más pequeños de todo el lugar. Y a mi me resultaba beneficioso, pero pasado el tiempo me di cuenta que de aquí nada bueno saldría, pese a saberlo no pude alejarme. El dinero es bueno, y el tiempo de trabajo no es tan largo. Hoy en la tarde llegué para arreglar unos vehículos descompuestos para que en la noche pudieran competir.

-¿Todo bien? -la masculina voz a mis espaldas me hizo girar, JiMin y Hoseok entran al taller con una sonrisa en sus labios.

-Pensé que estaban en el estudio.

-Tiempo libre. -dijo el rubio- ¿Cómo van las competencias?

-Ah, bien, supongo. La verdad es que perdió la gracia hace tiempo. -me quite el sudor de la frente y la grasa en mis mejillas.

-No pueden superarnos, ¿No?

-Han habido mejores. -bromeé, la verdad es que hasta el momento nadie los ha superado en velocidad y estrategia, ellos eran un buen equipo para los negocios- Escuché que ya integraron al chico ese.

-Hoy tendrá su primera práctica -Hoseok se sentó en el capó, y de su bolsillo sacó un paquete de Marlboro- El manager pide que lo tratemos bien.

-A Hoseok no le agrada la idea de tener a otro integrante, dice que pierde originalidad.

-¡Se supone que somos un grupo de amigos que ama la música! No necesitamos de un niño bonito para comercializar.

-No se trata de eso. -JiMin giró sus ojos molesto- Necesitamos de su canto y su técnica en el piano. Es una banda, es normal que se requieran más integrantes.

-¡Aún así...

En medio de su plática -discusión- mi teléfono comenzó a sonar indicando que algunos mensajes me habían llegado. Tomé el móvil, y el nombre de TaeHyung es lo primero que vi. 'Baeky dijo que empezaste a trabajar para su padre. ¿Ya tienes la beca?' Mordí mi labio antes de contestar con mis dedos apresurados. 'Sí, la tengo.'

-¡Haeri! -el rubio grita mi nombre, haciendo que suba la vista- Estás muy distraída. ¿Es acaso un chico? ¡¿Tienes novio?!

-¿Eh? Por supuesto que no. -negué- Es sólo... nada.

-Bien, seguiré fingiendo que te creo. -con una expresión divertida codea a Hoseok- Ella está en algo. -le susurra creyendo que yo no lo escuchó.

-¿Saben? Deberían irse. ¡Ahora! -tomándolos por los cuellos de las camisas los arrastre al exterior, sacándolos a patadas- ¡No olviden contarme cómo les fue!

Ambos jóvenes se despiden agitando sus manos al subir al vehículo rojo del Kim, se van de esta forma, ocasionando que de mis labios escapara un fuerte suspiro. Caí rendido al suelo del taller, con una jaqueca tremenda. ¿Por qué TaeHyung continúa hablándome? Pensé que luego de tanto tiempo aprendería a mantener su sana distancia conmigo, ¿Estar cerca mio no le afecta? Porque a mí sí, su solo mensaje provocó...

Dolor.

Duele no ser tan importante en su vida como yo querría. Debería superarlo de una vez por todas.

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