❀ Fluff

❀ Friends!au

❀ 1248 palabras

 Menudo día para olvidarse el paraguas, pensó Baekhyun con molestia mientras observaba las gotas caer sin piedad.

- ¡Baekhyuh! -una voz grave e imposible de no reconocer lo llamó, haciendo que se girara para ver la cara sonriente de Park Chanyeol, su vecino-. ¿Te vienes conmigo a casa? ¡Mi paraguas es lo suficientemente grande para los dos!

- Está bien -aceptó, a sabiendas de que de otra manera, le tocaría mojarse.

Chanyeol y él iban al mismo instituto, aunque a clases separadas. Se conocían desde pequeños y aunque no eran los mejores amigos, se llevaban muy bien. Quedaban a veces para hacer los deberes, jugaban a videojuegos o iban al cine a reírse de cualquier cosa, desde las películas hasta el público. El problema era que él era más bien callado en el instituto y Chanyeol era de esa clase de personas chispeantes y divertidas que le gustan a todo el mundo, así que normalmente no se le acercaba mucho estando allí, porque los demás no llevaban bien que el rarito de Byun se acercara a Park.

Baekhyun se juntó a Chanyeol, metiéndose bajo el paraguas, pero por el rabillo del ojo vio a Oh Sehun, el chico más popular del instituto y mejor amigo de Chanyeol, que lo miraba con una especie de sonrisa en la cara, antes de mirar al alto y despedirse hasta el día siguiente.

A Baekhyun le gustaba mucho Oh Sehun. Chanyeol lo sabía y se lo había intentado presentar una vez, pero no había sido posible al final. Sehun era alto, guapo, sacaba buenas notas y, en general, era todo lo que Baekhyun buscaba en un posible novio.

- El viernes doy una fiesta en mi casa -le dijo Chanyeol, comenzando a andar y a tirar de él hacia casa-. No va a venir mucha gente, pero estás invitado si quieres venir.

- ¿Oh va a ir? -preguntó él, algo sonrojado. Miró a la cara a Chanyeol y le sorprendió ver una sonrisa triste allí, una que le encogió el corazón por motivos que no pudo, o no quiso reconocer.

- Sí, Sehun vendrá -hubo una pausa que se le hizo incómoda-. Podrás conocerlo al fin.

Baekhyun asintió y no dijo nada más. Agradeció a Chanyeol que lo acompañara hasta la puerta para no mojarse y entró en su casa, sintiéndose confuso y mareado. Debería sentirse feliz por poder conocer a Oh Sehun, pero cada vez que pensaba en esa posibilidad, la sonrisa triste de Chanyeol aparecía en su mente y se llevaba su felicidad y emoción por eso.

El viernes llegó antes de lo que esperaba, y él se vistió como mejor pudo. Pantalones ajustados, una camisa sobre una camiseta y su pelo colocado perfectamente justo donde lo quería. Llamó puntual a la casa de Chanyeol, el mismo chico abriéndole la puerta con una sonrisa.

- ¡Wow, Baekhyun, estás muy guapo!

La boca del más bajo se abrió ligeramente, porque Chanyeol sí que estaba guapo. Se había peinado el pelo un poco hacia atrás, llevaba unos pantalones negros y una camisa blanca, algo muy sencillo pero que le sentaba como un guante. Era como si lo estuviera viendo bajo una nueva luz, completamente, y su corazón dejó de latir un segundo.

Finalmente despertó y entró a la casa, donde Chanyeol lo presentó a sus amigos. Realmente no había mucha gente, algunos amigos de clase y otros de sus clases del conservatorio. Le preguntó qué quería de beber y se lo sirvió en un vaso, tomándolo de la mano para llevarlo al otro extremo del salón. La mano de Chanyeol era grande y cálida, era curioso cómo nunca antes se había dado cuenta de eso y cómo echó de menos ese calor instantáneamente cuando la soltó.

- Baekhyun -lo llamó, haciéndolo alzar la vista y casi se le para el corazón al ver lo forzada y falsa que parecía su sonrisa-, éste es Oh Sehun.

Baekhyun entonces miró a la izquierda de Chanyeol y lo vio. Realmente era Oh Sehun, tendiéndole una mano que estrechó y que su mente no pudo evitar comparar con la otra que hacía nada había sujetado la propia.

- Os dejo solos -anunció Chanyeol, y se fue.

- Chanyeol me ha dicho que querías conocerme hace mucho -comentó Sehun con aire desinteresado-. ¿Quieres que salgamos al balcón a hablar?

Sin darle verdadero tiempo a reaccionar, el alto abrió la puerta corredera y salió, haciendo que lo siguiera. El aire era fresco y agradable, pero se sentía incómodo porque ahora que le habían presentado al que era su 'crush', realmente no sentía emoción. Tan sólo sentía un vacío en el pecho.

- ¿Sabes? -empezó de nuevo Sehun-. Chanyeol es muy bueno.

- Lo sé -se encontró diciendo.

- No, no lo sabes -rió suave Sehun, haciendo que Baekhyun lo mirara, preguntándose si se estaba riendo de él. Pero no, el otro tan sólo hablaba como si estuviera hablándole del tiempo-. Chanyeol me ha dicho durante mucho tiempo que querías conocerme porque te gustaba, y yo siempre me he negado, a pesar de lo mucho que ha insistido, hasta que al final hoy me ha hecho una encerrona -hizo una breve pausa-. No es que tenga nada en contra tuya, Bakhyun, de hecho creo que podrías caerme bien.

- ¿Entonces por qué? -y Sehun lo miró con una mirada que, sin necesidad de abrir la boca, le dijo la respuesta.

- Porque Chanyeol está enamorado de ti -le dijo sin rodeos-. Pero antepone tu felicidad a la suya, y si tú eres más feliz estando conmigo que con él, él te dejará ir.

Baekhyun jadeó. En cierto modo, muy dentro de él, lo sabía. Sabía que lo que Chanyeol sentía por él era algo más que una amistad. Y su corazón le dolió, pensando en que el alto había renunciado a él por un encaprichamiento estúpido. Porque Oh Sehun era alto, guapo y sacaba buenas notas, pero Chanyeol era todo eso y mucho más para él.

- Perdóname -se disculpó con Sehun, entrando de nuevo en el salón, buscando a Chanyeol; aunque no se perdió la risita del otro y el 'buena suerte' que le susurró.

El dueño de la casa no estaba a la vista. Preguntó a los presentes si alguien lo había visto, y finalmente Mina le dijo que creía haberlo visto subir a su cuarto. Sus pies lo guiaron escaleras arriba, de tres en tres, hasta que llegó a la habitación de Chanyeol. Dentro se podía escuchar una melodía suave de guitarra, una que sabía el alto había compuesto hacía unos meses. Entró sin llamar, sobresaltando al alto, quien estaba sentado en su cama con una única lágrima corriendo por su mejilla.

- ¿Baekhyun? -se secó aquella lágrima rápidamente, avergonzado-. ¿Qué haces aquí?

Pero Baekhyun simplemente se acercó a él y, agarrándolo por las mejillas, lo besó. Lo besó con fuerza, como si con ese beso quisiera borrar sus estupideces y el daño que le había hecho al alto. Chanyeol tardó unos segundos, pero pronto se lo devolvió, soltando la guitarra y acercando al más bajo hacia él. Se besaron mucho rato, tanto que sus labios casi se les durmieron y no tuvieron más remedio que separarse, mirándose a los ojos, los de Chanyeol llenos de preguntas.

- Sé que he sido un estúpido no dándome cuenta antes -le susurró Baekhyun, aún agarrándolo por las mejillas-, ¿pero me dejarías compensártelo durante el resto de mi vida, Chanyeol?

Chanyeol tan sólo sonrió y lo besó de nuevo.