❀ Fluff

❀ Museum!au

❀ 611 palabras

Nadie había avisado a Baekhyun de esto, se dijo, pasándose los dedos por los labios, nervioso.

Baekhyun había ido a visitar el Museo de Cera. Había ido solo, porque el amigo con el que iba a ir se había puesto súbitamente enfermo (maldito Jongdae y sus salidas nocturnas, había maldicho en su mente), y él no iba a perder el dinero de la entrada por eso. Pero lo que no se esperaba era esa planta de miedo, ambientada en Alien.

La verdad era que tenía la posibilidad de avanzar sin pasar por allí, pero nadie más lo estaba haciendo y la presión popular lo mantuvieron en su sitio en la cola.

La chica que trabajaba los llamó como si fueran voluntarios que habían ido a ayudar a los tripulantes del Covenant, siendo Baekhyun el último en entrar detrás de un hombre alto. No le gustaba ser el último, pero al menos ese tipo lo iba a proteger de lo que se les viniera por delante.

Ya para empezar, un vídeo en el que el alien salía de repente lo hizo saltar en el sitio y cerrar las manos en dos puños tensos a ambos lados de su cuerpo. Trató de carraspear y mirar a la nada mientras tranquilizaba su corazón, fingiendo que nada había pasado, mientras la mujer los guiaba dentro de la atracción y los dejaba allí.

El frío los rodeó al entrar, así como el humo. Frente a ellos, tenían un cuerpo falso abierto por la espalda, señal de que el alien había nacido. Un vídeo en la ventanilla de la puerta frente a ellos, mostraba a una mujer gritando desesperada que salieran de allí. Pero fue el chico real que entró de repente vestido como un miembro de la tripulación en el que lo asustó, haciéndolo soltar un grito y agarrarse sin poder evitarlo del chico alto que tenía delante.

Él le sonrió amablemente mientras el guía los mandaba pasillo abajo, tomándolo por la muñeca cuando Baekhyun se soltó avergonzado.

- Puedes agarrarte a mí si quieres -le dijo.
- ¿No te importa? -preguntó, sorprendido. El alto le sonrió y su corazón se aceleró, esta vez no por miedo.
- No, mi hermana ya va agarrada de su novio -rió, señalando a la pareja frente a ellos.

Baekhyun se enganchó a aquel desconocido entonces como si la vida le fuera en ello, asustado y con los ojos cerrados. El chico hasta le pasó un brazo por los hombros para infundirle calor, fuerza o algo, pero la verdad era que Baekhyun se sentía a salvo así.

La atracción se le pasó rápido pegado al calor de aquel chico. De hecho, y viendo que estaba solo, lo invitaron a acompañarlos durante el resto de la visita. Así conoció a Yoora, a su novio Jonghyuk y a Chanyeol, el chico que lo había ayudado.

Nunca pensó que se lo pasaría tan bien sin Jongdae, a decir verdad, pero Chanyeol era divertido, de mente aguda y chistes rápidos que pronto hizo que Baekhyun olvidara que tan sólo hacía un par de horas que lo conocía.

Al salir del museo, y tras descubrir en el cine 4D que al alto le gustaban los superhéroes tanto como a él, se quedaron en la puerta, sonriéndose.

- Gracias por dejarme acompañaros -le dijo al alto, quien sacudió la cabeza.
- No tienes por qué darlas -le dijo con aquella voz ronca que tanto le había gustado-. ¿Querrías venir conmigo el fin de semana a mirar cómics y a tomar café? -y antes de que Baekhyun abriera la boca siquiera, volvió a hablar-. Es una cita, por cierto.

Baekhyun, muy rojo pero muy halagado, le sonrió y asintió a su salvador.