Como pueden ver aquí tenía esta idea desdee el 2016 y nunca la termine y tampoco nunca la continúe... Pero quiero saber que opinan de la idea para ver si la continuo o no...

Díganme ¿Les parece bien?

Lydia había despertado feliz esta mañana hasta que Jackson la corto, pero no solo eso, lo hizo por mensaje de texto. Eso era el mayor insulto para alguien tan popular y tan cotizada entre el sexo opuesto como Lydia Martin. Así que ese día al finalizar las clases se fue a casa, con Alllison, su mejor amiga, a ver películas de amor comiendo mucha comida chatarra y desahogarse por él.

-¿Alguna vez te han dejado tan humillada en tu vida?

-¡Lydia! No grites.

-Allison, él me dejó, a mí, a Lydia Martin, a la reina, a la perfección andando.

-Y es un idiota por hacerlo. Lo sé, hasta Scott está enamorado de ti... Desde que tiene memoria.

Scott, es el mejor amigo de Lydia desde.... bebés, ellos siempre han sido los más unidos y todo el mundo sabía que él estaba tan enamorado de Lydia como ella de sus zapatos más caros, él nunca ha dicho lo que siente o al menos no a Lydia, pero Allison lo aguanta, cuando dice que Lyds lo es todo, todos los días.

-Sabes que no me metería con Scott, él es tuyo y sabes qué planeo ayudarte para que sean novios y se casen y tengan hijos y la niña se llame Lydia, obviamente. Ustedes son mi ship y lo sabes.

-Pues él no creo que lo sepa. Quiero ser tú Lyds...

-Allison, aunque siempre esté diciendo que soy la perfección andante y que soy la más hermosa. Tú eres aún más hermosa me ganas por esa linda actitud, eres dulce y considerada con la gente, la perfecta aquí eres tú.

-Mentirosa.

-Oh no, cariño, yo nunca miento.

-¿Qué hay de en tercer grado, cuando un niño raro te seguía y tú dijiste que no te interesaba pero si lo hacía?

-¿Qué? Eso no es cierto.

-Claro que sí, se llamaba algo así como... Stiles.

-¿Qué carajos es un Stiles?

-Claro, como si no supieras.

-Soy mala con los nombres... ¿Kira?

-¿Atacándome con la ex de mi crush? Eres maléfica

-Es broma bebé.

-Bueno, dejando eso de lado, si eres linda, con Scott, conmigo, con Jack...

Allison guardó silencio justo antes de cometer el peor error del día, Lydia solo la miró como por un minuto, ninguna dijo nada, Alli se sentía mal al haber mencionado el nombre del idiota que le rompió el corazón a su mejor amiga, y justo cuando pensaba en decir algo Lydia se quebró y empezó a llorar, pero llorar de verdad, se sentía tan tonta y tan avergonzada que se empezó a cubrir con un cojín, Allison siguió la regla de alerta de crisis de Lydia, llamar a Scott.

-Scott.

-¿Alli? ¿Qué pasó? ¿Lydia está bien?

-Quisiera decir que sí, ven, corriendo, ahora.

-Llego en 10, ¡Allison!

-¿Qué?

-Por lo que más quieras no la veas llorar, ella odia eso, simplemente aléjate en lo que llegó, yo sé que hacer.

Lydia intentaba tranquilizarse pero era imposible, Allison le hizo caso a Scott y se fue a la cocina en lo que él llegaba, mientras la pequeña Lydia seguía sentada en el sofá llorando, llego un momento en el que se frustró y empezó a lanzar las cosas pero Scott llegó.

-Hey, hey, para.

Scott la abrazó, evitando que lanzará un florero, ella subió sus piernas a las caderas de Scott y él la cargo hasta su cuarto y Allison iba tras de ellos. Lydia se acurrucaba en él como si ella fuera un bebé en los brazos de su padre y cuando llegaron al cuarto no lo quería soltar y no es como si a él le molestara.

-Lydia, prometo no bajarte pero mírame, por favor.

Lydia negó con la cabeza que tenía recargada en el hombro de él.

-Al menos háblame. ¿Quién fue? ¿Jackson? ¿Fue ese idiota?

-Sí

Lo confirmó con una voz tan de bebé que Scott se murió de ternura.

-Muy bien, bájate. Iré a darle una paliza.

-Créeme, quiero que lo golpees, más que nadie, pero no te vayas de mi lado.

En cuanto dijo eso, Lydia recordó que Allison estaba ahí observando todo y se fue soltando lentamente para que Scott supiera que la tenía que bajar.

-No se preocupen, yo me voy.

-No, Allison, tú estabas con Lydia primero, lo siento....

-Te llame, creo que era claro que tenias que venir. No interrumpiste nada.

Lydia pudo sentir la tensión en el aire así que dijo lo único que se le podía ocurrir.

-¡Hagamos una fiesta!

-Lydia, estas llorando, no creo que estés de humor.

-Scott tiene razón, debes descansar e intentar olvidarte de ese idiota.

-Ó mejor no soy como esas típicas chicas de secundaria que se quedan llorando en casa por un tipo, hago una fiesta y le demuestro que ¡Nadie! puede destruir a Lydia.

Lydia salió corriendo a arreglarse y dejó a Scott y Allison en su habitación.

-Esto no va salir bien, ve a detenerla.

-Allison, cuando una idea se mete en la cabeza de la reina, nadie puede cambiarlo.

-Pues controla a tu reina.

-¡Saben que la reina puede oírlos desde el baño! ¡Llamen a todos los que conozcan, hoy me superare, porque esta vez invitare a todos!

-Loca.

-¡Escuche eso Allison!

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La música se escuchaba tan alto que Lydia apenas y podía oír sus propios pensamientos, ya hasta se estaba arrepintiendo un poco de esto, hasta que llegó... Jackson

-¡Lydia, Lydia!

Ella salió corriendo en busca de Scott pero cuando llegó a él, por fin estaba hablando con Allison, muy cerca el uno del otro, posiblemente era a causa del alcohol pero no arruinaría su oportunidad así que se alejó.

-Lydia

-¿Jackson? ¿Qué haces aquí? A ti no te invite

-Me trajeron, no sabía que era tu fiesta hasta que llegamos.

-Bueno, divi...

-Quiero que hablemos.

-¿Sobre qué?

-Nosotros

-Oh no, no hay un nosotros.

En ese momento llegó Scott, abrazó a Lydia y se la llevó. Le empezó a preguntar si estaba bien, ella no respondía, estaba feliz, por lo poco que había pasado, significaba que Jackson se arrepentía de cortarla, entonces, podía torturarlo con algo que se arrepentiría de hacer cuando se le pasara la borrachera.

-¡Scott!

-¿Qué?

-¡Reúne gente, jugaremos a la botella!

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Scott hizo un buen trabajo, reunió gente que Lydia había visto antes, algunos eran amigos, otros eran compañeros de clase. Algo que la confundió es que trajo a un chico, raro, que sabe que lo ha visto pero no recuerda dónde.

-Empieza la anfitriona.

-No, empieza tu Scott

Scott hizo caso a Lydia, giro la botella y por un momento parecía que era el fin del mundo porque se empezó a detener en Kira, pero la botella soporto un poco más para poder llegar al lugar de Allison.

-Bien, 5 minutos en el paraíso.

-¡Pueden hacer un rápidin, Scott!

-¡Liam! Déjalos meterse al armario primero.

-Isaac, Liam, cállense.

Scott y Allison se metieron al armario y nadie escuchó nada en un buen rato, pero cuando abrieron la puerta Allison estaba dando la espalda a Scott, diciéndole que se controlará mientras reían. Todos empezaron a gritar y festejar.

-Ahora sí le toca a Lydia.

-Bien.

Lydia giró la botella, por un momento Scott se ilusionó, parecía que pararía en él pero avanzó pasando a Cora y parando frente al chico desconocido.

-¡Stiles, hermano! Tienes la mejor suerte del mundo.

Scott intentó chocar los cinco con él pero noto que Lydia los veía con una ceja levantada. Entonces se levanto y abrió la puerta para que se metieran y así lo hicieron.

-No te preocupes, ¿Stiles?, no tenemos porque hacer algo.

-En realidad, quería proponerte algo.

-¿Qué cosa?

-Vi como rompían un carísimo florero.

-Carajo. Dime que no era azul con flores

-Ese era. Así que, yo pagaré todo lo que rompan en tu fiesta...

-¿Si?

-Finges ser mi novia.

A Lydia le pareció un propuesta interesante.

-¿Por qué?

-Ese es mi secreto.

-Bésame.

-¿Qué?

-Acepto, bésame.

Stiles se acercó lentamente, Lydia no podía creerlo, ella creyó que se iba aventar para casi comérsela, pero no, se detuvo cuando sus narices chocaron y empezó a acariciar sus mejillas, sentían su respiración, ambos cerraron sus ojos y se besaron. Ese fue el inicio del caos, pero iba a ser el caos más hermoso, más de lo que ellos podrían imaginar.

Siguieron besándose y en eso Scott abrió la puerta, nadie se esperaba que Stiles se hubiera atrevido a besar a Lydia y la verdad era un beso muy bonito de observar, era lento, parecía ser dado mínimo con algo de cariño. Ya que sintieron la mirada de todos se detuvieron pero Stiles no se apartaba de ella y recargo su frente en la suya, hasta que Lydia volteo hacia la puerta, aún sorprendida de la gentileza de Stiles.

-¿Ahora sí puedo chocar cinco con él?

-Yo lo haré, cuando Lydia no vea, pero definitivamente lo haré.

Cuando salieron del armario Lydia golpeó a Scott y Liam. Se sentó cada uno en su lugar y le tocó a Liam girar la botella, todos se murieron de ternura cuando le tocó, su novia, Hayden.

-¡Eso es trampa! A él le toca la que quiere.

-No te preocupes Isaac, después de "voy a chocar cinco con él" no va a obtener absolutamente nada.

-Pero mi amor...

-¡Metete al armario, ahora!

-Ya voy.

Liam se metió corriendo antes de Hayden y ella azoto la puerta, se empezaron a escuchar gritos y todos asumieron que no iban a salir en un buen rato así que se empezaron a ir.

-Chicas, no se vayan, yo no las he besado.

-Supéralo Isaac.

-Nunca.

-Lydia trajo comida Mexicana.

-¿Dónde está?

-Barra de la cocina.

Issac salió corriendo y Stiles y Lydia se levantaron al mismo tiempo, se miraron y decidieron acercarse y él la invito a tomar algo, Scott estaba demasiado confundido y justo cuando iba a acercarse Allison lo detuvo y se lo llevó lejos.

-Suéltame, tengo que cuidarla, esta inestable.

-Stiles es un buen chico y está enamorado de ella desde niños, no corre ningún riesgo.

-¿Cómo sabes que no es un acosador?

-Porque no se llama Scott.

-Chistosa.