[🌈],,, 29.

Era un día tranquilo con un clima agradable, no hacia ni frío ni calor, no había ningún ruido molesto, solo el dulce cantar de algunos pajaritos que volaban de aquí para allá, con una linda y relajante brisa que ondeaba el cabello de las personas circulantes en la calle. Todo tan hermoso y relajante que-

─ ¡Ay sí, como si esas cosas pasaran! Eso pura mierd...─ Uno de los japoneses, Asahi, exclamó arrojando una palomita de maíz hacia el televisor.

Y aquí empieza el relato del día, situado en una casa mediana de un barrio común. Específicamente enfocándose en Hamada Asahi sentado en el sofá de la casa de su amigo, comiendo palomitas y rodeado de múltiples pañuelitos descartables que usaba para sacar sus lágrimas o limpiar la sustancia viscosa que salía de su nariz mientras no despegaba la vista del televisor.

─ ¡Quiero un Nick Nelson! ¡Necesito un Nick Nelson!─ Se quejó nuevamente, soplando con fuerza para terminar de sacar un par de mocos de su nariz y luego golpear agresivamente el sofá.─ ¿Por qué dios no pone hombres así en mi camino? ¡Solo coloca a malditos idiotas con complejo de superioridad! O peor aún... ¡A idiotas dominados con una novia malditamente loca!

Y nuevamente lloró con fuerza, ahogando sus quejidos mordiendo el almohadón que estaba junto a él, dejándolo de vez en cuando para llevarse un gran puñado de palomitas a la boca y luego seguir llorando. Estaba bastante sensible y Heartstopper no era de mucha ayuda, solo incrementaba su tristeza y las ganas de poder tener una bonita relación.

Sus amigos solo se dedicaban a verlo desde lejos, no queriendo interrumpir al japonés, porque sabían que si se acercaban a molestarlo él les arrojaría el control remoto (de nuevo) y a ninguno le gustaría tener un chichón creciendo en sus cabezas.
El pobre chico estaba despeinado, con rastro de lágrimas en sus mejillas, la ropa desarreglada e hipando debido al llanto que no podía controlar, toda esa escena dejando desconcertados a sus amigos.

─ Okay, esto no se puede quedar así. Voy a entrar, deseenme suerte.─ Fue Yoshinori quién tomó la valentía de actuar, era el que mejor conocía a Asahi y, al menos él, pensaba que podría controlarlo.

Se acercó lentamente sin intenciones de asustar a su primo, tomó el control para colocar la serie en pausa y se paró en frente del pelinegro menor con los brazos cruzados.

─ Suficiente por hoy, es la tercera vez que ves esa serie y llevas como una hora llorando por escenas que ya hasta te sabes de memoria. Nos estás deprimiendo a nosotros con tu llanto.─ Habló alto, mirando directamente a los ojos del más bajo intentando mantener su postura firme y no doblegarse a esos ojitos chiquitos aún aguados por las lágrimas que lo miraban con intensidad.

─ Pero... ¡Pero-! Lo quitaste justo en la parte en la que Nick le dice chiquito a Charlie ¡Yo también quiero que alguien me diga chiquito! ¡¿Por qué nadie me dice chiquito a mi?!─ Y con eso, Asahi volvió a llorar, abrazando por la cintura a Yoshinori que simplemente no sabía qué hacer, su única opción fue palmear la espalda de su pequeño primo llorón mirando a los demás en busca de ayuda.

Después de eso, Jihoon se acercó a Asahi abrazándolo por los hombros.

─ Ay cariño, tienes a mil chicos detrás de ti. Dales una oportunidad y verás que tú también puedes tener una bonita historia de amor.─ Aconsejó, con la intención de subir el ánimo del chico.

─ Sí, pero esos pretendientes solo buscan tener sexo ¿Quieres saber lo que me dijo el último chico que me habló por instagram?─ Preguntó observando a Jihoon mientras sacaba su celular.─ "Qué ese culo no pase hambre papito, grr." DÓNDE LE VES LO ROMÁNTICO A ESO.─ Y volvió a sollozar.

─ Estoy solo en la vida, envejezco solo, moriré solo, me enterrarán solo y me pudriré solo ¡Todo solo! ¡Solo!─ Exageró metiéndose más palomitas en la boca y pataleando.─ Terminaré casándome con Mashiho porque él estará igual de solo que yo entonces para no entrar en depresión deberemos casarnos porque yo soy el único que lo aguanta y él es el único que a mi me aguanta y es mejor estar casado con Mashiho a estar yo solo en un departamento compartido con tres alcohólicos, dos drogadictos y cuatro huérfanos mientras bebo sidra para niños que sobró de Navidad a la vez que veo pasar el tren que pasa justo por enfrente de nuestra ventana siendo acompañado por una rata a la que llamaré cuca.

Luego de eso, toda la sala quedó en silencio.

─ Sinceramente eso me ofendió pero no quiero iniciar una pelea porque llorará aún más de lo que ya está llorando y yo no sé consolar a gente llorona.─ Rompió el silencio Mashiho después de unos segundos.

Asahi asintió en su dirección agradecido.─ Gracias amigo.

─ Ahora, si me disculpan. Quiero seguir sufriendo con mi querida serie, así que les agradecería si se van y me dejan tranquilo.─ Los corrió el japonés, incluido a Doyoung, el dueño de casa.

─ Pero es mi casa...─ Le recordó el anfitrión.

─ Ah, ¿Dónde quedó el "mi casa es su casa"? Claro, como se trata del pobre y desamparado Asahi, a nadie le importa.

─ No lo decía tan literal a lo de mi casa...─ Susurró Kim para sí mismo, pero aún así logrando que Asahi lo escuchara y haciendo que nuevamente empezara a llorar.─ ¡Está bien, está bien! ¡Mi casa es tu casa, ya nos vamos!

Mágicamente, Asahi dejó de llorar.─ Genial. Apaguen la luz cuando se vayan y cierren bien la puerta que hace frío.

Jihoon negó y se paró frente al pequeño llorón.─ Hemos venido aquí para ayudar a Jeongwoo a prepararse para su cita, no a llorar mientras vemos una serie y sufrimos por nuestra patética experiencia en el amor. ¡Así que levanta ese culo del sillón y ayúdanos a que Woo termine de conquistar a ese japonés con apariencia de mafioso!

─ ¡Cierto! ¡Jeongwoo!─ Gritó, saltando del sofá y desiquilibrando a Yoshinori haciéndolo caer mientras insultaba al japonés menor. Asahi por su parte, saltó por el respaldo del sofá, acercándose a Jeongwoo que se encontraba tranquilamente comiendo palomitas, palomitas las cuales se le cayeron cuando el japonés pelinegro comenzó a zarandear al menor de todos allí.─ ¡¿Qué haces ahí parado como si nada Park?! ¡¿No ves que tendrás una cita y tú aún ni te haz bañado?! Madre de dios a este paso no nos quedará nada de tiempo ¡¡Nada!!

─ Oye, oye... OYE.─ Gritó Jeongwoo, callando al inquieto Asahi, separándose de él cuando casi se le caen las gafas por el zarandeo.─ Apenas son las doce del mediodía, la cita será como a la seis de la tarde. Calmate un poco.

En ese momento, fue Jihoon quien se metió a la conversación con sus "dulces" gritos.

─ ¡¿SEIS DE LA TARDE?! ¡¿Y RECIÉN NOS DICES?! POR DIOS, NO NOS DARÁ EL TIEMPO.─ Exaltado, esa era la palabra para describir a Jihoon en ese momento. Tomó al Park menor de la mano y comenzó a guiarlo hasta el baño.─ Ve a bañarte, pequeño pedazo de mugre, que entre tantas cosas por hacer no nos dará tiempo de nada.

─ Pero faltan seis horas...─ Murmuró.

─ ¿Y eso qué?─ Preguntó Mashiho.─ Es muy poco tiempo para todo lo que hay por hacer.

─ Pero... si solo debo de bañarme y arreglarme un poco. Tardo como máximo una hora en hacer eso.─ Respondió extrañado. Tardaba diez minutos en bañarse, treinta minutos en cambiarse, diez minutos en arreglarse el pelo y otros diez minutos colocándose algo de maquillaje.

─ Tienes que probarte los distintos conjuntos de ropa que te escogeremos.

─ Te arreglaremos las uñas.

─ Te arreglaremos el nido de ratas que hay en tu cabello.

─ Te maquillaremos.

─ Y te haremos un sesión de fotos para que subas a instagram por si la cita sale mal para que Haruto vea el tremendo bombón que se perdió y para conseguirte otros pretendientes.─ Terminó por decir Jihoon, a lo que todos lo miraron mal.─ ¿Qué? Hay que pensar en todo, podrá estar con el corazón roto pero jamás derrotado.

Yoshinori asintió.─ Bueno, en eso tiene razón.

─ Como sea, Jeong, ve a bañarte por favor. Hasta aquí siento el olor a zanja podrida que tienes.─ Comentó Doyoung.

─ Perdón, ese soy yo, otra vez cortaron el agua en mi casa.─ Confesó Mashiho riendo avergonzado.

Jihoon suspiró─ Bien, entonces primero se bañará Jeongwoo y después Mashiho.

Jeongwoo los miró mientras suspiraba, faltaban seis horas para su cita, no veía la necesidad de alistarse tan temprano.

Tal vez él no veía la necesidad, pero sus amigos sí y ellos sabían lo que harían.

Una vez el Park menor entró al baño, los demás corrieron hasta el sofá, algunos cayéndose al piso y otros golpeándose mutuamente para obtener un buen lugar.

─ Ya que nuestro chicuelo se ha ido, es hora de que los mayores disfruten. Doyoung apaga las luces, Asahi ve por las palomitas, Yoshi tú por las bebidas, Mashi por las almohadas. Esto está por ponerse fuerte, muy fuerte mis pequeños.─ Ordenó Jihoon como un jefe, cada uno de los demás le hicieron caso sin rechistar rápidamente mientras que él se encargaba de colocar la serie que verían en ese rato.

Una vez todo listo y ellos bien acomodados, sin saber aún lo que verían a continuación, Jihoon le dió play a la serie con una enorme, enorme sonrisa un poco diabólica.

─ Llegas a poner "a todos los chicos de los que me enamoré" y juro que te corro de mi casa Park.─ Amenazó Kim, recordando la última vez que tuvieron una pijamas y Jihoon fue el encargado de las películas, sufrieron mucho viendo todas esas películas de cliché adolescentes mal contadas.

─ Oh no, no queridos míos. Hoy veremos la magnífica e increíble serie llamada "Kinnporsche" ¡Genial, no lo creen!

─ Veremos la mejor serie jamás creada, tan increíble e inigualable, esta serie parece ser una bendición de Dios ¡O tal vez una bendición del mismísimo Satán! Depende de tu religión, claro. Y si eres ateo, pues es una bendición de sus creadores.─ Terminó de decir su discurso, con sus brazos levantamos y con la respiración agitada, como si hubiera dicho el discurso más importante de su vida. Mientras tanto, los demás sólo lo observaban con rareza, estaban acostumbrados respecto a esa actitud de su mayor, pero a veces Jihoon solía sorprender a los menores.

─ Eh, sí bueno... ¿Esa no es la serie donde uno de los protagonistas se parece a Mingyu?─ Agregó Yoshi.

─ ¿A Mingyu?─ Preguntó Doyoung.─ Por favor dime que es una historia homosexual, no podré ver a alguien que se parece a mi hermano siendo heterosexual.

─ Hm, será una serie de mafiosos homosexuales.─ Respondió sonriente.

─ ¿Alguien dijo mafiosos homosexuales?─ Dijo Jeongwoo saliéndose de bañar envuelto en una bata de baño.

─ Oh sí, eso dije. Así que vengan hijos míos, serán adentrados a este hermoso mundo llamado "los homosexuales mafiosos".─ Y eso fue todo, con tan solo haber escuchado la palabra homosexual, la atención de todos allí fue captada. Jeongwoo se apresuró a sentarse frente al televisor y junto a Doyoung importandole poco solo estar con una bata de baño puesta.

Mientras empezaba la intro, Jihoon se acercó a Yoshinori para susurrarle algunas cosas al japonés mayor.

─ Tú te haz visto la serie ¿Verdad?─ Preguntó y Yoshi asintió lentamente.─ Bien, cuando llegue la parte en donde le disparan a Big, tapale los ojos a Mashiho.─ Yoshinori lo miró sin entender, a lo que Jihoon suspiró. ─ Es que Big se parece al hermano mayor de Mashi, Yuta, así que sé que le llorará como magdalena cuando muera.

─ ¿Y Doyoung qué? Porsche se parece a Mingyu y Vegas a Yedam, ¿Qué haremos cuando pasen esas escenas?─ Mencionó el japonés mayor, recordando toooodas esas escenas que lo dejaban sonrojado cuando las veía.

─ Mierda, se nos van a traumar los niños con esas escenas. No lo pensé...─ Comentó mordiéndose las uñas.─ ¿Y si mandamos a Jeongwoo y Doyoung a ver los paw patrol?

─ Ni se les ocurra, ya me enganché con esta serie.─ Respondió Kim desde el sillón individual mientras le secaba el cabello a Jeongwoo.

─ Aún ni siquiera la han visto...

─ Se trata sobre mafiosos homosexuales, con escuchar eso ya me enganché.

─ Bien, veremos un capítulo y después arreglaremos a Woo.

─ Comper mua, mugroso.─ lo primero que escuchó Haruto al abrir la puerta de su casa fue a Junghwan hablando con un raro acento.

Se quedó extrañado, estaba apreciando una nueva etapa de Junghwan, el menor traía unos lentes de sol aunque estuviste nublado, un saco con estampado de cebra junto a una camisa fucsia, un par de guantes verde agua y un pantalón de pijama felpudo.

Watanabe no preguntó nada, sólo lo dejó pasar. Detrás de Junghwan venían Hyunsuk, Jaehyuk, Junkyu y Yedam en una extraña situación, el mayor de todos venía casi desmayado siendo sostenido por Jaehyuk, soltaba balbuceos y temblaba como chihuahua, detrás de él se asomaba Bang, acarreando un perchero con varios conjuntos de ropa, gotas de sudor caían por su rostro de este al estar llevando eso él solo, por último pero no menos importante, estaba Kim fresco como una lechuga comiendo una paleta, feliz de la vida mientras traía consigo un par de bolsas del super y... ¿Un espejo de cuerpo completo?

Todos entraron a su casa y se dirigieron al comedor, dejándolo un poco pensativo respecto a tantas cosas juntas que había visto. Empezado por Junghwan y su extravagante conjunto de ropa, siempre lo había visto vestido casualmente o en otros casos con una simple camisa para verse más formal según él, pero jamás pensó en verlo así. No lo juzgaba, cada quien se vestía como quería pero simplemente no se lo esperaba, tampoco ver al pobre de Choi medio desmayado y balbuceando, tenía la leve sospecha de que se debía gracias al pequeño So, si había alguien estricto respecto a la vestimenta, ese era Hyunsuk. En ese momento debía de estar delirando y teniendo un ataque de la moda, podía verlo en su cara, era difícil.

─ Muy bien mugrientos, quiero que corran el sofá y en su lugar coloquen el perchero, acomoden los cosméticos en la mesita de estar ¡Y cuidado con mi caja de maquillaje! Bien, también quiero que el espejo esté del lado izquierdo de esa maceta ¡Tu otra izquierda Kyu! Ok, ok... ¿Quién trajo la tintura? Yedam, coloca las cajitas en su orden de uso... ¡Por dios hijo, cómo puedes poner primero la caja de tintura antes que el decolorante! Madre mía estos mugriento tienen mucho por aprender... Oh, y alguien lancele un vaso de agua a Hyunsuk para que se despabile, no es momento de estar durmiendo.

Bien, ahora sí que Haruto no entendía nada.

─ ¡¿QUIÉN FUE EL MAL NACIDO QUE ME AVENTÓ UN VASO CON AGUA?!

─ Era tirarle agua en la cara ¡Pero no tirarle el vaso también! ¡¡Junkyu!!

─ ¡¿Qué?! ¡Jamás diste indicaciones específicas y yo así no puedo!

Bien, hasta ahí.

─ Alguien podría serme tan amable de explicarme QUÉ PASA CON TODOS USTEDES.─ Gritó. Llamando por fin la atención de todos, inclusive la de Hyunsuk el cual se había abalanzado sobre Junkyu para golpearlo.─ Saber el por qué Junghwan está vestido así, por qué Hyunsuk llegó medio muerto y por qué la sala de mi casa parece salón de estilista. Si me hacen ese favor, se los agradecería mucho.

─ Es que ayer mi vi una película donde aparecía un estilista homosexual que es mejor amigo del protagonista y yo también quise ser así.─ Explicó Junghwan sacándose las gafas de sol─ Hoy tú eres el protagonista y yo seré tu mejor amigo estilista y homosexual con carácter. Y estos mugrientos serán mis ayudantes, no puedo hacer toda la magia yo solo.

Haruto suspiró. ─ Nada bien saldrá de eso, pero tomaremos el riesgo. Hyunsuk ¿tú que tienes que decir sobre tu desmayo? No quiero muertos en mi casa, de la puerta para afuera ya dale sin miedo, aquí no que esta semana me toca la limpieza a mi.

─ ¡¿Acaso eres ciego?! ¡¿No ves como yo?! ¡¿No tenés sentido como yo?! A JUNGHWAN SE DEBE. Dios mío lo veo y se me baja la presión.─ Dramatizó el mayor, en sus casi diecinueve años de vida había visto algo tan atros. Jamás creyó que en algún momento de su vida un amigo suyo se vestiría de tal manera, sin saber combinar, sin saber la teoría del color, sin saber usar accesorios. Estaba viviendo su peor pesadilla.

─ No seas exagerado mugriento número uno, no sabes nada sobre la moda estadounidense de estilistas homosexuales. ─ Después de esas palabras a Hyunsuk le dio un tic en el ojo e intentó volver a tirarse sobre Junghwan pero Jaehyuk lo evitó sentándose sobre el mayor e inmovilizandolo.─ Qué agresivo que andas hoy día Suk, calmate un poco primor.

─ ¿Y cómo me explican todas estas cosas en mi sala?

─ ¿Tú te crees que con un simple conjunto de ropa y con el cabello arreglado ya estarás para tu cita con Jeongwoo?─ Preguntó.─ Pues déjame decirte que no.─ Adelantó a decir cuando vio las intenciones de Haruto de afirmar su pregunta.─ Será todo un ritual de belleza, no irás en esas fachas de pordiosero dándole pena al pobre Woo. Lo vas a asustar.

"Mientras no me arregle como él pues todo bien"

─ Está bien, háganlo. Sólo no me dejen como estúpido, los asesino si quedo como payaso.─ Se rindió, dejándose hacer por los demás.

Se asustó cuando Yedam y Jaehyuk lo tomaron por los hombros, sonriéndole de manera que le hizo arrepentirse de cada una de sus acciones. Ambos chicos lo tiraron hacía atrás, guiándolo hasta una silla alta frente al espejo, Jaehyuk le colocó una capa de corte a él mientras que Junkyu le ponía un delantal a Junghwan y Hyunsuk le colocaba los guantes al menor del grupo.

Y Junghwan entró en personaje.

─ Bien mi bombón azucarado.─ El japonés lo vio entre extrañado y asqueado por el apodo.─  Después de esta cita te aseguro que Jeongwoo caerá en tus encantos de conquista y en esa belleza inigualable que tienes ¡Dejaré de llamarme Jacob sino es así!

─ Te llamas Junghwan.

─ Ay mi pequeño James, sé que es difícil esto de aceptar tu homosexualidad pero créeme que es completamente normal.

─ Me llamo Haruto y estoy más que seguro de que yo he sido el que más rápido aceptó su homosexualidad.

─ Pero no te preocupes primor, te conozco desde que usabas pañales y siempre te sentí vibras homosexuales.

─ Nos conocemos hace cinco meses pero no puedo negar lo de las vibras homosexuales.

─ Inclusive nuestras madres lo sabían desde que éramos niños. Ah, ellas siendo mejores amigas en sus tiempos y ahora nosotros somos mejores amigos...

─ Ni siquiera tengo madre puñetón.

─ ¡¿Tanto te cuesta seguirme el juego maldito infeliz?!─ Dijo, dándole un zape en la nuca al japonés.─ Gente idiota sin imaginación artística, por algo el país está como está.

─ Como sea, mugriento dos, mugriento tres, vayan preparando la tintura y el decolorante.─ Les habló a Yedam y Jaehyuk.─ Mugriento uno tú ve preparando la ropa de Haruto y mugriento cuatro ve poniéndole la crema de larvas en la cara a mi bombón azucarado.─ Indicó como yodo un jefe.

─ Espera ¡¿Cómo que de larvas?! ¡Ni se te ocurra So Junghwan!

─Tarde tesoro. Podrán cuestionar mis métodos pero no los resultados, el señor que me las vendió me aseguró una piel de porcelana.

¿Era muy tarde para pensar dos veces antes de pedirle ayuda a sus amigos? Temía no llegar vivo a su cita.

─ Manos a la obra, mugrientos míos.

Aparezco después de algunos meses ¿me extrañaron? Porque yo sí ♡

¿Cómo han estado? ¿Qué se cuentan de sus vidas?

Lamento no haber actualizado, a veces se me escasea la imaginación, estuve como un mes intentando escribir este capítulo y ha salido esto.

🌱; Opiniones.

🌱; dudas.

🌱; sugerencias.

🌱; ideas para la cita o el siguiente capítulo.

Si ven algún error no duden en decírmelo, o algo que les moleste que yo estoy acá para servirles. ♡♡♡♡

Si les ha gustado comenten mucho ♡

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