Capítulo 4: 1, 2, 3, ahora.

Hipo
Partimos de Berk y llegamos a la Isla donde le daria la sorpresa a Astrid exactamente a las 11:55

- Hipo no crees que es muy tarde... - Dijo Astrid cayendo de sueño

- Calma, solo te necesito despierta, ve esto - Dije enseñándole el lugar, con una hermosa vista del mar, la luna y un árbol lleno de luciérnagas en donde debajo de este había un mini picnic

- Hipo yo... no tengo palabras

- ¿Te gusta?

- Me encanta, ¿Está es mi sorpresa? La verdad no tengo palabras

- No, solo espera, falta 3,2,1 ahora, esta es tu verdadera sorpresa - Dije y saque una caja y la abri donde dejaba ver un anillo con un diamante esmeralda y al lado de este estaba un corazon que decia Hiccstrid

- Hipo - Dijo en un mando ahogado

- Astrid... My lady, desde el primer instante en que mis ojo te vieron quede maravillado contigo. No podía creer que los dioses me mandaran a una era en donde existiera una persona como tu. Y no solo eras bella, eres inteligente, audaz, orgullosa, pleitista, bochinchera, alegre, enojona y testaruda... pero aún así nunca debe de estar maravillado contigo. Siempre estuviste ahí para mi cuando te revele lo de Chimuelo y luego de ello, siempre estabas ahí para mi, siempre, y quiero que no solo estés ahí para mi como mi amiga, mi mejor amiga, ni mi novia, quiero que estés ahí conmigo como mi esposa y que me ayudes a dirigir de la mejor manera el nuevo Berk que intento construir partiendo de la nada... ¿Aceptarais casarte conmigo?

- Llorando Astrid no podía decir palabras:- Yo... si.. ¡Si! Mil veces si

- Me haces el hombre más feliz del mundo

- Y tú la mujer mas feliz del mundo

Astrid
Despues de que hipo me colocara el anillo, saque una caja y se la di

- ¿Qué es eso?

- ¿Crees que no me doy cuenta de que hoy es nuestro aniversario? - Dije al dejar ver un Dije que decía Hipo y Astrid.

- Me encanta - Dije y lo bese

- Hipo - Lo bese - Y si mañana?... damos el anuncio de la boda - Volví a besarlo. ¡Como amaba a ese hombre!

- Alguien está emocionada por su boda - Sonríe

- Ya quiero que me llamen Señora Haddock - Lo bese

- Entonces mañana lo daremos a las diez de la mañana.

- Me parece bien

Alas 1:30 Hipo me dejo en mi casa y luego se fue a la suya, subí a mi habitación y mire el anillo que rodeaba mi dedo y no pude evitar sonreir al saber que me casaria con Hipo y sin más cai en un sueño profundo.

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Os juro que creí que los capítulos eran más largos. Los adoro a tíos por sus votos. Gracias.