Al día siguiente Sakuya llego a las clases y se fue directamente a los casilleros, metió una nota en el casillero de Tsubaki y se fue rápidamente. No se había dado cuenta que Belkia lo había visto

—..Imbécil

Susurró molesto, abrió el casillero y se llevó la nota

Luego de varios minutos Tsubaki llego y se fue directo al aula, se sentó junto a sus amigos y empezó a hablar, no debía sentirse mal.. él valía la pena, y sus amigos se lo demostraban 

Sakuya estaba esperando a Tsubaki en la azotea, ansioso para decirle sus sentimientos.., pero Tsubaki nunca llego

—..Soy un idiota

Susurró serio saliendo de la azotea

—Obviamente no vino, está enojado, debo decirle de frente

Susurró decidido, camino con valentía, pero con cada paso que daba su valor se desvanecía. Antes de entrar al aula suspiro, abrió la puerta y gritó

—¡Me gustas Tsubaki!

Todos estaban en silencio, nadie hablaba

—..Tsubaki Servamp es del aula de al lado

—..Oh

El peliverde cerró la puerta sonrojado como tomate y camino al aula de al lado, abrió la puerta un tanto avergonzado, todos lo estaban viendo

—..Se escuchó todo de al lado

Susurró Tsubaki con cara se asombró al igual que todos en el aula

—..Mierda, que vergüenza

Susurró apenado y frustrado, ¿No podía tener más mala suerte?